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Cambios por JennVilla

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Notas del fanfic:

Adaptación y traducción de "Changes" por Rosy Clozy en Youtube.

Notas del capitulo:

¡Hola! Regreso con un nuevo fanfic <3

¡Espero les guste!

La mañana soleada es un buen aliciente para que Harry se sienta de buen humor. Y también está el hecho de que haya regresado a Hogwarts a cursar su séptimo año con todas las de la ley.

Volver a su hogar, después de todo ese tiempo lleno de persecuciones, sufrimientos y muertes, es una de las mejores cosas que le puedan suceder actualmente al Héroe del Mundo Mágico, y él mismo sabe que se lo merece. Se merece un poco de descanso y paz. Él y sus amigos.

—Es bueno estar de vuelta. —dice Harry para sí mismo mientras cierra los ojos y deja que sus pulmones se llenen del aire puro y renovado de uno de los florecidos jardines de Hogwarts.

— ¡Hey, compañero!

Es Ron.

Harry sonríe y da la vuelta para saludar a su amigo.

—Oh, hola Ron.

— ¿Por qué huiste hace un rato?

—Lo siento, sólo quería dar un paseo. Ver Hogwarts de nuevo. Además, no me siento muy cómodo si estoy desayunando y hay gente observándome todo el tiempo.

—Bueno, no puedes culparles. Ellos nos consideran "Héroes de Guerra", últimamente. —dice Ron con una pequeña sonrisa.

—La atención debería disminuir con el tiempo —Harry suspira—. Espero que este año sea un año pacífico para todos nosotros.

—Sí... Aun así, el verano pasó tan rápido. —se lamenta Ron.

Harry no puede evitar sonreír con picardía.

—Debe ser agradable el tener una novia para que el tiempo se haga más fácil de soportar.

—Sí, sí —Ron se sonroja—. Pero tú y Ginny-

—Ron, ya hemos tenido esta conversación. —dice Harry con hastío.

— ¡Está bien! Lo dejaré por la paz entonces.

Las campanas suenan anunciando el inicio de las clases; una agitada y ofuscada Hermione viene corriendo hacia ellos.

— ¡Chicos! ¡Llegaremos tarde a pociones!

Ron y Harry reaccionan y se apresuran a correr detrás de Hermione. No es bueno iniciar el año llegando tarde a clases.

Hermione sonríe discretamente mientras ve como sus amigos le sobrepasan mientras corren.

—Algunas cosas nunca cambian.


Horace Slughorn ya está en el aula y todos los que han regresado para terminar sus estudios ya están en distintas mesas de trabajo.

—Lo sentimos mucho, profesor —jadea Harry. Ron llega junto a él y se apoya en su hombro para tomar aire—. Por el retraso.

— ¡Harry, muchacho! —canturrea Slughorn— Ah, Ron y Hermione también... ¡Qué bueno verles aquí! Tomen asiento, chicos. Justo ahora nos estamos familiarizando con el material de estudio para este semestre.

En realidad son pocos los estudiantes para este año, y sólo un puñado de ellos ha elegido cursar pociones. Es raro ver el aula de pociones así, piensa Harry observando lugares vacíos donde debería estar mesas, calderos y estudiantes.

—Sólo hay dos puestos libres junto a Padma. —murmura Hermione.

Padma Patil está en una de la mesas de adelante y es la única que tiene asientos libres en su mesa de trabajo. Bueno, no la única. Draco Malfoy, casi en la última fila de las mesas, también tiene un puesto libre a su lado.

—No se preocupen —dice Harry tranquilamente—. Siéntense ustedes dos juntos.

Hermione y Ron no dudan en aceptar la oferta y se acomodan junto a Padma luego de saludarle.

Harry se encoge de hombros y se dirige al puesto libre que está junto a Draco. Ron les da una breve mirada. Pobre Harry, piensa, primer día de clases y tiene que sentarse junto a Malfoy. Sólo porque está con su novia, decide no ayudar a Harry con la compañía indeseada. Bueno, y también porque se trata de ese Slytherin en particular; Ron cree que Harry sabrá lidiar mejor con el hurón que lo que pueda lograr él mismo.

