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lo que tus celos provocan por yuram-cham

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Notas del capitulo:

este one-shot va dedicado a mi amada Natally y jade quienes me pidieron algo y aqui trate de cumpliserlo ¡las amo!

quienes siguen amor eterno les informo que actualizo el martes eh tenido muchos problemas climaticos pero al parecer ya esta mejor

- ¡ya te dije que no!- grito alterado un moreno en medio de una discusión con su pareja

-¡soy tu prometido! es mi deber ir contigo- renegó el rubio furioso por la negación de su rey- de seguro quieres que me quede para engañarme con esa

- ¡conrad! Dile algo – suplico Yuri al ver que no ganaría la discusión.

- majestad, yo pienso igual que wólfram – objeto algo apenado el castaño – está comprometido con mi hermano así que es incorrecto que vea a esa “dama” sin la presencia de su prometido – sentencio el soldado recibiendo una dulce mirada de wólfram.

- ahh - Yuri dejo escapar un suspiro resignado – mañana salimos al amanecer – menciono sin ganas de pelear si tan solo a su “leal amigo conrad” no se le hubiera escapado aquello. Todo saldría a su gusto.

Flash back***

El ambiente en el despacho era el mismo de siempre, papeleo, papeleo y mas papeleo. Todo trascurría normal hasta que conrad irrumpió en la estancia con un sobre en sus manos.

-¿Qué sucede conrad? estamos trabajando- cuestiono el general molesto por la interrupción

- han traído esto de las tierras Grash – explico el castaño entregando un sobre blanco a su hermano.

Las tierras mencionadas formaban parte del territorio del maou. Siendo una de las casas más importantes junto a los Bielefeld.

- es una invitación -  anuncio el general – al parecer la hija del regente quiere conocer a su majestad. Para – el mayor arrugo el entrecejo - … posible compromiso.

- ¡¿qué?! Otra vez – grito Yuri asombrado. Ya anteriormente le habían llegado invitaciones de compromiso pero wólfram siempre se encargaba de que estas fueran rechazadas.

- esto es una clara falta de educación - objeto Gunter molesto – su majestad no está para andar de Casanova con estas oportunistas.

- además de que está comprometido- secundo conrad.

- aquí dice que también es importante la presencia de su majestad para discutir asuntos políticos… en pocas palabras es imposible negarse- concluyo Gwendal masajeando su entrecejo de solo pensar en cómo se pondría su hermano cuando se enterara.

- bueno, si no queda otra opción - musito alegre el moreno después de todo no diario conocía a una linda chica su única preocupación era que le inventaría a su “amigo” para que no lo acompañara – pero… ¿Qué le diremos a wólfram?- cuestiono Yuri algo preocupado.

-¿decirme de qué?- todos voltearon a la puerta donde estaba un rubio algo confundido al escuchar su nombre en la conversación - ¿ocurre algo que deba saber?

- ¿eh? Y-Yo… etto – Yuri busco con la mirada ayuda en Gwendal mas este solo negó la cabeza dejándolo solo en este asunto. Si muy cobarde quería serle infiel pues él no lo ayudaría

- ¿y bien? ¿Me van a decir? –la paciencia wólfram se estaba agotando, y bueno... No es que tuviera mucha

-y-yo… - el maou miro a su leal amigo conrad quien solo le sonrió tranquilizando y aliviando su dolor.

- lo que sucede es que su majestad recibió un llamado a las tierras Grash solicitando su presencia – el moreno asintió

- oh, entiendo pero ¿Qué tengo que ver yo en esto?- volvió a cuestionar algo confundido.

- oh, eso fue porque la hija del regente quiere comprometerse con su majestad y este no quería que te enteraras- respondió con una sonrisa como si nada.

Todos voltearon a mirarlo, unos asustados y otro enojado.

-¡¿QUE HAS DICHO?! ¡yurii!- el rubio tomo de las solapas al infiel de su prometido – ¡¿la rechazaste verdad?! – el maou aterrado negó con la cabeza.

- wólfram suelta a su majestad – ordenaba Gunter aterrado por el trato hacia el moreno.

- ¡yo iré también! – objeto el rubio, no dejaría que ninguna mujerzuela le robara a su Yuri de eso se encargaría el… a las buenas, o las malas.

Fin del flash back

- bueno siendo así, irán su majestad, conrad y wólfram – sentencio Gwendal interrumpiéndole en sus pensamientos.

