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Aceptame por aachan

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Notas del fanfic:

Kise y Aomine, son de Kuroko no Basuke y pertenecen a Fujimaki Tadatoshi 

Notas del capitulo:

bueno aqui otra pequeña historia,
que le dedico a una gran autora, que me encantan sus fics, Daomine, con mucho cariño, espero te guste.

Acéptame

Por Aachan

 

Una cabellera rubia perteneciente a un muchacho de 20 años paseaba por toda la sala, se movía desesperadamente, Kise en verdad estaba molesto tenía una cita con Aomine a las 8:00pm eran las 8:15 y el susodicho no aparecía por ningún lado.

-Cuando llegue me las pagara, si es que llega- dijo mientras se sentaba en el sillón, llevaba tanto tiempo dando vueltas que se había mareado, se recargo en el respaldo e inclino su cabeza, viendo hacia el techo y recordando el día en que su relación con su amado Daiki había iniciado.

------------ FLASH BACK----------

Ese día terminó su entrenamiento, fue en busca de una bebida, cuando volteo ahí estaba, Aomine, tan guapo y seductor como siempre, un sonrojo se apodero de sus mejillas.

 -Hola- dijo un tanto nervioso, la presencia de Aomine siempre causaba eso en él. Aomine solo lo miro, se le notaba nervioso pero el rubio pensó que era solo su imaginación.

-Hola, ¿puedo hablar contigo?- dijo el moreno mientras se encaminaba hasta un parque, seguido de un confundido y preocupado Kise que no dejaba de darle vueltas al asunto, el asistía a Kaijo y Aomine a Tohou, asi que ese encuentro no era simple casualidad, llegaron hasta un  gran árbol y Aomine se detuvo y por consiguiente también Ryouta, cuando Daiki rompió el silencio, lo hizo un poco ruborizado.

-Entrenas mucho, pensé que nunca acabarías, - ¿me estuvo esperando? Se preguntó esperanzado el rubio. – Casi me iba cuando vi que al fin salías, y ahora aquí estamos- hizo un ademan con sus manos indicando el lugar, pero el rubio no lo noto, estaba ido en sus propios pensamientos “-entonces si me estuvo esperando-”,

Aomine se veía muy nervioso y el rubio al fin se percató de eso, por lo que pregunto, -¿Qué es lo  que pasa?-  él se limitó a suspirar y mirarlo fijamente como tratando de darse ánimos. Y cuando hablo lo hizo rápidamente que apenas y se le pudo entender.

-Esto es tan difícil, no sé qué decir, hasta hace unos momentos mientras te esperaba estaba tan decidido, pero ahora que estas frente a mí, no como hacerlo, no sé por dónde empezar, - Aomine no miraba al rubio tenía su vista fija en el césped, miro brevemente los ojos ambar de Kise y continuo: - Creo que mejor lo digo antes de que vuelva a arrepentirme, tomo ambas manos de Kise (este hiso un esfuerzo sobrehumano para no derretirse ante la atrevida acción del moreno.) Aomine lo miraba serio y decidido Kise nunca lo había visto tan de cerca por lo que su sonrojo fue inminente, pero aun asi no aparto la vista de Daiki, algo le decía que no debía hacerlo. – Me… tú me gustas – Kise abrió los ojos sorprendido.

-¿Qué?- pregunto, angustiado de que su imaginación le hubiera hecho una mala jugada, Daiki había dicho que él le gustaba, en su mente eso no era posible.

-Me gustas, desde hace un tiempo que lo descubrí, no puedo dejar de pensar en ti, quiero estar a tu lado, tocarte, abrazarte, besarte. – Ryouta no decía nada, estaba en una especie de shock, su amor no correspondido desde la secundaria, era correspondido al fin, después de 3 años en que ansiaba escuchar esas palabras, al fin estaba pasando, Daiki correspondía a su amor. –Lo siento.-  Dijo Aomine con una cara llena de tristeza. – Seguramente esta confesión te da asco, pero ya no podía soportarlo, necesitaba decírtelo. –

El moreno soltó las manos del contrario, y empezaba a marcharse, “-no , no, lo está malinterpretando-“ pensaba el rubio, tenía que detenerlo pero sus pies no respondían, tenía miedo de volver a perderlo, trato de hablarle pero no pudo, gruesas lagrimas comenzaron a caer y un sollozo escapo de su garganta, en menos de un segundo Aomine se encontraba nuevamente a su lado, - Perdón, no sabía que lo tomarías tan mal, discúlpame,  nunca debí decírtelo.

-No, lo estas malinterpretando- sorprendentemente su voz había regresado, tal vez se debía a que Daiki volvía a sujetarlo, pero no se entretuvo pensándolo y continuo. – También me gustas, te he querido desde que estábamos en segundo de secundaria,  estoy tan feliz que apenas puedo mantenerme en pie, Te Amo Daiki, -El moreno feliz, lo abrazó

- No sabes lo feliz que me haces, estaba tan asustado, pensé que me odiarías, Te Amo Ryouta. – lo tomo del mentón y lo beso, un beso rápido, delicado y lleno de amor, ambos se abrazaron y cayeron de rodillas.

