Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Fénix de Porcelana [Xiaolin Showdown - Chack] por 0kami

[Reviews - 0]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Esta historia es principalmente CHACK, es decir, relación entre Jack Spicer y Chase Young. Si este tipo de relación no te gusta, por favor no sigas con la lectura.

Notas del capitulo:

Disclaimer

No tengo derechos sobre ninguno de los personajes de Xiaolin Showdown, todos son propiedad de Christy Hui y Cartoon Network.

Capítulo 1: Cenizas

Destrozado. Así es como se sentía Jack Spicer tras cometer el peor error de su corta vida. A pesar de haber dedicado tanto tiempo a la búsqueda de los Shen Gong Wu, esforzándose por ser el mejor y soportando el sufrimiento en cada combate, al final sólo había recibido humillaciones.

 

El único Wu que quedaba en su poder era el Mono Bastón, y aunque este objeto lo bendecía con una buena habilidad física y eran totalmente compatibles, si lo comparaba con otros Wus, Jack Spicer no tenía nada más que desprecios y burlas, tanto de sus enemigos como de sus ocasionales camaradas.

 

Sólo camaradas en el crimen, porque no se podía decir que Jack Spicer tuviera amigos. Desde mucho antes de conocer a Wuya, él siempre fue un chico solitario y que lo único que Jack quería era ser reconocido y sus deseos de lograr aquella meta se incrementaron al conocer a Chase Young.

 

Pero nada salió como él esperaba. No pasaron muchas batallas para que Chase Young lo despreciara o tuviera un trato brusco con él. Eso había dolido. Que el hombre que admiraba lo mirara como un gusano producía en el un dolor demasiado grande, porque esa admiración se transformó en cariño y finalmente terminó en amor. 

 

En un amor que claramente no sería correspondido por el gran señor del mal, pero él fue demasiado ingenuo y testarudo para verlo.

 

Me gustas Chase —las palabras salieron de su boca con total seguridad una vez estuvo frente al pelinegro. —Juntos podríamos dominar el mundo ¡Seríamos imparables!

 

Patético Spicer —Chase ni siquiera perdió el tiempo en mirar al adolescente.

 

¿Qué? —Jack tuvo que parpadear un par de veces para comprender la fría respuesta de Chase.

 

No eres más que un miserable gusano que juega a ser un «Genio del mal» … pero para mí sólo eres un chiste.

 

Chase… yo… —por muy estúpido que fuera, Jack quería seguir intentándolo, pero el guerrero frente a él levantó su mano para indicar que guardara silencio.

 

Chase se giró con lentitud para enfrentar a Jack, quien tembló ligeramente cuando la mirada del mayor chocó con la suya.

 

No vuelvas a cruzarte en mi camino.

 

 ----

Esas palabras fueron la corona de su miseria. Sus sueños y su corazón quedaron hechos mil pedazos y él no tuvo otra opción que tragarse las lágrimas para después desaparecer de la presencia de Chase de la forma más digna que pudo.

 

 

No transcurrió mucho tiempo para que Jack regresara a su casa y terminara dirigiéndose a su habitación. Antes se hubiera dirigido a su guarida del mal, pero en aquel momento ese era el último lugar donde quería estar.

 

Se encerró con llave en su vieja habitación, la que le pareció estar perdida en el tiempo. Nada había cambiado; cada cosa o mueble en la habitación seguía exactamente como él lo recordaba.

 

La habitación estaba totalmente oscura, y no sólo por las pesadas cortinas negras que cubrían las ventanas. Las paredes de un rojo oscuro, estaban cubiertas de recortes de noticias sobre robótica, algunos posters de bandas de rock gótico y su solitaria cama al centro del cuarto estaba perfectamente estirada.

 

Con pasos lentos se dirigió a su ropero y pudo ver que todo estaba en impecable orden, lo que no coincidía con la apariencia desordenada de su laboratorio, ¿Tanto había cambiado, sólo para recibir algo de aceptación?

 

La verdad es que los últimos años había usado muy pocas veces su habitación, ya que se había refugiado durante mucho tiempo en su laboratorio, incluso para dormir y ahora que estaba ahí se sentía como un extraño en aquel lugar.