- ya que – el moreno salió de la estancia. Wólfram estaba por seguirlo pero fue interrumpido por conrad

- es mejor que lo dejes solo – objeto algo apenado – tienes que tenerle paciencia, ya sabes como es.

- … lo sé- musito el rubio bajando su mirada - ¿creen que no me doy cuenta? Yuri solo está viendo la oportunidad de alegarse de mi – los ojos del rubio se nublaron pero no, el no lloraría.

- si lo sabes ¿Por qué no acabas con este compromiso? -  cuestiono Gwendal aun sabiendo la respuesta.

- por qué no dejare ir a la persona que amo – wólfram les regalo una hermosa pero triste sonrisa – aunque mi corazón se destroce en el camino… luchare por el – afirmo antes de salir del lugar.

- ah ¡lord mocoso esta encaprichado con su majestad! – dramatizo Gunter

- no, mi hermano en verdad está enamorado – afirmo conrad mirando el lugar por donde el rubio había salido.

- tengo un mal presentimiento -  Gwendal miro seriamente a su hermano - no pierdas de vista a wólfram  -ordeno, ambos sabían del carácter del rubio así que era mejor tenerlo dominado.

- lo hare – prometió el castaño aunque una cosa es decir y otra muy diferente hacerlo.

*************************

En la habitación real un joven yacía en su lecho, reflexionando sobre lo ocurrido. Desde que había llegado a ese mundo y conoció a wólfram su vida se había convertido en un infierno, según él. Los celos del rubio eran demasiado enfermizos pero tal vez esa joven sería la respuesta a sus  problemas.

- con que Judith – murmuro el nombre de la doncella en cuestión, ella le ayudaría a quitarse todo lo que sentía por su amigo.

Era cierto que el rubio lo sacaba de quicio, y siempre le impedía socializar con las jóvenes del reino. Mas lo que en verdad le asustaba a Yuri, era el hecho de que en varias ocasiones observaba el cuerpo de wólfram con otros pensamientos nada sanos según él.

Sus sueños se tornaban eróticos, y en las noches sin que el mayor se despertara – cosa que no le era difícil – admiraba y acariciaba sus hermosas piernas, sus pequeños pies, su delicada silueta.

- ¡ahh! no, no, no ¡yo no soy gay!- grito al darse cuenta de que todos sus pensamientos habían cambiado de rumbo-  a mí me gustan las mujeres, las mujeres… es hora de tomar medidas serias en este asunto – ya estaba decidido mañana conocería a la mujer que tanto soñó y ni wólfram ni nadie le haría cambiar de opinión

*************************

El sol salió en su resplandor, el cielo azul estaba despejado, más un par de aves gritaban su típico “mal augurio” anunciando la tormenta que se desataría en este evento.

Por los mares una tropa de shin mazuko, conformada por su majestad el rey, su prometido wólfram, su padrino conrad además de un par de soldados por si las dudas, se dirigían hacia las tierras del regente Grash.

- ¿wólfram te sientes bien?- conrad acariciaba  la espalda del rubio que vomitaba en la borda como era común en el.

- e-estoy b-ahh – los mareos no le dejaban hablar por lo que se concentro en retener su comida en el estomago.

- si sabias que no podías con estos viajes debiste quedarte – reprocho Yuri algo molesto.

- ¿p-para qué? Ah,… ¡infiel d-de seguro solo quieres estar con esa! Buaa - una nueva arcada le hizo volver a enfocarse en la borda del barco.

- tranquilos chicos – el castaño trataba de evitar una nueva discusión entre su hermano y ahijado cuando visualizo el puerto de su destino – llegamos

-¿eh? ¡Enserio!-  desde la popa de navío, Yuri pudo apreciar el castillo prominente de las tierras, los mercados y habitantes todo esto le recordaba en cierta manera a caloría.

- ¡tierra firme! – agradeció el rubio cuando bajaron del barco.

-es usted ¿su majestad Yuri y acompañantes? – cuestiono un joven de cabellera castaña clara y ojos del mismo tono, mas una compleción como la de wólfram. Delgado y estilizado

- sí, tú debes ser el guía ¿verdad?- afirmo el moreno sonriéndole, era un chico muy lindo pero nadie rivalizaba con wólfram. Al darse cuenta de su pensamiento sacudió la cabeza en negación un hombre NO debe ser lindo.

