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Este cuento no es eterno por alois kun

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Notas del capitulo:

¡Buenos días, tardes o noches! 

Esta idea salió de la canción de Porta: La Bella y la Bestia

Y quien mejor que mis dos amores para hacerlo.

No me gustó mucho el final, tampoco tiene mucho horror. No cuenta cómo son las violaciones ni nada por el estilo. Perdonen si hay algún error ortográfico, no tengo un beta reader y lo puse tal y como estaba.

Aviso: Kuroko no basket ni sus personajes me pertenecen, sino a Tadatoshi Fujimaki.

La canción tampoco me pertenece, sino a Porta.

""- partes de la canción

ー diálogo

"Es sólo una historia más..
La Bella y la Bestia"

Una historia normal, como todas otras, pero con algo trágico.

[Porta]

"Ella era bella,
frágil como una rosa,
él era una bestia
esclavo de sus impulsos"

No era mujer, ni era bella como alguna, no tenía una fantástica cintura de avispa ni atributos que florecieran en sus pechos, pero que era hermoso, sí. Sabía defenderse incluso tomó unos cursos para defenderse, pero su primera debilidad era su amor de vida, esa persona que amaba y esa fue la que le dio la... ¿Era frágil? También, quizás se viera fuerte por fuera y que podía vencer a cualquiera pero él sabía con certeza que eso no era verdad, en su corazón solo había una debilidad a la que no podía luchar aunque quisiera. Su único error fue enamorarse de una bestia que residía dentro de el, una bestia de la cuál desconocía completamente y que lamentablemente tuvo que conocer.

"Único día que les ataron esposas
ya no eran niños,
crecieron,se hicieron adultos juntos"

Y casarse fue el segundo error que cometió, si no lo hubiera hecho quizás hubiera sido más felíz, pero ¿Quién sabía de su destino? Nadie podía saber de su futuro así de simple. Su corazón era como el de una niña que apenas estaba creciendo, que no conocía moretones ni saber cuándo se a caído exactamente, no había sentido dolor alguno ya que su primer amor había sido correspondido como deseaba. De pronto ya no eran niños porque ellos no habían notado cuántos años habían pasado, pero los suficientes para haber madurado ya; eran adultos y ambos se dieron su primer beso de "amor" o eso consideraba él, porque el otro no.

"Todo marchaba bien,
eso parecía en su primera luna de miel
juró serle de por vida fiel"

Como un cuento de hadas, quién no estaría emocionado y felíz por haberse casado con su amor, con esa persona que te hace feliz y de solo verlo hace que tus labios se curven un poco, mostrando una sonrisa. Fue precipitado, sin pensarlo mucho. Habían sido amigos desde toda la vida, el otro sabía cada cosa de él y supuestamente tú también sabías todo del otro. Que juró serle fiel, pero que no lo cumplía, era un mentiroso, pero un mentiroso que sabía cómo esconder cada escena y hacer que ese pelirrojo no supiera nada de lo ocurrido. Esa felicidad alparecer era limitada porque después de la hermosa luna de miel se presentó el sufrimiento, a quedarse por fin en esa pareja de ahora esposos.

"Y ella a él,
una historia como otra cualquiera(sí)
quién les ve y quién les viera"

Una simple historia, una normal por la que muchas pasan, una de las peores en sus vidas. Aunque él si le había jurado serle fiel cuando se casaron en América, su esposo no, pero él sí lo había jurado y lo cumpliría al pie de la letra. Si alguien los viera de lejos pensaría que son amigos corrientes, de esos que salían a beber un fin de semana y que en toda la semana se pasaban mirando a las mujeres en los bares de la ciudad. Porqué parecían unos amigos, nada más y eso estaba muy lejos de la realidad.

"Pero el tiempo pasa
y las relaciones se agotan
se cansan,
ella ni lo nota
porque esta ciega"

¿Eso era lo que estaba pasando su relación? Que lástima que pensó que era porque trabajaban demás y no podían verse, que erróneo. De unos meses para acá el peliazulado empezó a faltar, ya no venía por las noches y si lo hacía dormían casi por separado. No hacían el amor, ni sexo simple siquiera, se hablaban monosílabos y se mantenían alejados. ¿Desde cuándo empezó a cambiar tanto? No encontraba una respuesta clara porque él no había cambiado, seguía siendo el mismo romántico de siempre, su esposo.. El rubí no se daba cuenta, pero ya la relación se estaba agotando y muy rápido. Ya pronto ni se veían, el zafiro se le había escapado de su campo de visión por completo. Lo llamaba y no contestaba, mandaba mensajes de texto pero no los leía ¿En dónde estaba? Ni idea de que hacer ¿Porqué? Porque su corazón lo mantenía ciego totalmente, diciendo que su amado volverá pronto y eso lo mantenía de pie.

