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No hablaré de mi amor por pandorayaoista

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Notas del capitulo:

Bueno esto… esta cosa… salió luego de ver hércules, llego a mi mente y lo escribí espero les guste y comenten aunque los consejos no están de más cof,cof,quiero-ser-escritor(a),cof,cof

No podía dormir el insomnio le avía ganado como tantas otras veces en que su mente divagaba en esos nuevos sentimientos que su joven corazón comenzaba a sentí por cierto mayordomo de ojos carmesís

Estaba enamorado pero no quería decirle a nadie, le era humillante amar a un demonio por que de seguro ese ser del infierno no le correspondía ni en amor ni en deseo y por eso se sentía fatal, quería que esos sentimientos de profundo amor desaparecieran y así seguir con su vida que de “normal” no tenía nada

Se levantó de la cama ya harto de pensar en lo que según él eran estupideces, se puso las pantuflas y salió de su habitación, camino por los pasillos de su mansión, la que siempre considero su hogar y que ahora se le hacía tan fría y vacía, camino hasta las escaleras, miro asía los lados para ver que el dueño de sus pensamientos no lo viera en su paseo nocturno, bajo las escaleras, camino por unos pasillos hasta llegar a la puerta que daba al jardín de la mansión, bajo los fríos peldaños de piedra mientras su camisón blanco ondulaba al fresco viento de verano y camino asía el jardín sentándose en la orillas de una fuente de piedra

En ella se podía ver en el centro en una pequeña plataforma la imagen de una mujer joven, 15 años a lo sumo de largo cabello ondulado y hermosas facciones, tenía una lira entre las manos y parecía estarla tocando, vestía una toga (autor(a): toga aquí:  http://i00.i.aliimg.com/wsphoto/v0/2053077850/Greek-Goddess-Venus-font-b-Costume-b-font-font-b-Roman-b-font-Athena-font-b.jpg) pero toda la estatua era gris y fría como el corazón de ciel 

El joven phantomhive dejo ir un suspiro, se sentía triste por su amor no correspondido que intentaba negar

¿Por qué no le dices ciel?, así sabrás si te ama o no – le hablo una dulce vos al oído, el conde dio un bote sobre la orilla de la fuente y callo sentado al piso, la joven de la fuente de agua le hablo, le estaba sonriendo!!!, Ahora tenía el pelo castaño y la tez blanca pero seguía igual de hermosa

Qui… quien… quien eres tu – pregunto nervioso el conde

Alguien que no quiere verte sufrir – le respondió extendiéndole su mano, ciel la miro detenida mente para luego aceptar y ponerse de pie

No sé de qué me hablas… yo estoy perfectamente bien – dijo orgulloso sentándose de nuevo en la orilla de la fuente cruzando los brazos, la extraña chica también se sentó

Ho vamos… he visto tu tristeza y melancolía, anímate, dile a Sebastián que… – ciel le tapo la boca con la mano

Shhh… cállate no ves que te puede oír – le reto – a demás es mentira, no siento ni pena por él, estás viendo cosas donde no las hay – se defendió

¿Estás seguro? – le sonrió picara

Si – contesto altanero

No sé por qué pero… no te creo – le dijo burlona

Pues créelo y la conversación ya me harto con permiso… – se levantó y comenzó a caminar en dirección a los rosales y la chica lo imito

Ho Vamos! el amor no es tan malo – le decía ella

Mmm… – fue la respuesta de ciel cuando delante de él y de la nada callo una pluma de cuervo negra azabache – como el cabello de… –silencio de golpe con las mejillas ruborizadas, acerco su pequeña nariz y olfateo la inconfundible fragancia varonil de su mayordomo, luego se dio cuenta de lo que hacía – Aahh, ¿Que está Pasándome?, Es que no lo Entiendo...