-así es me llamo Felipe. Ellos deben ser su escolta- supuso el menor mirando fijamente al rey. En verdad era apuesto. Su cabella oscura como la noche lo volvía un ser extravagante. Lástima que la hija de su amo,  ya lo tenía en su mira.

- te equivocas soy SU prometido, grábatelo bien – wólfram se aferro al brazo de Yuri mientras miraba a ese lacayo con enojo y una clara advertencia de “aléjate o te mato”

- wólfram musito apenado el moreno.

- b-bueno,  s-subamos al carruaje que mi amo no es muy paciente-  solicito abriendo la puerta del vehículo. Mas su nerviosismo se debía a la mirada del rubio… era alguien de quien cuidarse.

- ¡andando!

*************************

En la sala del castillo Grash, una hermosa joven se encontraba leyendo en la espera de que su “rey” llegara por ella. Desde que le hablaron de la belleza de este se propuso conquistarlo y lo lograría a cualquier precio.

- hija ¿segura que quieres esto?- cuestiono un hombre maduro de cabellera rojiza sostenida en una coleta y ojos cafés.

- padre, el rey será mío. No hay hombre que se me resista – la bella joven se levanto de su asiento con gracia. Era cierto que era hermosa, su larga y rizada melena rojiza le daba un toque seductor pero sus hermosos ojos azul cielo. Su delgado cuerpo y bien proporcionado la hacían la codicia y envidia de todos.

- según escuche está comprometido con wólfram von Bielefeld – menciono el hombre, el no era ciego sabía que su hija era bella pero ese chico se llevaba el premio en cuento a belleza, nunca conoció un ser mas hermoso que el.

- ese no es problema, según escuche su majestad no acepta el compromiso por ser un hombre – objeto con superioridad. Dando por adelantada su victoria.

- no te confíes Judith o perderás – la chica solamente sonrió confiada en su belleza.

Justo en ese momento una joven sirvienta entro anunciando que el rey acababa de llegar.

- mírame bien padre, la próxima vez seré la prometida del rey  - anuncio la pelirroja acomodando un poco su vestido. Que el show comience

********************

- ya pueden pasar – le anuncio la joven sirvienta. Marchándose junto a Felipe.

- pues entremos – conrad abrió las grandes puertas que daban a la sala dejando apreciar a dos personas.

- buenas tardes – saludo una hermosa chica mirando de reojo la reacción de su rey

Yuri se había congelado. En su vida había visto a una mujer más hermosa. Se veía como una doncella fina y delicada y su bella sonrisa le trasmitía confianza.

- por favor tomen  asiento – solicito el regente de la casa

- gracias – el moreno y sus acompañantes se situaron en el sillón frente a ellos.

Para wólfram no paso desapercibido como se miraban Yuri y esa zorra. El conocía muy bien a las de su clase, todo sonrisitas pero cuando toman confianza sacan las garras, no perdería contra esa farsante sin chiste.

- gracias por venir. Me presento soy máximo von Grash y ella es mi hija Judith- la joven fingió un lindo sonrojo que la hizo ver adorable a los ojos del maou.

- un gusto, como ya saben soy Yuri shibuya, el es mi amigo conrad weller – el castaño asintió con una sonrisa – y wólfram von Bielefeld.

- SU prometido – le interrumpió el rubio mirando de reojo a la chica quien no se sorprendió.

-etto… yo – el moreno no sabía que decir en esa situación.

- pero eso me imagino ya lo sabías ¿no?- le reto el rubio mirándola con claro odio – y aun así tuviste el descaro de solicitar una audiencia ¡ja! solo eres una farsante – desprecio.

- lo sabia - la chica se levanto tranquilamente – me atreví a pedir una cita con el rey aun sabiéndolo p-pero e-es porque – sus ojos se comenzaron a nublar por las lagrimas – y-yo solo quería sniff conocerlo

- ¡ya basta!- Yuri acudió a consolarla. Nada le rompía más el corazón que ver a una chica llorar –wólfram, no es manera de tratar  una dama – el rubio quiso objetar pero fue detenido por su hermano – conrad sácalo de aquí antes de que me enoje –ordeno

- entiendo, lo llevare a la habitación que les asignaron -  anuncio seriamente llevándose al rubio quien se negaba a dejarlos solos.