"Ciega de amor
Pero no aguanta la monotonía
ya no quería ser dueño de una sola tía"

Mientras tanto el zafiro estaba dando rondas por el bar a donde siempre iba a reunirse con sus amigos, estaba harto de su esposo, se casó con él por pena y por tenerlo en su cama, pero eso ya no podía satisfacer su cuerpo hambriento de sexo, su esposo era muy poco y él necesitaba mucho más para poder saciarse. La rutina acabó ese matrimonio, besar a su esposo era monótono casi lo hacia por obligación y no porque gustase de hacerlo. Su cuerpo ya no le causaba lo mismo que al principio y el sabía porqué. Siempre fue un hombre de mujeres, no de tener a un hombre como esposo sino de acostarse con una o dos cada noche, esa era su vida y no podía dejarla por un hombre que ni le satisfacía.

"O eso le decía a sus colegas de copas
''Yo salgo con otras,pero ella ni lo nota''

Ante eso todos los demás empezaban a reír, porque el pelirrojo ni idea de que lo estaban engañando y no se daría al parecer, esa historia cambió mucho.

"Bella estaba ciega
pero no era tonta,
ya dudaba"

Y decir que estaba dudando ya era poco, una noche él volvió a su casa gritando incoherencias mientras él se quedó callado en su habitación, por primera vez sintiendo miedo por su esposo, por eso decidió no salir de su cuarto porque algo malo podría pasarle, aunque no duró mucho porque empezó a llamarlo. Quizás estuviera ciego de amor por el moreno, pero eso no quitaba la opción de que el mismo lo estuviera engañando.

"Tantas noches sola
cuantas horas de la madrugada"

Pasó casi 45 noches esperándolo, había contado las semanas, los días, las horas, los segundos; cada cosa relacionado con él. Desde hace tiempo se habían posado unas horribles ojeras debajo de sus ojos rojizos, ya habían pasado semanas de desvelarse hasta que fueran las cinco de la mañana. Sus ojos aún ardían quien lo viera, alguien hermoso que andaba enamorado de sus cadenas.

Las madrugadas eran eternas, difíciles, no se podía hacer mucho. …l se sentaba al lado de la ventana de su habitación para ver si veía una cabellera azulada e ir corriendo hacia él para poder besarlo y dormirse en sus brazos, volver a revivir en su pecho.

"La primera vez fue la mas dolorosa,
te regaló una infidelidad por cada rosa"

Volvió otra vez, pero con un hermoso ramo de rosas, todas rojas y grandes. El moreno sonrió mientras le daba un tierno beso en los labios dejando las rosas en los brazos del pelirrojo quién tenía unas lagrimitas en sus ojos por la emoción. Sonreía más al saber el significado de esas rosas rojas, para el moreno eran las veces que lo había engañado y para el pelirrojo era una gran muestra de amor. Quizás nunca se dio cuenta de que habían exactamente 35 rosas, 35 mujeres diferentes en meses, cada día; Kagami era un iluso. Incluso después de ello él volvía con unas rosas más, adornando la casa de colores diferentes, algunas azules, amarillas, rosas, rojas, blancas más todas ellas tenían el mismo significado, ninguna fue por amor propio.

"Y es que el perdón será tu debilidad
pero lo que pasa una vez
siempre sucede de una vez más"

Era de carne débil y perdonar era algo que sus padres le habían inculcado de pequeño, tenía que perdonarse y luego podía perdonar con sencillez, así estaría bien. Pero sus límites se excedían ciertas veces, lo perdonaba por casi todo, las tardanzas, las veces que no se presentaba cuando dijo que sí, esas citas que nunca se cumplían, los aniversarios olvidados, las palabras soeces, las maldiciones, las cenas en soledad, los cumpleaños solo, todo. Hasta esa vez que se excedió y lo golpeó por primera vez.

Porque lo que pasa una vez... Está claro que sucederá una vez más, era algo ya que se veía; un ciclo maldito del cuál estará preso durante muchísimos años y él ni idea tenía de ello.

"Este cuento no es eterno
debo salir, ponerle un fin
ser más fuerte que esa bestia"

Apenas ese cuento comenzaba a narrarse, desde que la bestia empezó a alejarse de Bella hasta cuando fue la perdición de ambos, una situación precipitada, desde el principio ¿Ponerle un fin? Eso no parecía estar en sus opciones, no podía salir del plato, él siempre estaba allí. Y tampoco podía ser fuerte con él. ¿Cómo puedes ser fuerte con la persona que te hace débil? Todo era tan irónico en su vida que ya no sabía que pensar.

