PROLOGO
En el mundo hay tanta maldad pero la más cruel quienes la realizan debes ser personas sin entrañas, no se les puede considerar de otra manera aquellas que se dedican a robar a niños indefensos, alejándoles de sus familias, destruyendo el corazón de una madre al no saber del destino de su pequeño tesoro que cada día siempre lo recordara y sus esperanzas de volver a verlo nunca se apagaran ese es el amor de una madre.
EN UN PARQUE EN TOKIO
Amor que hermoso parque –dijo una bella mujer cargando a su pequeña de dos años que solo estiraba su manita para alcanzar a sus dos hermanos donceles mayores que estaban agarrados de la mano de su padre.
Ese es el último lugar de nuestro paseo familiar mi terroncito de azúcar –dijo el hombre para besar su esposa, pero ambos rieron cuando escucharon el sonido de asco de sus pequeños hijos.
¿Quién hubiera creído que nuestro primer embarazado? –dijo la mujer acariciando los sedosos cabellos de sus hijos de cinco años cada uno que solo soltaron una risita –hubieran sido gemelos idénticos donceles –finalizo para ver que sus dos diablillos salían corriendo a jugar con los juegos del parque, la madre dejo a su hija en una piscina de arena para que jugara con la misma, ambos padres se sentaron en una banca viendo a sus tres hijos sintiéndose complemente felices por tener a tan maravillosa familia, sus dos donceles tenían el cabello rubio como su padre piel blanca como la nieve de su madre, y unos hermosos ojos color dorado o miel como muchos preferían decirle cuando miraban los ojos de sus pequeño, herencia de su padre, su pequeña de dos años tenía el cabello castaño de su madre, piel morenita de su padre y los ojos de un café oscuro de su madre, para ellos dos sus tres hijos eran su adoración, orgullo y felicidad.
Voy por unos helados amor –dijo el padre para levantarse y buscar un puesto de helado, su mujer asintió para que sus ojos vigilaran a sus pequeños que corrían de un lugar a otro persiguiéndose ambos gemelos, luego paso a su pequeña que intento salir del área cayéndose en la grama para empezar a llorar, su madre al verla salió corriendo para cargar a su pequeña.
Ya amor, mami esta aquí mi tesoro –decía la madre para arrullar a su pequeña que al sentir el calor cálido de su madre dejo de llorar para empezar a reír, la madre solo beso sus manos, pero rápidamente alzo la vista ya que sintió un mal presentimiento buscando con la mirada a sus dos amores, viendo con horror que no se encontraban ahí – ¡Joey, Ryota! –Gritaba desesperada la mujer para que su mirada buscara cada rincón del parque --¡AYUDA POR FAVOR AYUDA POLICIA! –gritaba abrazando fuertemente a su pequeña, siguiendo llamando a sus dos angelitos y ellos no respondían a su llamado –no mis bebes no, por favor que alguien me ayude –decía una madre llorando desesperadamente.
Señora cálmense y dígame que tiene –dijo un policía viendo la desesperación de ella.
¡Mis hijos, mis bebes han sido robados! –gritaba al punto de entrar en un estado histérico la mujer, el policía al escucharla rápidamente llamo por apoyo para tratar de tranquilizar a la mujer, su hija la tenia abrazada por el cuello, y la mujer con su mano libre se jaloneaba su cabello, buscando a sus hijos en el parque.
Por favor tranquilícese dígame como se llaman los pequeños y su edad, características físicas –dijo el agente buscando con la mirada algún sospechoso, viendo que sus demás compañeros ya estaban entrevistando a todos los presentes.
Aquí tiene una foto de mis dos bebes donceles, el mayor se llama Joseph Wheeler, pero lo llamamos Joey, el menor se llama Ryota Wheeler, como ve son gemelos idénticos –decía la mujer entre sollozos abrazando a su pequeña viendo que su esposo venia corriendo afligido al enterarse de lo que había sucedido.
Encuéntrelos por favor no importa cómo pero tráiganos a nuestros tesoros –dijo el padre para abrazar a su esposa que solo se aferro a su camisa para llorar amargamente por sus niños, Serenity también sollozaba al sentir la tristeza de sus dos progenitores –los encontraremos amor, ellos soy muy listos –decía el varon abrazando a su esposa.
Solo fue un segundo, solo un segundo y mis bebes desaparecieron –decía angustiada la madre para negar con la cabeza, no podía creer que alguien sin corazón le haya quitado sus pequeños bebes, dos pedacitos de cielo que no han hecho ninguna maldad para que estén en manos de alguien sin corazón.
EN OTRO LUGAR
Pero qué demonios robaste animal–dijo un hombre viendo que a los dos donceles uno estaba detrás de su hermano sollozando para regresar con sus padres y el otro le daba una mirada gélida haciendo que tragara por el miedo que provocaba el niño de aproximadamente cinco años.
