Fue una semana en la que fácilmente podrían haberse agarrado del cuello para luchar a golpes contra el suelo. Sin embargo, no se fueron a los puños, o se insultaron, ni se evitaron como en las veces anteriores. Pero igual tenían que decir que había mucha incomodidad entre los dos. Fue muy extraño. Comían juntos y se iban a trabajar juntos también, pero no hablaban o preguntaban de sus días. No era que se odiaran, por supuesto. Podía decirse que, solo estaban teniendo cuidado de no lastimarse de nuevo.
Sin embargo, como resultado de esto, Do-han ni siquiera pudo hablar con Hye-won sobre la idea del viaje.
Saludó la mañana del día de la partida con el pensamiento de que tal vez iba a tener que irse solo. Y Do-han, que estaba a punto de salir de la casa con una mochila llena de equipaje, tuvo que toparse con Hye-won, con una pequeña maleta, y sentado justo frente a la puerta principal del departamento. Dohan apretó las muelas con fuerza y recitó el nombre del culpable en su mente.
"Eun-soo."
No obstante, ahora era realmente muy difícil e incómodo hablar sobre esto así que, después de darle un último vistazo a su equipaje, Dohan salió por la puerta principal sin decir ni una sola palabra al respecto. Como si fueran personas con diferentes destinos, él caminó adelante y Hyewon se quedó justo atrás.
Pero Do-han esperó a Mi-hee todo este tiempo con una sensación de ansiedad impresionante, como un estudiante que necesitaba a su amigo el primer día para no pasar vergüenzas. Deseaba que alguien viniera y rompiera el silencio que se había establecido entre Hyewon y él y luego, incluso antes de que se diera cuenta y cuando estaba a punto de desmayarse por el agotamiento emocional, vio a Byung-jun y Mi-hee caminar desde lejos mientras se daban de puñetazos.
"¡Hola, hijo de puta! ¿Te ibas a ir solo o qué carajo?"
Aunque el hombre estaba maldiciendo a todo pulmón, Dohan sonrió con una expresión bastante aliviada en su rostro.
Al principio, Byung-jun no estaba en la lista de invitados para este viaje pero, aparentemente solo se necesitaba de una llamada y un par de palabras sobre sus planes para que ahora llevara una maleta que le llegaba un poco más arriba de las rodillas.
"¿Qué tal, doctor? ¿Ya listo para irse a la playa? ¿Ya se compró su traje de baño?"
Y le dio un golpazo en la espalda a modo de saludo. Sin embargo, Kang Hye-won, todavía sosteniendo su equipaje entre las manos, no hizo ninguna expresión o sacó alguna palabra para responder a su pregunta así que, por supuesto, esto solo ocasionó que Do-han tuviera un dolor de cabeza mucho más molesto que el de la primera vez.
Era extraño que este viaje se estableciera en primer lugar: Salir de vacaciones con estos muchachos siempre era un caos de niveles ancestrales así que, en realidad no se le hizo raro que los gritos de Mi-hee y Byung-jun continuaran incluso cuando ya estaban arriba del auto de Eun-soo.
"No, ¿La doctora va a conducir? Ya estuvo que nos morimos."
"¡No seas payaso!"
"Por favor, Padre Celestial. Deja que lleguemos a la playa con bien porque cuando las mujeres conducen siempre hay... ¡Auch! ¡No me pegues Mihee!"
"Eunsoo. Dile que se estacione. Anda, que se estacione para que veas como se nos va todo el día."
Lejos de ser un viaje de adultos, estaba al nivel de un viaje escolar de escuela primaria. Do-han, que estaba sentado en el asiento del copiloto, se rascó la cabeza por un momento y miró a Hye-won, que estaba sentado atrás y en medio de Byeong-jun y Mi-hee, que eran increíblemente insoportables. Parecía un niñito chiquito, con su expresión serena y su maletita en las manos.
