Hotaru y Akemi Usami
Nii-chan, siempre pensé que el vivir con usagi-san era algo extraño, pero no es nada comparado con lo que me ha pasado esta mañana….
Flash back
Eran cerca de las 5 de la madruga en domingo cuando en el cuarto de Takashi Misaki, un estudiante de universidad en la sección de economía, con 19 años de edad. EL vive en la casa de gran novelista Usami Akihiko, alias usagi-san, quien además escribe historias del genero yaoi bajo el nombre de A. yayoi para darle gusto a sus fantasías en las cuales un pobre chico castaño y de grandes ojos verdes en víctima.
En fin, el caso es que a esa hora el joven Misaki se encontraba soñando felizmente, hasta que por alguna causa desconocida sintió como era abrasado por enfrente, ligeramente despertó, mas no abrí sus ojos…
-tal vez sea usagi-san – pensó… más las manos que estaban en su espalda se sentían más pequeñas y descarto que el Usami fuera quien lo abrasara ¿desde cuándo sintió otros dos brazos extra?...
Sus ojos se abrieron de sobre manera observando como tenía una melena castaña bajos sus ojos y atrás alcanzo a ver unos cabellos platinados… el pobre de Misaki no supo hacer otra cosa más que…
-¡KYAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA! – gritar por la sorpresa (N/A:=w=U)
Aquel grito provoco que cierto escritor se levantara corriendo para saber qué había pasado con su pequeño amante, definitivamente no dejaría que durmiera solito en la inmensidad del cuarto su niño.
End the flash back
Ahora se encontraban los cuatro sentado en la sala tomando algo de té, Misaki y Akihito observaban a los “intrusos”, los cuales no prestaban la más mínima atención, y más el peli plateado, quien solo bebía tranquilamente su té mientras que el castaño le llamaba “onni-chan” y no le respondía.
-¿Quiénes son ustedes? – Pregunto el escritor -¿y que hacen aquí?
El pequeño castaño voltio a verlo algo sonrojado – etto… mi nombre es Akemi y él es mi nii-chan Hotaru… estábamos dormidos cuando otou-chan nos dio la carta y nos quedamos dormidos en nuestro cuarto…
-espera un momento – la explicación fue detenida por Misaki – ¿cómo es que llegaron aquí?
-nosotros vivimos aquí con otou-chan y ya-chan, aunque ahora que lo veo bien, faltan varias cosas – Dijo mientras pasaba la mirada por lo que había en la planta baja, hasta que paro al ver al gran oso de peluche – ¿Suzuki-san?
Misaki se sorprendió al ver que el menor sabia el nombre de Suzuki, aunque aún se le hacía extraño el ver a ambos jóvenes, ya fijándose atentamente el mayor parecía una copia exacta de usagi-san, hasta hacia la misma expresión que él, mientras que el menor, pues bien podría pasar como su gemelo, aunque se veía más joven y sus ojos eran de color negro.
-¿usted es Usami Akihito-san? – pregunto el menor con educación y algo sonrojado, definitivamente era igual de adorable que Misaki
-sí, ¿porque lo preguntas? – l e respondió un tanto confundido por la pregunta.
El oji-negro voltio hacia su hermano con una sonrisa como pidiéndole permiso de “algo” y este solo lo miro e hiso una señal de “has lo que quieras”, lo siguiente que se vio fue al menor saltar para abrasarlo sin ninguna restricción, todo fue tan rápido que solo se vio la cara de sorpresa de Akihiko, la de entre sorpresa-molestia de Misaki, la de felicidad de Akemi y una desinteresada por parte de Hotaru.
Aunque aquello fue algo sorpresivo, ninguno dijo nada y por alguna razón Akihiko sintió que debía acariciar la cabeza de niño, total hacerlo no le costaría nada ¿cierto?.... ese fue el error más grande y estúpido que provocaron los celos de Misaki (N/A: ya saben aunque este chaval lo niega mil veces, sabemos que lo ama).
-bueno, díganme ¿Qué es lo que quieren? – pregunto algo molesto el oji-verde (N/A: claro estaba tan poco enojado que podía cocinar en su cabecita non)
-parece que esa cosa que invento Hiroto si sirve… – pensó el Hotaru, para así sacar de su pantalón dos sobres en los que tenía para volver a dirigirse a los adultos – mi papá me envió con este sobre para usted, en pocas semanas se desarrollara una especie de virus que podría favorecerles – dijo seriamente – por lo que veo en el calendario aún faltan casi 2 y media semana, akihiko-san este sobre es para usted, ahí explica quiénes somos y a que venimos – declaro.
No muy convencido, y aun con Akemi sobre él, tomo el sobre y lo abrió con cuidado, sacando aquel papel y viendo la hermosa letra que en esta se encontraba, aquella letra la conocía a la perfección, esa era la letra de misaki, en ella impregnaba el siguiente mensaje (N/A: wow soy poeta =D):
Usagi-san:
No sé qué tanto le creas a mis hijos, míos y tuyos, sé que suena en verdad algo difícil de creer jejeje… yo no creía en que pudieran viajar al pasado solo para que cumplan con un tonto capricho que tanto me lamente, ellos saben en que concite su misión, si en verdad funciono seré muy feliz, pero si no… ¬¬ los matare si leen esta carta.
Bueno lo que quería es pedirte que los cuides y protejas… aunque Hotaru reclame y haga berrinche (¡POR QUE TENIA QUE SACAR TU ACTITUD!), sé que se pueden defender perfectamente… pero aun así, etto… no le comentes nada a misaki (se oye raro llamarme en tercera persona) sobre la carta que te eh enviado, no se invéntale que son tus sobrinos ¬¬U…
Atte:
Takahashi Misaki
PD: cuando le digan a mi nii-chan sobre la relación que tenemos (¿?) Hotaru te entragara el otro sobre dónde viene un respaldo de tus últimos 3 libros que le debes entrega a Aikawa el día 24 de mayo, 20 de junio y 26 de julio. Junto con unas fotos (¬¬U matare a Hotaru por la idea)
Voltio a ver al par de hermanos y soltó un suspiro cansado, sería difícil decirle a misaki que ambos se quedaran pero tenía que hacerlo con mucho tacto, lástima que él no podía decirlo de esa manera. (N/A: u.uU)
-bueno se quedaran hasta que acaben su deber ¿no es así? – pregunto el novelista
-así es – respondió seriamente – pero tendremos que asistir a clases… ¿o nos quieres aquí durante todo el día?
-¿en qué grado van? – el escritor los necesitaba fuera, no sabía que haría si ambos están ahí
Ambos jóvenes sonrieron, uno con malicia y el otro con inocencia – estamos en nuestro primer año de universidad.