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A lo Romeo y Julieta por Tsunekosawada

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Notas del fanfic:

Hola ¿como han estado? llevo tiempo sin escribir, espero no estar oxidada jajaja

Notas del capitulo:

Pues aqui la nueva historia, la verdad espero que les guste, en esta ocasion trate de hacer a un Sasuke menos... ¿Idiota? 

Mikoto y Kushina se conocían desde siempre, sin embargo cuando se casaron tuvieron que distanciarse un poco por la constante rivalidad que existía entre sus esposo, pero cuando ellos no estaban siempre podía hacer una pequeña escapadita para salir de compras, por esa gran amistad que se tenían cuando ambas tuvieron hijos decidieron que sus hijos fueran tan amigos como ellas, y que quizá de esa forma la absurda rivalidad de sus esposos acabara.


Con eso en mente habían inscrito a sus hijos en el mismo colegio y en el mismo salón, además de que gracias a que sus amados esposos siempre estaban ocupados podían llevar a sus hijos al parque a jugar juntos.


¿Cuántos años habían pasado de aquello? No sabían pero sus hijos ya eran unos adultos, Uchiha Itachi ya tenía 21 años y estaba estudiando administración de empresas, Namikaze Deidara era mayor que el azabache por unos meses así que ya tenía 22 y estudiaba artes plásticas, y aunque ambos sabían de los problemas que tenían sus padres, eso no le importaba y según sus madres eran muy buenos amigos, sin embargo la verdad era que ya llevaban unos meses saliendo.


Por otro lado estaban Uchiha Sasuke y Namikaze Naruto, ambos de 16 años y estudiando la preparatoria juntos, y aunque hubo un tiempo en el que Sasuke se enteró de lo que su madre había hecho a espaldas de su padre, y por ello decidió no hablar unos meses con Naruto, sin embargo el rubio era tan insistente, que quizá no estaría del todo mal desobedecer las órdenes de su padre, ojos que no ven corazón que no siente pensaba.


Y ahí estaban otro día más de escuela, como siempre Naruto sentado detrás del azabache para poder platicar mejor.


- Naruto – Murmuro una chica de ojos color perla, Hinata, que se había vuelto una gran amiga de ambos - ¿hiciste la tarea?


- Claro que la hizo, Hinata... el señorito no me dejo irme de la cafetería ayer hasta que no lo ayudara a acabarla, pero ya sabes el dobe es algo torpe, así que al final se la termine pasando.


- Pues gracias por exhibirme teme ¿te imaginas hubiera entrado el maestro y nos escuchaba? – se cruzó de brazos indignado el rubio.


- Pues simplemente no se las aceptaba y los castigaba, que fastidio – murmuro Shikamaru otro de sus amigos.


De repente todos los del salón se fueron a sentar cuando llego el profesor.


- Buenos días jóvenes – murmuro un hombre de cabello gris entrando al salón – lamento llegar tarde, tuve que pasar a la dirección


- Siempre dice eso – murmuro por lo bajo el rubio.


- cállate, te van a sacar del salón – respondió bajo el Uchiha.


- Bueno, como decía y ya que al parecer sus compañeros terminaron de conversar... Pase a la dirección, porque el día de hoy se integrara a nuestro salón una nueva alumna, por favor pase señorita Haruno.


- Gracias señor Kakashi – murmuro sonriente la chica – Hola, buen día... me llamo Haruno Sakura, espero llevarme bien con todos ustedes – al decir esto fijo su mirada en el azabache.


- Bueno señorita, tome lugar junto a... Shikamaru, es el más aplicado del salón aunque no parezca, pídale los apuntes a él.


La chica suspiro un poco decepcionada del lugar en el que la mandaron a sentar, pero después buscaría la manera de acercarse al chico, después de todo él no lo sabía aun, pero ella era su prometida.


Sakura era la hija del dueño de otra empresa, la cual estaba pasando un mal momento, por ello su padre tenía que desviar fondos y reducir personal para poder seguir dándole a su familia la vida de lujos con la que estaban acostumbrados, maquillando unos informes y balances de presupuesto había logrado llegar con Fugaku y convencerlo de que sería maravilloso que sus empresas se fusionaran comprometiendo a sus hijos, esa era la forma más rápida de acabar con sus problemas económicos, y para ello cambio a Sakura de escuela.