"Kang Hye-won ¿Quién te cae mejor? ¿Yo o este pendejo?"
"Kang Hye-won, me dijo pendejo. ¡Dile algo!"
"¡Tú empezaste!"
"¡Yo no hice nada!"
"¡Fuiste tú!"
"¡Tú!"
"..."
Observar a Hyewon siendo golpeado por ellos dos le hizo sentir tan incómodo, que de inmediato se arrepintió de haber dejado que se quedaran atrás. En realidad, Dohan, que no dejaba de ver su carita, estuvo a punto de decir que había cambiado de opinión y que mejor se pasará para el frente. Sin embargo, no era como si quisiera parecer demasiado consciente de él así que no dijo ya nada.
"No te preocupes por eso, no te preocupes por eso."
Dohan se volvió para mirar hacía el otro lado, pero todavía tenía un ojo bien puesto en Hyewon.
Luego, cuando la mirada de Byeong-jun alcanzó también al inexpresivo doctor, lo abrazó de los hombros y preguntó:
"¿Qué pasó contigo, Kang Hye-won? Nunca sales ¿Qué dijiste para que te dieran permiso de faltar en el hospital? Yo dije que tenía diarrea hiper mega explosiva."
"Super asqueroso."
Hyewon lo pensó:
"Dije que tenía que encargarme de algunas tareas del hogar."
"..."
"... Eso es super aburrido."
"¿Tú, Eun-soo?"
"Solo cambié las citas con mis pacientes para dentro de dos días."
"Maldita ¿Debería cambiar mi especialidad?"
"Tú necesitas un psiquiatra, no ser uno."
Todos se echaron a reír cuando Byeongjun hizo cara de ofendido.
Afortunadamente, cada uno, incluyendo a Hyewon, estuvieron tranquilos y hablando cómodamente hasta que llegaron a su destino. Y eso era raro teniendo en cuenta que no eran adultos cuando querían jugar sino... Niños.
"Miren ¡El mar!"
Esa fue la señal para que todos se fueran hacia una ventana.
"Byung, no eres un bebé. Ya viste el mar antes así que no parezcas tan emocionado."
"Ya pasó mucho tiempo desde que vine. Tenía como 20."
"Mentiroso."
Do-han estiró su cuerpo y miró por la ventana también. Estaba el sol, la playa de arena clara color trigo y un hermoso mar azul turquesa. El paisaje de playa con el que todo adolescente que quería escaparse con sus amigos soñaba alguna vez.
"Hay un montón de gente".
El océano estaba lleno de sombrillitas, mesas, sillas y papalotes así que podía decirse que era más gente que agua.
"Todo el mundo, excepto nosotros, lo disfruta."
"¿Se cancela?"
"Naaa, nos vamos a abrir paso."
"Es super curioso ver que todos parecen tan saludables..."
"¿Qué quieres decir?"
"Estoy en el hospital todos los días así que de repente hasta se me hace raro que no tengan respiradores. ¡Oiga señor! ¿Su saturación de oxígeno está bien?"
Eun-soo se echó a reír y también lo hizo Do-han. Mi-hee, Hyewon y él veían pacientes acostados en una camilla todos los días, noche y día, pero Byeong-jun, del departamento de medicina de emergencia, veía los casos más aterradores y difíciles uno por otro por otro. Era obvio que necesitaba de este descanso antes de que se volviera loco.
Do-han fingió estar mirando a Byung-jun y desvió los ojos hacia Hye-won. Sin embargo, no importaba lo que dijeran sus amigos o lo que estuviera pasando en la playa, el rostro del hombre, mirando por la ventana, no se conmovió ni se movió ni pareció menos o más asombrado que al principio.
"No te preocupes por eso, no te preocupes por eso. ¡¡Deja de prestarle atención al tipo hermoso que está detrás de ti y ve para adelante!!"
