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La pesadilla de Obelisko: Locura temporal por Ghost princess Perona

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Notas del fanfic:

Naruto no es mío, es de Masashi Kishimoto.

Notas del capitulo:

Alguien por ahí me pidió que continuara con Obelisko, así que aquí está la nueva entrega. Espero que les guste...

"Urrrghhhh, duele" dijo Byakuya, frotándose la cabeza. “Es oficial, este es el peor día de nuestras vidas.” Él y sus hermanos aterrizaron en un terreno muy duro, en medio del bosque, como si lo hiciera en un montón de piedras. Bueno, al menos él lo hizo. Sorato logró frenar su caída con levitación e Izuna utilizó el Kamui para atravesar las plantas hasta su última parada, una raíz. "¿Qué diablos pasó?"

"No lo sé" respondió el genio, levantándose del suelo con un gruñido. Su Rinnegan había conseguido sacarlo del embrollo, más su aterrizaje necesitaba un poco de práctica. “Este lugar se me hace algo familiar..."

"A mí también" dijo el menor y corrió hacia su hermano para sanarlo. El mayor se levantó, gruñendo, e intentó recordar cuándo había estado allí. Vio algunos fantasmas del pasado, tres niños de diferentes edades pero claramente relacionados por la sangre jugando en ese lugar. "Oye, este es el claro donde jugábamos de pequeños..." lo miraron como si estuviera loco. "¡Nuestro patio de juegos! ¡Donde marcábamos nuestras alturas también! ¿No recuerdas que solíamos trepar ese árbol?"

"Ahora que estás hablando de eso... sí" el pelinegro se acercó. "Me acuerdo de las marcas que tú y yo hacíamos en este árbol cuando Izuna era más pequeño" pasó su mano por la corteza herida hace tanto por kunais hasta encontrar unas diferentes a las de la altura. "No puede ser, esto es demasiado reciente para ser las mismas marcas..."

"¿Demasiado frescas?"

"¡Sí! Han pasado años desde que morimos, ¡pero la última marca todavía está algo fresca! ¡La hicieron cuando estaba embarazado de Otohime!" el ninja medico también inspeccionó las marcas, que eran de los distintos tamaños de su barriga en el embarazo.

"Sí, es extraño" caminaron por el bosque. Luego llegaron al lugar donde solía estar su casa… bueno, una de ellas. Después de todo tuvieron muchas en su niñez, yendo de un sitio a otro. Esta era una cueva simple que a simple vista no parecía habitada, menos por un hombre y sus tres hijos. Fueron recibidos por el olor de... "Mamá está haciendo inarisushi, podría reconocer ese olor en cualquier parte"

"También hay leche… para bebés"

"Probablemente para Hime-chan" Izuna entró en su casa para inspeccionar, pero sus hermanos bajaron la vista. Estaban un poco avergonzados por sus acciones tras la muerte de su hermano pequeño y sabían que para ese momento su madre ya se había ido.

"¿Qué estás diciendo, Izu? Ella ya no es un bebé y mamá tampoco vive" Bya comenzó a descender y encontró a su madre en la cocina, una visión muy familiar. Se quedaron sin aliento, activando su Sharingan para asegurarse de que no estaban alucinando. Y sí, era Uchiha Madara en persona, preparándose algo para comer… o intentándolo en medio de un ataque depresivo. "Mamá…"

"¿Eh?" Madara se dio vuelta y se enfrentó a sus hijos. Sus ojos se abrieron de par en par. "Yo ... ¿estoy alucinando?" se preguntó a sí mismo. "¿O eres un fantasma? Porque no puedes ser..."

"¿De qué estás hablando mamá? Soy Bya"

"Bya ... ¡pero no puede ser! ¡Mi Byakuya está muerto! ¡Maldita sea... ese hombre lo alejó de mí por su pequeña aldea de ensueño! Ha estado muerto por días y ahora el fantasma de mi fracaso ha venido a vengarse por no protegerlo..."