 

Extenuado, se lanzó de espalda a la cama, dirigiendo su mirada a algún punto fijo en el techo y se quedó por un momento así, tratando de decidir que iba a hacer con su vida. Podía fingir que jamás se había confesado, y seguir buscando los Shen Gong Wu con la ayuda de sus fieles robots. Eso estaría bien, construir robots era su talento más grande, ya que según él y cualquiera con la suficiente materia gris sabría que Jack Spicer era el mejor en robótica.

 

Pero estaba Chase. ¿Cómo podría verlo a la cara después de ser rechazado por éste? ¿Comentaría Chase lo ocurrido con otros? No. Él no era así, seguramente lo ignoraría de manera contundente, pero Jack quería conseguir su sueño y ahora necesitaba un nuevo plan… podía tomarse un tiempo de tanta locura y volver cuando estuviera con su alma sana.

 

Con renovadas energías, se levantó de la cama y avanzó a grandes zancadas hasta la ventana, donde empleó toda su fuerza para abrir las largas cortinas, pero lo único que consiguió fue que al moverlas una considerable cantidad de polvo cayera sobre él.

 

Jack terminó tosiendo como un loco y a restregarse los ojos desesperadamente para después buscar apoyo en su escritorio, pero al hacerlo derribó una considerable montaña de papeles que estaban en una esquina del mueble.

 

Cuando Jack logró recomponerse y abrir sus lastimados ojos, observó las cartas que estaban en el piso. Cada una de ellas eran cartas dirigidas a él, y en la mayoría de los casos, tanto el mensaje como el autor era el mismo.

 

“Jack Spicer ven al lado del bien ¡Aún no es tarde!”

 

Ese era el mensaje que Omi, el monje del agua y uno de sus más antiguos enemigos le daba. ¿Acaso la pequeña bola de queso seguía preocupándose por él? No sabía si sentirse alegre o avergonzado por aquel trato. Después de dar un lento suspiro, el joven pelirrojo comenzó a tomar uno por uno los papeles para colocarlos en su lugar y no se detuvo hasta que descubrió que había tres sobres sellados.

 

Una era de su prima Megan, otra de Katnappé, y la última era un sobre que guardaba un pesado contenido y que provenía desde Japón. Esto sorprendió un poco al pelirrojo y provocó la suficiente curiosidad para abrirla. En su interior se encontraba una delgada pantalla táctil con el siguiente mensaje:

 

Estimado Señor Jack Spicer:

 

Tenemos el placer de informarle de que, gracias a su desempeño en el campo de la robótica, ha sido seleccionado para participar en la categoría de genios adolescente en el evento «Robocup 3000» patrocinado por la Universidad de Tokio. La reunión tiene como objetivo potenciar el desarrollo de nuevos talentos y la muestra de tecnología. Puede asegurar su asistencia presionando su dedo índice en el círculo de la parte inferior de este dispositivo. Le pedimos que confirme su participación antes del primero de marzo. La localización, así como las condiciones del concurso será revelada después de que mande su respuesta.

 

Sin otro particular y esperando de que tome la decisión que más le favorezca se despide atentamente,

Komiyama Hiroshi

 

Rector de la Universidad de Tokio

 

 

—… ¿Robocup 3000?... —no lo podía creer. —¡Después de diez años desde el último evento han decidido volver a realizarla! —Jack sentía como un pequeño rayo de luz aparecía, una oportunidad para demostrar sus habilidades.

 

Todavía tenía tiempo para decidir si iba o no, pero ya que ahora estaba desocupado… Jack hizo lo indicado en la pantalla. Al colocar su dedo índice en el círculo, el mensaje anterior fue inmediatamente cambiado por el logo de la universidad en el centro, y a continuación la robótica voz de un hombre anunció:

 

—Asistencia del participante Jack Spicer confirmada. Por favor, espere fuera de su casa mañana a las 08:00 hrs. Sea puntual.

 

—¿Eso es todo?

 

—Si, eso es todo. — fue la respuesta final de la voz.

 

Jack, con recelo, comenzó a observar el aparato por si había alguna cámara o micrófono, pero no vio nada. Sintió curiosidad, y quiso desarmarlo, pero ante el temor de ser descalificado por dicha acción, se contuvo. No lo arruinaría esta vez, era la forma perfecta de resurgir de las cenizas, y demostrarles a todos, en especial a Chase, que Jack Spicer era un verdadero genio adolescente del mal.