Dohan murmuró para sus adentros como si estuviera memorizando un tipo de mantra. Luego, casi demasiado laboriosamente, apartó la mirada otra vez y se quedó mirando por la ventana. Ver a la gente caminando por la playa, empapada como si acabaran de meterse en el agua, con gafas de sol bajo el sol abrasador y sonrisas enormes, hizo que de verdad se sintiera como si estuviera en unas verdaderas vacaciones de verano. Y aparentemente, Mi-hee había sentido lo mismo porque murmuró detrás de él:
"Ya me siento en verano".
Decidieron abrir la ventana para recibir el viento cálido y húmedo que hacía que sus caras se pusieran pegajosas, pero los gritos ruidosos y el sonido intermitente de las olas mezclado entre ellos hicieron que se sintiera más cómodo de lo que pensó que sería. Como dijo Mi-hee, cuando el calor abrasador le tocó la cara y bañó los brazos que se extendían por el alféizar de la ventana, finalmente se dio cuenta de que era verano y que habían salido del hospital. Su cabeza, compleja y sombría, se volvió un poco más simple ahora. Y las comisuras de sus labios se curvaron en una linda sonrisa casual.
Después de correr por un rato, el auto de Eun-soo se detuvo en una pensión enorme que quedaba justo en frente de la playa. No era un edificio nuevo, pero había señales de mantenimiento por todas partes, era bonito y fresco y se llegaba al puerto por un caminito de piedras pulidas. Byeong-jun vitoreó el lugar y dijo que era excelente, pero no duró por mucho tiempo.
"La habitación es demasiado pequeña."
"Por supuesto. Porque era un plan para cuatro personas para empezar."
"¡Kim Mi-hee está tratando de hacerme sentir mal!"
"¡Es porque eres un estorbo!"
Mi-hee siguió discutiendo con Byung-jun sobre las habitaciones así que Eunsoo sonrió amablemente ante la reacción de los dos y agregó que el plan original era para cuatro personas, por lo que solo pidieron una habitación pequeña para los dos hombres y una habitación pequeña para dos mujeres. Ahora, sin embargo, gracias a eso iba a ser incómodo.
"Oigan ¿Y si montamos una tienda de campaña y dormimos en la playa? Es lo que yo solía hacer cuando iba con mis padres."
"¿Tienes una tienda de campaña?"
"Sí, la traje. Es enorme."
De alguna manera, realmente tenía mucho equipaje.
Mi-hee, que estaba brincando de un lado para otro como si la sugerencia de Byeong-jun no fuera mala, palmeó su espalda una y otra vez hasta que pareció no tener más remedio que quejarse de dolor. Mientras tanto, Dohan y Hyewon también expresaron activamente estar de acuerdo con el plan porque, después de todo, eso sería mejor que tener a tres hombres grandes en una habitación tan chiquitita.
Dohan siguió estando un poco preocupado por todo esto e incluso se arrepintió de haber seguido con la idea de venir de viaje. Pero cuando se cambió de ropa, junto con Byeongjun, su corazón pronto comenzó a emocionarse tanto como el de un niño pequeño. Esto se debía a que, en medio de tanta problema, el traje de baño que compró por internet se veía precioso y le hacía ver muy guapo. Incluso hasta más musculoso.
"Oye, me veo muy bien".
"Im Do-han, deja de mirarte en el espejo ¡Por Dios!"
"¡Es que me encanta el traje! En serio. Tócame para que sientas la tela. Toca."
"No te voy a tocar. No te... ¡Aléjate, pedazo de loco! Y apúrate ya."
Dohan, que tenía un traje de baño negro de manga larga y un short del mismo color, se hizo pasar por modelo mientras se ponía y quitaba las gafas de sol repetidamente frente al espejo. Byeong-jun, que solo tenía un short que se compró de rebaja en un supermercado, cubrió el espejo con su playera y empujó a Do-han para llevárselo al mar junto con él, pero este no se movió tan fácilmente. ¡¡¡Necesitaba verse un poco más!!! Y es que sus cejas oscuras, su tono de piel tan sano y su cabello teñido de un castaño rojizo quedaban muy bien con esta escena tan veraniega. ¡En serio! ¡Era el hombre más guapo de esta maldita playa!
