Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Puntos de sutura. (Traducción finalizada) por yuniwalker

[Reviews - 12]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Dohan, que se escapó apresuradamente del centro quirúrgico, justo como si lo persiguiera un ladrón, se fue por la salida de emergencia, apoyó la espalda contra la puerta de hierro y respiró hondo por un momento que se sintió igual a una eternidad. De hecho, hizo esto muchas veces en un intento por tranquilizarse pero, incluso así, su corazón estaba latiendo tan fuerte como si fuera a estallarle en cualquier momento y eso, a su vez, ocasionó que un horrible calor le subiera hasta la cabeza. Su rostro se puso rojo como una manzana madura y sus labios, ligeramente hinchados, le mostraron que todavía tenían el toque y el aroma de Hye-won bien presente en toda su piel.

Dohan se cubrió la cara con ambas manos y bajó rápidamente las escaleras de la salida de emergencia, incluso aunque pareció a punto de caer de boca un montón de veces.
Park Eun-soo, que se enteró de la conmoción en la sala de emergencias, subió corriendo las escaleras justamente por la misma área así que, sin darse cuenta, se encontró con Do-han cara a cara. Casi hasta darse un golpazo. Y como si el hombre estuviera borracho, sus ojos estaban medio abiertos y su rostro pareció tan rojo brillante que hasta pensó que estaba enfermo. Eunsoo, que no sabía exactamente qué decir, inclinó la espalda para saludarlo pero él solo salió corriendo sin mirarla ni una vez. Eun-soo dirigió los ojos hacia ese mismo lugar, arqueó las cejas y dibujó una expresión verdaderamente extrañada en su rostro. Como sospechando algo...

"¿...?"

Mientras tanto, Dohan, que no podía correr en el vestíbulo del hospital, apretó los dientes y se fue caminando con la misma urgencia que lo haría de querer ir al baño. Luego, cuando finalmente llegó a un lugar más despejado, se fue corriendo hacia su casa y justo como si estuviera haciendo ejercicio, le dio vueltas al complejo de apartamentos tres veces antes de abrir la puerta. Pero, incluso entonces, descubrió que su corazón no sabía cuando quedarse quieto. Estaba latiendo y latiendo en la medida en que pensó que podría desmayarse o hasta sufrir de un ataque cardíaco de verdad. Estaba mareado, sus labios estaban secos y no podía volver a la normalidad ni concentrarse.

Dohan sacó una lata de cerveza del refrigerador y se la bebió de un solo trago. Sin embargo, el calor y la sed no disminuyeron incluso después de eso así que se bebió otra lata. Luego, arrugó el envase, lo aventó por allí y miró al techo sin importarle que tuviera los ojos un tanto desenfocados.

"Loco."

Sí, era una puta locura.

"Es una locura. Kang Hye-won ¿Qué...? Dime ¿Por qué hiciste eso? ¿Qué pasó?"

Dohan, mirando hacia atrás, a lo que había sucedido en la sala de quirófano, comenzó a tocarse los labios con un par de dedos completamente temblorosos. La herida se le había abierto de nuevo así que ahora tenía un dolor punzante cada vez que hablaba pero, en realidad había descubierto que eso no le importaba en absoluto. Y contrario a lo que se esperaba que hiciera, Dohan frotó su boca con más fuerza, la apretó y luego la mordió sin temer que comenzara a dolerle. Dios, recordaba la textura de las sábanas de la cama en ese cuarto, las pestañas temblorosas de Hyewon, su olor, su temperatura corporal, su peso, la dureza de sus labios húmedos y la forma de su lengua enredada entre la suya. Es más, incluso sus lágrimas comenzaron a llegarle de nuevo a la mente con cada respiración.

"¿Por qué…? ¿Porqué me besaste?"
  
Hyewon no era el tipo de persona que vivía a su gusto, como Dohan. No era un hombre que actuaría de manera improvisada según el deseo de ser descarado y además, por encima de todo eso, podía jurar que la mano que le abrazaba la cintura y los labios que buscaban los suyos no se sentían igual a si solo estuviera intentando reconciliarse. Era comprensivo y apasionado. Amoroso incluso. Y además, después de eso, Hye-won tenía una expresión bastante... Tímida. Cómo si estuviera apenado de que ese accidente hubiese ocurrido en una situación en la que no debería haber pasado nada para empezar.

Dohan, con los ojos borrosos, volvió a su habitación, tambaleándose y reflexionando sobre las sensaciones que quedaron en sus labios después del hecho. Y cuando finalmente estuvo tendido en la cama, entonces agarró la almohada y movió su cuerpo de un lado para otro en un movimiento que no correspondía en nada con alguien de su edad. Con solo un beso, se sintió como un adolescente que acababa de confesarse así que en realidad, no pudo conciliar el sueño por mucho, mucho tiempo después de eso.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).