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"Como quiero" por Chaotic Kittie

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Notas del fanfic:

One Shot.

Arreglé esta historia, aunque más que eso, es una confesión del protagonista.

Notas del capitulo:

Inspirado en una canción, aunque no tiene la letra ni nada.

Espero les guste.

Como quiero.

 

En estos momentos en que el pesar del corazón se hace uno junto a la soledad, constantes sonidos difusos alrededor, dispersan mi alma en pequeños fragmentos desechados. En donde las oportunidades ya no existen, y la peor de todas las dificultades se ha mostrado ante nosotros, arrasando con cualquier refugio que hubiera mantenido.

Solo deseaba ser esa milésima parte en su corazón.

¿Acaso era un sueño imposible?

Al parecer lo era, pues el tiempo se encargo de refregarnos a ambos dos, nuestros errores, esto fue culpa de los dos.

 

Era enfermo, increíblemente enfermo, como cada vez, me encontraba más necesitado de él, más ansioso de su cuerpo, más necesitado de su alma.

El desgastado ir y venir del palpitar, solo demuestra que esta aletargada relación, se ha hecho polvo por el tiempo.

Hemos acabado discutiendo una vez más esta tarde, entre frialdad y gritos, exijo lo que creo mis derechos, proclamándole como mío. Pues mi forma de sentir se ha vuelto obsesiva, lunática, arraigada. Y sólo me encuentro, con el quiebre de aquella dignidad truncada.

Me pregunto un sin fin de dudas, a las que no encuentro ninguna respuesta, y mi cabeza me pide a gritos que me separe de su mundo, que deje atrás todo recuerdo. Pero es imposible, totalmente inimaginable no tenerte a mi lado.

Es difícil aceptar que ya no es lo mismo de antes, que se sigue alejando a pasos agigantados, avanzando con una rapidez inhumana que me deja atrás y me abandona en el ciclo

Esta vez estaba dispuesto a amar, sin esconder nada.

Con desconfianza me acerque, mostrando de a poco mis sentimientos, para llegar hasta un final, en donde me vi entregando todo. Él sabe que me costó muchísimo, que nuestro proceso fue tardío, y que siendo como éramos, la comunicación nunca fue nuestro fuerte.

En el pasado me encontraba tranquilo, la soledad era una compañía grata y el silencio era mi único argumento, pero cuando él llego…

Todo fue distinto.

Me cegué, esperándole cada noche, dejando expandir mis sentimientos tan ampliamente que no existía un término exacto para definirlos. Él se había encargado de transmitir, curar y hacerme desear, todo contacto con su persona.

Estaba a su lado era lo único importante, y me sentía dichoso, por tenerle, por ser suyo, por haberme entregado.

Y el tiempo siguió pasando, y me volví avaro.

Deseaba mucho más, obsesivamente comencé a buscar más cariño, más amor, más de él. Quería atraparlo, pero lo sentía más lejos, penetrar en su corazón dejando una huella intangible y las palabras salían espontaneas estando a su lado, mientras por dentro mi corazón se oscurecía más, y se viciaba más con su persona.

Ahora solo queda el vacio, y es increíblemente contradictorio, mientras me costó tanto empezar a quererle, en estos momentos, deseo entregarme completamente.

Las horas pasan tan lento cuando no está, y me encuentro pensando en él constantemente, siendo que debo olvidarle. Metiendo en mi cabeza que no vale la pena, trato de engañarme sin lograr mi cometido.

Soy el muñeco herido que se entregó, y como fiel sirviente le espera, enganchado a una esperanza que no tiene fundamentos, dedicando cada segundo a una presencia que ya no existe, a un amor difunto.

Pronto será tarde, demasiado tarde, ya que el cansancio me gana la partida, convirtiéndome en un pequeño engendro incapaz de desear algo nuevo, incapaz de seguir adelante. En este preciso instante, soy el estorbo al que engaña con excusas tontas.

Quizá nunca hubo amor, quizá estoy aquí esperándote con falsa ilusión, quizá… nunca fuimos uno.

Y son en aquellos momentos de rudeza en donde todavía pongo esfuerzos y tan sólo reluce mi torpeza, en los que mis ojos me engañan y me hacen creer que aún existe una posibilidad, y que el afecto que mostramos falsamente por las calles, vuelve a convertirse en un amor vulgar y puro.

Entre par y par, la rutina se amontona en el fiasco de sus dramas, en un cansancio reciproco, en el que la inseguridad sale a flote. Me encuentro a mí, en una inmensidad de miedos, claudicado en un horizonte imaginario, rogando migajas mientras pierdo mi orgullo, totalmente inerte ante él,

Confieso que he tratado inútilmente de acabar con esto, matar cualquier signo de debilidad pero la devoción de lo que yo, llamo un amor enfermo, es tan fiel, tan devota que cualquier signo de cariño me envuelve entre sus redes, bastando tan sólo un mínimo roce, todo se esfuma, el sufrimiento, la amargura, la indiferencia.

No me dejes, no te vayas, no te alejes.

Observe desde la ventana a los pájaros emigrar, a las parejas transportarse a su mundo de a dos, y a nosotros inexistentes, él por su camino y yo por el mío. Entonces, me escondo en mi caparazón, aferrado a cualquier tipo de felicidad, ahogado en una tristeza, miedoso de una intolerable soledad. Pidiendo a gritos desde el interior ser merecido una vez más.

Entre tanto la lógica no deja nada, y el pesimismo gana a mi voluntad.  “La culpa es tuya, por no saber perder” Lo acepto, es la verdad, pero es tan difícil no tenerle.

¿Tanto cuesta?

Todo lo convertimos en una confusa situación, lo que debía ser una hermosa gama de recuerdos, se convirtió en una demanda de tonos grises, miserablemente quisimos ser útiles y sólo terminamos ganando, el destrozo del alma.

 

Al fin y al cabo nos echamos abajo, desplomando cada sueño, y sabiendo todo ello sigo suplicando por esa atención que se arranco de mí.

Estoy dispuesto a cualquier cosa por seguir a su lado, aunque el cansancio llame a mi puerta. Necesito de su ser para completar esta agonía, por más que sea veneno para mis labios y muerte instantánea para mí corazón.

Por favor, vuelve a mí.


Háblame, mírame y deja que todo sea para mí

Deséame y hazme creer, aunque sea una ilusión nuevamente
Protégeme e ilusióname con un mundo de esperanza

Destrúyeme hasta que mi corazón se desintegre.

Solo quiéreme una vez más…

Como en el principió…

Como ese sueño que alguna vez nos prometimos…

Deseo con toda mi voluntad, pertenecer a tu mundo…
Ser la milésima parte en aquel frío corazón

Pero no encuentro más salida, que estar entre tus sombras

Un secreto a mil voces
Repleto de una oscuridad viscosa
 

Haré todo lo que me pidas.

 

Los Deseos Son pequeñas partes de nosotros....
Egoísmo, Capricho,  nadie lo sabe con exactitud.

"El amor un sentimiento vulnerable, extraño y que produce una dicha desequilibrada horrendamente necesaria, pues nos ayuda a crecer y encontrar nuestro camino

Notas finales:

Lo arreglé ya no soportaba tantas faltas de ortografía y de redacción. Gracias a quienes acompañan a estas dedicatorias nuevamente.


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