"No, mamá, estoy aquí" se acercó y agarró las manos de su madre, poniéndolas en su rostro. "Soy tu hijo, Byakuya, estoy de regreso" Madara activó su Sharingan y reconoció el chakra de su hijo. Inmediatamente abrazó a su hijo mayor, casi estrangulándolo. "No creías que íbamos a dejarte en paz, ¿no? Porque claramente no puedes cuidarte por ti solo."

"Bya... mi Bya..."

"¡Oh, y más volvieron conmigo!" sus hermanos se acercaron. Madara saltó frente a ellos y abrazó a cada uno con entusiasmo. No podía creerlo, el destino en realidad se apiadó de él por una vez y le devolvió a sus bebés.

"Mis bebés... no me dejen otra vez"

"Mamá" lloró Izuna. Sorato cubrió sus ojos con su pelo, pero también estaba llorando. Extrañó mucho a su madre, sobre todo cuando estaba en el otro mundo... el abrazo terminó cuando los estómagos de todos gruñeron. "Mamá, tenemos hambre. ¡No hemos comido nada desde que el Rinnegan nos devolvió la vida!"

"Por supuesto, solo espera un momento hasta que termine con algo más de inariushi" el Uchiha mayor corrió a la cocina para preparar la comida cuando se escuchó un llanto. "Otohime tiene hambre, tendrás que esperar un poco más..."

"No, yo voy" Izu agarró a su hija y la puso el biberón en los labios. "Soy su madre después de todo"

"Voy a tener todo listo para comer" dijo Byakuya, corriendo hacia la mesa, y Sorato también. Por lo general, no lo haría, pero ahora... estaba tan feliz de que su familia se hubiera reunido que no le importaba su reputación. Un pequeño trabajo doméstico no lo iba a matar después de todo. Cuando todo estuvo listo y el inarisushi frente a ellos, comieron como si nunca hubieran comido en sus vidas. Una vez que terminaron, Madara aprovechó su oportunidad para hablar.

"Solo quiero decirles, chicos, que... ¡cómo pueden ser tan estúpidos!" finalmente explotó, asustándolos un poco. No era una buena noticia para nadie, ni siquiera para ellos, que su madre estuviera tan enojado. "Izuna, ¿qué he dicho de Konoha? ¡Cuando te dije que no fueras a ese lugar, fue porque no tenías que ir! No puedes ir por ahí haciendo estupideces, Izu..."

"Lo siento, mamá" bajó la cabeza.

"¡Y tú, Byakuya! ¡Qué te he dicho sobre tu temperamento! ¡Te expliqué miles de veces que algún día iba a matarte si no lo controlabas, pero nunca pensé que eras tan estúpido como para hacerlo realidad! ¡Eren el mayor! ¡Tienes que dar un buen ejemplo a tus hermanos menores! ¿Por qué no has trabajado en eso?"

"Lo siento"

"Y Sorato, siempre te he considerado más prudente que tus hermanos, pero has demostrado que estoy equivocado"

"En mi defensa, fui manipulado para..."

"¡Eso no es excusa! ¡Debiste haberlo sabido antes y evitar quedar atrapado en tal situación!" Madara rompió a llorar de nuevo, sobresaltándolos. Estos días sin sus bebés han sido un infierno total, destruyéndolo por dentro. "¡Ustedes harían llorar a cualquier madre! ¡Incluso a mí!"

"Mamá... no llores, por favor, estamos aquí y lo sentimos" dijo Byakuya.

"Sí, no queríamos matarnos, solo... no queríamos lastimarte tampoco" continuó Sorato.

"Y prometemos que no vamos a volver a hacerlo" terminó Izuna.