Sakura estaba feliz, durante todas las clases no apartaba la vista de Sasuke, su futuro esposo era guapo, inteligente y millonario, claro que haría que se enamore de ella, apenas solo el timbre del descanso se levantó para acercarse al azabache.


- Disculpa – murmuro sonrojada poniéndose frente a Sasuke – yo... bueno, me preguntaba si podrías prestarme tus apuntes...


- Pues, si mi memoria no me falla, Kakashi fue claro, te dijo que se lo pidieras a Shikamaru... vamos Naruto


- Sasuke, no seas grosero – suspiro viendo a su amigo – si quieres tomas mis apuntes, tengo lo mismo que Sasuke... - sonrió para luego salir del salón con el azabache


- ¿Naruto? Ese no es... - se quedó pensado, pues según todo el mundo las familias Uchiha y Namikaze no podían verse ni en pintura por lo que eso le llamaba la atención ¿Qué hacia Sasuke con Naruto?


El resto del día paso normal para todos, con la diferencia que Sakura se acercó a Sasuke otras dos veces, siendo ignorada de la misma forma.


Naruto y Sasuke esperaban como siempre que Itachi y Deidara fueran por ellos, pues tenían la costumbre de ir a comer algo juntos a alguna cafetería después de clases, pero no sabían que ese día en particular Sakura los miraba de lejos grabando todo, pues lo necesitaría para después.


Los días pasaban y era lo mismo con Sakura, sin embargo hasta Naruto comenzaba a enojarse, de verdad le molestaba que la chica siempre se le insinuara a Sasuke, se había vuelto insoportable, en una ocasión incluso se auto invito a pasar el receso con ellos sentándose en medio de ambos.


- No la soporto – murmuro ocultándose de la chica – es muy molesta


- Pero si el que dijo que había que ser amables con ella eras tú – comento burlándose el azabache


- Lo sé, pero ya tenemos suficiente con ocultarnos de nuestros padres, como para que ahora tengamos que escondernos de ella también... además solo quiere acaparar tu atención.


- Ah, o sea que te enoja que no quiera tu atención


- No es eso Sasuke, olvídalo no entiendes – frunció un poco el ceño apartando la mirada.


- ¿no? Entonces ¿Qué te molesta?


- Creí que eras más inteligente, ¿ves como si eres un idiota? Luego dices que el despistado soy yo... pero olvídalo, no importa


- Naruto... - suspiro un poco tomándole la mano – mírame... yo quizá pienso en algo, pero no lo sabré hasta que no me digas si es o no...


- ¿y que podría ser lo que el señor Uchiha piensa? – murmuro mientras volteaba a verlo.


- Eres un payaso – sonrió tomándolo del rostro notando el sonrojo de su amigo – en que quizá... yo te gusto como tú me gustas


- ¿gustarme tu? – Menciono mientras pasaba sus brazos por el cuello de este – tienes el ego muy elevado...


- Entonces... vamos a comprobarlo – murmuro antes de unir sus labios con los del rubio quien sin pensarlo dos veces correspondió el gesto, con el cual quedo más que claro lo que sentían el uno por el otro y por el cual habían esperado mucho tiempo.


- Te amo – mencionaron al unísono apenas se separaron, sonriendo y volviendo a besarse, sin saber que la de cabellos rosa los había encontrado y les había tomado una fotografía marchándose indignada, quizá ya era hora de hablar con su suegro para que la presentarán formalmente.


Y así fue, apenas terminaron las clases salió del salón para ir a la empresa de su suegro y darle toda la evidencia que había conseguido del aparente noviazgo de Sasuke y Naruto.


Para Sasuke el día había transcurrido de maravilla, el chico que había Sido su mejor amigo ahora era su novio, y ya se lo habían contado a sus hermanos solo faltaba contarle a su madre, quien seguramente saltaría de alegría. Entro a su casa dejando sus cosas a un lado con la intención de ir con su madre sorprendiéndose al ver a su padre en la sala leyendo el periódico.


-papá...


-valla que ocasión tan especial, padre está en casa - soltó Itachi entrando detrás de su hermano- iré a decirle a mamá que llegamos


- deja el sarcasmo Itachi, su madre no está - cerro su periódico viendo a sus hijos con bastante enojo - ¿Acaso soy una burla para ustedes? ¿Mis órdenes no son claras?


