*Flash back*
-Sebastián, te amo-dije agachando la mirada, mi cuerpo ardía de vergüenza, estaba demasiado feliz el valor que había tomado para confesarle se vio destrozado por su fría contestación
-Lo lamento my Lord pero su amor no es correspondido yo no lo amo-dijo fríamente destrozando todas mis ilusiones, y huyendo rápidamente de la habitación
*Fin Flash Back*
Había pasado cerca de una semana después de que mi dulce confesión fuera destrozada por el demonio de mis sueños, Sebastián, ahora solo me atendía rápidamente sin dirigirme ni siquiera la mirada, venia me dejaba mi desayuno, mi comida, mi cena y mi té, pera ya no me hablaba a menos que fuera de suma importancia, eso se estaba convirtiendo en un infierno para mi, cuando me dejaba mi desayuno lo observaba atentamente, pero siempre mi voz se anudaba en mi garganta, solo me quedaba lloriqueando.
*Te siento tan cerca & distante a la vez descifrando tu silencio*
-Sebastián-susurraba y quería tomar la manga de su camisa en lo que él se volteaba para retirarse de la habitación , pero siempre me quedaba a unos centímetros de tomarlo, siempre era así, después me llevaba la mano a la cara para cubrírmela para después soltarme a llorar, imaginando cuan feliz seriamos si yo no hubiera abierto la boca.
*&& Luego me imagino dentro de tu piel, pero pierdo en el intento*
Él continuaba ayudándome en las misiones de la reina, claro él quería mi alma solo mi alma, así que me ayudaba a seguir cumpliendo mi venganza, pero usualmente cada vez que íbamos a Londres, siempre coqueteaba con una que otra muchacha para obtener información, él me llevaba a la mansión y me dejaba en mi habitación, en un día de esos lo busque y encontré una escena horrible, él satisfacía sus pasiones de la carne con una señorita de ojos y cabellos castaños, me petrifique ante la escena, cuando escuche unas palabras que destrozaron la poca tranquilidad que tenia
-Te amo-le dijiste a esa tipa, ella miro y te sonrió
-Yo también Sebastián-, salí corriendo y al llegar a mi habtación llore mientras él “atendía” a la señorita, me abrace de mis rodillas, llorando, mi corazón me dolía tanto, pedía su amor a gritos, a pesar de que ahora era mas frio que el hielo, mas lejano que luna, ahora yo trataba de que siempre él me mirara, trataba de sonreírle para que se enamorara de mi, trataba de hacerlo sentir bien pero todo era inútil, siempre buscabas a esa amante tuya para satisfacer tus necesidades, pero que esperaba yo, si eras un demonio.
*& Por más que busco darte amor nunca te fijas en mi, si supieras que puedo morir por ti, por ti*
Después de terminadas tus fechorías llegabas a mi habitación, arreglado y tan frio como siempre
-My Lord, quiere que lo arrope-me decías mirándome fríamente, cada palabra helada chocaba contra mi corazón como una púa de cristal, todo mi cuerpo me dolía, ¿Por qué me tuve que enamorar de ti?
-No, puedo hacerlo yo solo-contestaba lo que menos quería era tenerte a mi lado, observar esos fríos ojos carmesí no podía aguantarlo, ya que para mi este amor es imposible.
*Inalcanzable como estrella tan distante, un amor casi imposible, invisible como el aire*
-Yes My Lord-hacías tu reverencia y te ibas, yo solo caía de rodillas y volvía a llorar, maldita la hora en que te conocí, sabes te convertiste en la maldita luz cuando yo rondaba en la completa obscuridad, eres el dulce y suave palpitar de mi corazón, pero ¿porque el destino es así conmigo?, ¿Por qué esta tan ensañado en quitarme mi felicidad?, ¿Por qué no puedo ser feliz a tu lado?, lloraba con tan solo la luna como mi compañera.
*Eres tan inalcanzable, tan sublime como un ángel*
Porque te tuviste que convertir en mi vida, en mi esperanza, porque me tuve que enamorar de ti, ahora es una tristeza pensar en tu hermosa y dulce sonrisa, en tu negro cabello y en esos ojos carmesís, te amo, no puedo creer lo miserable que me hace sentir estos sentimientos, que había tirado a la basura, la esperanza, la fe, la pasión y el sentimiento que mas aborrezco ahora, el amor, pero estas demasiado lejos de mi.
*Un amor casi imposible, como un fuego que no arde, te me haz vuelto inalcanzable, Inalcanzable*
Dormí esa noche con una embriagante tristeza, al despertar regresamos a la mansión, observaba fijamente la nada, pensando en cada paso, cada movimiento, cada fibra de tu cabello moverse, realmente te amo, pero ¿Por qué el destino es tan cruel?
-Lo siento Bocchan, pero yo lo bañare y lo atenderé el día de hoy, Sebastián me dijo que tenía unos asuntos que atender- dijo Meyrin con una gran sonrisa.
