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Bufanda por LeeLawlietTakarai

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Notas del fanfic:

Queda prohibido, salvo excepción prevista en la ley, cualquier forma de reproducción (parcia o total),
distribucción, comunicación pública y transformación de esta obra sin contar con la
autorización del titular de la propiedad intelectual.
La infracción de los derechos mencionados puede ser constitutiva de delito contra la propiedad intelectual.

"Cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia"

 

Bufanda

 

Capítulo 1

            El invierno ya había llegado a la ciudad de Tokio, y se dejaba sentir a su máxima potencia, nunca había hecho tanto frío en la ciudad, todo era por el calentamiento global, de eso estaba seguro. 

La nieve caía graciosamente desde un cielo que estaba tan nublado que ni un travieso rayo de sol podía penetrar su resistente barrera. Que barbaridad unas delicadas y simples nubes podían ganarle al astro solar.

Las calles se encontraban llenas de gente, como si ese clima tan extremo les gustara, era como si estuviesen acostumbrados a ello; todas esas personas se encontraban envueltas en las emociones y sensaciones que provoca la navidad, haciendo compras por aquí, apartando regalos por allá, todos iban y venían.

Las luces que adornaban la ciudad le daban un aspecto más pintorezco y menos serio que era como el resto de mundo veía a los japoneses, como personas serias que solo se dedicaban a trabajar y a sobrevivir, más cercanos a las máquinas que a las otras personas.

Nadie le prestaba atención a nadie, todos caminaban y pensaban en sus propios problemas, bien podía pasar un asesino a su lado y estás no darse cuenta.

            Un joven de menos de treinta años caminaba en ese mar de personas que iban por las ruidosas e iluminadas calles de una de las ciudades más modernas del mundo. Su mirada era opacada por unos lentes negros que lo hacían verse por de más elegante, y eso que no estaba haciendo nada de sol, tan solo los usaba para no perder su estilo. La manera de vestir indicada que se trataba de un sujeto con una muy buen posición ecónomica pues vestía con un elegante pantalón de ceda negro al igual que la camisa y sus zapatos obviamente de marca no se quedaban atrás, negros y perfectamente limpios, ni una gota del agua que se encontraba por los suelos los ensuciaba. La gabardina era el mismo color al igual que una peculiar bufanda negra. Parecía como si viniera de un velorio, pero no era así. Tan solo era que el negro era de sus colores favoritos y además le sentaba muy bien por la tonalidad de su piel, que era blanca sin llegar a ser demasiado pálida y combinaba muy bien con la tonalidad de sus ojos que era gris, aunque no fueran naturales le quedaban muy bien.

            Como todas las demás personas se encontraba perdido en sus pensamientos, no sabía que iba a hacer en esa navidad y año nuevo, desdes hacía más de seis años que pasaba las navidades solo y ahora quería que fuera diferente pues tanta soledad le estaba afectando mucho. No quería convertirse en un verdadero miserable.

            No convivía mucho con sus padres, por eso en esa época tan solo los llamaba un par de horas y les deseaba lo mejor, y aunque quisiera ir con ellos no podía por el hecho de que sus padres estaban viviendo en Inglaterra y no podía salir del país pues en su trabajo tan solo le daban pocos días de vacaciones. Y eso que era un alto administrativo de una de las empresas más importantes de Japón.

            En cuanto a amistades no tenía muchos amigos, los que tenía salían a alguna disco o bar y eso a él no le llamaba en lo absoluto la atención. Por lo que eso también estaba descartado.

            Tal vez, nuevamente su gato llamado Akuma, sería el único que lo acompañara en esa navidad, aunque su gato se durmiera antes de entrar la media noche.

 

            Pasando de las diez de la noche y el último shinkansen de la estación de Tokio estaba apunto de salir, el joven apresuro el paso para poder comprar el boleto y subir al vagón. No usaba automóvil por que transitar en coche por la ciudades de Tokio era una verdadera pesadilla. Por fortuna lo hizo pero, una vez que estaba dentro del vagón se dio cuenta de que alguien que se encontraba afuera le estiraba la mano para avisarle que algo había tirado, no pudo mirar con claridad la cara de la persona, pero si, que sin querer mientras entraba al vagón, había tirado su bufanda....

 

Continuará......

Terminado el Viernes 30 de Noviembre de 2007 a las 13:56 hrs. Escuchando "Sayoonara" de L'Arc~en~ciel

 

 


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