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En la oscuridad del Bosque por InfernalxAikyo

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Notas del capitulo:

Porfin otro capitulo ! tenía tan abandonado esto >_< lo siento mucho, estuve enferma un par de días y en ese tiempo comencé a ver Mirai Nikki (Si, no la había visto e.e) y estuve pegada unos días como vegetal viendola ._. ya saben como pasa el tiempo cuando uno ve series ._. 

Pero aquí esta! espero que les guste n_n

Gracias por leer <3

Desperté sobresaltado como si mi corazón se hubiese avivado frenéticamente de un momento a otro

- Ya despertaste, chico- La voz de Desmond entraba grave y un poco molesta en mi oído. Intenté moverme pero una mano suave y fuerte me detuvo.

- No debes moverte, Sasha- Soul me sostenía sobre sus brazos ¡Definitivamente era él! Ya lo había recordado todo, en el momento que le vi intenté levantarme pero el intenso sangrado en mi oreja y el cansancio me habían vencido a pocos metros de él, haciéndome caer inconsciente.

Ahora él me mantenía fuertemente aferrado a sus brazos cálidos que me sujetaban firmes y me daban tranquilidad. Desmond caminaba a nuestro lado con desaire, definitivamente algo le molestaba. Nos dirigíamos a casa en completo silencio, ninguno de los tres quería hablar y todo comenzaba a tornarse muy confuso. Un millón de preguntas azotaba mi cabeza ¿Por qué estaba Soul aquí? ¿Cómo había logrado escapar? ¿Dónde estuvo todo este tiempo? Todo esto empezaba a atormentarme, necesitaba saber, necesitaba entender por qué no se presentó antes.

Ya habíamos llegado. Suavemente Desmond abrió la puerta de la pequeña casita y apartó las cosas que estaban sobre la cama para dar paso a Soul que aún me mantenía sobre sus brazos que cuidadosamente me soltaban para dejarme recostado sobre el lecho, cubriéndome con sábanas y arropándome con la dulzura de una madre.

Allí estaban, Soul sentado en la orilla de la cama, Desmond sentado en la otra, ambos estaban realmente preocupados, les miré y sonreí para avisar que ya me encontraba bien. Todo era tan confuso ¿Qué se supone que debía hacer ahora? ¿Qué es lo que debo hacer con Desmond, con Soul? Recorrí con mi mirada los frondosos verdes de Soul y terminé en las pupilas mieles del cazador, sonrojándome ¡Me sentía tan avergonzado! Yo, yo había besado a ambos ¡Y ahora los tenía frente a mí!

- ¡Esta bien!- Dijo repentinamente Desmond mientras se ponía de pie No queda mucha comida y ahora tenemos un invitado, iré por algo de comer al mercado ¿Les parece?- Ambos asentimos con la cabeza, el cruzó una mirada cómplice conmigo, clavando sus ojos  firmes en los míos, su rostro infantil parecía haber empalidecido un poco, parecía enfermo, iba a preguntarle si acaso se sentía mal cuando me interrumpió de pronto:

- Además…-Dijo mirando hacia otro lado mientras atravesaba el umbral de la puerta –Ustedes dos tienen mucho de qué hablar…- Aguardó unos segundos antes de cerrar la puerta, pareció suspirar y la cerró lentamente. Ahora yo y Soul estábamos completamente solos.

- ¿Dónde estuviste todo este tiempo?-Pregunté un poco molesto luego de unos minutos de silencio. Sus ojos que habían estado perdidos mirando por la ventana se dirigieron hacia mí rápidos, clavándose como espinas en mis pupilas. Acercó su mano hacia mi cabeza y comenzó a acariciar mi cabello, luego su cuerpo se acercó más al mío y apoyando mi cabeza sobre su pecho,  inhaló profundamente.

- Extrañaba el aroma de tu pelo…-Dijo como si no hubiese escuchado mi pregunta. Me aparté bruscamente de él.

- ¿¡Dónde estuviste todo este tiempo!?- Insistí mucho más molesto. Él me observó un poco extrañado, luego volviendo a mirar por la ventana, comenzó:

- Estuve secuestrado…-Su voz parecía un poco entristecida –Todos estos años fui un rehén de una de esas bestias-

- ¿Estás bromeando?-Exclamé exaltado mientras que sin darme cuenta lo tomaba por los hombros y le sacudía -¿¡Cómo estuviste diez años secuestrado sin ser devorado por esos animales!?-

- ¡Me usaban para su diversión!- Refutó apartando bruscamente mis manos de sus hombros, clavando sus pupilas en las mías firmes como un hilo tenso. Yo callé inmediatamente y no quise volver a preguntar nada más sobre el tema, había olvidado que esas bestias fueron humanas en algún momento y aún mantenían esa repugnante costumbre de divertirse y disfrutar con el dolor ajeno.