-Esta bien Meyrin, pero no te dijo a donde iba-me dio mi té.
-Solo vi que salió con una señorita de cabellos y ojos castaños- luego Meyrin se retiro a preparar el baño, cristalinas lágrimas caían en la taza de té que yo sostenía.
Trague saliva era la misma tipa que estaba contigo cuando fuimos a Londres, la amas Sebastián, yo oí de tus labios esas palabras dedicadas para ella, y luego llore nuevamente
*Vivo en la vereda de tu soledad, cuando alguien te lastima*
-Sebastián, solo yo te amare de esta manera tan intensa, solo yo soy capaz de dar todo por ti, no me interesa la empresa, el dinero, la mansión, nada material me importa, solo quiero tu dulce compañía, ¿Por qué me la niegas?, te amo-las palabras eran entrecortadas ya que sollozaba sin parar mi corazón se destruía no podía detenerlo, sentía los añicos de mi corazón caer en lo vacio de mi existencia
Meyrin vino me baño, me preparo para la comida
-Bocchan, ¿se encuentra bien?, tiene los ojos rojos-me decía Meyrin mientras acariciaba mi cabello
-No-susurre, y la abrace, ella sorprendida correspondió el abrazo, a mi se me estaba quebrando la vida misma, sentía que nada tenia un significado importante, que la felicidad es relativa y el amor un asco, entonces ¿para que sigo viviendo?, si la felicidad de mi vida es efímera, ¿Por qué sigo respirando?, si no hay nada por lo que vivir, ¿Por qué sigo luchando?
*Que ganas de decirte que no hay nadie mas, que te ame sin medida*
Ese día Meyrin me consoló con mucho amor, sentí la calidez maternal, ella me cuido todo el día me obligo a comer, a caminar, prácticamente todo, estaba en mi estudio cuando oí la puerta azotarse, corrí a ver quien era, eras tu, venias enfadado, tenias una expresión entre melancolía y enojo
-Sebastián- baje tratando de sonar autoritativo – ¿donde estuviste? y ¿con quien?-dije tratando de sonar indignado no quería que mi voz se quebrara en el proceso.
-Bocchan mi vida privada no le incumbe-me dijiste tan cruel y fríamente, es verdad tu vida privada tendría que ser indiferente para mi, pero no, yo tengo que saber.
-Te ordeno Sebastián que me digas lo que te pregunte-dije bastante enfadado
-Estuve con mi amante, perdón con mi ex amante-al terminar de oír eso tu voz se quebró y estabas a punto de llorar, ¿la amabas? –Retírate- fue lo único que alcance a decir, tu corriste a tu habitación y me quede llorando, tu sufrías por otra y yo por ti, que ironía
*Como duele verte suspirar, por quien no te hace feliz, si supieras que puedo morir por ti*
Corrí nuevamente a mi estudio y me tire nuevamente a la pena, azote la puerta me recargue en ella y caí de sentón, llore, llore tanto que empape mis manos, mi corazón se destrozaba tanto, ¿Por qué tuviste que buscarte otra?, ahora ya somos 2 desconocidos viviendo en una casa, ¿Por qué no pudiste amarme a mi?, ahora tu corazón demoniaco ama a otra, no, por favor, coloque mis manos en el piso y deje caer las lagrimas al suelo, observando como caían, ¿Por qué me castigan de esta forma?, mi amor es sincero, yo me siento vacio, machacaste mis sentimientos que ahora no paran de llorarte, de suplicar tu presencia.
*Inalcanzable como estrella tan distante, un amor casi imposible, invisible como el aire*
Me alce tambaleándome, en verdad no puedo creer lo tonto que fui, reí irónicamente mientras lagrimas enmarcaban mis mejillas, yo pensaba que alguien como tu se iba a enamorar de mi, tu eres hombre es normal que ames a una mujer, pero había olvidado algo de suma importancia que solo soy una pieza en tu rompecabezas, un alma mas en tu estante perfecto de tus amos anteriores, jamás fui alguien especial ni importante para ti, soy patético, realmente patético, agite mi cabeza, ¿porque tuve que conocerte?, ¿Por qué tuve que amarte?, esta es una broma muy cruel del destino, ahora solo quiero desaparecer y quitarme este maldito dolor.
*Eres tan inalcanzable, tan sublime como un ángel*
Meyrin toco la puerta.
-Bocchan..-no la deje terminar, era realmente penoso mi estado.
