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El primer día sin ti Puzzleshipping por LizzieVidal

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Notas del fanfic:

Ni Yu-Gi-Oh! Ni ninguno de sus personajes me pertenecen, estos pertenecen al gran maestro Kazuki Takahashi♥.

Notas del capitulo:

Ni Yu-Gi-Oh! Ni ninguno de sus personajes me pertenecen, estos pertenecen al gran maestro Kazuki Takahashi♥.

 

¡Hola chicos!  Alguno se había preguntado eso de que sintieron los tricolores el primer días que estuvieron separados, en el anime vemos a Yugi al otro día comenzar su propia historia, pero ya no sabemos que pasó con Atem, así que me di a la tarea de relatar que es lo que sintieron ambos desde mi punto de vista, porque es tan obvio que si estás con una persona tanto tiempo cuando se aleja la extrañas mares, así que solo relato lo que pienso del como se sintieron u.u

Espero que les guste, es un pequeño One-shot, tenía ganas de escribir algo así, así que aquí está :3 Me parte el alma u.u

Bueno los dejo leer y nos leemos en las notas finales n.n

 

PD: Pasen a darle like a mi página en Facebook https://www.facebook.com/LizzieVidal0809/ Para estar más en contacto con ustedes mis queridos lectores♥, mi página ya se convirtió más que nada en una linda comunidad donde nos une un mismo amor Yu-Gi-Oh!♥ Me gusta compartirles capítulos diarios del manga y de los capítulos en su idioma original subtitulados a español, así como películas y esas cosas, así que si quieren formar parte de esto tan lindo que se ha creado los espero por allá.♥

 

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"No sé porque hoy me dio por extrañarte, por echar de menos tu presencia. Alguien me dijo que el olvido está lleno de memoria".


 


Después de la batalla ceremonial y de que Yami regresará a su pasado salimos del valle de los reyes, los artículos del milenio se habían perdido para siempre y sé que no iba a haber otra forma posible de ver a mi otro yo de nuevo, eso me dolió, me había acostumbrado tanto a él y a su compañía que estar sin su presencia sería muy complicado.


El viaje en barco de regreso por el Nilo se me hizo inclusive más eterno que la ida, al llegar a tierra firme los egipcios nos acompañaron hasta el aeropuerto para despedirnos.


Antes de abordar el avión abracé fuertemente a Marik y a Ishizu, ellos habían sido de mucho ayuda para Yami y para mí en el final de la misión.


—Gracias por todo Ishizu-san, Marik-kun, fueron de mucha ayuda para mi otro yo y para mí, se los agradezco tanto -Dije sonriéndoles sinceramente.


—Ese era nuestro deber con el faraón -Dijo la morena sonriéndome.


—Fue todo un gusto ayudarles -Dijo el oji-lavanda feliz.


—Yug, es hora de abordar -Dijo el rubio apurándome.


—Si, ya voy -Dije volteando a ver al rubio sonriéndole.


—Buena suerte Yugi -Dijo amistosamente el egipcio tocándome el hombro.


—Que los dioses te acompañen siempre -Dijo su hermana sonriéndome cálidamente, yo solo asentí.


—Espero verlos pronto -Dije sonriendo.


—Hasta luego Yugi -Dijeron los egipcios asintiendo sonriéndome.


 


~*~


Al subir al avión me senté a un lado de Jonouchi-kun en el asiento de la ventana, mientras el avión despegaba iba mirando como poco a poco íbamos subiendo dejando atrás las ciudades de Egipto, mi corazón se sentía frágil y diminuto, intentaba sonreír, pero era realmente imposible, sentía que una parte de mí se había marchado junto con mi yami.


—Yug, ¿quieres jugar un juego de cartas para distraernos un rato? -Me preguntó el rubio enérgicamente.


—Yugi acaba de ganarle al otro Yugi ¿y tú quieres enfrentarlo?, te derrotará en un segundo -Mencionó Honda riéndose, él estaba sentado en la fila de alado.


—Nadie te pidió tu opinión Honda -Rezongó el rubio mirándolo feo.


—¿Ya van a empezar ustedes dos? -Preguntó el oji-esmeralda que estaba sentado a un lado del moreno poniendo su mano derecha en su frente cerrando los ojos reprobando la acción de Honda-kun y Jonouchi-kun.


—Ya deberías acostumbrarte Otogi-kun -Dijo el albino sonriendo cálidamente asomándose tras el oji-esmeralda ya que él estaba junto a mi abuelo en los asientos de atrás de ellos.


—Ry-chan tiene razón -Dije riendo -Y claro que jugaremos Jonouchi-kun, pero ahora estoy algo cansado, así que ¿podría ser en otro momento? -Pregunté apenado.


—Claro Yug, entonces descansa un poco -Dijo sonriéndome.


—Si gracias -Dije sonriéndole cálidamente.