  ----

 Sin perder el tiempo, el joven se dirigió a su laboratorio secreto, pero antes de llegar pudo escuchar el sonido de cubiertos chocando con platos en el gran comedor de la mansión. A lo largo de la elegante mesa, Jack observó cómo sus padres cenaban en absoluto silencio y elegancia, ignorándose mutuamente como siempre lo hacían desde que él tenía memoria.

 

Le parecía una escena cómica. Su padre, era un hombre alto de cabellos ya blancos, de mirada severa y autoritaria, digna de un empresario que vivía hundiendo a sus pares. Su único fin era apoderarse de las empresas a las que había puesto en su mira. Un imperio construido sobre los cadáveres de sus víctimas.

 

Por el contrario, su madre no destacaba por su altura, pero si por su largo y hermoso cabello rojo. Era perfecta, pero sólo una fachada, ya que todos sabían que aprovechando el estatus de su esposo, derrochaba grandes cantidades de dinero y organizaba monumentales fiestas, donde perdía totalmente su máscara de rectitud, y se mostraba como la mujer lujuriosa que era.

 

Por un momento, pensó que podía despedirse de ellos aprovechando que estaban ahí. Pero sería una pérdida de tiempo y un estúpido teatro familiar.

 

Retomó su camino hacía su refugio para seleccionar el material, las herramientas y los diseños que podía usar en la competencia. Era lo más importante, lo que tenía que organizar personalmente. Sus maletas con sus pertenencias quedaron a cargo de algunos de sus Jack-Bots, aquellos que todavía tenían la suerte de estar ensamblados tras su último duelo.

 

Cuando ya estaba todo listo, se sentó en las escaleras del vestíbulo de la mansión acompañado de varias maletas y dos de sus robots. No pensaba usarlos en el concurso, pero necesitaba ayuda para el desarrollo del mejor robot que había hecho.

 

Ya lo había decidido, esperaría ahí hasta que fuera la hora para ser recogido. Y justo como se había informado en el dispositivo, a las ocho de la mañana el sonido de un auto en la entrada le anunció que era el momento de su partida. Spicer no miró a atrás y se marchó del lugar al que no podía llamar hogar.

 

Una parte de Jack Spicer sintió nervios. Sabía que era talentoso, consideraba que su triunfo estaba asegurado, eso no era lo que le preocupaba. Sentía una incomodidad y un gran peso en su estómago. No podía evitar pensar en Chase y en sus hirientes palabras. Había sido rechazado y humillado, pero seguía amándolo e idolatrándolo. Era algo que ya no podía negar.

----

 A las ocho y media de la mañana el pelirrojo llegó al aeropuerto y abordó un avión sin pasar por el problemático sistema de seguridad, ya que la universidad tenía un transporte privado para él. En menos de quince minutos ya estaba sentado en el avión que lo llevaría a su glorioso destino.

 

Jack cerró sus ojos preparándose para dormir y no mostró gesto alguno cuando el avión dio una pequeña sacudida antes de comenzar a elevarse. El joven albino se sumergió en sus sueños de gloria donde podía ver a Chase Young viéndolo con adoración. Al menos, en sus fantasías podía ver aquella mirada, que sin importar cuanto lo intentara, jamás podría olvidar.

 

Notas finales:

Notas Finales:

 

Está bien. He cambiado algunas cosas del fic, además de corregir errores que en verdad eran demasiado horribles (y espero que no haya quedado ninguno). Siento nostalgia al volver a leerlo y escribirlo, fue mi primer slash y de una pareja que me encanta.

 

He desarrollado un poco más la parte de la declaración de Spicer, tanto en sentimientos como en dialogo. Además, he eliminado la escena de la conversación entre Jack y sus padres, ya que no considero que ayude mucho con la historia.

 

Por último, el cambio más importante que realice es el motivo del viaje de Jack. Las consecuencias seguirán siendo las mismas, pero he querido desarrollar la habilidad de Jack con los robots. Algo que siendo sincera, no profundice lo suficiente.

 

Gracias por leer. Atentamente Lacrimosa Azul.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).