Mihee sacudió la cabeza, pero Hyewon, que estuvo en blanco durante todo este tiempo, añadió en voz baja un par de palabras positivas y dijo que "De verdad se veía muy bien."
En realidad, todos se habían puesto ya su traje de baño, pero Hyewon llevaba una camiseta de manga larga y pantalones largos de vestir. Dohan instó a Mihee y Byeongjun a que se fueran con él a la playa pero, cuando vio a Hyewon, saliendo desde atrás con las manos completamente puestas sobre su frente, se acercó un poquito, como si no quisiera, y le puso encima un traje de baño protector extra que había traído desde casa.
"Yo no lo necesito".
"... Muchas gracias."
Hye-won, que tenía la piel exageradamente blanca, se quemaba en lugar de broncearse cuando se exponía a los rayos ultravioleta durante mucho tiempo.
Desde la infancia, el tipo era tan sensible que se quemaba fácilmente hasta un punto en que se le pelaba la piel. Además, no podía ponerse cualquier protector solar porque a veces le debe una reacción y Dohan hasta recordó que una vez le salió urticaria en la cara porque había estado parado en el patio de recreo durante un encuentro atlético de la secundaria. En ese momento, eran unos niños y Dohan quería proteger a Hyewon porque era muy suave y bonito. Todavía estaba preocupado y quería protegerlo pero, era algo un poco más complicado que en ese momento. No quería ser muy obvio después de pelear.
Cuando Dohan salió de la habitación, con retraso y justo después de ver que Hyewon se pusiera el traje protector que le había entregado correctamente, notó que Mihee ya estaba caminando hacia la playa justo como si fuera una chiquilla. En realidad, él había creado una brecha importante con su grupo de amigos sin darse cuenta porque quería asegurarse de que Hye-won, que los seguía, caminando increíblemente lento, llegara a salvo a algún lugar con suficiente sombra.
La playa estaba tan caliente que la palabra "infierno" le encajaba de manera literal. Mi-hee y Byung-jun, que se habían quedado descalzos, tuvieron que volver a ponerse las chanclas debido a lo mucho que les quemaba la arena y mientras tanto, Eun-soo y Hye-won se sentaron justo abajo de una gran sombrilla y se quedaron a mirar: Do-han y Byung-jun habían agarrado a Mi-hee de los brazos y las piernas y decidieron que era una buena idea aventarla directo al mar. Los dos hombres, ignorando las palabrotas de Mihee, la arrastraron al agua varias veces más después de eso y hasta pareció como si quisieran ahogarla a propósito. Eun-soo le dio un golpecito en el hombro a Hye-won.
"¿Se pelearon?"
"... Sí. Supongo"
"¿Por qué?"
"Pues... Toqué la parte sensible de Do-Han."
"Algo así me imaginaba."
Eun-soo suspiró, mirando a Hyewon y a esas tres personas alternativamente.
"En realidad, planeé esto con Mi-hee para intentar hacer que te confesaras".
"..."
"Ya sabes. La playa es un ambiente ideal. Muy romántico. Así que pensé qué..."
"No creo que seas muy buena para esto, honestamente".
"Que poca fe me tienes."
Y lo que pareció una palmadita inocente en el hombro por parte de Eun-soo, más bien fue un gesto para alertar a Byeong-jun.
Ajá, también lo habían incluido a él.
"¡Por Dohan!"
Y tacleó a Dohan hasta tirarlo un par de metros adelante del mar.
Por supuesto, al verlo allí, rodando por el suelo y gritando de dolor, Hye-won se levantó de un salto y se acercó corriendo hasta él. Eun-soo se dio una palmada en la frente.