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Guerra magica por xxsadomasochisticxx

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1.

Maya se escabulló por los torpes pasillo de Drill sus manos estaban apretadas y sus uñas se enterraron en el dorso de su mano, escuchaba los gritos de su maestra de turno; Aún así no se detuvo y siguió caminando.

Odiaba que le pasará, cada vez que intentaba realizar un hechizo todos conspiraban en su contra y terminaba explotando las paredes. 

Yuna le decía que se frustraba rápido y eso "intervenía con sus emociones" y por ende fallaba estrepitosamente siendo el bufón de la corte, ¡Que se jodan¡, pensó rodando los ojos.

Se quedó quieto al ver a los guardias inclinarse, mierda, si era su madre estaría acabado y sería castigado y reñido como un niñito de cinco años.

Por suerte no era más que Yuna, como siempre sus ojos no mostraban expresión alguna, iba leyendo un libro bastante grande de hechicería. A su lado Mista se enroscaba en su brazo con una sonrisa algo malvada (Que miedo).

Este al verlo, se sorprendido y caminó hasta él, genial!.

—Maya que haces fuera de tus clases?—preguntó amablemente como el principe perfecto que era, sus facciones de relajaron y Maya se quiso golpear para desaparecer o hacer un hechizo para hacerse invisible, ah espera, no sabía como jodidos hacerlo.

—Me salí... — susurró con un hilo de vez, acariciando su brazo y mirando a todos partes menos a su hermano mayor, quién obviamente desaprobaba su actuar por completo.

—Te cuesta ese hechizo, no?—Le preguntó con una voz suave, acariciando su cabello, mientras que Mista se separaba de Yuna, antes de irse.

No necesitaba una respuesta, era obvio que no podía aprender cómo levitar un objeto, algo tan básico y fácil que hasta un niño promedio podía hacerlo, menos él, Maya solarían, príncipe de Drill no podía hacer magia.

—Ven acá—dijo adentrándose en una de las habitaciones deshabitadas del castillo.

 

Yuna era uno de los hechiceros más fuertes del reino, era conocido por sus "hechizos susurrados" conjuros ancestrales que usaba para que nadie lo pudiera imitar.

Maya siguió a su hermano entrando en la habitación oscura y despueblada, Yuna se sentó sobre el piso indicándole que lo  imitará y así lo hizo, se sentó en una posición de meditación. Allí dentro ningún sonido se escuchaba del exterior, a pesar de que a esa hora todos los guardianes se paseaban por las instalaciones.

—La magia no es sólo un mecanismo al cual podemos acceder para dañar, son parte de la naturaleza,—Le dijo cerrando los ojos y respirando profundo, Maya lo imitó con más renuencia que cualqueir otra cosa,—para canalizarla debes concentrarte, esta en tu cuerpo, cada parte de la naturaleza eres tú —susurró abriendo los ojos, observándolo, tragó duro, intentando concentrarse como le indicaba Yuna.

Tomó varias respiraciones profundas, se concentró en cómo inhalar y exhalar, relajando cada músculo.

—Eso es, ahora intenta pronunciar el hechizo, recuerda son sólo palabra, concentrate en la magia y no en el resultado, siente en cada fibra de tú cuerpo esa sensación—Indicó, colocándo sus manos en su regazo, esperando a que su hermano menor logrará conectarse.

—Levitación astral...—susurró, sintiendo un cosquilleo en su estómago que subió por su pecho y sus brazos, los dedos le hormiguearon. Cuando abrió los ojos observo como un lápiz tirado en el suelo levitaba frente a sus ojos.

Miró con emoción el objeto, golpeándolo un poco y este flotó en la habitación.

—Wow!—Chilló asombrado, le tomó una semana aprender la postura y el movimiento del brazo, pero su hermano se lo enseño en un parpadeo. Lo admiraba, anhelaba ese poder más que nada.

—Te lo dije, este hechizo es  subestimado por los hechiceros, pero es el más importante, una ruptura del tiempo y el espacio el cual podemos mover a nuestro antojo, increíble, no?—Preguntó con una sonrisa tan gentil, entendía porqué se había ganado ese apodo.

Yuna Solarían, el príncipe gentil, era apropiado sin duda, pero también "Nerd" hubiese dado en el cabo perfectamente, sin embargo él no entendía su sobrenombre, Maya el príncipe brillante muy apropiado si se refería sus explosiones diarias.

—Gracias—Le sonrió falsamente, parándose del suelo, siendo seguido por Yuna,  ambos salieron y se despidieron sin palabras, era seguro el futuro rey tenía muchas obligaciones a parte de ayudar a su tonto hermano con magia básica.

Se deslizó hasta la sala de estudio y se adentró enfrentando a Tanya Werelove, su maestra y tirana personal (si, no le bastaba al mundo con su madre), rodó los ojos al verla roja de la ira mientras su perfecto peinado hacía atrás se deshacía de una forma chistosa en su frente, su cabello blanco pulcro se riza con facilidad cosa que le fastidiaba.

—Donde estabas?—Preguntó molesta, apreto sus dientes rechistando, sus manos sostenían su varita, una vieja reliquia familiar, cómo siempre decía.

—Me estaba llamado mi hermano—mintió con soltura, sin inmutarse, antes de sentarse en el suelo.

Se concentró como en la habitación desholada o eso intentaba.

—Que rayos haces en el suelo!, nadie te enseño que eso es antihigiénico?!—Chilló Tanya corriendo hasta su joven pupilo y intentando pararlo. Maya gruño fastidiado, ¿Como mierda quería que conjurara ese estúpido hechizo si no le dejaba de gritar?, intento relajarse de nuevo.

Volviendo a respirar, recordando la voz tan suave de Yuna,  una vez en ese estado se preparó mentalmente para la humillaciones y las burlas por no poder hacerlo "Levitación astral" dijo una vez más, cuando abrió los ojos vio varios objetos flotando al rededor de la habitación.

Se paró de un salto con un gritó de emoción haciendo un simpático baile de la victoria, lo había hecho!, se felicitó con alegría.

—Lo hiciste bien, pero no es la gran cosa, tan deficiente para ser un príncipe, no lo olvides!—Le dijo Tanya con maldad antes de salir de la habitación, las cosas se cayeron al piso y Maya se encontró a sí mismo  en el piso.

Sabía que nunca sería tan bueno como Yuna, quién tenía una extraordinario manejo de la magia y el conocimiento para usarla, eso lo sabía, más nunca se rendiría.

Mientras por la el rabillo de la puerta observaba todo Mista, una sonrisa afilada salió de sus labios, antes de volver por donde llego y con nueva información.    

Notas finales:

Hoklis, bienvenido a mi nuevo proyecto mágico y fantasiosa, espero les guste, es a primera vez que público un original en esta plataforma, asi q si les guste comenten eso me hace muy feliz, eso es todo por hoy, adiós ^^.


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