- papá... no entiendo a qué te refieres - menciono el menor


- ¿Te di permiso para hablar, Sasuke? No, bueno aunque te dé o no permiso no harás caso...


-Papá, estoy de acuerdo con Sasuke, no entiendo de que nos estás hablando - Itachi se puso delante de su hermano - si los reclamas algo se claro.


- ¿claro? ¿Más de lo que ya he Sido? Lo que ocurre es que tú hermano al parecer no entiende las órdenes que le doy - golpeó la mesa con notable enojo - tienen prohibido hablar con la familia Namikaze! Y el no solo habla con su hijo ¡lo besa!


Sasuke se puso pálido ¿Cómo se había enterado su padre de eso? Llevaban años así y jamás lo había notado ¿Que era diferente ahora?


-Pero eso se acaba hoy Sasuke... vayan a arreglarse, tenemos invitados hoy, ah y Sasuke mañana iré a cambiarte de escuela.


Los hermanos asintieron marchándose, definitivamente no entendían que es lo que había ocurrido, pero ahora solo podían obedecer para no empeorar las cosas.


La hora de la cena había llegado, y los chicos no habían tenido la oportunidad de hablar con Mikoto sobre lo ocurrido, así que tendrían que esperar, a las ocho en punto el timbre sonó y la puerta se abrió, entonces la mente de Sasuke se aclaró al ver a Sakura, definitivamente ella era la que había provocado todo.


-Kizashi, Mebuki, Sakura, pasen - el sonriente Fugaku los dejo entrar - la cena está lista los esperábamos


-Perdón por la demora Fugaku, ya sabes cómo tardan las mujeres en arreglarse - menciono dándole la mano a este.


-Buenas noche - murmuró Mikoto con cierta desconfianza


- ¡Sasuke! Hola - Sakura sonrió acercándose a este, sin embargo el azabache puso en blanco los ojos antes de apartarse


El patriarca de los Uchiha frunció el ceño por el comportamiento de su hijo menor, pero lo dejo pasar guiando a todos hasta el comedor.


-Bien, creo que ya es momento de que todos sepan cuál es el motivo de esta cena...


-Yo creo que sí cariño, porque no has dicho nada - Mikoto sonrió tomando su copa de vino


-Bien, cómo saben las empresas Haruno y Uchiha son bastante importantes...


-al igual que la de los Namikaze, padre - después de decir eso Itachi tomo un sorbo de su vino


- Itachi, cariño no interrumpas a tu padre - Mikoto intervino para que su esposo no se enojara... más.


-como decía, el punto es que decidimos fusionar nuestras compañías después de una larga platica, por ello... Sakura y Sasuke se casarán apenas sean mayores de edad


- ¡¿Qué?! - Mikoto se levantó golpeando la mesa, Itachi escupió su vino en la cara de Sakura y Sasuke se perdió en las palabras de su padre - ¿Cómo haces eso sin mi opinión? ¡Mi hijo no es mercancía que puedas vender! ¡¿Qué te pasa?!


- Mikoto me avergüenzas... y te recuerdo que no tomaste en cuenta mi opinión cuando metiste a Sasuke a la misma escuela que ese niño...


- Eres un... si me disculpan me retiro de la cena, y mis hijos igual - negó un poco antes de apartarse y tomar a sus hijos de las manos para llevarlos con ella - no puede ser...


- ¡Mikoto! Ven aquí ahora... deja de hacer espectáculos...


- No, es que no me lo creo... vamos niño - suspiro yendo a la habitación de Sasuke - no, no y no tú no te casas... debes amar a la persona con la que te cases...


- Mamá... tendrás problemas con papá...


- más bien papá tendrá problemas y mira que se lo ha ganado... mamá, Sasuke no se puede casar él y Naruto están saliendo.


- ¡¿Qué?! ¿Por qué no me dijiste? Que emoción... Sasuke empaca tus cosas... y tú igual Itachi... hablaré con Kushina... no puedo dejar que sigan viviendo aquí, yo ya veré qué hago con su padre.


- pero mamá


- sin peros, cómo madre me preocupa su felicidad y no dejaré que su padre haga estas cosas... descuiden está enojado y eso lo ciega, pero tengo un mal presentimiento y descubriré que ocurre, empaquen mientras hablo con Kushina.