-¿estás bien?- Yuri ayudo a la joven a limpiarse las lagrimas

- p-perdóneme, yo no debí hacer esto. Fue mi error no se enoje con el – suplico aferrándose a la ropa del mayor con suavidad.

- no tienes por qué pedir perdón, él fue quien actuó mal – sentencio el moreno dándole la victoria a ella. Quien sonrió abrazándolo mientras este la consolaba – ya no llores, mejor platiquemos ¿sí?

Judith asintió. Ya tenía al rey donde lo quería.

************************

En la habitación que les había asignado a su prometido y el. Wólfram descansaba ya con su habitual camisón. El manto oscuro había dado paso a la noche con rapidez. En todo el día no había salido de la alcoba esperando a que Yuri viniera por el más al parecer su rey tenía otras cosas más importantes que hacer.
- No te cederé Yuri… tu eres mío sniff y-yo te amo – susurra contra la almohada, lo sabía muy bien. El moreno no era de él y nunca le correspondería pero prefería caer en pedazos a retirarse como un cobarde.

Limpiando sus lágrimas, coloco en su rostro una faceta de indiferencia. Se levanto y tomo su bata. Nuevamente seria él quien cediera y perdiera un poco más de su orgullo.

Con algo de frio y sin hacer ruido logro salir de la habitación, encaminándose al despacho donde suponía seguía su prometido con esa mujerzuela. De un pasillo seguía otro hasta llegar a las escaleras donde logro captar una voz muy familiar.

Era Yuri…. Y esa

Antes de ser visto su cuerpo actuó por inercia y se oculto en el borde del pasillo. Cada parte de su cuerpo le gritaba que se fuera o diera la cara pero este no se movía.

- jaja por favor pare – la joven reía tras un intento de chiste que le conto el moreno- oh, estaba tan entretenida que no me di cuenta de lo tarde que era.

- ¿eh? -  el rey miro por la ventana el manto oscuro, ¡diablos!, ¡era de noche! “ahh wólfram me matara” pensó aterrado imaginando los gritos del rubio- ah, si ya es tarde, creo que es mejor que me retire – Yuri se dispuso a marcharse pero la joven le tomo de la mano antes de que lo lograra.

- “zorra” pensó el rubio queriendo quemarla en ese instante.

- ¿sucede algo?- cuestiono preocupado el moreno al ver como la chica desviaba la mirada apenada.

- m-me preguntaba si usted – Judith bajo la mirada jugando con su vestido – a-aceptaría verse conmigo mañana en los establos…l-lo que sucede es que – la chica alzo su mirada topándose con la del moreno – t-tengo algo importante que decirle.

- y-yo – Yuri no sabía que decir, esto parecía un encuentro para una confesión como en los mangas shojo, al fin tendría una novia linda y… no  necesitaría a wólfram, ya no lo vería sonreír, dormir, celarlo ¿era lo que él quería no? entonces ¿por qué la idea de ello no lo alegraba?- si.

- ¡kya! Gracias – un casto beso fue depositado en sus labios. Todo su cuerpo se tenso. Judith lo había besado. Más antes de decir algo esta había salido corriendo diciendo que lo esperaba mañana.

- … n-no – algo dentro de wólfram se había quebrado. Quiso salir y reclamarle por infiel pero en vez de eso corrió, huyo. Por primera vez en su vida wólfram von Bielefeld había huido.

- nada – susurro el moreno acariciando sus labios, no había sentido nada, esas cosquillas que escucho decir ¿Dónde quedaban? Acaso besar solo era un choque de labios… No lo sabía – tal vez con el tiempo  - se dijo a sí mismo, si eso debía ser.

No muy convencido se encamino al cuarto que les habían asignado. Al llegar suspiro con desgano, pensando encontrar a un rubio hecho una furia más algo decepcionado solo se topo con que este estaba dormido tapado hasta el cuello.

El moreno aprovecho esto para cambiarse y dormirse, mañana su vida cambiaria con una respuesta. Pero ese beso… en verdad le había hecho dudar ¿sería feliz con ella?

- Judith- susurro su nombre, mas no lo ocasionada absolutamente nada. “wólfram” pensó antes de caer profundamente dormido sin notar como el cuerpo a su lado sollozaba.

- “idiota, idiota, idiota… eres un idiota Yuri… pero yo lo soy más” el rubio se descubrió viendo el plácido rostro dormido del moreno – te prometo que nadie nos separara… solo espera, que mañana me encargare de todo- prometió sonriendo, mas quien fuera testigo de su sonrisa se asustaría.