—Muy bien, entonces. ¿En qué íbamos? —dice el profesor— Ah, sí...

Slughorn reinicia la clase y Harry se concentra en sus palabras. Debe intentar al menos poner un poco de su parte si es que quiere sacar buenas notas en pociones. Hermione ya había hablado sobre ello con Harry y Ron. Simplemente, ellos tienen que esforzarse esta vez.

Draco, a un lado del Niño Dorado, no puede evitar sentirse incómodo. Harry le da una breve mirada y Draco suelta:

— ¿Pasa algo, Potter?

—No. Eh, yo... —él titubea y Draco sonríe con sorna.

—Tan elocuente como siempre, ¿no?

El profesor llama la atención de todos, antes de que Harry pueda pensar en algo para contestar a la pulla de Draco.

—Así que el proyecto de este semestre, claramente necesitará que se trabaje en parejas.

Toda el aula parece despertar pues cada uno empieza a gritar en busca de compañero:

— ¡Seamus! ¡Hazte conmigo!

— ¡Ernie, no me dejes sola!

— ¡Yo estaré con Hermione o Harry! —ruge Ron, asustando a Harry— ¡Ni se atrevan a pedírselos!

—Cálmense, ahora mismo —dice Slughorn en voz alta y todos se detienen mirando atentamente al profesor—. Antes de que escojan pareja, escuchen mis instrucciones. Para promover la unidad entre las Casas, la profesora Mcgonagall ha pedido que cualquier proyecto, de cualquier materia que requiera de trabajo en equipo, se haga entre personas de distintas Casas. Eso significa que ustedes deben hacer equipo con alguien que no sea de su Casa.

Ron y Neville parecen querer morirse. Hermione, aunque no muy contenta con la disposición de las cosas, se apresta a trabajar con cualquiera. No puede permitirse una mala nota, de todos modos.

Harry, sin saber qué le impulsa a decir lo siguiente, se pone de pie:

—Yo haré equipo con Malfoy.

Ron casi se cae de su silla y Slughorn sonríe con simpatía.

—Muy bien Harry. Entonces, los demás podemos ir empezando con hacer equipo con alguien más, ¿no? Quiero a cada equipo en la misma mesa, por favor.

Cada uno se dispone entonces a buscar compañero y Draco mira sospechosamente a Harry.

—Puedo ver a lo que estás jugando, Potter. Eso de escoger al mejor alumno en pociones para hacer equipo con este, es algo muy ingenioso.

Harry le sonríe y Draco no puede evitar observarle detalladamente.

—Bueno, no estaba pensando en eso exactamente, pero de todas maneras, esa es toda una ventaja para mí.

Draco suspira con fastidio y mira hacia el frente.

—Sólo no me contagies tu incompetencia. No quiero tener malas notas por tu culpa.

Harry pone los ojos en blanco y murmura un "idiota" para luego suspirar y estirarse en su silla.

—Mira Malfoy, sé que nosotros nunca hemos estado en los mejores términos-

—Eres muy lento en la comprensión de ciertas cosas, Potter.

—Pero —Harry ignora el comentario—, hemos pasado por suficientes cosas, y estoy muy cansado como para lidiar con estúpidas rivalidades ahora mismo. ¿Qué dices de tratar de dejar eso atrás, y empezar de nuevo?

Harry ha extendido su mano hacia Draco en una muda oferta de reconciliación, aguardando casi con esperanza que Draco se la acepte.

Bueno, no todo es fácil con Draco Malfoy.

—Creo que puedo darme cuenta yo solo de cuáles son los indebidos, gracias. —dice Draco con petulancia sin aceptar la mano de Harry, el cual tiene la boca abierta por la sorpresa. Draco sonríe y le guiña un ojo provocando una estruendosa carcajada en el Gryffindor.