"Claro que no. A partir de ahora no voy a dejarlos salir de mi vista. Vengan aquí" agarró a los tres y los abrazó de nuevo, llorando en el hombro de su hijo mayor. Los Uchihas más jóvenes se vieron e intentaron calmar a su madre, prometiendo que no volverían a hacerlo. Finalmente, el ex jefe del clan se calmó y dejó que lo llevaran a su cama para dormir. "Sé que son demasiado mayores para esto, pero... ¿pueden dormir conmigo? Extraño cuando eran pequeños y se metían en mi cama durante las tormentas."

"Claro" Izuna dejó a su bebé en la cuna de la habitación y él y sus hermanos se tumbaron en la cama. En la mitad de la noche, Sorato se despertó sintiendo que alguien los estaba mirando. Sacudió a Bya y ambos salieron de la cama. Izu los siguió, sin estar seguro de lo que estaba sucediendo, pero la mirada seria en los rostros de su hermano lo hizo fruncir el ceño.

"¡Sé que estás ahí, Zetsu, aparece!" ordenó Sorato, activando su Rinnegan. Inmediatamente sus compañeros dieron un paso atrás por precaución, conscientes de lo que esos ojos eran capaces de hacer.

"Ohhh, el niño prodigio que no pude usar está de vuelta... y los inútiles también" dijo la sustancia negra, saliendo de la tierra. Sus extraños ojos dorados brillaban de una manera desconcertante. "¿Cómo lograste regresar de la muerte? No puedo creer que lo hayas logrado, aunque seas tú."

"Fue una hazaña de equipo... como lo va a ser tu derrota" respondió el adolescente de ojos morados. Todos ellos entraron en la posición de batalla. Con una increíble coordinación, los hermanos lucharon contra la Voluntad de Kaguya, que era furtivo como el demonio y astuto como una serpiente, pero terminó haciendo un mal movimiento e Izuna pudo derribarlo con un bisturí de chakra. Él aulló, sorprendentemente herido, y se retiró sin dejar rastro. "¡Maldición! Lo perdimos"

"No va a durar mucho..." cantó el más joven, flexionando los dedos. “A partir de ahora me gustaría que recordaran cuál es mi sobrenombre, porque acaba de salvarlos.”

"¿Qué quieres decir?"

"Utilicé un hongo parásito extremadamente agresivo en ese golpe. Una de mis especialidades es atacar a alguien con una bacteria o virus modificado suficientemente agresivo como para matarlos fácilmente trasmisibles para que sean mi caballo de Troya" el pequeño moreno sorprendió a los otros dos. "No durará mucho"

"¿Qué hacen afuera a esta hora?" preguntó Madara con Otohime en sus brazos. "Izu, el bebé estaba llorando. Ya le cambié el pañal, pero ahora está hambrienta, aliméntala, ¿sí?"

"¡Inmediatamente!"

"Y ustedes dos, vuelvan a la cama, ahora"

"Está bien" era bonito estar en casa otra vez. Aunque tu madre te tratara como si todavía tuvieras diez años cuando en realidad tenías más de veinte.

-En otro tiempo-

Indra se despertó en el suelo de un bosque que nunca antes había visto. Se frotó la cabeza, que dolía bastante, y miró a su alrededor. No, definitivamente no había nada conocido para él allí. Siguió caminando hasta que localizó una aldea en la distancia. Hum, Futami-san siempre decía que no deberías entrar a un lugar desconocido sin prepararte. Y tenía razón, de repente estaba rodeado de hombres con máscaras y un tatuaje idéntico en sus brazos.

"Capitán, encontramos la fuente del chakra, es este chico" dijo uno de ellos, sorprendiendo al joven usuario de ninshu. No estaba acostumbrado a que alguien lo amenazara así. Además, desde que se enteraron de su sufrimiento, su padre y hermano se encargaron de destruir su armadura fría y tiránica, dejando sólo el interior ligeramente… bueno, muy sensible por el momento.

"Parecía normal, ¿qué piensas, Tora?" el que tenía la máscara de tigre hizo un signo con la mano. El Ootsutsuki retrocedió instintivamente, sabiendo el tipo de efectos que esos movimientos tenían. Él mismo los había inventado, después de todo.