***********************

El día siguiente había llegado con grandes…. Muy grandes sorpresas.

En un establo una joven esperaba a que su rey llegara, ya tenía preparado su actuación de joven débil y enamorada, jaja como se divertía de solo pensar en ello. Más debía admitir que Yuri era alguien interesante. Definitivamente seria suyo.

- ya está tardando – murmuro molesta por la espera.

Para evitar que alguien los interrumpiera había ordenado a los soldados del lugar dejarla sola. Por ello cuando hoyo unos pasos atrás de ella supuso que se trataba de su rey.

- Yuri llegas tar- … ¡¿qué haces TÚ aquí?!- cuestiono Judith furiosa. Al que tenía delante de ella no era otro que wólfram von Bielefeld.

- ¿esperabas a alguien más…zorra?- wólfram sonreía triunfante viendo el enojo de su rival.

- ¡maldito! ¡¿Dónde está Yuri?!

-¿eh? Te refieres  a MI prometido – el rubio se alzo los hombros con indiferencia – el no vendrá, de hecho me mando en su lugar.

-¡mientes! El no me dejaría plantada- Judith retrocedió al ver la mirada fulminante del contrario sobre la otra.

-déjame te lo digo solo una vez… una cualquiera como tu n-u-n-c-a me alejara de Yuri. ¿Lo captas? – el rubio comenzó avanzar sin despegar su vista de la chica – así que más te vale no volver acercarte a mi hombre

- ¿o si no que?-  le reto con jactación. Cosa que solo hizo que la sonrisa del doncel se anchara.

- o si no – wólfram murmuro unas palabras y al instante dos tigres de fuego aparecieron, estos tenían un aspecto terrífico. Los felinos la rodearon casi quemándola – te matare – sentencio.

- ¡a-aléjate! ¡t-todo el mundo sabrá esto!

- ¿Eh? ¿De qué hablas?- wólfram puso una hermosa sonrisa tierna – yo no hice nada malo, es tu palabra contra la mía… un Bielefeld. Así que decide: sal de mi camino o tu “hermosa” cara terminara calcinada – amenazo sádicamente.

-¡lo hare! Solo déjame por favor- rogo en medio del llanto. Este solo la miro como una basura y se marcho dejándola aterrada.

 

- “al final resulto ser una cobarde… ¿Ves Yuri? Yo soy el único que te conviene” pensaba wólfram mientras se encaminaba a su habitación. Ya había terminado con ese estorbo solo faltaba una cosa  para poder ser feliz

- ¡wólfram! Te eh estado buscando – conrad se acerco a su hermano el cual solo lo miro atentamente – no he visto a su majestad ¿sabes donde esta?

- ah sobre eso, está en la alcoba- respondió como si nada.

- ¿a esta hora? – el castaño lo miro dudoso.

-ahh… lo que sucede es que ayer peleamos. Ya sabes mi celos y eso – el rubio bajo la mirada apenado – y le pedí que me esperara para hablar con él. Ya no quiero que estemos peleados

- con que era eso – el mayor le acaricio la melena al rubio – entiendo. Me encargare de que nadie los moleste. Suerte – con un casto beso en la frente de su hermanito se marcho deseándoles una pronto reconciliación

 

Wólfram continúo con su camino hacia la habitación. Al llegar abrió lentamente la puerta. Dentro todo estaba oscuro apenas los rayos del sol pasaban por las cortinas más aun así se adentro con total confianza.

- ya volví Yuri, veo que ya despertaste – el rubio se encamino al tocador sacando una camisa - ¿Qué dices? No logro entenderte – menciono observando a su amado rey quien se retorcía entre las sabanas.

Yuri estaba en la cama amarrado y amordazado, sus manos fueron atadas a la cabecera y los pies a las esquinas de la cama para evitar que se soltada.

- perdona que no te libere pero harás mucho ruido se paciente, me daré  un baño – informo el rubio melosamente antes de abandonar el lugar.

***************

Apenas había despertado y sintió su cuerpo extraño. Grande fue su sorpresa al ver que se encontraba amarrado a la cama, pero ¿Quién sería capaz de tal acción?

