Una vez hemos muerto, creemos que la vida concluye con nuestro cuerpo, los pesares y nuestros sueños. No es así para Obito, al cual la vida le da una segunda oportunidad y el único detalle es que teniendo una mejor vida, mantiene remembranzas del pasado y quienes lo rodean, lo que una vez fueron a su lado.

¡Es para volverse loco!

No obstante, si creía que era solo él, estaba muy equivocado al reencontrarse con su rival de su vida pasada y cómo termina entre sus piernas. 

¡Ups!

ObiKaka