La chica sonrió y comenzó a tocar la lira, ciel le volteo a verla molesto – ¡¡que ases!!!, vas a despertar a toda la mansión – si bien el ruido no era fuerte ciel no quería que llegara a oídos de Sebastián

Naa… tranquilo y disfruta tu momento – a la par de la lira, comenzó a sonar una suave y melodiosa música

Y ciel estaba seguro que Sebastián ya se dirigía asía allí – cállate ya!! – le reto, la chica solo le sonrió dulcemente y chasqueando los dedos

El conde sintió unas enormes ganas de cantar, se llevó las manos a la boca, nunca avía cantado y nunca lo aria

Canta con el corazón ciel – le aconsejo tocando más fuerte la lira mientras la melodía, que salía quien sabe de dónde, subía de volumen hasta que el conde ya no pudo aguantar más y se dejó llevar por el hechizo de la extraña chica…

 

(Cantan alrededor del jardín junto a las rosas blancas)

Ciel: “Si a los engaños dieran premios, hubiera

          varios ya ganado, no

          me interesa tener novio, eso es historia

          ya lo sé todo.” (Tira la pluma negra y la joven la atrapa)

(Ciel iba enrojeciendo poco a poco por la vergüenza)

 

La chica: “A quien crees que engañas él es lo

                 Que tu más quieres

                 Ocultarlo tratas es hermoso lo que sietes”

(La chica cantaba hermoso asiendo un dúo perfecto con ciel)

 

Ciel: “¡oh no!”

 

La chica: “no lo disimules bien sabemos donde

                  esta tu corazón”

(le muestra la pluma y se la pasa pero ciel la rechaza)

 

Ciel: “¡no, oh. oooh!”

         “No van a oír que lo diga no, no”

 

La chica: “tu sueño es no lo niegues, ¡uh oh!

 

Ciel: “jamás lo haré no hablaré de mi amor”

 

La chica: “churu, churu, uh, uh, uh”

 

Ciel: “Creí ya haber aprendido

           siempre el inicio es hermoso, mi mente

           dice ten cuidado”

 

La chica: “¡ah, ah!”

 

(ciel mira a la chica furioso por hacerlo cantar algo tan cursi)

Ciel: “porque no todo es maravilloso, ¡oh, oh, oh!”

 

La chica: “Claramente vemos que lo quieres

                 y lo extrañas no lo aceptaremos

                 date cuenta que lo amas”

Ciel: “!no ho, ho!”

 

 La chica: “trata de admitirlo

                  debes de aceptarlo muy enamorada

                  está”

Ciel: “!no, oh, oh, oh!

          No van a oír que lo diga no, no”

 

(La chica le muestra un cuadro donde aparece Sebastián sonriendo seductor (autor(a): que no se dé donde lo saco) y ciel sonríe enamorado)

La chica: “ya ríndete tu sonrisa es de amor”

 

Ciel: “no insistan más no diré que es amooooor”

 

La chica: “Quieras o No, te atrapo el amor, Chudu, Chudu”

 

Ciel: “No Pidan más, Que lo diga”

 

La chica: “No lo dice no, Chudu, Chudu”

 

Ciel: “¡No harán Jamás que lo diga!” (Se sienta nuevamente a la orilla de la fuente con los brazos cruzados)

La chica: “uuuh,

                  Su Orgullo no, deja que hable el amor”

(Le deja la pluma en el cabello y ciel la toma)

 

Ciel: “Ooohh...

          Nadie, sabrá...

          No hablare de mi amor...”

(Con cara de enamorado acaricia la pluma)

 

La chica: “Chudu, Chudu, Chudu, Chudu, Shalalalala, Aaahh” (termina suspirando con los dedos entrelazados)

 

Sebastián que avía estado viendo y escuchando a su amo que cantaba con tanto sentimiento se sienta junto a él y le acaricia la mejilla, ciel dio un pequeño salto del susto y al mirar el rostro de  Sebastián sonriéndole con ternura se pone rojo como un tomate maduro

Cuan… cuanto… escuchaste… – pregunto nervioso el conde

Llegue al escuchar la lira… cantas hermoso ciel – le contesto pasando suavemente su nariz por la mejilla del conde el cual se estremeció (autor(a): y no de frio!! Kawaii!!)