Giro su cabeza para todos lados, trato de gritar mas todo fue inútil ¿Qué pasaría con él? No lo sabía

Las horas pasaron hasta que finalmente abrieron la puerta, su alivio al ver a wólfram fue indescriptible mas cuando este hablo, lo supo. Fue él quien lo había expuesto a esta situación.

-“que me hará… maldita sea wólfram se volvió loco” pensaba. No sabía cómo actuar, podía transformarse pero su cuerpo se negaba como si no se sintiera en peligro.

El ruido de la puerta del baño le hizo girar encontrándose con un sensual rubio: wólfram traía solamente una camisa que le llegaba apenas debajo de los glúteos, su cabello mojado le daba un toque erótico mas su mirada brillante y llena de lujuria fue lo que alerto al moreno.

- mmg mgh – trato de hablar pero sus palabras morían en la mordaza.

- tranquilo Yuri, es mejor que te relajes que esto apenas está comenzando – wólfram camino lentamente hacia su tocador donde tomo un aceite y acto seguido se acerco a la orilla de la cama. Y subió una de sus piernas en ella.

Yuri observo como el rubio untaba con gracia y delicadeza el líquido en cada parte de su pierna. Su mirada se condujo un poco más arriba y ¡oh por dio! ¡No tenia ropa interior!

-“asqueroso” se dijo mas ni él lo creía, era lo más jodidamente erótico que había visto. Esa maldita prenda lo hacía ver tan deseable “no, no, no ¡no!“

- ahhh veo que ni con esto reaccionas- wólfram dejo el bote a un lado y gateo hasta sentarse en la pelvis del mayor y con ritmo comenzar a moverse  sobre el miembro del mayor– mgh no luches Yuri… se mío -  suplico en el odio del moreno

- “ maldita sea, ahh es tan.. Se siente tan bien”

- déjame oírte – wólfram quito la mordaza con rapidez

-ah, ¡wolf! Para esto de una vez- ordeno el mayor sin ser obedecido.

-¿Por qué? Mgh al parecer a tu amiguito ya le está gustando – menciono al notar la erección en su entrepierna.

-¡e-eso no es!. ¡Quítate! Ah.. mgh e-esto es as..Asqueroso- desprecio

- ¿asqueroso?- wólfram detuvo su actuar - ¿eso crees? – el rubio descendió hasta la altura de la entrepierna ajena, y sin pudor  bajo el pantalón del moreno junto a su ropa interior – veamos si esto te parece asqueroso.

-¡OH POR DIOS!- Yuri llevo su cabeza hacia atrás, era demasiado. Wólfram sin aviso engullo su erección en su caliente cavidad.

El rubio lamia el tronco y base con rapidez. Sus labios lo  sostenían mientras su cabeza bajaba en un vaivén. La felación era tan rápida pero tan deliciosa. La lengua del menor no conforme rodeaba a la punta lamiéndola cual helado.

Sus manos viajaron hacia los testículos donde masajeo para después lamer y succionarlos. Los gemidos de Yuri se combinaban con suplicas de que detuviera pero ¿Por qué hacerlo? Si Yuri lo odiaría después de esto por lo menos se llevaría un grato recuerdo.

-ahh estas tan duro, ¿te calienta esto Yuri?- wólfram miro al mayor sin dejar de lamer su pene – te pones así mientras un hombre te la chupa, que pervertido.

- ahh mgh ¡n-no! ah w-wólfram d-detente ahh

-mgh sabe tan bien, siempre ah me pregunte como seria esto es deliciosa- el rubio hacia caso omiso a las suplicas del mayor

Sin dejar de lado su felación con sus dedos comenzó a expandir su entrada sería su primera vez pero no quería demostrarlo o echarse para atrás

- ya estoy al límite- el rubio se sentó sobre la pelvis del moreno quien no creía lo que sus ojos veían: wólfram auto penetrándose… su cara de placer y dolor mezclada quedaría en lo más profundo de su ser.

-ahh e-estamos unidos y-Yuri – el rubio dejo escapar un par de lagrimas. Al fin Yuri le pertenecía.

-mgh e-eres muy estrecho – se quejo el moreno. Mas era tan placentero que poco le importo que fuera un hombre el que lo estuviera montando de esa forma tan exquisita.

Wólfram comenzó un poco despacio, con timidez alzo sus caderas para dejarlas caer, una corriente eléctrica lo invadió. Pronto su ritmo era tan frenética que no lo soportaba deseaba aun mas

Una insana idea paso por su mente, se quería vengar… mas no sabía que esa sería su sentencia..

