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Ahogado en el Pecado por Marieth

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Notas del fanfic:

Full Metal Alchemist no me pertenece sino a Hiromu Arakawa, lo que escribo no recibe ninguna ganancia... T-T mal por mi

Notas del capitulo:

*Saliendo de las profundidades de su tumba*

Vaya, si que he acumulado polvo en esta cuenta, hasta creí que no iba a poder volver, pero heme aqui. ¿Por qué volví? Porque me di cuenta de que aun tengo una deuda enorme con las que leyeron "Abandonate al pecado"

Tanto tiempo pensando en que debía escribir algo sobre el pasado de Ed y nunca lo hice, que vergüenza, bueno ahora traigo algo, no se si sea de su agrado, pero eso me lo pueden decir después xD

AGRADECIMIENTOS ESPECIALES A:

Chikori (Dedicado a ti chiclito del mal pornoso)

sandra r

sorako

Alia

samiyumi

hope

C_Kitty

Astrid186

Yuuna&

Anilorac

Kaguya-Hime Shiro

ritzuka-chan

WEROCKXD

y alguien que me dejó su correo xD no lo publico por razones de seguridad

Todas estas personas me dejaron review en el ultimo, que sepan que los leí todos y los aprecio mucho >3<

Bien todo dicho les dejo el fic.

La noche se mantenía helada gracias al viento que soplaba entre las construcciones, sonidos de pasos llenaban el pesado silencio que reinaba en las cercanías convirtiendo la escena en algo extraño, las baldosas bajo esos pies resonaban fuertemente haciendo que el sonido viajara más lejos de lo esperado. Al par de pasos que ya se escuchaban antes se sumaron otros por unos momentos hasta que se detuvieron.

Dos personas se habían encontrado ahí.

-Vaya, le estas tratando de robar el nombre a tu hermana mayor por lo visto. -Un muchacho delgado y de estatura media había dicho aquellas palabras con un deje de gracia en ellas, su rostro de piel pálida parecía brillar de forma innatural en la oscuridad de aquella calle, sus dientes se mostraban blancos y perfectos gracias a su sonrisa burlona, sus ojos violetas miraban al otro evaluándolo.

-Cierra la boca maldito monstruo. -Respondió el otro, sus ojos dorados brillaban con una luz extraña, su cabello largo y rubio sujeto en una trenza ondeaba con el viento helado que pasaba entre ellos, aquellos pantalones negros y camisa roja que se pegaban a su piel contorneando su figura menuda, una aparición extraordinaria si quitabas de en medio su cara bonita arruinada por esa mueca de odio -Hago las cosas como me placen y no tienes derecho a meterte.

-Por el contrario, tengo derecho a meterme en los asuntos de mi hermanito menor, es mi obligación ver que hagas tu trabajo Edward -El joven caminó acercándose más al otro, su cabello negro se perdía en la noche dejándose ver solo un reflejo verdoso cuando una luz golpeaba los mechones largos.

-¡No me llames de esa forma tan sucia bastardo! -Gruñó el rubio tratando de contener las ganas de golpear al otro. Aunque no se le haría complicado, podría usar sus uñas para rasgar la piel que se mostraba abundantemente gracias a la ropa del otro joven ¿qué tanto cubría su ropa de todas formas? Bien podría ir desnudo sin molestarse siquiera en portar esa playera negra tan idéntica a la que llevaba: sin mangas y que cubría la mitad de su torso. Igualmente estaba aquello que cubría hasta medio muslo ¿era una falda o qué? No había sentido en averiguarlo de todas formas. -En lugar de meterte donde no te llaman ve a hacer tu trabajo a donde están las prostitutas, perteneces con ellas.

-¿Oh si? Pero tú mismo te acabas de ofrecer a un hombre hace unas horas ¿no es así? Usaste su lujuria en tu favor en lugar de usar su orgullo como estas obligado a hacer ¿Se te ha olvidado eso Pride? -No le dio importancia al comentario sobre las prostitutas, igual tenía razón hasta cierto punto.

-Usa tu cerebro por única vez ¿quieres Envy? Revisa bien el trato que le ofrecí y dime de nuevo que usé su lujuria para obtener un esclavo nuevo -Pride miró amenazante a Envy, los ojos del rubio estaban encendidos y llenos de furia tratando de rasgarlo solo con mirarle ¡Oh como quería arrancarle esa estúpida sonrisa de los labios!