Me di la vuelta y me acomodé recargado en la ventana, al parecer para los chicos era muy normal que Yami ya no estuviera sin embargo para mí era otra historia, tal vez era que Yami estaba conmigo en todo momento y con los chicos solo a ratos cuando lo necesitaban o qué sabía yo, pero a mí sí me estaba afectando no poder verlo.


Cerré fuertemente mis ojos pensando en mi otro yo, sentía que en cualquier momento iba a aparecer su recamara mental frente a la mía y que al abrir la puerta lo iba a ver a él ahí dentro sonriéndome, pero lastimosamente no era así.


En algún determinado momento me quedé dormido mientras recordaba todo lo que había vivido junto a mi oscuridad.


Mi sueño se había extendido tanto que dormí hasta llegar a Ciudad Domino, las casi trece horas del vuelo había dormido y ni una sola vez había despertado, eran las 3:40 de la tarde cuando llegamos así que al salir del avión y del aeropuerto cada quién se fue a su casa, de igual manera al siguiente día vería a Honda-kun, a Jonouchi-kun y a Ry-chan para irnos juntos a la escuela.


El abuelo y yo nos dirigimos a nuestra casa-tienda, yo seguía pensativo, no quería sentir que mi alma se rompía en pedazos al entrar a mi habitación y no poder volver a tener la compañía de Yami.


—¿Quieres algo de comer, Yugi? -Me preguntó mi abuelito al entrar a la casa.


—No abuelito, gracias, iré a mi habitación -Dije sonriéndole falsamente.


—¿Estás bien? -Preguntó mirándome preocupado.


—Claro que lo estoy -Dije sonriendo nerviosamente -Supongo que solo estoy cansado por el vuelo -Dije pensando -Al rato bajo a cenar -Dije comenzando a subir las escaleras.


—Esta bien, te creeré -Dijo cerrando pesadamente los ojos.


Subí a mi habitación y quise sentir la presencia de mi otro yo, pero no, él ya no estaba ahí, fui y me tiré boca abajo en la cama, me sentía mal, triste, sin ánimos, nunca imaginé que despedirme de Yami fuera a ser tan difícil.


 


~*~


POV de Atem.


Al concluir la batalla ceremonial entré por la puerta que tenía grabado el ojo de Wdjat en el centro, al entrar me encontré con todas las personas que habían sido importantes en el pasado para mí, mis buenos y fieles amigos estaban ahí esperándome, mis memorias estaban competas y podía ver todo claramente, me sentía bien por ese motivo, pero por otro, al terminar de cruzar me encontré en el mismo lugar de la batalla ceremonial solo que ahí no estaban ni mis amigos, ni mi hikari, volteé y no había nada más que una puerta cerrada, la contemple por un momento sintiendo como mi corazón empezaba a detenerse poco a poco dentro de mi pecho, la razón: Ya no volvería a ver a mi aibou, había estado a su lado por un largo tiempo así que me había hecho muy cercano a él, ahora sentía que una parte de mi me faltaba, necesitaba estar al lado de mi luz, pero nada podía hacer para poder volver a verlo, nuestros destinos estaban marcados y las cosas debían ser así.


—Atem debemos volver al palacio -Dijo Mana, mi mejor amiga de la infancia llegando a mi lado sacándome de mis pensamientos.


—Si, vamos -Dije volteando a verla sonriéndole levemente, luego cerré los ojos pesadamente comenzando a caminar hacia fuera del templo, en la entrada había unos caballos que usaríamos para volver al palacio.


La cabalgata duró un pequeño rato en el que había jugado carreras contra Mana, al final yo había terminado ganando como siempre, como cuando éramos unos niños, eso me alegró al momento, pero después volví a sentir la falta de la presencia de mi hikari.


—Faraón ¿le pasa algo? -Preguntó Mahado llegando a mi lado extrañado.


—No, no es nada -Dije sonriendo nerviosamente.


—¡Atem! Apúrate o te ganaré -Grito la oji-azul tomando la delantera.


—¡Mana! ¡Ya te eh dicho que debes de referirte con respeto al faraón! -Grito con una venita saltándole en la sien, Mana solo lo volteó a ver y le mostró la lengua aumentando la velocidad en la marcha de su caballo.


—Déjala, no puedes obligarla después de que toda la vida nos criamos juntos sin ese tipo de etiquetas -Dije sonriéndole.


—Pero ella sabe que no es correcto -Dijo frustrado.


—Bueno, mejor apurémonos a llegar al palacio, necesito descansar un poco -Dije soltando un hondo suspiro.


—Como usted ordene faraón -Dijo sonriéndome.


 


~*~


Al llegar al palacio entré rápidamente y subí a mis aposentos, me sentía triste, pero no podía permitir que alguien me viera así, no quería que se preocuparan por mí y a pesar de todo, nada se podía hacer para solucionar esto que sentía dentro de mi pecho.