Es que son lindos, y tú me pediste que robara lo más valioso que encontrara, y la madre de ellos decía mis tesoros –dijo el otro ladrón riendo bobamente, sintiendo como su compañero le daba un coscorrón en la cabeza.
Idiota te dije que robaras carteras, billeteras, no unos mocosos, y por la ropa que tienen deben de ser de una familia bien acomodada –dijo el hombre frotándose la cabeza –los padres no se quedaran quietos imbécil llamaran a la policía y nos meterán a la cárcel en un pestañar –dijo el hombre para negar con la cabeza, pero al escuchar la sirena de la policía tuvo miedo de su suerte metiendo como podía a los niños en el auto, dándole resistencia el mayor de los donceles ya que mordía su mano pero pudo meterlo en el automóvil y que su compañero empezara la huida.
Joey, quiero a nuestros padres –decía Ryota abrazando a su hermano que solo buscaba la manera de salvarlo.
Estúpido, ahora que haremos, la policía está buscando a estos mocosos, no iré a la cárcel por una idioteces de tu parte –dijo el hombre viendo desde el espejo a los niños, buscando una salida de esa situación –de verdad mocosos no querías secuestrarlos, buscaremos la manera de regresarlos con sus padres, pero no llores ok –decía el hombre viendo que los niños solo asintieron con una sonrisa al pensar que regresarían con su familia, Joey saco de su bolsillos dos broches con sus nombres, colocando el nombre de su hermano en su camisa para cuando fueran a una estación de policía supieran sus nombres.
Pero como lo regresaremos, si parar a la cárcel nuevamente –susurro el otro viendo con horror que una patrulla le estaba indicando que parara con su mirada vio a su compañero que solo aumento la velocidad para emprender la huida.
Si tuvieras hijos y un idiota te los roba no moverías cielo, mar y tierra para encontrarlos –dijo el hombre entrando en pánico al darse cuenta que ya no era solo una patrulla sino varias, como un experto pudo librarse de ellas pero estaban en una carretera completamente desconocida para él
Tengo miedo –dijo Ryota abrazando a su hermano, este solo lo consolaba viendo que iban muy rápido hasta que abrió grandemente sus ojos al ver un cabezal de un tráiler venir encima del auto, el copiloto trato de esquivar el tráiler haciendo que el automóvil patinara a máxima velocidad, Joey miraba todo eso en cámara lenta, abrazando fuertemente a su hermanito que por la velocidad que tenía en esos momentos el auto rebotaba hasta que el auto choco fuertemente en una pared, Ryota su cabeza choco con la ventanilla, y Joey salió disparado hacia afuera por el impacto quedando ambos donceles inconscientes.
Maldita sea –susurro uno de los ladrones para agarrarse la cabeza, viendo que su compañero de al lado estaba inconsciente, pero abrió grandemente sus ojos al recordar a los infantes rápidamente se giro viendo que uno de los donceles tenia sangrado en su cabeza, pero no era una herida muy profunda, después busco al otro doncel viendo que estaba afuera, se quito el cinturón para socorrer al pequeño que estaba gravemente herido –no pequeño no mueras, perdónanos nunca quisimos esto –decía afligido el hombre para cargar al pequeño delicadamente para empezar a correr gritando por ayuda, olvidándose completamente de su compañero y el otro doncel que en esos momentos abría lentamente sus ojitos para asustarse en donde estaba.
¿Quién Soy? –sollozaba el doncel para salir del auto abrazándose a sí mismo, viendo todo a su alrededor sin conocer nada del lugar empezó a caminar tratando de recordar algo de su persona, pero su mente estaba en blanco, para que llorara mas fuerte no sabía cuánto había caminado pero cuando sintió que su cuerpo ya no podía mas y en cualquier momento se desmayaría una hermosa mujer que estaba al parecer se estaba ejercitándose para poder despejarse del recuerdo que la atormentaba, al ver el estado del menor salió auxiliarlo
Pero por todos los santos –dijo la mujer para cargar al pequeño que estaba temblando de frio, su camisa estaba llena de sangre –se fuerte mi niño, tu madre te protegerá, mi bebe pronto llegaremos al hotel –susurro la mujer preocupada para tomar dirección al hotel que se estaba hospedando con su familia.
EN OTRO LUGAR
Ayuda por favor este niño necesita atención medica –gritaba el ladrón para entregar al doncel a un doctor de emergencia que rápidamente se llevo a la criatura a cuidados intensivos.
Señor díganos el nombre del niño y que parentesco tiene con el menor para archivarlo –dijo la recepcionista viendo que el hombre bajaba la cabeza.