"Debo salir
quiero vivir"

Eso que estaba pasando no era vida, cada vez volvía borracho de noche gritando maldiciones y peleándose con los vencinos del apartamento. Muchas veces que se escondió de él en la oscuridad de su habitación, algunas veces con suerte y otras cuando lo encontraba.. Lo hacia tener sexo a la fuerza, o una violación mejor dicho como la primera vez que lo hizo. Pero que para Kagami eran simples acciones sin pensar, porque él se mentía diciendo que Aomine lo hacia tener eso con él porque necesitaba de sí, porque lo amaba tanto como él lo hacia. Que equivocado estaba cuando pensó eso.

"Quiero vivir"

Definitivamente quería salir de ese lugar cuanto antes, eso ya no se podía considerar vida, con Aomine no se podía.

[Norykko]

"Tantas cicatrices ya no puedo más
me duelen las entrañas
de tanto sangrar.. "

Aquélla vez volvió a repetirse. …l volvía cada vez más violento por las noches, pero sin una gota de alcohol en el cuerpo y ¿Quién sufría las consecuencias? …l, claro está. Ciertas veces tan fuertes que eran sus golpes a su cuerpo que sangraba en demasía, la sangre escarlata bajaba por sus pómulos, nuca e incluso pecho y piernas, abría con brutalidad su piel. Decir que sí se descargaba con él era muy poco. Dolía. Y cuando trataba de gritar por auxilio el solo apretaba su cuello con fuerza, tratando de ahorcarlo pero que cuando faltaba poco lo soltaba dándole patadas en sus costillas.

A la mañana siguiente no salía de la cama, sabía que Aomine ya no estaba pero sentía el miedo recorrer sus venas. La cama y las mantas tenían gotas de sangres, unas más grandes y otras muy pequeñas. Pensando que Aomine solo lo hizo porque estaba enfurecido y lo perdonó de nuevo.

"No existe un maquillaje que pueda tapar
(este moretón que es mi corazón)"

Podrían decirle gay, homosexual, aberración, transexual, como sea; pero en definitiva había tenido que empezar a comprar maquillaje para poder tapar los moretones que tenía por todo su cuerpo. Varias personas quedaban sorprendidas al verlo cabizbajo y con un aspecto sombrío, el cambio que hizo Aomine en el fue demasiado.

Pero para otras.. No había maquillaje que pudiese tapar los moretones de una noche anterior.

"Ya no se cuánto más tiempo podré aguantar
ya no me quedan lágrimas para llorar"

Se acostaba a las seis aproximadamente a su cama y se descargaba llorando en la almohada, frustrado. ¿Porqué tenía que sucederle a él? ¿Había hecho algo malo acaso? ¿Qué se merecía él para recibir a semejante bestia? Después de tres horas soltando lágrima pura ya no tenía lágrimas para poder soltar, no salían de sus lagrimales por que sencillamente ya no tenía lágrimas. Tampoco sabía cuánto podría aguantar, lo más probable es que aguante unos cinco días y explotaría como bomba.

"El peso de estos años me doblan la edad
(En cada rincón tengo un moretón)"

Ya no tenía 15 años, sino que tenía casi ya 27 años y unos cuantos junto a Daiki, años que se han vuelto insoportables, años que en su corazón empezaba a sentir miedo desde meses. Habían días que ni salía de su casa, semanas enteras que se desconectaba del mundo exterior y que solo se permanecía durmiendo para olvidarse de su bestia, quien también le salía en sus sueños para acabar de mortificarlo. Su cuerpo ahora era más diferente y caracterizado por ser más pequeño, más delgado, sin tanto músculo y lleno de marcas moradas que cubrían la mayor parte de su cuerpo, estaba más blanco por no salir, mientras que su cabello permanencia más corto de lo normal y lo peor era que sus ojos ahora estaban apagados. Ya no poseían aquéllas llamas que se encendían siempre, ya no brillaban como rubíes, no eran el escarlata ni el fuego que siempre lo había caracterizado por tener.

"Dime que esto no ha pasado
tu dime que lo has olvidado
mañana todo habrá cambiado
y esto será sólo un horrible recuerdo"

Unas manos morenas empezaron a abrir los botones de su camisa tocando la piel fría de su esposo. Se veía tan deplorable allí acostado, sin moverse, sin hablar o parpadear siquiera; como si ya no tuviera fuerzas para detenerlo como las veces anteriores.

Esas veces que el moreno era cariñoso con él solo podía hacerlo pensar que ya había olvidado todo lo pasado, que éso no había ocurrido entre ambos y que a la mañana siguiente despertaría en sus brazos como todo un cuento que él moría por vivir. Solo quería despertarse y ver que fue un horrible sueño, que Aomine vendría con una sonrisa y besara sus labios con amor, el amor que le regalaba.