Sebastián tomo al conde en brazos y lo sentó en su regazo abrasándolo – ciel… -  le susurró al oído puso su enguantada mano en la nuca del conde acariciando su cabello y ya sin poder aguantar más atrajo a su amo besándolo con todo el amor contenido

Ciel abrió los ojos como latos, no se esperaba eso, se imaginó que se burlaría o que lo rechazaría de manera cruel y despiadada pero no que lo besaría – “debe ser uno más de sus juegos” – pensó y trato de resistirse pero la boca del demonio iba ganando terreno, su ternura, su fresco y adictivo sabor, las manos de Sebastián que abrasaban al conde como si temiera perderlo

Ciel no pudo luchar y serrando los ojos se dejó hacer por el demonio, ambos disfrutaban del primer beso del conde, pero Sebastián quería más, delineo sutilmente con su lengua la boca de su amo quien tímidamente le dio vía libre a la juguetona lengua del pelinegro

La lengua del demonio recorrió con gula la boca del menor, pasando por cada diente hasta encontrar la tímida lengua de su ciel la que enrollo con la suya asiendo que corrientes eléctricas pasaran por las columnas de ambos y enseñándole lentamente a la inexperta el procedimiento

Ciel ya no recordaba ni su nombre, eran demasiadas sensaciones  para su joven mente y el maldito demonio que todo lo hacía perfecto besaba mejor que los dioses, ahogo un gemido cuando la mano del pelinegro se coló por debajo de su piyama, eso lo trajo de vuelta a la realidad separándose de Sebastián dejando un hilo de saliva que aun los unía, él ojicarmin lo miraba intensamente y con un brillo desconocido para el joven amo, será acaso que...

Se… Sebastián… por… que? – pregunto jadeante

Porque… lo amo… lo he amado desde hace tiempo ya… ciel… – le susurro su nombre al oído y el nombrado se volvió a estremecer

Pero creí que los demonios no aman, no… lo ases por el contrato ¿cierto? – dijo triste

El contrato ya no importa más, solo importa que te amo y si  amamos pero no todos tienen la suerte que tuve yo – le dijo besando su mejilla – no todos encuentran a su amor – le susurro

Ejem… ejem… – se aclaró la garganta – hola todavía estoy aquí – dijo la chica de la toga saludándolos con la mano

¡¡Que no te avías ido!!! – dijo ciel rojo como tomate al ver que los avía observado besándose

Nop, solo espere para despedirme, cuídense – salto asía la plataforma en el centro de la fuente

Espera – Sebastián se levantó con ciel en brazos – no me has dicho cómo te llamas ni como savias que yo… etto amo a Sebastián – dijo ciel escondiendo el rostro en el pecho del demonio quien lo miro con ternura

Bueno te lo diré… el día de tu boda, como regalo – le dijo sonriendo

En ese caso, le are llegar la invitación – hablo Sebastián

Olle… no llevamos ni una hora de… relación… y ya te quieres casar!!! – le regaño ciel

Antes mejor – le respondió el pelinegro feliz

Bueno me retiro, nos veremos pronto – dijo sobre la plataforma la extraña chica de toga, volviendo a su posición anterior tocando la lira, adquiriendo su tono gris y frio, volvió a ser una estatua, se había ido

Y bien my love – dijo el demonio mirando a su amo que se sonrojo por el apodo – que asemos ahora – le dijo pícaro

No sé – dijo tímido – ¿a ti que te gustaría hacer? – susurro coqueto

Sebastián en menos de un parpadeo llevo a su amo a la habitación de este y cerro con llave, no saldrían de allí en un largo, tiempo

¿¡Fin!? <3

 

Notas finales:

Bueno… espero les allá gustado y si no lamento profundamente haberles quitado su tiempo TT-TT

Ha!! y si hay faltas de ortografía me avisan y tratare de mejorar más mi escritura

Sayonara nos leemos luego!!!


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