: -¡Noooo!, ¡No quiero!- Gritaba desesperada mientras pataleaba. Mi pie se fue a plantar a la cara de alguien ¡Ha toma eso! por el golpe me soltó cuando dejo escapar un alarido y yo logre huir.
-¡Maldita perra me rompiste la nariz!- Grito mientras yo seguía huyendo. Todos tras de mí, la puerta a unos metros, ya casi... hasta que...
- ¡Amanda Knoll!-sonó furica la voz de mi madre desde la cocina.- ¡Mas te vale que te pongas ese vestido y le pidas disculpas a tu hermano antes de que suba y tire a la basura todos tus dibujitos chinos!- ¡No, mi anime no!
-¡Pero mamá!- proteste.
-¡Pero nada!- sentencio saliendo de la cocina y ¡touche! la mirada asesina que solo las madres logran hacer. Ahora era si o si.
Así termine en este ridículo bocho amarillo (yo elegí el color muajajaja) con un aun mas ridículo vestido igual de amarillo (desde ese día mamá cree que amo el amarillo.) -¿Tengo que ir?- Pregunte por milésima vez con un puchero de lo más tierno.
-Si aunque pongas cara de cordero a medio matar.- contesto mamá desde el asiento del copiloto.- vamos es la fiesta de cumpleaños de tu prima Esther, siempre fueron muy unidas.- Oh mai gay guai ¡Sho unida al estropajo! Ño, ni en chorrocientos mil años. Ósea ples, mamá si me la pasaba con ella es porque cierta persona (ingrese indirecta) me obligaba a hablarle y ¡que crees!,¡Ese estropajo de cabellos enmarañados y exceso de carne me jodio la puta infancia! Aish... ahora quiero llorar pero no, no quiero arruinar mi maquillaje.
-Tienes razón mamá.- mejor decirle que si o empezara con sus anécdotas de cuando hacíamos travesuras juntas, o mejor dicho Esther las hacía y yo me llevaba el castigo.
Gracias a mi "escape anti vestido." llegamos algo tarde pero no tanto. Mi radar anti gordas odiosas estaba a mil para huir en cuanto viera a... "ella"... aish hasta cosita me da. -Iré al lavabo.- Me pare de la mesa y camine hacia el baño, debo admitir la cerda tiene buen gusto. El salón es hermoso y ¿Que es esto? ¡El baño tiene esos jaboncitos que tan bien huelen! !o mai ga!
-jajaja, si yo también pienso que huelen bien.- Dijo una tierna voz tras de mí. ¡Staph! ¡Lo dije en voz alta!- Si lo hiciste.-Rectifico la voz.
-Aish, ¡Por deoz que tengo que dejar esa maña y...!- me di la vuelta lentamente y juro que lo que vi fue hermoso mil. Su cabesho chocolate y ondulado, ojos verdes con pigmento miel, tés blanca, ¡Delgada! ¡A que me mojo! ¿Quien es esta ninfa griega y por que esta ahí parada y no entre mis piernas?
-¿Amanda?, Amanda... ¿Estas bien?, ¡Amanda!- Eso mami zangolotéame, hazme tuya contra el lavabo. Espera... ¿como sabe mi nombre?
-Em... ¿Diga?- Mi tono de era dudoso y un poco torpe. Aish es que me pierdo en sus ojos, son tan... rompe ovarios ¿Me dejara lamerle un ojo? o los dos... ¡Mejor enterita!
-¿Estas bien?- pregunto con clara preocupación !aish! se preocupa por mí, esta tan buena... digo es tan buena ¿de dónde la conozco? -mejor que bien- conteste con una sonrisa libidinosa, ¡Amanda contrólate pliz!- Digo... si y... ¿Tu eres?
-¿no me recuerdas?- su sonrisa picara me mojo... digo derritió el corazón y las bragas... ¡Aish Amanda plox!
-En la mente de Amanda-
Lujuria: me la quiero coger... felicidad: yo también... razón: No sean tontos eso no es posible Lujuria y felicidad: ¡Pero está bien buena! Razón: Eso si... bueno permiso para cogerse a la extraña con la acusación de que esta tan buena que es delito.
Amanda: oie cy que rikolino.
-de regreso al mundo.-
-¿Que es rikolino?- pregunto la dueña de los ojos verdes con una disimulada sonrisita ¡Mierda otra vez!
-eh... se me antojo un rikolino.- Me excuse sonrojada.
-Jajá, eres tan ocurrente como siempre.- dijo con una sonrisa para por fin retirarse con un sexy movimiento de caderas.- Ah... y Amanda.- se paro en la entrada y me volteo a ver de reojo.- Es un placer verte de nuevo... prima.- Y me cerro el ojo ¡Oh dios creo que me voy a venir y tener un orgasmo a la vez! aunque no, en realidad me estoy orinando y soy virgo así que ni idea de cómo se sentirá un orgasmo pero estoy así como "o-nunca-eh-tenido-un-orgasmo-pero-si-lo-tuviera-se-sentiria-asi." ¡Es que esta tan buena la prima!... (Inserte cerebro plox) prima... prima...
-¡Esther!- grite frustrada y pude ver como volteaba con una sonrisita para por fin irse, dejándome ahí; confundida, caliente y shokeada.