"Sé que me quieres mi vida
yo sé que no habra más heridas
mañana será un nuevo día
Y otra vez seremos felices de nuevo"

Terminaron por hacer el amor después de tantos meses que ni siquiera se besaban, esa noche Daiki no pudo acostarse con su presa, por eso había vuelto a donde Kagami viéndolo en ese estado deplorable allí. Para Kagami fue una prueba de que la pantera estaba cambiando a una mejor faceta, que pronto no habrían más heridas, que ya sería mañana un nuevo día con mucho más amor que los días anteriores y que por fin.. Serían felices de nuevo. Pero Aomine admitía que el escarlata ya no poseía ese físico hermoso que le había gustado y que sus ojos ya no eran como antes, no se prendían en fuego real. Pero que más da.

Sexo es sexo.

Amor es amor.

Dos cosas totalmente diferentes, ideas opuestas pero polos iguales. Y los polos iguales no se atraen.

[Porta]

"Empiezan las discusiones,
parece que a él no le gustan"

Nadie sabe de donde sacó fuerzas realmente pero lo hizo. Se levantó de su cama cuando el moreno lo llamó preguntando o casi gritando el porqué no había decidido cocinar cuando él le había dicho que vendría precisamente esa noche. Tuvieron su primera discusión, los gritos de ambos podían escucharse hasta el semáforo y las personas de otros apartamentos alarmadas también podían escucharlos gritarse malas palabras. Aomine no era la mejor persona como para pelear, las odiaba y más cuando le contestaba. …l quería que se quedara callado y poder descargarse como siempre, sin embargo el pelirrojo no quería dejarse otra vez.

"Se vuelve insensible y agresivo
y a Bella le asusta"

Pero tan pronto como tuvo valentía esta desapareció al ver los ojos fulminantes del contrario en sus ojos apagados. Se estremeció completamente, de pies a cabeza y empezó a retroceder, viendo como nacía una sonrisa macabra en el rostro de su maldito esposo. …sa.. …sa voz tan agresiva y la actitud retante del pelirrojo lo había excitado, oh. ¿Desde hace cuánto Kagami se había callado? Hace tanto tiempo que no le había hablado de esa manera, ahora lo quería y ya. El miedo empezó a ser acto de presencia nuevamente en el cuerpo del pelirrojo, quién cayó al suelo y siguió retrocediendo, viendo de reojo a Aomine quien empezaba a quitarse el cinturón.

ー Te lo juro.. Hoy te dejaré seco.

"Lágrimas caían,tras un empujón
y el primer puñetazo,
te conformas con un perdón
y un simple abrazo"

Fue demasiado, ya juró que no podía soportar más. Unas lágrimas gruesas bajaron cuando sintió que Aomine lo empujaba, dejándolo caer estrepitosamente al piso de la casa, sentía tanto y tanto miedo que se escondería para la próxima en el armario y no saldría jamás y nunca. Tembló al ver como sacaba su correa y se aproximaba hacia él, tembló como nunca en su vida, sabía lo que vendría.

No se esperó que dejara de lado aquél cinturón, lo tomara por el cabello con brusquedad y que le propinara un puñetazo directo al rostro, dejando el lugar instantáneamente morado. Cubrió esa parte, alejándose del peliazulado, viendo como Aomine bajaba la cabeza y se lanzaba a abrazarlo.

ー Perdóname.

Pidió con voz débil el moreno, se había pasado mucho, pero a sabiendas de que podría hacerlo de nuevo.

"No quieres darle importancia
porque no quieres perderlo"

No, no quería perderlo, por eso dejaba que le pegara tan fuerte como podía y no daba quejas; porque simplemente no quería que Aomine se alejase de su lado. Porque no deseaba quedarse solo, porque amaba a ese moreno y lo único que quería hacer era pasar el resto de sus días con él, porque va a seguir lo que prometió ese día que se casaron en la iglesia.

"Pero sientes impotencia
y a la vez pánico y miedo"

Y eso era lo que estaba haciendo que se retractara tan a menudo, sentía pánico. Cada vez que escuchaba el chirrido de la puerta principal abrirse sentía un profundo pánico perforar sus oídos, diciéndole que ya estaba su castigo de todos los días. Sentía miedo cuando veía a los ojos zafiros del otro, cuando este le gritaba desde la cocina con una voz seca, porque sabía que no podía escapar. Por las veces que cuando lograba dormirse por la noche este se levantaba de su cama yendo a la habitación del tigre y haciéndolo estremecer, cada vez que lo obligaba a tener sexo con él; a todo eso sentía miedo.

"No puedes creerlo todavía,
después de tantos años
''Si te preguntan, di que te has caído en el baño.''