"Tiene niveles de chakra que sólo un jounin experimentado tendría" comentó el sensor. "Debe ser un espía de otra aldea"

"¿Qué?" preguntó Indra.

"Vendrás con nosotros" dijo el capitán ANBU, agarrando al adolescente del brazo e intentando arrastrarlo. Fue bastante agresivo, por lo que el joven sufrió un flashback. De repente tenía diez años y Yami estaba diciendo esas mismas cosas, usando el mismo agarre para arrastrarlo a una habitación donde el resto de sus amigos estaban esperando. Entró en pánico y activó su Susanoo.

"¡Alejarse de mí!" él gritó aterrorizado, sin poder controlarse. Demonios, armadura, armadura… ¡no podía! "Asura... ¡Asura, ayúdame!" odiaba ser tan débil como para depender de los demás, pero ahora no estaba pensando con claridad. Su armadura se había ido y lo único que quedaba era una sensación de miedo abrumadora que le quitaba por completo el control de sus técnicas. "Papá... Papá, ¡ayúdame! ¡Ayúdame!"

"¡Retrocedan!" ordenó el líder del equipo y sus hombres obedecieron. Sacaron sus armas y usaron chakra para fortalecer sus espadas. "¡Es un Uchiha! ¿Cómo podría ser? solo hay cuatro en el mundo y todos ellos están aquí."

"No lo sé, pero… es inestable" dijo otro, activando el Byakugan para ver sus canales de chakra. La cantidad de energía que desprendía y el poco control que tenía se notaba. “Hay que atraparlo antes de que llegue al pueblo, eso sería un desastre"

"¿Podremos? Este Susanoo parece fuerte"

"Llama a Itachi Uchiha" el capitán le pidió al sensor y él asintió, comunicándose con el pueblo. Desde que su nombre fue limpiado, Itachi regresó al ANBU… aunque tuvo una seria degradación en cuanto a rango. Kisame se unió un poco renuente, logrando obtener los últimos retazos de información que ayudarían a la destrucción total de Akatsuki. Al tiburón, por su ayuda, se le permitió quedarse en el pueblo junto con su familia. Estaba contento... aunque Sasuke no lo estaba. Tratar de decapitara su cuñado se había vuelto el pasatiempo del adolescente. Y una vez a la semana, el pez y su comadreja iban al hospital para una revisión. Como ese día en particular.

"Te dije que no era nada, estoy mucho mejor ahora" dijo Itachi, aclarando su garganta. Ya no sentía húmeda todo el tiempo, lo que era un gran avance. "Y no deberíamos dejar solos a las niñas, están aprendiendo a gatear y..."

"Lo sé, es fácil para ellas hacer desastres" fueron interrumpidos por una voz en sus cabezas. Sin duda un Yamanaka transmitiéndoles una misión.

"Uchiha taicho, tenemos un problema en el bosque" el pelinegro frunció el ceño.

"¿Qué tipo de problema?"

"Hay un Uchiha y es inestable, nos atacó con el Susanoo" informó el sensor, gruñendo cuando se vio obligado a saltar en medio de la comunicación mente a mente, interrumpiéndola por unos segundos. "¡Por favor, venga rápido, está completamente loco!"

"Itachi..."

"Lo sé, Kisame" el menor se mordió el labio. El tiburón hizo un movimiento para agarrar su espada, que llevaba a todas partes. "No, no puedes venir. Ve a casa y cuida a las niñas. Dile a Sasuke y Obito lo que está sucediendo y envíalos allí en caso de que... haya más intrusos a la espera."

"Estás pensando en los hijos de Madara otra vez, ¿no?" preguntó el ex ninja de Kirigakure. Esos tres habían desaparecido hace mucho, pero su amante aún estaba sumamente preocupado por su paradero. "Mira, nadie tuvo la culpa de que Izuna nos la haya jugado..."