-¡Mama!- llegue gritando de frustración- algún psicópata rapto mi gorda prima y dejo en su lugar una modelo pero si SA-BRO-SA.- Hablaba supáh rápido, como completa descolocada.- ¡Te juro que no es ella! A esta mujer si me la doy...- ¡Y típico! cuando mama voltea claramente avergonzada por la sarta de boberías que voy gritando noto que habla con más ni menos que... ¡Si! ¡Mi prima Esther!
pasaron algunas horas y Esther no se iba de nuestra mesa, poco a poco todos se fueron levantando para ir a bailar y para cuando comenzó el caballo dorado yo ya estaba completamente sola con... "ella". ¡Dios Esther! ¿Por qué te pusiste tan buena?
-jajaja es la cuarta vez que me preguntas eso.- contesto sentándose a mi lado. Mierda... -Sabes... volveré al pueblo.- puso su cabeza en mi hombro mientras lo decía y yo sentí los colores subiendo por mi rostro.- ¿Me acompañarías al baño?- ¿Eso fue una indirecta?, ¿lo fue?, ¡díganme que lo fue!
-ya que...- conteste con indiferencia ¡Es que si le pongo felling me la devoro aquí! Bueno no...
Una vez en el lavabo me acerque a echarme agua en el rostro. Aun no podía creer que esa hermosa mujer sea la odiosa de mi prima... ella... ¡joder! Golpee la orilla del lavamanos, aun estaban esas ganas de vomitar al recordarla, al recordar todo lo que me hizo... nunca la perdonare... haberme jodido así la infancia.
-Amanda…- Dijo entrando tras de mí y cerrando con pestillo.
-¿Qué quieres?- Mierda fui algo ruda, pero se lo merece. Siempre la odie y ahora llega con ese cabello chocolate, esos ojos aun mas verdes que antes y esos labios hermosos que me besan a querer cambiar las cosas… ¡Joder! ¿Me está besando?, ¡Si me está besando! No vi en que momento, pero su cuerpo apreso al mío contra el lavabo. Lentamente subí mis manos para tomarla de la cintura. Debió de creer que la alejaría pues se tenso con el contacto. Pero ni yo me explico por qué en vez de ello… le correspondí, abrí mi boca dándole paso a su cálida y húmeda lengua. Joder que bien besa. Poco a poco paso de ser un beso tierno a una feroz batalla de lenguas, sus delgados dedos enredados en mi negra cabellera, mis manos en sus muslos recorriéndolos con ansias. En un movimiento rápido conseguí alzarla y cambiar los papeles. Ella sentada sobre el lavabo y yo entre sus piernas con las manos en sus glúteos. Su espalda comenzó a arquearse a la vez que me mordió levemente el hombro dándome un sexy toque momentáneo contra su pelvis. ¡Joder llamen a los bomberos que me estoy quemando! Ah no esa es una canción… ¡Pero igual!- No aguanto más…- Gruñí tomando los tirantes de su vestido a punto de bajarlos, cuando para mi maldita mala suerte alguien comenzó a tocar la puerta. Me empujo fuertemente y a una velocidad inesperada se acomodo el vestido ¿Estas de coña? ¡Pero si no me puedes dejar así mujer! La frustración se leía en mi rostro y sé que lo noto pues ya con toda compostura me alzo una ceja con cara de “¿Te gustó?
-Eso fue por decirme sabrosa.- Susurro mientras se acercaba lentamente.- Y esto…- ¡O si otro beso!- Por llamarme gorda…- Y juro que la cabeza me dio vueltas de la tremenda cachetada que me acomodo ¡Que diablos! Abrió la puerta y con fingidas lagrimas salió gritando.- ¡Eres una idiota!, ¡No tenias porque arruinar mi cumpleaños!- Justo como me dejo la primer vez en el baño me dejo ahora; confundida; muy caliente y shockeada. Solo que ahora todos los invitados, incluyendo a mi madre me ven con cara de quererme matar. ¡Aish! A´masita te juro que pepe el toro es inocente. Ósea sho no hice nada malo, mi prima huyo antes de que lo hiciera.
Ahora si no tengo duda… ¡Ella es mi prima Esther!
Lunes… No por favor. Desde la fiesta mama no me dirige la palabra y peor aun el domingo me anunciaron que Esther entraría a mi colegio ¡Por Athena! Que la escuela se queme…
Llegue como siempre tarde pero obviamente sin ganas d entrar, rodee l escuela y me senté en una jardinera del patio lo suficientemente alejada como para que ningún profesor o alumno me alcanzara a ver. ¿Enserio habra venido? Las horas pasaron rápidas, por alguna razón no podía parar de pensar. Uno, dos, tres, cuatro, ya la cuarta hora y yo aun aqui tumbada ¡Demonios! Mis notas de por sí ya son malas como para estar brincándome clases por ella. Me levante segura de mi misma, decidida a comerme al mundo, cuando por alguna mística razón el mundo me dijo “naa” y volví al suelo. Tal vez esa fuerza mayor dijo “No Amanda, tu estas hecha para ser floja así que duerme un rato.”
-¡Demonios!- Grito alguien y yo solo veía el cielo azul sobre mi… ah esa nube tiene forma de helado… ¡Y esa es roja! Espera… ¡Esa no es una nube! Hermoso cabello rojo y seductoramente corto, ojos azules y una pequeña cicatriz en el ojo derecho. Que chica tan… Sexy ¡Si, si! Ya sé que van a decir “es que Amanda tu a todas las ves sexys” pero juro que es sexy y esos ojos ¡Juro que vi el cielo en su mirada!- Oye idiota… Te pusiste en el camino de mi balón.- Me reclamo con obvia molestia ¡Que voz! Jeje, como dije… el cielo en su mirada.