El moreno era perfecto para buscar excusas creíbles, cada día tenía una excusa diferente a sus golpes. Las dejaba anotada en un papelito de la mesa y se iba a gozar de una buena vida, dejando a el tigre demacrado.

Con debilidad se levantó de la cama, sintiendo como no podía sostenerse, sus piernas no tenían la fuerza necesaria y temblaban. Pasó maquillaje por los moretones, quizás una charla con Tatsuya le haría bien para él. Salió como nuevo de la casa, repitiéndose la excusa que le había dado el moreno en la mesa de su casa.

"El silencio no te ayuda,
sé que no sabes que hacer"

Callar era su plato principal, el que comía todos los días con los demás, pero no eran lo suficientemente creíbles para su hermano Tatsuya. Decir que su pelirrojo favorito había cambiado era poco, ése ya no podía ser Taiga, el que amaba el basket con devoción y a quien invitaba todos los fines de semana para ir a ver una película en el cine, quien había deseado ser un bombero y terminó como ama de casa, ése OBLIGATORIAMENTE no podía ser Taiga.

ー Tienes un moretón.. ¿Qué te pasó?

ー Me caí en el baño ayer.. Duele mucho..

ー Taiga.. ¿Te ha golpeado?

ー ¿Quién?

ー Daiki.. Te ha estado golpeando ¿Verdad?

ー ¿Cómo puedes pensar eso? Claro que no, te dije que ayer me caí.

ー El sábado me dijiste que te habías golpeado con el barandal de tu balcón, el miércoles que te caiste corriendo skateboard, el jueves que mientras dormías al parecer te golpeaste.. Ninguna es creíble y menos cuando te conozco tanto.

Había dado en el punto exacto, pero dicho anteriormente Kagami prefería callar.

ー Estás pensando mal, Aomine jamás me haría eso, el me ama.

ー Taiga.. Bien sabes que él no te ama.

ー ¡Claro que sí! ¡…l me ama! ¡¡Lo que pasa es que tú estás envidioso!!

ー No tengo el porqué envidiar a una persona abusada.

ー ¡…l no abusa de mí! ¡Nosotros nos amamos!

ー No me creo nada.. Cualquier cosa.. Estaré junto a ti.

"Sabes que fue la primera
y no será la última vez"

Terminó por despedirse de Tatsuya temblando, sabía que no podría seguir mintiéndole a su hermano, ya había mucho cambio en él, era imposible que Tatsuya no se preocupara por él. No quería irse a su casa por lo que se dirigió a un bar pensando en tomar sólo unos tragos y nada más, no pensaba emborracharse porque no terminaría de la mejor manera. Muy bien sabía que volvería a pegarle, si ya lo hizo una vez lo volvería hacer y poco le importaría su opinión.

"Créeme sé que no quieres más problemas
pero no te quedes en silencio
si tu marido te pega"

…se fue otro de los muchos errores y ese fue uno potencial en su relación, el callarse y no hacer nada más. El creer que Aomine cambiaría con el paso del tiempo, creer en un amor iluso, en torres y castillas, en un Príncipe azul que logró convertirse en el demonio principal de su historia, que ingenuo fue.

Sufría de violencia doméstica y como cualquier otra mujer quedaba callada; porque tenía miedo de lo que pudiese sucederle si contaba algo a los demás, porque era débil y tenía consciencia de ello.

"Porque no le perteneces,
te mereces mucho más"

ー Me perteneces.. ¿Entendido? Aleja a ese emo de ti.

ー Claro que no.. No tienes derecho sobre mi persona.

ー ¿Me estás negando la verdad, Taiga?

Por más veces que le dijera que su cuerpo no le pertenecía Aomine hacia caso omiso y siempre volvía a decirle que le pertenecía como si fuera un objeto, como si no tuviera sentimientos. Era tan buena persona para esa bestia y eso únicamente lo sabía Himuro, quien notó el primer moretón en el rostro de su hermano, cuando notó como empezó a ponerse más blanco, más delgado y débil.

ー Tú te mereces mucho más, Taiga.

Lo sabía, Kagami sabía que Himuro tenía la certeza de que lo estaban golpeando y por eso le decía aquéllas palabras. El pelirrojo sonrió débil y abrazó a su hermano sintiendo el frío de la ciudad, ojalá que Aomine se perdiera y nunca llegase a su apartamento; cuanto quería perderlo de vista como la primera vez. Con él fue que comprendió finalmente que no le pertenecía al moreno.

"Sobre ti no tiene autoridad
se la das y él se crece"

El destino la tenía con él, quería que él se muriera en realidad. Pidió veces a Dios para que Aomine se alejase de él, que le pidiera el divorcio, que se cansara y se fuera con las maletas, pero no.