No soy nadie del pequeño, por accidente mi compañero se robo a dos menores –confeso el hombre, hasta ese momento se recordó del otro doncel que dejo inconsciente en el auto, miro con preocupación a la señora, que estaba reportando el robo de los menores, sus ojos se fijaron en la televisión viendo con horror que el auto que estaba conduciendo en esos momentos estaba pasando en el noticiero, pero lo que se llevo su alma al infierno fue ver el auto completamente envuelto en llamas –¡NO!, no puede ser, el auto donde estaba el otro doncel exploto, el niño murió por mi culpa –grito para luego susurrar el hombre agarrándose con sus dos manos su cabeza, siendo apresado por un guardia del hospital hasta que vinieran los padres del menor.
¡Maldito! –Grito el padre de los dos donceles para darle un puñetazo al hombre, los policías les habían informado todo lo sucedido al hombre –dime donde están mi otro hijo –grito el varon para intentar darle otro golpe al infeliz que robo a sus bebes.
Lo siento mucho señor, no fue nuestra intención se lo juro –dijo el hombre sin levantar la cabeza, sabiendo que al decirles que le había pasado al otro doncel el hombre lo mataría –cuando reaccione después del accidente que tuvimos al huir de la justicia, vi que uno de los donceles tenía un golpe en la cabeza y estaba inconsciente, pero cuando mire al otro doncel que estaba tirado en la carretera con un charco de sangre, no pensé en nada más que salvarle la vida, era nuestra culpa que él estuviera luchando por su vida, pero nunca pensé que él, que el auto que viajáramos explotara, con mi compañero y su hijo dentro del mismo, ambos fallecieron, de verdad lo lamento nunca quisimos robarnos a sus hijos, pero tuvimos miedo de la policía que huimos con ellos –dijo el hombre observando que el padre de los donceles solo retrocedido con los ojos completamente abiertos al saber que su Ryota había fallecido en ese accidente, para mirar que su esposa sentía que la tierra se abría y la devoraba al saber las noticias de sus dos tesoro.
Mis bebes mis lindos Joey y Ryota –sollozaba la mujer, para correr con un doctor necesitaba noticias de su pequeño –por favor quiero saber la salud de mi pequeño doncel que entro en emergencias –grito histeria la mujer para señalar una foto de sus dos bebes, al reconocer a uno de los donceles el doctor.
Su hijo se encuentra estable cuando ingreso perdió mucha sangre recibiendo varias transfusiones de la misma, si sigue mostrando ese cuadro, en unos días podrá salir del hospital –dijo amablemente el doctor, la madre del pequeño solo asintió para caminar donde estaba su esposo, viendo que un policía se acercaba a él con una mochila semi calcinada que la reconociera a kilómetros ya que era la favorita de Ryota, con una mano en el pecho se acerco esperando que fueran buenas noticias.
Lo sentimos señor, pero desgraciadamente por la intensidad del fuego no se pudo reconocer si su hijo estaba dentro del auto, los bomberos solo pudieron salvar esta mochila, por lo cual suponemos que desgraciadamente el menor falleció dentro del auto –dijo el policía viendo que la mujer solo abrazaba la mochila para llorar amargamente junto a su esposo.
No, mi amor, mi corazón de madre, me dice que mi pequeño está con vida, y no descansare hasta que lo encuentre –dijo la mujer con una mano en su corazón, su esposo solo la abrazo fuertemente esperando que fuera verdad lo dicho por su esposa.
EN OTRO LUGAR
Estás loca mujer, no es tu hijo; amor, se que todavía no has podido resignarte a la muerte de nuestro bebe hace cinco años atrás, pero no es excusa para que quieras arrebatarle ese pequeño doncel de su familia que tal vez en estos momentos lo estén buscando desesperadamente –dijo un hombre viendo que su esposa estaba sentada en un sillón llorando amargamente.
Es mentira, es mi hijo yo lo encontré perdido y herido –sollozaba la mujer para ver a su esposo que no sabía qué hacer ante esta situación, pero ambos dejaron de hablar cuando su hija mayor entro a la habitación, informando que el niño había despertado, los dos adultos tomaron rumbo al cuarto donde estaba el doncel.
En serio no sabes quién soy –habla el doncel con otra niña que solo negaba con la cabeza, para ver entrar a sus dos padres, el niño solo miraba fijamente a los adultos --¿Quién soy? y ¿Quiénes son? –dijo el pequeño para sentir un fuerte dolor de cabeza para que nuevamente se desmayara los dos adultos se vieron fijamente para tomar una decisión.
Niñas desde este momento, este angelito será su hermano menor, y no pueden decirle que no es nuestro hijo por ningún motivo hasta que el mismo recuerde a sus padres, aunque tal vez en estos momentos lo estén buscando –dijo preocupado el varon, viendo que sus dos hijas estaban emocionadas de tener un lindo hermanito como era el doncel que juraron no revelar el secreto.
Bienvenido a nuestra familia, mi hermoso hijo Ryota Kise –dijo la mujer para besar la frente de su hijo que solo se acurruco más en la cama.