- ahh si mas – gemía sin dejar de montarse – ahhh conrad mas sii – el rubio fingió sorprenderse llevando sus manos a la boca.

La cara que Yuri puso cuando escucho el nombre de su padrino en los labios de SU prometido, no tenia precio. Wólfram quiso reírse pero rápidamente todo su gozo se transformo en miedo.

-“conrad…conrad” se repetía Yuri aun en shock, ¿Por qué demonios SU prometido había gemido el nombre de su padrino? La imagen de ellos haciendo esto, de wólfram gimiendo mientras era penetrado por el castaño lo enfureció. Nunca se sintió tan enojado.

Su poder maou salió a flote ante su ira, de un movimiento destrozo los amarres. Wólfram estaba aun montado en el. Y muy… muy asustado.

- con que conrad- murmuro Yuri antes de cambiar las posiciones ahora el arremetía contra wólfram penetrándolo sin piedad – eres Mío ¡entiéndelo! – ordenaba sin dejar de menear sus caderas

-ahh y-Yuri ahh – wólfram no podía hablar nunca imagino a su Yuri tan posesivo.

- ¡yo soy tu dueño! ¡Lo matare! Matare a todo aquel que te toque- los ojos del moreno eran impactantes con sed de sangre y lujuria mezclada

- ¡y-Yuri m-me corro! – el rubio reprimió un fuerte gemido en a almohada al venirse.

- tsk – el rey apresuro su ritmo al sentirse cerca del orgasmo

- ¡dentro no!- le grito el rubio aterrado pero era tarde había sido llenado con esa esencia.

-cállate, me vendré tantas veces hasta que quedes preñado-  el menor lo miro atónito ¿Cómo Yuri sabia eso? - ¿Qué? ¿Creíste que no lo sabía? Pues ahh lastima para ti

- ¡sii! Hazme los hijos que quieras- suplico enroscando sus piernas en la cadera del mayor incitándole a continuar.

- luego no quiero quejas, porque no te soltare hasta el que te quedes totalmente lleno de mi – sentencio con seriedad. Amarraría a wólfram aunque fuera a la fuerza. Si para eso era necesario un hijo así lo haría

*********************

- ¡su majestad! – Le llamo conrad, ya tenían todo listo para marcharse, de vuelta al castillo – es hora de partir. Me informaron que la señorita Judith esta “indispuesta” así que manda pedir disculpas.

- aja -  por más que el rubio le explicara que solo fue para vengarse del, y que no se le ocurrió otro nombre. La idea de que conrad le arrebatara a su rubio le volvía loco.

- ¿wólfram? Estas bien – conrad se acerco a su hermano quien apenas se podía poner de pie ¡le dolía todo! Juro que un día mataría a Yuri shibuya

-e-estoy bien, solo me siento mareado – mintió tratando de ocultar su dolor de espalda  y cadera.

- déjame ver – el castaño trato de tocar al rubio pero la mano de su rey se lo impidió.

- no lo toques – ordeno con celos evidentes- yo seré quien se haga cargo de MI prometido ¿entendiste?

-s-si majestad  – el castaño no sabía que fue más impactante la mirada de su ahijado o que este fuera tan posesivo con su hermanito. Pero le dio mucho gusto saber que al fin ambos serian felices.

*

*
*

Al llegar todo el mundo se dio cuenta del evidente cambio de actitud de esos dos. Yuri no dejaba que ningún hombre estuviera a solas con su futuro esposo y wólfram era más cariñoso en público con él.

Más lo que en verdad fue una sorpresa fue la notica que les llego 15 días después de regresar de su viaje.

-¿Qué has dicho Gisela? – cuestiono el rubio sin creerlo.

- que está esperando un bebe ¡felicidades!

- ¡wólfram! Seremos padres- Yuri abrazo a su pareja quien solo lloraba de la felicidad – al fin serás solo mío, ya no podrás huir nunca porque ahí un ser que nos unirá eternamente

- jaja no sabías que eras tan posesivo – bromeo el rubio con picaría.

- tú tienes la culpa, esto es lo que tus celos provocan en mi – sentencio antes de besarlo con todo su amor.

Definitivamente ambos eran igual de celosos y posesivos pero así se amaban

Fiiiin~

 

Notas finales:

gracias por su apoyo :3


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