Se cubrió con las mantas de la cama, esperando poder dormirse finalmente. Escuchaba como Aomine rompía los platos y los floreros, oh por lo menos le habían costado baratos y no tendría que llorar por que fueran caros.

ー ¡¡Te dije que NO LO VOLVIERAS A VER!! ¡¿No entiendes?!

Y ahora que había escuchado el motivo del porqué estaba tan furioso tembló como papel, no tenía idea de como se enteraba que veía a su hermano pero siempre lo sabía. Se levantó temblando hacia la ventana cerca de su cama y la abrió poco a poco, tenía que salir de allí. Le había dado tanta y tanta  autoridad que ahora no podía hacer otra cosa que huir, porque si le daba más autoridad sobre él estaba seguro que más bestia será.

"No puedes detenerle,
no puedes defenderte,
no puedes hacer más que rezar por tener suerte"

Nada. Absolutamente nada le ayudaba, ya no podía detenerlo siquiera, no podía defenderse sino hablar con Dios para que lo ayudara, nada más. Algo le había sucedido a su hermano, ya no le contestaba las llamadas, enviaba mensajes y este no los veía ¿Qué había ocurrido con él?

Se sentó en uno de los bancos de la iglesia y cerró sus párpados. Como deseaba salir de ese infierno que había estado viviendo hace años. Quizás el rezar le sea bueno y Dios escuche sus plegarias.

"Cada día más normal
pasar del amor al odio"

ー ¡Déjame en paz! ¡Lárgate, imbécil!

El amor se convertía en odio, ya no se podía sentir cariño por el moreno, ese que le pegó hasta más no poder. Empezó a reventar cosas en contra del peliazulado escuchando como este maldecia unas cosas, pero ni atención le prestó.

Pronto empezó a maldecirlo también, a reventarle la comida, a romper las rosas, a negarse más, a tratar de defenderse; que mucho había cambiado todo ¿No? Su corazón ya no palpitaba con la misma rapidez que antes y era bueno porque sabía que ya no le estaba gustando. Hasta que cierto día se hartó.

ー ¡¡He estado esperando algo desde hace tiempo!! ¡¡¿Porqué rayos no me pides el divorcio?!! ¡Estoy loco por irme de este infierno!

ー ¿Con que te quieres ir..? ¡¿A dónde?! O espera.. ¡¿Te vas a ir a acostar con tu hermanito querido?! ¡¡Pues déjame decirte que NUNCA te pediré el divorcio!! ¡Eres mío, Bakagami!

"Se convirtió en algo habitual,
otro mal episodio"

Todos los días era una pelea distinta. Aomine se enojaba por cosas simples y Taiga le seguía el juego, no se quedaría callado ante tantas quejas que emitía el moreno, que aprenda hacer las cosas él y lo deje en paz de una buena vez. Era como una rutina diaria el pelear, el tratar de matarse, las violaciones se volvieron comunes en ese episodio. Kagami tenía miedo pero no lo demostraba, si Daiki quería ser más Bestia que lo fuera porque él se defendería más.

"Bestia no te quiere"

La pantera no lo quería, era cierto. Desde el principio no lo había querido, solo deseaba tenerlo en su cama para metersela las vecez que no podía tener sexo con una tía. Entonces ¿Porqué lo mantenía junto a él? No sabía porque, nadie sabia porque su mente trabajaba de esa manera tan cruel, si no lo quería ¿Porqué no lo dejaba ser libre?

"Pero quiere que seas suya
para siempre"

''¡Si no eres mía,no serás de nadie entiendes!''

Lo tomó del brazo brusco, poniendo su cuerpo en la mesa y posicionandose encima de el pelirrojo. Este no estaba contento, sus cejas se unían que parecían solo una, tenía el ceño fruncido y lo miraba con enojo, solo quería polvo con él. Quitó la camisa que portaba el tigre viendo como había rebajado, la última vez que lo había visto por lo menos estaba más bronceado y más musculoso. Besó y mordió con fuerza su piel blanca de su cuello, en los moretones solo se encargaba de besar y lamer para no causar dolor, que irónico ¿No? Vio las mejillas rojas del contrario y decidió seguir así. La única manera de que sea suyo era ser frágil y  delicado con el opuesto.

"Bella no podía más,
el cada vez era más bestia"

Que lo tratara bien en la cama no significaba nada, volvía cada vez más fuerte, más molesto. Incluso un día en la semana lo golpeó tan fuerte que se terminó desmayando por el impacto y la fuerza utilizada. Trataba de escapar, pero en cada lugar que iba se encontraba con el moreno, como si tuviera un rastreador y el moreno lo tuviese en una vigilancia 24/7. Su hermano no volvió a aparecer por los lares, cuando envió un mensaje la tienda envió otro que decía: 'la persona que portaba este número ha cambiado de número recientemente'

¿Porqué se tuvo que alejar la persona que ahora necesitaba? ¿Qué pasó para que se alejara tanto? ¿Porqué cambió el número celular?