-"Después de que te sacies de mi cuerpo abandonaré este cuarto y no me volverás a ver hasta que yo decida volver a buscarte, en ningún momento deberás tratar de detenerme o pedirme que me quede, si desobedeces a lo que he dicho tendré que quedarme con algo tuyo y obtendrás tu castigo". Eso fue lo que le dijiste al mortal si no mal recuerdo -Envy mordisqueó su dedo índice pensando en las condiciones, la conclusión ya la sabía desde que había escuchado a lo lejos el potente grito de terror del humano -A pesar de ser un mocoso tan enano, eres inteligente... Aunque sigues cometiendo errores garrafales ¿Por qué después de perder tu humanidad sigues viviendo en tu pecado? ¿No es eso lo que te puso en esta situación en primer lugar Edward?

El rubio preso de la ira se abalanzó sobre Envy, lo tomó del cuello con ambas manos y presionó tanto como humanamente era posible y hasta más, se escuchó el crujir del hueso tan frágil y solo arrojó el cuerpo al suelo, lo pateó un par de veces y le miró con desdén desde arriba.

-Te dije que no me llamaras de esa forma tan sucia -Dijo peligrosamente al cuerpo en el suelo que yacía inmóvil bajo sus pies -Dejé de ser ese hace años. Mi nombre es Pride y que te quede claro desde ahora.

Una risa tan suave y fría llenó por completo el leve silencio, el cuerpo que estaba tirado bajo los pies de Pride se levantó con lentitud y calma, la cabeza de Envy se encontraba inclinada en un ángulo imposible para un hombre vivo; el joven simplemente usó sus manos para arreglar el "desperfecto" y volver a su pose anterior.

-Eres tan cruel, eso dolió bastante ¿sabes? -Envy sin quitar su sonrisa burlona tomó del cabello a Pride y estampó el rostro del rubio contra las baldosas rompiéndolas y haciendo un pequeño hoyo en el suelo, el joven retiró las manos del cabello manchado de sangre y lo dejó ahí, se puso en cuclillas frente a Pride y solo se quedó mirándolo -Odio el dolor y a los enanos que no saben en donde está su lugar. Te seguiré llamando como me dé la gana hasta que dejes de comportarte como un asqueroso humano.

Pride comenzaba a levantarse de ahí, posó una mano sobre las baldosas rotas tratando de buscar apoyo, levantaba levemente el rostro hasta que una mano le alzó con fuerza obligándolo a ver la cara de Envy, aquella que nunca dejaba su mueca burlona y que era acentuada por el rostro de dolor que estaba haciendo, gracias a los jalones de cabello que mantenían su cara alzada.

-Aun recuerdo bien la cara que hiciste cuando caías al infierno, tan llena de terror, aun pensabas que eras inocente, que tu no tenías nada que hacer en ese lugar si eras bueno con todos: ayudabas a los que podías, te metías en el camino de los abusones de tu comunidad, incluso pensabas en convertirte en policía y ayudar a limpiar a la sociedad de tanto crimen... Pero eso no era para nada tu verdadera personalidad, incluso creo que aun no te percatas de ello, sigues pensando que eres alguien bueno obligado a podrirse en el pecado. Piensas que nada de esto es tu culpa.

-¿Y no es verdad? ¿No me obligan a condenar almas solo para mantenerme lejos de mi castigo? ¡Siempre fui alguien bueno, alguien que merecía el paraíso y no las llamas del averno!

-¿De verdad? ¿Estás seguro que nunca hiciste esas buenas acciones para recibir alabanzas y palabras de gratitud? ¿No te hinchaban el pecho las miradas de los otros? Incluso ahora que pienso en aquel hombre que acabas de condenar ¿No dijo que siempre fuiste un interesado? TÚ lo admitiste.

-Silencio -Dijo en ese mismo tono peligroso que antes, como si fuera a matar en cualquier momento -No sabes nada de mí.

-Al contrario hermanito, incluso creo que te conozco más de lo que te conoces a ti mismo. Sé que nunca te importaron las personas a las que les tendiste la mano, tu complejo de héroe siempre fue impulsado por tus ganas de saber que sin ti ellos no podían haber salido adelante, siempre fue todo sobre ti. Es por eso mismo que ahora fallas como demonio: tú no eres un pecado, te ahogas en él, dejas que tu orgullo te domine y no dejas de ser un patético humano al final.

