Hacia algunos meses que el conde Phantomhive ha vuelto de la misión en el Westton college junto con su mayordomo, sin embargo en el momento en el que pisaron la mansión si burbuja de lujuria se desvaneció dando paso a la frustración del mayor que a pesar de que su naturaleza demoníaca no necesita las relaciones sexuales el cuerpo que hizo con parecido humano si y eso lo ha hecho frustrarse al grado de querer vengarse de su propio amo.

Soporte durante la misión su juego de lujuria religiosa, pero no más. Usted decidió darle la espalda a Dios y eso es lo que hará, a partir de ahora se va a olvidar de estas cosas y se va a centrar en su venganza porque esta situación comienza a aburrirme…. 

The hour of revenge of the devil has arrived. Are you ready for it?

(Historia secuela de mi fic "Libidinum Religio" aun así espero que este quede suficientemente claro para que no haya necesidad de leer el otro.)

Ciel Phantomhive trata de vivir una vida tan simple como le sea posible,  no amor, no sonrisas, no una vida llena de placer en las sábanas... Aunque a veces la debilidad en forma de mayordomo le haga caer, el se esfuerza en tratar de mantenerlo siempre como su lema, pero... ¿Que pasa cuando los símbolos de lo sagrado despiertan tus más bajos instintos?

  HISTORIA NO APTA PARA PERSONAS CON SENSIBILIDAD ANTE LOS TEMAS RELIGIOSOS. 

Un joven de ascendencia prohibida será capaz de hacer todo lo posible para saber de donde proviene, ¿quién es? ¿De donde es?.

- Serías capaz de todo con tal de tener el poder y el conocimiento de lo que estás buscando.

- Daría todo. Hasta mi alma entera.

Vincent Phantomhive al parecer a perdido la cordura tras la muerte de su esposa,  en  la mirada azulina de su pequeño hijo similar a la de su hermosa Rachel a encontrado su delirio, su locura simplemente ha perdido la cordura, sometiendo a su propio hijo a sus más bajos instintos. El odio de Ciel es evidente mas parece disfrutarlo, mientras más lo humilla forma un extraño lazo de amor con su hermoso hijo.

Ciel por su parte se ha refugiado en el odio que alberga en su ser, al sentirse el juguete de su padre en este perverso juego de placer, del cual el no disfruta. Buscando venganza por su humillación decide hacer un pacto infernal, es donde aparece un demonio a quien el llamó Sebastian Michaelis, este aprovechando la vulnerabilidad del joven comienza a disfrutar del placer que este le regala. Ambos al principio solo lo hacen por motivos meramente egoístas, pero al final terminarán descubriendo que algo más fuerte los termina uniendo y descubriendo como la fatalidad puede sellar sus destinos.

 

Fatalidad signo cruel, en su rodar se llevo 
el mas valioso joyel que tu querer me brindo 
el calor permanente de un cariño, 
que habido como un niño de ti tanto esperé. 

-Mi pequeña dama carmesí, ellos siempre abusan de ti  y te tratan como un objeto sin valor… pero no tienes que preocuparte más por eso. Aquí estoy para cuidar de ti, serás mía un día y ese día, ellos se arrepentirán del daño que te causaron. Mi pequeño petirrojo te amo~ aunque no lo sepas aun.-

Esas fueron las palabras del sepulturero mientras veía salir de su tienda a su amado Grell.

A Ciel le encantan los juegos, y arrastrará a Sebastian en ellos a cualquier costo.

¿Qué pasaría su Caperucita no fue a visitar a su abuela? ¿Qué pasaría si no encontró el Lobo  . .Si no que en vez de una enorme fiera, lo que encontró fue un adorable cachorro ? Pero ese cachorro de resulto ser más que otro simple animal del bosque. . .

Ciel comienza a tener nuevas sensaciones, quizás molestando a Sebastian pueda calmar su frustración.

Al mismo tiempo su mayordomo se debate qué es lo que debería hacer, a cada momento que pasa su amo le parece más y más interesante. 

Cansado de la monótona vida que había llevado por años, Ciel Phantomhive ya no encuentra sentido alguno a sus días. Sin venganzas que llevar a cabo y sin enemigos a los que hacer pasar las mismas penurias que su familia tuvo que vivir, el momento propicio para poner fin a todo es el ahora. Sebastian no lo desea, pero su joven amo siempre fue su debilidad y por él, todo lo haría.

Ciel tuvo un accidente, en el que por desgracia su padre y él no salieron ilesos, arrebatando a su vez la vida de Rachel. Pasado casi un año el joven despierta, y la cruel realidad desgarra sus mejillas, había pasado todo ese tiempo postrado en la cama de un hospital, viviendo en el mundo ilusorio de sus sueños; en ellos, su imagen distorsionada daba vida a un joven conde acompañado por un hombre de tez muerta y aterciopelada sonrisa, vistiendo un frac negro y acariciando un crudo y maquiavélico secreto con esos dedos enguantados, un mundo en el que los demonios desarrollaban pactos, y te devolvían el aliento luego de intercambiar una mirada carmesí.

Al despertar de aquella ensoñación, fue a ver a su padre de manera que pudo percibir la presencia de un hombre alto de gabardina oscura, y todo señalaba que él había sido quién cubrió los gastos de ambos durante su estadía. ¿Quién era ese hombre? ¿Por qué mirarle a los ojos le traía tanta melancolía? Le robaba el aire, y le ocasionaba aquel ardor que escuece en toda su piel.

Permanezcan leyendo, y descúbranlo en el primer capítulo de « A cielo abierto »