- Lo…lo siento- Me disculpé apenado, apartando mis ojos de los suyos. Él volvió a observarme con su mirada dulce, puso su mano izquierda sobre la mía y comenzó a acercarse lentamente a mí. Estaba nervioso, completamente nervioso, mi corazón se aceleró drásticamente y una pequeña gota de sudor recorrió rápida mi frente y cayó precipitada sobre mi mejilla. Después de mucho tiempo, ahora tenía al verdadero Soul frente a mí, no habían flores alucinógenas ni tampoco era parte de un sueño, era él, mi amigo quién estaba estrechando sus labios entre los míos, tomó mi mano mientras me besaba y me apresó en un cálido abrazo. Luego se separó suavemente de mí, fue un beso corto pero lo suficientemente intenso para elevarme al cielo mismo.

- Te extrañaba, Soul- Dije mientras sin que pudiera evitarlo comenzaba a sentir como mis mejillas comenzaban a ruborizarse rápidamente, llevé ambas manos a mi rostro e intenté disimular el sonrojo, pero él ya se había dado cuenta. Apartó las manos de mi rostro y las tomó entre las suyas, luego se acercó nuevamente a mí

- También te extrañe, Sasha- Susurró suave en mi oído, su voz vibrante sonaba lujuriosa y llena de deseo. Un escalofrío me recorrió por completo. Me aparté nerviosamente de él, había algo que comenzaba a inquietarme, el Soul de ahora era completamente distinto al de antes ¿Qué había pasado con él en todo este tiempo? La dulzura e inocencia de mi amigo de antaño comenzaban a opacarse lentamente con la frialdad e indecencia típicas de los adolecentes que vivían en las zonas más olvidadas del bosque ¡Bueno! ¿Qué más podía esperar de alguien que estuvo secuestrado tanto tiempo? Seguramente esas bestias le obligaron y mostraron cosas indeseables para él, que terminaron carcomiéndole la mente.

- ¿Qué sucede?- Preguntó extrañado intentando nuevamente atraerme hacia él, pero me opuse. Aunque me costase admitirlo, aún en mí estaba la pureza e ingenuidad del niño de hace diez años y este niño aún no podía aceptar bien los cambios de Soul.

-¿Te he asustado, verdad?- Preguntó como si hubiese leído mis pensamientos. Sus ojos perdieron la agudeza hostil y volvieron a la pacífica calma que siempre he visto en ellos –Lo siento yo…- Comenzó apenado –Ha sido muy difícil ¿Sabes?- Su voz comenzó a tornarse temblorosa –Sé que he cambiado, yo…-

- Ya no es necesario- Interrumpí mientras tomaba una de sus manos y la envolvía cálidamente en las mías –Ya no es necesario que te comportes así- Sonreí para intentar animarle –Ahora estás conmigo-

- Lo sé…Pero, yo…-

Volví a interrumpir su frase nuevamente y sin pensarlo demasiado lo estreché fuertemente en un abrazo, él se resistió un poco, parecía querer terminar lo que tenía que decir pero no le dejé hablar y entre medio del forcejeo que se dio entre nosotros lo besé. Sus labios se movían agitados y tensos, su respiración se aceleró y pude sentir como su corazón comenzaba a latir desesperadamente, como si quisiese explotar dentro de su pecho palpitante. Comencé a dejarme llevar por la danza de sus labios envolviéndome, no podía llevar el control, sus ansias y el apetito que demostraba en su beso me invadía y no me dejaba actuar.

- ¡Ah! ¡Soul! ¿¡Qué haces!?- Me aparté bruscamente de él. Un diminuto riachuelo de sangre comenzaba a brotar de mi labio inferior y descendía lánguido por mi barbilla, me había mordido.

- ¡Lo…Lo siento!-Exclamó avergonzado mientras se apresuraba a buscar un trapo para quitar la sangre de mis labios.

- ¿Qué es lo que sucede, Soul?- Pregunté mientras terminaba de apartar el líquido carmesí. En ese momento sus ojos tomaron un color más cristalino y triste.

- No… No lo sé, Sasha- Titubeó con voz quebradiza mientras las lágrimas amenazaban con escapar del claro de sus ojos.

- No sé…- Negó con la cabeza mientras las primeras gotas comenzaban a descender por sus pómulos –No sé que me sucede contigo…-  Terminó.

