Podía jurar que todas mis desgracias desaparecerían si no te hubiera dejado ir tan fácilmente. Onodera… mi Onodera Ritsu, se ha dejado tanto de mi, que yo ya no estoy tan seguro de que tengamos una tercera parte; un punto y aparte a nuestro amor, si no que será ya nuestro punto final… no sé si pueda vivir sin él, sin sentir su calor… no, solo recordarlo con ese traje de novio y alado junto a… una… chica… eso me hierve la sangre.
Ritsu, ¿Qué hare yo sin ti ahora? Lo único que estoy haciendo es llorar como estúpido y repitiendo una canción que retumban mis oídos.
Ahora solo tengo una pregunta… ¿Por qué me enamore de ti solamente?
…………………………………………………………………………………………………………………………………………………………
VISION DE TAKANO.
Desde el primer momento en que me di cuenta que tu, Onodera Ritsu, fueras el amor perdido de la secundaria… de hace diez años. Una de las causas de una gran depresión que casi llega a consumirme por completo.
Mi destrucción, pero también mi renacer al tenerte de nuevo.
Esta vez no puedo continuar
sin tenerte junto a mi
cada vez que te pienso
siento ganas de que estés aquí
todavía no puedo olvidar
el momento en que te vi
sin saber que pensar
quería acercarme
¿Cuando tengo que hacer para que sepas que no he sido el mismo desde que nos separamos?
Y sin poderte hablar y te
sentí y hasta hoy no he podido escapar.
En una mañana común en la editorial, estábamos los dos solo en Emerald mientras el preparaba el trabajo, me senté a su lado mientras en mis manos traía una fila de papeles— Onodera… —lo mire directo a los ojos—.
—Taka… —nuestra cercanía era más concreta como pasaban los centímetros en nuestros rostros—.
Aunque, antes de que pudiera sellar nuestros labios, lo sorprendí dejándole la montaña de papeles que tenía que rellenar— no descuides tu trabajo, idiota —
— ¡¿Qué demonios te pasa?! —le gritaba a mí, a su jefe por el `mínimo´ trabajo que le dejo—.
—“a pesar de que lo ame mucho, no debo de descuidar su trabajo por un simple derroche de amor que se me ocurra” lo quiero para en la noche, sin escusas… tienes tiempo de sobra para ello —volvi a mi lugar de trabajo y revisaba algunos storyboards que me dejaron a cargo este mes. Tenía una sonrisa media dibujada en mi— “su mirada es igual a cuando era el inocente Oda… tan lindo…” —
Todavía no puedo olvidar
el momento en que te vi
cada vez que te pienso
siento ganas de que estés aquí
nada me costaba intentar
te tenia frente a mi
si esto no puedo ser
fue por destino.
Cuando tengo oportunidad de salir junto con el, las probabilidades de que tengamos un rato caminando juntos es más alta. Aun si él se niega mi compañía, siempre tengo yo que dar el primer paso para que se acostumbra a ella; aunque luego de un rato, mientras el esta desprevenido, puedo tomar su mano y cálidamente agarrarme a ella.
Y sin poderte hablar y te
sentí y hasta hoy no he podido escapar.
Al entrar a donde están nuestras estancias, tengo que hacer uso de algo de fuerza para poder estar con el por un rato mas
—espera, Takano-san —dice al notar que hay una obstrucción para cerrar la puerta completamente—.
— ¿Qué acaso no puedes ni decirme las buenas noches, o tan siquiera corresponder la mirada que te dirijo? —le deje esa cuestión para que la pensase un poco—.
— ¡no! No es eso… —
—entonces ya admite que me amas…
Y me basto tan poco para quererte tanto
y sucedió que poco a poco me fui entregando.
— ¡¿q-que?! —
—dilo —
— ¡claro que no! —con esto su cara fue más roja por el sonrojo que tenía en su cara.
Lo sujete de la cadera y comencé a besar con algo de pasión mientras cerraba la puerta con todo y llave. Hare que digas que me amas, cueste lo que cueste… porque yo nunca rompo una promesa, mas si viene relacionada contigo.
Como saber cómo entender lo que sentí
supe que no eras para mí
pero basto un segundo para entrar en tu mundo.