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Liberación por StormiKitsune

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Notas del fanfic:

Estor personajes pertenecen a Tite Kubo para su manga y anime Bleach.

La historia es de mi inspiración.

Notas del capitulo:

Siendo este mi primer fic espero que sea de su agrado y disfruten leyéndolo tanto como yo al escribirlo.

Cualquier pregunta o dudas con gusto las resolveré.

POV Shuuhei


Luchaba por respirar, los golpes recién recibidos en mis costillas se sentían demasiado dolorosos, creo que escuche algo crujir mientras los hombres de Tosen volvían a apresarme, era la quinta vez que intentaba escapar.


¿Nunca aprenderás verdad?... ¡Hey! ¡Maldita escoria! -Iba escupió mi rostro mientras yo lo ignoraba, estos hombres eran los betas bajo el mando de Tosen; mi alfa.


Seguí ignorando los gritos e insultos que lanzaban hacia mí, mientras me llevaban a rastras nuevamente hacia la casa alfa, Tosen estaba en el portal mirándonos mientras torcía su rostro en una mueca de disgusto.


Esta noche seria muy larga para mí.


Me llevaron hacia el sótano, aquel lugar de terror en que torturaban a los miembros rebeldes de la manada nunca debería haber entrado aquí, pero no podía evitarlo, a pesar de mi condición omega me negaba a permitir que ese hombre tomara todo de mí; aunque la marca de apareamiento en mi nuca dijera lo contrario.


Luchaba intentando escapar aun cuando mis manos ya estaban atadas a las gruesas cadenas en las paredes, ¿Por qué todo se volvió así? ¿Cuándo comenzó esta tortura?


Los hombres de Tosen se rieron de mi mientras daban paso a mi alfa hasta que este se situaba frente a mis ojos, intente bajar la mirada, pero su mano sujetando mi garganta lo impedía.


Te lo he advertido muchas veces Shuuhei -Tosen gruñe frente a mí, sus ojos toman ese tono de rojo que aterra mis sueños volviéndolos pesadillas, no debería temerle, no debería estar temblando cual hoja al viento, en estos momentos me odiaba por ser tan débil, me odiaba por ser omega- estarás encerrado aquí hasta que consigas darme un heredero. Luego de eso prescindiré de ti como el estorbo que eres. Pero no sin antes darte una lección que nunca olvidaras. -Solo recuerdo su sonrisa sádica mientras tomaba su tercera forma, aquellas que todos los humanos temían, hibrido entre hombre y lobo, una criatura de dos metros de altura, cubierta en el mas espeso pelaje azul oscuro, ojos rojos como el carmesí y aquellas garras y colmillos tan aterradores.


Mis gritos de dolor, al sentir aquellas zarpas surcar la piel de mi espalda, el liquido caliente corriendo sobre ella, el olor de la plata liquida siendo acercada a mi cuerpo, la sensación de lava liquida corriendo a través de mi espalda, mientras la plata penetraba en mis heridas entrando en mi sangre, haciéndome aullar de dolor y encorvarme suplicando que me matara.


Ese no era el final.


La risa de sus betas mientras Tosen me dejaba a su merced, 5 hombres turnándose para entrar en mi a la fuerza. Si, yo podría ser la perra del Alfa. pero solo era una incubadora para llevar su heredero, mas haya que eso solo era un agujero más que llenar.


Mientras mi celo no llegara no había peligro de quedar en estado, así que la tortura favorita de Tosen era dejarme como premio a los betas que lograron capturarme.


POV Tosen


Sali del sótano subiendo las escaleras hacia la planta principal, la mueca en mi rostro cambiando drásticamente al ver a mi esposa sentada junto a la ventana, sus ojos observándome mientras yo cerraba la puerta y caminaba hacia ella sentándome a su lado.


Faltan 4 días para su celo. luego de eso solo tendremos que esperar 2 meses y tendremos lo que necesitamos. -Shisami me observa y sonríe, aquella sonrisa no llega a sus ojos fríos, esos ojos oscuros tan idénticos a los de su hermano… Shuuhei.- Tendremos nuestro heredero y los ancianos no podrán negar su linaje.


Me levante dejando a mi esposa mientras ella seguía en su tarea de tejer, ere una mujer muy misteriosa, su padre antes de morir me hiso jurar que me casaría con ella haciéndome cargo de la manada, sin embargo ella era humana, los ancianos no permitirían que un hijo de nosotros si es que sobrevivía fuese el heredero de la manada, así fue como se nos ocurrió el plan, Shisami y Shuuhei eran como dos gotas de agua, solo que el tenia el factor de lobo omega, seria perfecto para nosotros ya que su padre lo había mantenido escondido por temor a que otros alfas quisieran llevarse a uno de los pocos lobos omegas nacidos, de ellos se decía que daban a luz a las crías mas fuertes, solo daban a luz lobos alfas, los mas grandes y temibles, los mejores alfas eran nacidos de ellos, además del poder que daban a su pareja alfa si estos eran vinculados juntos.