Ron, unos puestos más adelante, mira sorprendido la escena. Gira un poco en su asiento y le dice a Hermione:

—Mione, ¿qué crees que le pasa a Harry? ¡Yo creo que Malfoy le está haciendo algo!

Hermione desde siempre ha sido una bruja inteligente, a ella no se le pasa nada desapercibido. Observa a Draco y Harry -que aún están compartiendo una sonrisa-, y sonríe.

—Tal vez. —dice simplemente, sin responder a la mirada interrogativa de su novio.

—Chicos —Slughorn vuelve a hablar después de un momento—. Para este proyecto, deben preparar Veritaserum. ¿Alguien nos puede recordar los efectos de esta poción?

Hermione ya tiene el brazo levantado y el profesor le concede la palabra.

Veritaserum es un potente suero de la verdad, el cual induce al que lo toma, a contar todos sus secretos.

—Muy bien, señorita Granger. Esta requiere de mucha investigación y preparación, así que por favor abran sus libros de "Elaboración de pociones avanzadas" en la página 235.


—Este proyecto requerirá que todos ustedes lleven a cabo investigaciones fuera de la clase. Espero que todos los equipos estén preparados para las próximas semanas. —dice Slughorn después de una hora de explicaciones y lectura sobre el Veritaserum.

Ron gime en su puesto y Hermione sonríe emocionada por la nueva e interesante tarea. Harry no es que tenga muchas ilusiones con el nuevo proyecto, pero con la compañía de Draco, sabe que las cosas serán un poco fáciles.

— ¿Mi habitación o la tuya? —pregunta sin darse cuenta de que Draco casi se ahoga con su propia saliva por la inesperada pregunta.

— ¿Qué? —pregunta estúpidamente el Slytherin.

Harry se da cuenta de lo que acaba de decir y se sonroja furiosamente y se apresura en aclarar:

—Quiero decir... para nuestra investigación... ¡Pa-para el proyecto!

Draco decide fingir una sonrisa presuntuosa antes de ponerse en evidencia.

—Aunque tu invitación me halaga, Potter, pienso que la biblioteca es un buen lugar para lo que nos concierne.

—Sí... muy bien.

—Estoy libre los miércoles y los viernes. Bueno, si es que acaso tú estés libre también, y eso no interfiera con tus labores de Héroe.

—Los miércoles están bien para mí —dice Harry—. ¿Nos vemos entonces allí después del almuerzo?

Draco no contesta por un momento, pero luego, con indiferencia, dice:

—Lo que sea, Potter.

La clase termina y Draco se apresura en salir del aula. Ron y Hermione se reúnen con Harry.

—Harry... ¿Qué demonios te pasó ahora? —pregunta Ron— ¿Hacer equipo con Malfoy? ¿En serio? —exclama con confusión.

— ¿Y qué? Él no es peligroso, Ron. Es hora de dejar algunas cosas atrás, ¿no?

— ¡Estamos hablando de Malfoy! ¡Un inmenso cabrón, un mortífago! ¡Él nunca cambiará!

—De todas maneras, lo único que le importa ahora es su estudio. No tengo de qué preocuparme. —dice Harry con simpleza.

—Lo que tú digas, compañero —Ron se rinde—. Entonces dile adiós a ese año pacífico que tanto querías.

—Oh basta ustedes dos —dice Hermione exasperada—. ¡Es apenas nuestro primer día! Mejor salgamos al patio y disfrutemos del sol.

Harry y Ron olvidan rápidamente su discusión anterior y asienten para luego salir del aula tras Hermione. Cerca de allí, Draco se aleja por el pasillo y Harry le observa por un momento.

— ¿Vienes? —urge Ron a su lado.

—Sí. —dice Harry y sigue a sus amigos.

Antes de que Draco doble la esquina del pasillo, gira y mira hacia la figura cada vez más lejana de Harry. Sonríe un poco y retoma su camino.


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