Toda mi corta vida he escuchado “las apariencias engañan”, y siempre me pareció algo insignificante, sin importancia, y tampoco es como si ahora yo estuviese sufriendo por enamorarme de alguien que es muy diferente a lo que creí, no, esto es diferente, pues siempre creí ser alguien fuerte, valiente y decidido, pero no es así, soy un cobarde, tengo miedo, y muero por alguien que ni sabe que existo.
Me refugio en mi ropa negra, mi ojos delineados y en la soledad, mi música es mi fiel amiga, ella me dice la verdad, nunca podré tener a ese ángel que sufre por un amor que no corresponde a sus sentimientos.
Hay cosas que son más dolorosas que sufrir por un amor que no te ve aunque estés a dos centímetros de él, por ejemplo no tengo dinero, mi padre acaba de matar a mi mama, y después se suicidó. No tengo dinero para pagar la escuela, la banda tiene que hacer un demo para enviarlo a una disquera y acabo de lastimarme la mano, sin mencionar que soy el guitarrista principal, y por si fuera poco, además de que debo conseguir dinero para seguir estudiando, también necesito para darle a mi hermano menor, pero lo único bueno de esto, es que mi hermano tiene beca para estudiar, así que eso me quita un poco de todo el peso que cargan mis hombros.
Pero es inevitable, él es lo más puro que hay en la tierra, quisiera ser ese imbécil que lo rechaza e ignora, para poder tenerlo y tener todo su amor, pero él se muere por ese idiota que tiene todo y no lo aprovecha.
Quisiera ser ese imbécil y poder ver los ojos de ese ángel que lo ven como la persona más importante en su vida, pero mi papel es otro, yo ni siquiera tengo personaje en su historia.
Cuando lo veo llorar por ese chico, siento que quiero matarlo, pero él lo ama tanto, que yo ya estaría muerto antes de si quiera estar a 10 pasos de ese imbécil.
Pero bueno, al parecer la mala suerte es de familia, pues mi hermano está enamorado de ese imbécil, que tampoco sabe ni el nombre de mi hermano.
Mi hermano y yo vamos a la misma escuela, pero él va un año antes que yo, y es víctima de varías chicas y chicos que se burlan de él por no tener dinero como ellos.
Me ha costado defenderlo, pues él es débil, un golpe puede ocasionarle graves heridas, pero lo que le puede romper el alma, son las palabras.
Él no es como los demás, él es muy tierno, serio, listo, siempre piensa en cualquier otro antes que en él mismo.
Pero ahora eso no es lo que se requiere para triunfar, ahora lo que importa es si tienen bonito cuerpo y linda cara, y aunque mi hermano es muy lindo, no se deja notar por completo, es igual a mí, y prefiero que nunca salga a la luz, a que tenga que fingir ser una puta como casi todos los donceles y mujeres hacen para ser alguien, mama y papa jamás le dieron amor, pero yo sí, y lo quiero tanto, que puedo dejas atrás todas mis metas solo para darle un futuro a mi hermanito, pero la tristeza en aquel ángel que llora en los brazos de una de sus tantas amigas, me pone tan mal, lo que daría por aunque sea ser su pañuelo de lágrimas, daría mucho, pero tal vez ni eso baste para sacar de su corazón a ese imbécil.
¿Qué hay después de la lluvia?
A veces un sol listo para secar la tierra.
Otras veces, un cielo nublado que dice que otoño puede acabar con el paso del tiempo, pero a mí me dice, que la tristeza de otoño y la soledad de invierno jamás van a desaparecer de mí corazón, no importa cuánto tiempo pase.
Mi nombre es Sai, tengo 18, soy alto, pelinegro, piel parida, ojos muy negros, mi aspecto parece de emo, pero no soy para nada emo, simplemente visto de negro.
Mi hermano es Sasuke, un doncel de 16 años, piel y ojos negros, es más bajo que yo, y él viste como cualquiera, aunque sus ropas no son de marca, pero hay una señora en la calle donde vivimos que le hace ropa linda a mi hermano, y se la regala solo a cambio de limpiar su casa, estoy seguro que si fuera esa mujer, le regalaría la ropa así nada más, pero lo más seguro es que le pida limpiar su casa solo para no hacerle creer a Sasuke que se la da por lastima o pena, esa mujer es muy buena, hasta a mí me da ropa para venderla y conseguir dinero.
Con la muerte de nuestros padres, Sasuke y yo nos quedamos más solos que antes, ahora debo trabajar el doble p triple de lo que lo hacía incluso cuando nuestros padres aún vivían.
El nombre del imbécil por el que mi hermano se muere, es Naruto Namikaze, es rubio, piel canela, y ojos azules, es un poco más bajo que yo, vamos en el mismo año, el mismo salón.
Y el nombre del doncel por el que yo muero, pero que muere por Naruto, es Gaara, Sabaku no Gaara, su cabello es muy rojo, piel muy blanca, y ojos aguamarina, aunque tiene aspecto de mapache, es un muy lindo parecido, es el más lindo en toda la escuela, y lo mejor, es que él no presume, no es egoísta, pero sufre por no tener la atención de Naruto.
Siento lo que él siente, yo muero por alguien que a quien no le importo, y él sufre por alguien que lo conoce, pero que solo juega con sus sentimientos, solo piensa en él mismo, y no en el dolor que deja a su paso.
Aunque, por más que lo odie, Naruto no es como lo veo, yo lo veo como un chico rico que jamás se preocupa por nada ni nadie, pero en realidad él es un buen chico, si hace sufrir a muchos, es porque él no siente lo que muchas sienten por él, así que prefiere no corresponder a nadie, pero las rechaza con gentileza, pero para muchas y muchos, el simple hecho de que no estén a la altura del rubio, basta para llorar como si su vida dependiera de ello.
¿Qué hay después de la lluvia?