¿Yo? ¿Yo era el que causaba ese comportamiento en Soul? ¡Pero si apenas nos habíamos reencontrado!

-Está bien, Soul…- Me acerqué a él e intente abrazarle para consolarlo, pero en el momento que su mirada se levantó para encontrarse con la mía, sus ojos cambiaron drásticamente. Nuevamente su mirada se había vuelto tensa y aguda, fría como la de un lince, feroz como la de una bestia. Se abalanzó sobre mí y me apresó contra las sábanas, tomándome por ambas manos y dejando su rostro muy cerca del mío.

- ¿Qué es lo que tienes, Sasha?- Dijo mientras su respiración agitada comenzaba a entrelazarse con la mía. Sentí temor, no puedo negarlo, no entendía del todo que era lo que le estaba pasando a Soul pero hacía todo lo posible por comprenderle, así que mantuve la calma.

- Me estás lastimando- Dije aparentando tranquilidad mientras intentaba ocultar mi nerviosismo tras un rostro impávido.

- ¿Qué es lo que tienes que me encanta de esta forma?-  Dijo como si no me hubiese escuchado. Apretó fuertemente mis muñecas y con su lengua húmeda y cálida recorrió mi cuello. No pude evitar estremecerme de sobremanera, mil escalofríos corrieron rápidos por todo mi cuerpo de pies a cabeza en espasmos notablemente visibles. Subió su lengua hasta la oreja que no llevaba vendada y en un pérfido pero dulce susurro dijo: 

- Voy a devorarte -

- No harás nada de eso, Mond- Miré hacia arriba. El plomo de una de las armas de Desmond amenazaba con volarle la cabeza en un solo movimiento.

- T…Tranquilo Desmond- Intenté explicar nerviosamente –Estás malinterpretan…- Pero no pude terminar mi oración. Soul había dado una certera patada en la mano del cazador, lo que le obligó a soltar la pistola, una pelea comenzaba a darse entre ambos.

Demoré mucho tiempo en reaccionar, sabía perfectamente de las habilidades en pelea de Desmond pero nada sabía de las de Soul. Ambos se movían con soltura y cada golpe era acertadamente ejecutado, pero ninguno de los dos se inmutaba ante el dolor causado por ellos. Un puñetazo en la mejilla de Soul hizo que un hilo de sangre escapara de su boca, pero no fue suficiente para detenerle, en un arrebato furioso se abalanzó sobre Desmond y apresando sus caderas con la fuerza de sus piernas comenzó a darle una serie de puñetazos en la cara, uno, dos, tres, cuatro golpes sobre sus mejillas y no había mueca de dolor en el rostro del cazador. En un movimiento rápido Desmond invirtió la posición y empezó brutalmente a devolver cada uno de los golpes recibidos, uno tras otro, con más fuerza, sin piedad. Ambos se estaban dando una paliza, tenía que detenerles.

- Basta…- Dije mientras comenzaba a acercarme a ellos.

- Basta, Soul, Desmond- Parecían no escucharme en absoluto

- ¡Basta! ¡Maldita sea!- Exclamé furioso dando un fuerte golpe al piso. Ambos se detuvieron al instante.

- ¡Aún hay bestias allá afuera! ¿Recuerdan?- Grité aún más enfadado. Estaba realmente molesto, todo este tiempo hemos estado bajo el temor infundado por los lobos que han atacado nuestra aldea, y ahora que teníamos la oportunidad de acabar con ellos…

- ¡No deberían estar gastando sus energías en este tipo de pelea! – Desmond se apartó de Soul y se levantó del piso mientras levantaba ambas manos en son de paz.

- Sasha yo...Creí que él iba…- Desmond se acercaba a mí y me tomaba por los hombros, intentando calmarme.

- ¡No entiendes nada, Desmond!- Exclamé furioso mientras tomaba mi abrigo y me dirigía al umbral de la puerta. Los ojos de Soul me siguieron atentos y extrañados.

 –Y tú tampoco entiendes, Soul- Dije antes de salir y cerrar la puerta con un fuerte golpe.

Estaba muy oscuro afuera y el frío helado se colaba por mis ropas y atravesaba mis músculos devorándome hasta los huesos, titubeé un par de segundos ¿Qué había sido eso? No sabía pero ahora no podía arrepentirme. Me dirigía hacia el bosque, si Desmond y Soul dejaban de mostrar preocupación por esas bestias debía ser yo mismo quien acabase con ellas, no sabía cómo iba a lograrlo, pero esta noche terminaría con la existencia de esos lobos. 

Notas finales:

Ojala les haya gustado :D dejen sus reviews!


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