"Cuando ella quiso hablar
ya era demasiado tarde"

Entonces.. Ese cuento dio la etapa principal su fin, empezando a cerrarse el ciclo maldito. Kagami se tiró a la cama con la cara empapada de lágrimas, viendo el cuerpo demacrado de su hermano sin vida, no pensó que eso pudiera ocurrir.

Aomine sonrió satisfecho y salió de la habitación, ahora no habría nadie en su camino para que Kagami se fuese, ahora no tenía a nadie. Lo peor era que Kagami sabía que Himuro estaba próximo a casarse con el amor de su vida, un muchacho de casi dos metros y su boda sería en unos días, la noticia cayó como balde de agua fría. Hace sólo unas semanas que se encontraba tan felíz de poder casarse.. Y ahora... Por su culpa..

"Se dio cuenta que vivía junto al mal
'La Bella y la Bestia'
Prefiero no contaros el final"

Enserio, prefería morir a pasarse con ese monstruo que tenía por esposo, había matado a su hermano y lo trajo en una bolsa negra de basura, tirando los restos en la cama, principalmente la cabeza cortada. Lloró como nunca, la única persona que había tenido a su lado se fue, por la maldita bestia que estaba a solo unos pasos de él. El que le dio apoyo, quien lo abrazaba, quien lo hacia reír, sus palabras, sus consejos y las verdades que siempre le había dicho.. ¿Porqué él de todas las personas?

El cuento de la Bella y la Bestia les quedaba tan bien a ambos que podrían hacer una novela, pero el pelirrojo no quería volver a aparecer en él, prefería ser la hada madrina de la Cenicienta, nadie más.

[Estribillo]

"Este cuento no es eterno
debo salir ponerle un fin
ser más fuerte que esa bestia"

Ahora la palabra fin tenía que aparecer en su vocabulario, la palabra amor estaba tachada desde hace tiempo y no tenía problemas en borrarla en definitiva, soportó casi todo, eso ya se había pasado de la raya. Una vez que el moreno regresó borracho al apartamento quiso otra vez violarlo, pero ante eso tomó una botella de cristal y lo golpeó con fuerza que ni sabía que portaba en su ahora más delgado cuerpo. Allí cayó inconsciente por unos minutos y salió corriendo a su habitación sabiendo que se despertaría pronto, haciendo que la adrenalina corriera por sus venas. Tomó su ropa y la puso en la maleta que tenía preparada desde hace unos minutos. Puso la ropa allí, amontonada y mal arreglada pero que la arreglaría después y salió corriendo del apartamento sin mirar hacia atrás.

"Debo salir
quiero vivir
quiero vivir"

Y con ese pensamiento corrió todo lo que pudieron sus piernas, corrió y corrió bastante, sin dinero pero pronto ahorraría y podría trabajar. Anteriormente se llevó los papeles del divorcio, esperando a que lo pudieran divorciar lo más antes del peliazulado. En horas se encontró en una calle bastante alejada del lugar, no se veía casi nada y no habían edificios, quizás se había alejado bastante y sonrió, si seguía caminando tendrá una mejor vida.

[Norykko]

"Tu final atravesó mi alma en sólo un compás
callaste mis lamentos con brutalidad"

Fue demasiado temprano para decir Eureka, demasiado temprano. Se encontró ahora en el mismo apartamento, con el furioso moreno en frente y la maleta hecha trizas a su lado. Sus muñecas estaban atadas fuertemente en la parte atrás de la silla y sus piernas en las patas de esta.

ー Contesta.. ¿Porqué te fuiste?

ー .... No te soporto y qui-

La cachetada estaba segura y el ardor que sentía también, bajó la cabeza viendo como en su pantalon se formaban unas gotitas producto de las lágrimas, su vista se encontraba borrosa. El corazón del tigre se estrujaba con fuerza y tristeza, quería ser libre, quería poder salir con otra persona o volver a reír; no seguir triste, quería volver a ver a su hermano.

ー Te dije.. Que eres mío.. Pero tú te quisiste escapar y yo tuve que tomar medidas drásticas, al parecer tendré que romperte todos los huesos para que no te muevas de mi lado.

ー Matame si es necesario.. A nadie le gustaría estar al lado de una bestia como tú.

Y la cachetada fue mayor. Se marcaron los dedos del moreno en su mejilla y ahí se vino de nuevo el castigo, sí.

Decir Eureka fue precipitado y más sabiendo como es el destino.