-Retírate Meyrin, no quiero ver a nadie mas, hasta que yo los llame- le dije dando la espalda tratando de no quebrarme, solo oí como cerro la puerta, me acorde de cada momento a tu lado, eras tan dulcemente servicial, pero todo era mentiras ¿verdad?, un escenario bien montado para que todos supieran que eras mi mayordomo y no un demonio caza almas, te odio, te amo, te adoro, te necesito, te extraño, llore con mas fuerza, no me importaba que me oyeran, me sentía muerto, muerto en vida, te habías robado cada gota de felicidad de mi cuerpo, ahora siento solo pena, amor, dolor y tristeza, eres frio, pero no puedo decirte adiós, simplemente no quiero pero debo decirte adiós.
*Un amor casi imposible, como un fuego que no arde, te me haz vuelto inalcanzable, Inalcanzable*
Tome un frasco que estaba guardado en un cajón de mi estudio lo guarde, camine hacia mi habitación, limpiando mis mejillas mientras daba una ojeada a cada cosa que existía en la mansión, llegue a mi habitación, fui al baño y me lave la cara, mis ojos enrojecidos no era algo muy agradable, aun así quería volver a llorar, pero si continuaba sentía que me asfixiaría o me ahogaría con mis propias lagrimas, quisiera que todo fuera distinto tu a mi lado regalándome sonrisas y yo regalándote besos, pero no fue así, ahora tengo enfrentar la agria realidad, me espere unos minutos, sentado a obscuras en mi sillón, tenia que calmarme, firmaba unos papeles, cuando los coloque en la mesa, me levante a ver mi cara ya no había tanto enrojecimiento pero mi cara aun predominaba la tristeza.
-Sebastián, ven con los demás sirvientes, y trae un poco de té es una orden-dije mientras el ojo del contrato brillaba.
Al poco rato llegaron los 5 sirvientes
-Nos llamo Bocchan- dijeron al unisonó
-Si así es, quiero cada uno tome los papeles que están marcados, y los vayan a entregar a primera hora a Londres, ósea que tendrán que salir hoy en la noche excepto tu Sebastián tu te quedas aquí-los 4 asintieron, tomaron los papeles se fueron.
Todo se quedo en silencio y oí como salió el carruaje, era ahora o nunca
*Inalcanzable como estrella tan distante, un amor casi imposible, invisible como el aire*
-Sebastián, hace poco, te dije que te amaba ¿cierto?-él solo asintió –espero no te lo hayas tomado tan en serio-vi como su cara mostraba disgusto
-Lo sabía Bocchan-dijo cambiando su cara a fría
-Solamente quiero ordenarte algo por hoy-dije viéndolo fijamente
-Lo que sea mi Bocchan- se inclino un poco
-Bésame- dije ocultando mi rostro ya que mis mejillas se volvieron carmines pero mis ojos cristalinos
-Yes my Lord- hizo una reverencia y sensualmente se acerco a mi
*Eres tan inalcanzable, tan sublime como un ángel*
Tomo mi rostro entre sus manos mientras me veía fijamente, cerré los ojos automáticamente mientras él acortaba los centímetros de nuestro rostros y los sentí, sentí esos labios dulcemente carnosos en los míos, sentí la presión que hacia sobre los míos esa dulce calidez que jamás me pertenecerá, pedí una orden bastante estúpida pero no aguantaba las ganas de sentirlo solo una vez.
-Te amo Sebastián- murmure por mis adentro –gracias-le dije cuando se separo de mi, me miro sorprendido
-Toma esto es para ti-dije entregando los papeles –ahora vete Sebastián y no regresaras hasta que yo te llame, lo haz entendido-
-Yes my Lord-hizo su reverencia y se fue, mi Sebastián te amo, gracias por ese bello regalo que me diste, antes de partir, ahora continuare con lo que quería hacer.
*Un amor casi imposible, como un fuego que no arde, te me haz vuelto inalcanzable, Inalcanzable*
Coloque un poco de ese frasco en mi té, me senté y lo bebí poco a poco.
Mi dulce Sebastián, te amo como no tienes idea, gracias por todo lo que haz hecho por mi, realmente pensé que todo era mágico para nosotros , pero solo fue un truco del cruel destino, fue lentamente pasando, ya no aguantaba mas este dolor y tal vez mi acto sea cobarde pero no creo que pueda vivir viéndote más, ya es hora de dejarte libre, de no tenerte atado a mi, tenia miedo de estar sin ti, pero soy un estúpido jamás estuviste conmigo, solo estuviste para comerte mi alma, lamento haber sido un estorbo y una carga, lamento no poder satisfacer tus necesidades, la libertad que añora la culpa pronto será obtenida, perdóname por haberte mantenido a mi todo este tiempo, es hora de que te regrese lo que es tuyo, ojala esto que siento fuera mentira, ojala pudiera revivir aquellos momentos, aunque no lo creas, te amo, este es nuestro amargo adiós mi querido Sebastián
Todo empezó a torcerse, mi cuerpo se sentia pesado y frio luego todo tornarse negro, supongo que el veneno ya surtió efecto, adiós mi Sebastián…
*Inalcanzable, inalcanzable, inalcanzable*