Caminé por el pasillo hacia mi habitación dos guardias me abrieron las puertas y las cerraron en cuanto entré, puse una mano en mi pecho sentía como mi corazón latía casi sin fuerzas, lo único que quería era ver la sonrisa sincera de Yugi, volver a tomar su mano y sentir que todo el tiempo estaría a mi lado, caminé hasta el balcón y me recargué mirando el suelo.


 Aibou... -Susurré pesadamente mientras cerraba fuertemente los ojos.


Después de algunos minutos entré y me tumbé boca arriba en mi cama poniendo mi brazo izquierdo sobre mis ojos, solo quería dormir, dormir, despertar y ver las hermosas joyas amatistas que solo le pertenecían a mi adorada luz.


Las despedidas siempre eran la parte más terrible de los comienzos, pero nunca imaginé que me dolería tanto separarme de Yugi.


Desperté pesadamente después de algunas horas, justamente cuando estaba comenzando a anochecer, salí de nuevo al balcón y sentí la brisa fresca que estaba comenzando a correr, recorrer mi piel, miré al cielo y divisé a la bella diosa Isis iluminando majestuosa el cielo egipcio.


—Mi aibou amaría verla -Dije sonriendo con pena recordando que mi luz adoraba la luna -Diosa Isis, ilumina a mi aibou y que sienta a través de tu amor que yo estoy ahí con él -Dije soltando un triste suspiro.


Fin del POV de Atem


 


~*~


Desperté por ahí de las siete de la noche, justamente cuando la luz de la luna estaba comenzando a entrar por el traga luz del techo bañando mi blanca piel con su luz, me acomodé mejor para verla, y tomé una almohada para abrazarla, por alguna extraña razón sentía una inmensa paz llenar mi ser, sentía una calidez indescriptible, era como si Yami estuviera una vez más junto a mí, pero solo era mi imaginación y mis ganas de tenerlo ahí ya que él no estaba más.


Después de un rato comencé a sentir hambre así que bajé a comer algo, el abuelo había preparado la cena así que solo fue cuestión de servirme.


—Que bueno que bajaste a comer Yugi -Dijo sonriéndome entrando a la cocina.


—Si, ya me estaba dando algo de hambre -Dije sonriendo levemente.


—Por cierto, Yugi, la próxima semana iré a una expedición junto a mi amigo Arthur así que ¿qué te parece si nos acompañas? -Preguntó sonriéndome.


—Eso sería genial... ¿Verdad Ya...? -Comencé a decir cayendo en cuenta de que mi oscuridad ya no estaba más, mi abuelo solo soltó un hondo suspiro al escucharme.


 


~*~


Pov de Yami


Mana fue a mis aposentos para hacerme un poco de compañía y para jugar un juego de Senet(1), entró y se sentó en mi cama hablándome para que fuera a jugar con ella.


—Ahora no mana -Dije pesadamente.


—¡Vamos Atem! No seas aburrido -Dijo haciendo un puchero poniendo sus manos en su cadera.


—Esta bien -Dije entrando encaminándome a mi cama sentándome en el borde -Entonces comencemos -Dije sonriéndole levemente.


—Esa es la actitud que yo quiero -Dijo feliz colocando la fichas en el tablero.


Después de una medio hora o menos ya le había ganado tres veces, siempre había sido muy bueno en este juego.


—De nuevo te he ganado -Dije sonriendo orgulloso.


— Es imposible, no te esfuerzas en nada en ganar -Dijo haciendo un puchero.


—Que quieres que te diga soy el rey de los juegos, además el único que puede vencerme en todo caso es mi aibou, ¿verdad, ai...? -Comencé a decir, Mana me miró extrañada y luego negó levemente con su cabeza.


Fin del POV de Yami


 


~*~


—*Tengo que acostumbrarme a que sea así ¿no?, ya que esto solo es el comienzo, solo es mi primer día sin ti* -Pensaron ambos tricolores cerrando los ojos sintiendo sus corazones pesados.


Esto era así, ambos estaban separados por muchos siglos de diferencia y no podían hacer algo para volver a verse, el comienzo sin tu persona especial siempre es duro y ellos tenían que enfrentar que solo era el comienzo de su vida el uno sin el otro.


 


----Fin----


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Notas finales:

(1)Senet: El Senet es un ideado en el y muy famoso en esa época. Es uno de los juegos de mesa más antiguos que se conocen junto con el Oware o el Juego Real de Ur .

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Espero que les haya gusta y no les haya partido tanto el alma u.u 

Tengo más fics que escribir y que hacer y cosas así y amo tener tiempo libre para escribir *w*

Pero bueno espero desde el fondo de mi corazón♥ que les haya gustado y espero que nos leámos muy pronto de nuevo en otro nuevo fic, sin más que decir ahora, me despido, y hasta luego. :3


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