Cuando Mikoto colgó salió de la casa con sus hijos metiendo las maletas en la cajuela de su auto.


-¿A dónde crees que vas mujer? Haciendo estos espectáculos ante visitas


- no te preocupes, voy a volver... los que no lo harán son tus hijos, y si hice lo que hice fue porque tú lo causas te, vamos niños


Sus hijos asintieron y subieron al auto para poder ir a casa de sus "enemigos". Al llegar Kushina los recibió cariñosamente como siempre, ella había tenido que decir la verdad a Minato, quien se enojó con ella por el hecho de no haberle tenido confianza antes.


-perdona si te cause problemas Kushina...


-descuida - sonrió dejándolos entrar - Minato entendió, solo se sintió herido porque no confíe en él... y es verdad, el jamás me niega nada, así que fui tonta al no decirle


- ojalá mi marido fuera como el tuyo...


- pasen - murmuró con una leve risa - ya preparamos una habitación para tus hijos


- Sasuke? – la voz del menor de los rubios de escucho en el pasillo - ¿Que hacen aquí?


- Luego te explico hijo... ahora quizá están cansados, así que llévalos a la habitación de invitados 


- Bueno, Kushina... me retiro iré a hablar con mi marido - murmuró abrazando a su amiga para luego salir de la casa despidiéndose de esta.


Mientras las dos mujeres se despedían Naruto tomo una de las manos de Sasuke guiándolos a la habitación en la que dormirían.


-No sé qué ocurrió, pero definitivamente me alegra que vengas a mi casa...


-Lo sé - el azabache suspiro - solo desearía que fuera en mejores circunstancias...


-Tortolitos, lamento interrumpir pero ¿Dónde está Dei?


- ah mi hermano tiene un departamento y ahí está quedándose


- Cierto, lo olvide - Itachi sonrió tomando las maletas de su hermano y las suyas para meterlas a la habitación y darles privacidad


- Naruto... te amo, no lo olvides... pase lo que pase quiero estar contigo


- Lo se Sasuke teme... - sonrió abrazándolo y besándolo


Si, sin embargo no era buena idea besarse en el pasillo, Minato había aceptado la petición de su esposa, porque los Uchiha eran amigos de sus hijos, pero ¿qué hacía Sasuke besando a su bebé?


-Naruto! ¡¿Qué es lo que estás haciendo?! - el mayor con el ceño fruncido se acercó para apartar a su hijo - ¿Dónde está tu madre? Vete a tu habitación, estás castigado...


- Señor yo...


- Señor nada, si los acepte fue por qué Kushina me convenció, pero no voy a aceptar que trates de seducir a mi hijo... Naruto obedece y vete a tu habitación, y tú jovencito... enciérrate en la habitación que no quiero verte - tomo a su hijo del brazo y lo llevo a su habitación para encerrarlo e ir a hablar con su esposa.


Los gritos histéricos de Minato se escuchaban por toda la casa, la frase "mi hijo no va a ser novio de ese" se repetía una y otra vez, y los chicos agradecían a quien invento los celulares pues al menos así pudieron seguir hablando, y Sasuke le contó lo de su compromiso al rubio, ambos estaban angustiados, no sabían que hacer querían estar juntos, pero parecía que sus padres jamás entenderían, y al final solo pudieron llegar a una conclusión... escaparían juntos.


Cuando todos se habían dormido, Sasuke salió de su habitación con la misma maleta con la que había llegado a la residencia Namikaze, y con cuidado busco la manera de sacar a Naruto de su habitación, al salir el rubio lo abrazo y se colgó su mochila y fue a la cocina a buscar algunos paquetes de ramen instantáneo y otras cosas, además de ir a la oficina de su padre y sacar algo de dinero para poder pagar un departamento o algo donde alojarse, ellos ya no querían ser parte de los problemas de sus padres.  

Notas finales:

Bueno, esta es la primera parte de está pequeña historia, que se me ocurrió mientras hacia mis deberes de la escuela, así que será corta, la segunda parte la subiré después, claro si es que a ustedes les gusta. 
Creo que eso es todo por mi parte, los quiero, y recuerden permanecer en casa para que podamos salir adelante de la pandemia


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