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idontwannabeyouanymore por Lila0526

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Notas del fanfic:

Este es mi primer one-shot.

Espero que lo disfrutes. 

Notas del capitulo:

Ciel tiene un humor que desearía vender. 

Allí estaba Ciel. Sólo y en la oscura profundidad de su cuarto. En su mano sostenía un pañuelo que fue arrojado junto a la pila de los restantes. Sólo para volver a sacar otro, secarse sus lágrimas y repetir el proceso.

Si las lágrimas pudieran ser embotelladas, habrían piscinas llenas por modelos.

El silencio mecía la habitación y el frío de invierno sólo hacía todo más melancólico. Ciel giró de lado y la manta blanca fue tapando su cuerpo y fue haciéndose más pequeño. No había una razón concreta de su estado. Pero era demasiado evidente. Ciel no necesitaba hablar, con demostrar era suficiente. Se conocía tan bien.

Ciel estaba herido. Desmoronándose dos veces al día. Tan melancólico como su amado lo conoció. Y recordarlo solo lo hizo desmoronarse más. Las lágrimas caían, pero Ciel no hacía ningún ruido. Su pelo estaba sucio, su piel estaba demasiado pálida y sus manos estaban heladas.

Ciel pareció tensarse, estaba molesto y más que nervioso. Se sentía extraño actuar así por alguien. Se sentía aterrado. Era imposible, él no era una chica. No había ninguna razón por la cual debería actuar así. Aun así, no pudo.

No cuando Sebastian lo miró, tan herido y tan decepcionado, que Ciel se sintió la peor cosa del mundo. Y ahí se dio cuenta de que ya había caído, demasiado bajo.

Ciel no era así, siempre había ignorado los sentimientos de los demás. Era frío, egoísta y un poco terco. Pero fue por Sebastian que Ciel pensó.

Tenía un humor que hubiera deseado poder vender.

Fue inevitable, Ciel volvió a llorar al pensar en él. Era inexplicable, la mirada de Sebastian le trasmitían tantas cosas, tantas emociones que, aunque ahora estuviera llorando a mares, no se sentía vacío. Era como si Sebastian supiera que hacer con él. Con solo una mirada de sus ojos Ciel se derrumbó. Y giró sobre sus pies para salir de la escena antes de que Sebastian le viera de esa forma tan patética que odiaba.

Ciel odiaba las mentiras, pero él también mentía.

Si “te amo” fuera una promesa, la rompería si era honesto.

Su telefonó sonó. Que hombre tan increíble, fue lo que Ciel pensó. Estaba seguro, que Sebastian sabía cómo se sentía. Pero fue esa certeza de que se trataba del hombre que le puso a Ciel los pelos de punta. Se levantó desganado y herido, solo para apagar su teléfono y dirigirse al baño.

Ciel miraba su reflejo sobre el espejo, una vez dentro de las cuatro paredes de azulejos. Sus ojos estaban rojos, hinchados y su nariz también. Era un desastre. Y le dijo a él, lo que sabe que antes escuchó.

No quiero ser tú.

Ciel lavó sus ojos y cara con el agua helada. Secó su rostro con la toalla azul y escuchó un ruido en la puerta. Una mueca se formó en la boca de Ciel.

No sabía qué hacer.

Estaba anonado. Sus pazos fueron lentos y salió de la puerta del baño. Sus pazos se hicieron cada vez más tardados y se acercó a la puerta de la entrada con inseguridad y unas cuantas emociones más. Como si esa fuera la puerta a la solución de sus problemas.

Lentamente la abrió.

Como supuso, Sebastian estaba allí. Se veía tan mal, tan devastado. Y fue cuando Ciel miró sus ojos que sintió que volvería a llorar otra vez. El hombre lo conocía tan bien, que lo terminaría matando.

—Ciel…

La voz de Sebastian diciendo su nombre era tan profunda que ya comenzó a extrañarla de nuevo. Ciel juraba que si no dejaba de mirarlo iba a lagrimear. Era seguro. Sus labios se juntaron en otra mueca, una que declaraba vergüenza, miedo y arrepentimiento.

—Lo siento… —dijo Ciel. Su cabeza bajó y su fleco tapó sus ojos. Las lágrimas comenzaron a caer finamente y sintió ganas de taparse. La cálida mano de Sebastian acarició su cabeza con tanto amor que sintió que se desmoronaría. Ciel comenzó a llorar más fuerte y Sebastian dejó un afectuoso beso sobre su cabeza.

Ciel se lo dijo así mismo. Una vez más, en un silencioso pensamiento;

No quiero ser tú.

Nunca más.

Notas finales:

Gracias por llegar hasta acá, mi cuenta ha estado inactiva por eso decidí escribir esto. 

Si quieres entablar una amistad, molestarme o simplemente dejar un comentario sobre mis historias, puedes seguirme en mi tumblr;

leviathan-616 

(es un nombre fácil de recordar, jeje) 

Te mando saludos 

Lila 


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