"Me has convertido en un triste número más
(Tu triste corazón fue tu perdición)"

Un número que aumentaba, las personas que sufrían violencia doméstica eran cada vez más y el no quedaba afuera de ellas. Era un número, un maldito número.

"Es demasiado tarde para ir hacia atrás
no volveré a tener otra oportunidad"

Esas oportunidades que tuvo cuando su hermano estaba vivo ya no estaban, Aomine ya no se iba del apartamento sino que se pasaba todo el día a su lado, él amarrado en una silla mientras el moreno bebía alcohol y veía algunas revistas de playboy, era un patán. Si solo pudiera pasar el tiempo para atrás se hubiera ido de inmediato las veces que tuvo la oportunidad, pudo haber sido más felíz con su hermano y quien sabe, hubiera encontrado el amor con otra persona.

Las oportunidades ya no estaban en su plato principal.

"Seré sólo un mal día en la prensa local
(Pero mi dolor será tu prisión)"

…l mismo tuvo la culpa por callar y no hablar cuando fue necesario y casi obligatorio al momento, cuántas veces su hermano se lo había dicho y no le hizo caso por pensar si perdería a el moreno. Decidió dormirse para poder olvidar momentáneamente el dolor aue sentía, tanto físico como emocional.

"Y si yo ahora pudiera cambiar en algo tus miserias
daría todo porque entiendas
sólo un segundo de mi sufrimiento"

Si la pantera supiera cuánto sufría esas veces lo más seguro era que se detuviese, pero no. Deseaba que el moreno supiera y sintiera sos golpes que le propinaba, solo quería que Aomine Daiki sintiera solo un segundo de su sufrimiento, nada más, solo un segundo y ya.

"Espero que al menos mi historia
no quede sólo en la memoria
Y traze nueva trayectoria,
Que no se repita jamás este cuento"

Y este cuento a llegado a su final, en la memoria del moreno. Dos años después Murasakibara pudo encontrar los restos de Himuro y las causas de su muerte. Kagami no tuvo un buen futuro, Aomine se lo llevó a la India a sabe donde y allí llevaban "viviendo" desde hace unas semanas.

ー Espero que me escuches.. Te extraño tanto.

ー ¡Deja de rezarle a ese muerto!

ー ¡¡Cállate!! ¡¡Tú no te metas!! ¡Lo mataste! ¡Asesino!

En meses de dolor empezó a alucinar varias cosas, como que el moreno se aparecía cuando no estaba, cuando Himuro estaba a su lado, cuando escuchaba la puerta abrirse y los gritos aterradores cuando en realidad estaba rodeado de silencio.

Y es que no estaba en India, no estaba en un apartamento, nunca viajó, Aomine nunca le gritó que dejara de rezarle a Himuro sino que la locura había invadido su cuerpo y ante eso Aomine lo había llevado a un manicomio, dejándolo allí. Muchas veces otras personas del manicomio lo habían visto hablar y reírse solo, mientras otras solo lo encontraban llorando y golpeando con frustración el cuarto blanco en donde a hacia ya dos años encerrado.

Aomine se acercó sonriéndole y el gritó una vez más.

ー ¡Maldito asesino!

[Estribillo]

"Este cuento no es eterno
debes salir ponerle un fin(¡Porta!)
ser más fuerte que esa bestia(¡Norykko!)
Debes salir
Vuelve a vivir(Trastorno Bipolar)
vuelve a vivir"

Mientras tanto Aomine estaba en Japón, vestido de blanco y apunto de casarse con Kise Ryota, otro que posiblemente también caería en ese ciclo maldito en el cual Kagami había pasado, que lástima.

(La Bella y la Bestia)

"Sé más fuerte,
camina hacia adelante,
no te rindas,
no te quedes en silencio.."


Se levantó por la madrugada a las 3:33 am, sintiendo el frío provenir del aire acondicionado. No habían ventanas en el cuarto blanco donde estaba por lo que eso era.

Pasó sus manos por los brazos fríos y con una rara sensación miró hacia la puerta.

Allí, entre las sombras y la oscuridad se hallaba su hermano sonriéndole, dándole cariño desde el cielo.

Sonrió para sí, creyendo que era una nueva ilusión de su mente cuando en verdad si era la sonrisa de su hermano en la habitación.

.......
Notas finales:

No me gustó el final, pero Kagami no iba a ser feliz de todas maneras, era el cuento de una bestia. 

No creo si fue el dolor necesario para Kagami, al final terminó loco.

E Himuro.. Pues no me imaginó lo que sufrió Mukkun al encontrar sus restos.

Espero les haya gustado. Si hay alguna sugerencia o alguna pareja que quieran me dicen y lo hago~ 

Besos.


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