Manteníamos a Shuuhei encerrado, paro cada vez ese maldito lograba escapar, por más que manteníamos su cuerpo en su mínimo de energía, siempre que uno de los betas bajaba la guardia el escapaba de alguna u otra forma, pero eso ya no sería problema, no después de lo que le pasaría esta noche.


Me fui nuevamente al sótano después de darme una ducha y cenar un poco, cuando entré los betas se vestían mientras Shuuhei yacía en el suelo pareciendo mas un muñeco sin vida.


¡Tsk! Idiotas, les deje claro que no se pasaran de la mano con el -con el pie lo hice rodar un poco y escuche un gemido dolorido, suspire- bien. al menos no está muerto. llévenlo a la celda y suban a cenar, hoy es la carrera de la manada y todos están ansiosos de iniciarla.


Me fui después de dejarles esa orden, ellos subieron tras de mi luego de cumplirla y nos largamos para iniciar la carrera.


A decir verdad, no quería acostarme con Shuuhei, podía ser muy parecido a Shisami pero no me iban los hombres, esperaba muy al fondo de mi ser que falleciera, seria lo mejor para él y para mí.


POV Shuuhei


No podía ver nada a través de mis ojos hinchados, luego de violarme entre todos me dieron una paliza dejándome deshecho, me sentía como un despojo, mal herido, más trecho.


Trate de moverme en la pequeña celda en la que estaba, pero me faltaba la energía, ni siquiera respirar era fácil, a cada succión sentía que cuchillos raspaban mi ser.


Me quede en silencio cuando escuche un ruido en el sótano, susurros bajos y pequeños sonidos de movimiento, trate de olfatear al intruso, pero no pude oler nada, pensé que estaba loco e intente moverme hasta que una voz me detuvo donde estaba. - Si fuera tu guardaría mi energía para sanarme. ¿Por qué no cambias?


Sin poder ver y oler me sentía indefenso, pero la sensación que me llegaba junto a esa voz era de paz y seguridad.


¿Co..como sabes de mí? -arrastre sin poder creerme que alguien estuviera aquí por un buen motivo, la respuesta que recibí fue una risa suave y sentí como una manta era tirada sobre mí.


No te muevas mientras trabajo en esto -me que de muy quieto escuchando como el hierro de los barrotes crujía, que estaba haciendo este tipo, sentí como la celda se estremecía y al final con un quejido fuerte algo fue arrancado de su lugar, brazos fuertes se enroscaron alrededor de mí, un cuerpo cálido cubriendo mi cuerpo maltratado del frio del lugar, la manta que me cubría me rodeo por completo mientras aquel aliento cálido rosaba un lado de mi oreja- no hagas ruido mientras te sacamos de aquí…


Cuando escuche esas palabras mi cuerpo no pudo más, toda la adrenalina me abandono y caí inconsciente si fuerza, solo rezando porque esto no fuese una pesadilla al final, seria muy cruel soñar que era rescatado solo para despertar dentro de ese asqueroso lugar nuevamente, lo único que podía hacer por ahora era confiar en mi salvador anónimo.


Desperté, pero no podía abrir mis ojos, era consciente de mi entorno, la temperatura era agradable, el olor a flores silvestres llenaba mis sentidos, también olía a tierra húmeda y cuero nuevo, con un poco de menta, no entendía que estaba pasando, intente moverme, el lugar donde estaba acostado era muy suave para ser el piso de mi vieja celda, intente recordar cómo había llegado aquí pero una caricia y un suave tarareo volvieron a sumirme en la oscuridad, pero mi corazón se sentía mas tranquilo de sentir esa presencia a mi lado otra vez.


Cada vez que despertaba pasaba mas y mas tiempo consciente aunque no podía abrir mis ojos, hasta una mañana, solo fue por unos segundos pero lo que vi me sorprendió, a mi lado, en la cama había un enorme cuerpo peludo, el mas hermoso y enorme de los lobos dormía a mi lado como protegiéndome, sonreí y no pude permanecer despierto por más tiempo, no sabía quién era, lo único que sabia de el era que su olor me recordaba al hogar y la seguridad.

Notas finales:

¡Gracias!


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