-Si soy tan incompetente ¿por qué no me han desechado como hicieron con Greed? -Pride quitó con brusquedad la mano que lo sostenía mientras se ponía de pie, sus heridas olvidadas y, posiblemente, ya curadas gracias a su cuerpo sobrenatural.

Envy se puso de pie igualmente y con calma, se le veía tan de buen humor y es que ¿Cómo no estarlo? El enano siempre fue una buena fuente de entretenimiento, aun cuando no era más que un simple mortal enclenque.

-No es necesario que te desechemos, tu solo te hundirás un día ¿para qué ensuciarnos las manos con trabajo que tú mismo puedes hacer?

-En algo tienes razón, yo mismo puedo hacer todo lo que necesite, incluso destruirme como tú dices -Algo estaba raro ¿él dándole la razón a Envy? -Por lo menos no necesito de algo más para sostener mi pecado, solo a mí; en cambio tú necesitas de alguien o algo más para ser envidia, los humanos a los que tientan deben de tener a otro elemento para caer en el infierno ¿no es eso más patético que mi situación?

-¿Tu diciendo ser menos que yo? ¡Vaya Soberbia que eres! No entiendo cómo es que Satanás te relaciona a lo que él cometió cerca del inicio de los tiempos.

Odio, nada puede describir mejor el sentimiento que llenaba los ojos de ambos pecados, tan cerca un enemigo del otro y sin embargo...

-No me entiendes para nada ¿verdad? Esa pobre y vieja cabeza no te funciona ya. ¿Sabes de donde nació tu envidia?

-De donde mismo nació tu soberbia.

-Exacto -Pride acercó sus rostros de manera brusca en un beso rudo y lleno solamente de desprecio, el otro no negó el contacto y puso sus manos en los hombros del rubio.

...sin embargo son incapaces de alejarse.

Las caricias repartidas con el único fin de arrancar la piel del otro, las palabras dulces llenas de veneno que prometen tortura deliciosa, el placer que los llena a ambos arrastrándolos a las profundidades del infierno.

Edward había visto hace años a Envy en la calle, el mismo cuerpo de pecado, los mismos labios que prometían placer inigualable: perfecto para ser su juguete. ¿Pero qué hizo Envy? Herir el orgullo del rubio, pisotearlo, le causó tantas cosas en ese momento: Deseo, envidia, odio... pero todo llevaba a un solo final.

Soberbia.

Su pecado.

Su perdición.

Edward murió esa misma noche que encontró a Envy, perdió su alma debido a su más grande pecado, pero aun así se sintió demasiado para merecer los fuegos eternos, no, él no merecía estar con las masas.

Él merecía estar por encima, no era un pecador. Era la representación del vicio y Envy lo sabía, le ofreció el lugar no viendo que estaba arriesgando su propia posición de poder sobre los otros, porque ¿qué no la soberbia da nacimiento a los otros pecados?

... no, Envy no sería menos que su nuevo Pride, él sería el más fuerte por siempre, al que los demás pecados capitales respondieran, él no envidiaría a un demonio recién nacido.

Pride siempre buscaría la forma de aplastar a Envy en su juego, mostrarle que fue un error que le haya rechazado, el de ojos violetas debió entregar su todo al rubio, doblegarse ante alguien superior, ahora... ahora solo le quedaba suplicarle su perdón, ser su juguete para la eternidad.

Envy lo sabe, esta conciente de los planes de Pride, pero es entretenido verle, saber que todo lo que hace es por ese sentimiento de envidia que suele venir con la soberbia. Aun así le sigue la corriente, le deja que le toque y que le bese, él domina la situación hasta el más mínimo gesto, Pride no sabe siquiera en lo que se está metiendo con alguien mucho más viejo.

Las criaturas del universo tienen muchas opciones ante el pecado:

Se pueden abandonar en él y disfrutarlo.

Se pueden convertir en él e incitar a otros a seguir en ese camino de vicio.

Y hay otros que prefieren ahogarse en él y perder su existencia en una espiral que solo va hacia abajo.

Envy y Pride están conscientes de que terminarán ahogándose en sus pecados, la cuestión ahí es...

...¿Quién se ahogará primero?

Notas finales:

Si, se que dejé muchas cosas al aire pero la verdad quiero incluir la historia completa de Ed en otro fic (posiblemente two-shot) junto con la historia de Envy

... Si xD porque alguien me amenazó incluiré lemon a la próxima

No se crean, es justo y necesario hasta para mi mentecita

Ahi me dicen si ya mejor vuelvo a mi tumba o de verdad quieren que lo siga xD cuidense


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