"Fue traído de vuelta por mí. Las chicas sólo querían ayudarme… yo sabía quién era, debería haberlo vigilado de cerca y esto probablemente no hubiera sucedido."

"Vamos, podría ser otro Uchiha..."

"¿Hay más?"

"Touchee" admitió el tiburón. "Solo sé precavido, ¿está bien?"

"Oh, lo haré" y se fue. Kisame hizo lo que le dijeron y tocó a la puerta de su cuñado hasta que el mocoso finalmente se dignó a abrir. Se miraron el uno al otro antes de que Sasuke se dignara a escucharlo. Tras una corta explicación, partió para ayudar a su hermano. Antes de hacer lo mismo en la casa de Obito, se cubrió los ojos. Después de superar su abusiva relación con Zetsu, el ninja enmascarado comenzó una con Kakashi. Ahora se encontraba mucho mejor. Lo único malo era que solían usar el tiempo que Rin pasaba en la Academia para hacer cosas no apropiadas para niños.

"¡Oye, ¿estás vestido?!" gritó.

"¿Qué?" preguntó el pelinegro, saliendo de la casa en ropa interior. Después de contarles la situación, Obito agarró su ropa y se vistió rápidamente, ordenando a Kakashi que se quedara en la casa. "Volveré pronto"

"¿Crees que sean los hijos de Madara?"

"Sin ninguna duda"

-En otra parte del bosque-

Asura despertó después de un aterrizaje particularmente duro, sosteniendo su cabeza. Miró a su alrededor en busca de cualquier señal de su hermano, tratando de localizarlo. El Ootsutsuki todavía recordaba la promesa que le había hecho a su padre, proteger a su hermano mayor con su vida mientras sanaba y no iba a fallar en eso. Comenzó a caminar, gritando el nombre de Indra, cuando...

"La otra fuente de chakra que percibimos viene de él" dijo un hombre con una máscara de porcelana. Asura se dio la vuelta y vio que estaba rodeado de personas con la misma indumentaria. "¿Qué hacemos, capitán?"

"Captúrenlo, de inmediato"

"¿Eh? No sé lo que crees que estás haciendo, pero..." retrocedió cuando se dio cuenta de que uno de ellos estaba haciendo señales con la mano para usar una técnica extraña. ¿Desde cuándo un jutsu puede herir a alguien? Él presenció la invención de esas cosas y no se usaban así. "Te metiste con el chico equivocado" rompió la cuerda con facilidad. "Ahora vas a probar mi futon"

"¡Tiene reservas de chakra de clase jounin o incluso más!" gritó uno, agazapándose. "¡Debe ser un espía!"

"¿Espía? ¿Qué es un espía?" preguntó el menor, sinceramente confundido. ¿A dónde diablos había ido a parar?

"También es un usuario de Fuuton, capitán"

"Retrocede, me ocuparé de él" dijo uno de ellos. El capitán ordenó que lo siguiera y Asura se puso en posición de combate. Si este tipo pensaba que podría vencer fácilmente a uno de los hijos del Rikkudo Sennin, entonces estaba muy equivocado. "Será mejor que no ofrezcas ninguna resistencia" hizo extrañas señales con las manos y luego gritó algo acerca de Mokuton... y un árbol con muchas ramas móviles se abalanzó sobre él. Asura luchó contra ellos… pero no era el torpe hermano pequeño por nada. Fue capturado bastante rápido.

"¡Déjame ir!" ordenó el cautivo.

"Excelente, Yamato-san, lo tenemos"

"Es mejor dejar de hablar y llevarlo a la aldea. Puede soltarse de un momento a otro" dijo el usuario de estilo madera. De esa manera, Asura fue arrastrado a la aldea.

Notas finales:

¿Qué les pareció? Los planes de un Zetsu se han ido al traste, Ashura e Indra han acabado muy adelante y el poderosísimo hermano mayor está pasando por una etapa de debilidad e inestabilidad que puede hacer volar todo por los aires. ¿Qué más puede salir mal? Review!!!


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