------------------FIN FLASH BACK----------------

Asi había comenzado su noviazgo, y ambos han sido muy felices desde entonces, ambos confiaban el uno en el otro, se amaban,  su relación era la envidia de toda la universidad. 

Kise volvió a suspirar, al ver que eran las 8:30pm y Daiki seguía sin dar señales de vida, en los 3 años de su noviazgo, nunca lo había dejado plantado, y tenía que ser precisamente hoy la primera vez, Kise había planeado una noche maravillosa, para conmemorar esos 3 años, era su aniversario y el muy maldito no aparecía,  estaba a punto de ir a quitarse el traje (se lo había puesto a petición de Daiki), cuando su celular sonó:

-Al fin te dignas a llamar,- dijo en tono molesto a la persona del otro lado de la línea.

-Lo siento amor, tenía algo que hacer, y   se me complicaron las cosas, pero ya estoy aquí,  ¿puedes salir? – Ryouta no lo veía, pero podía imaginar a su novio haciendo un puchero.

-Bajo enseguida.- Colgó el celular, se miro al espejo, se acomodó el traje y el cabello, se veía tan sexy con ese traje negro, entallado, notándose su bien trabajado cuerpo, sabía que Aomine babearía al verlo, y quién no.

Bajo un poco molesto, no le perdonaría tan fácil hacerlo esperar esos 40 min. Lo haría sufrir un poco, pero solo un poco, después de todo no le podía negar nada a su novio.
Pero al salir todo eso se esfumo, ya que se encontró frente a una mesa;  adornada con velas, rosas y unas charolas que lo más seguro contenían comida.

-Lo siento, tardaron en encontrar el vino que quería. FELIZ ANIVERSARIO- dijo mientras señalaba la mesa y le recorría la silla para que tomara asiento, el rubio tomo asiento, el moreno lo beso para después hacer lo mismo.

Todo estaba perfecto, la mesa, el vino, la cena, Aomine, la amena platica y charla sin sentido, se notaba a kilómetros  de distancia el gran amor que ambos se profesaban. Al terminar el postre, Aomine acerco su silla junto a la de Kise, y hablo un tanto mas serio.

-Estos 3 años que he pasado contigo han sido maravillosos, eres lo mejor que me ha pasado,  deseo estar a tu lado por siempre, - Kise abrió la boca para decir algo, pero Aomine hizo un ademán con su mano para que lo dejara terminar. – Es por eso que quiero que aceptes esto: - dijo mientras le mostraba una caja con un anillo dentro, era un anillo muy lindo, de hombre, no tenía nada especial salvo que había dos iguales. – Mira yo tengo otro- estiro su mano para que Ryouta pudiera observar el anillo que llevaba puesto,  - este dice Ryouta y el tuyo dice Daiki, sé que no podemos casarnos y que aun somos jóvenes, pero quiero estar siempre a tu lado, asi que por favor, Acéptame. ¿Quieres vivir conmigo? – Kise no respondía, a decir verdad todo el tiempo estuvo en silencio y solo observaba alternativamente de Aomine, al anillo, y del anillo a Aomine, asi que el moreno agregó,  - rentaremos un lugar cerca de la universidad, asi podemos estar siempre juntos y se nos haría más fácil, ¿Qué dices? – el rubio seguía sin hablar, pero para cualquier respuesta, estiro su mano y Daiki coloco el anillo en su dedo anular, ambos se miraron y se sonrieron, Kise observo su anillo y el de Daiki, entrelazo sus manos, y se levantó de la silla, obligando a Aomine a hacer lo mismo, una vez levantados los dos, Kise abrazo a su novio, y unas pequeñas lagrimas cayeron por sus mejillas.

-No sabes lo feliz que me haces Daiki, Te amo, y he sido feliz durante los 6 años de mi vida que te he amado, cuando me dijiste lo que sentías por mí, no lo podía creer, desde entonces mi felicidad ha ido en aumento, Te amo, gracias por hacerme tan feliz- sus lágrimas seguían cayendo en el hombro de Aomine y cuando se dio cuenta el suyo también estaba empapado, pero de las lágrimas de Daiki,

-También Te Amo Ryouta, y lamento tanto no haberme dado cuenta antes, pero a partir de ahora, viviré solo para hacerte  feliz.

-También yo Daiki, viviré solo por ti, y para ti.

-Eso me agrada, y con este anillo,- tomo dulcemente la mano de su amante y jugueteo con el anillo- ya todos sabrán que eres solamente mío, ya me canse de espantar siempre a esas molestas moscas que te andan rondando para todos lados,

-jajaja eso no es verdad, todo el mundo sabe de nuestra relación, y nadie me sigue a ningún lado.

-Porque yo los espanto- dijo entre dientes, para provocar una risita en el rubio, ninguno de los dos noto que sus lágrimas de felicidad habían terminado,

-Te amo Ryouta, nunca me cansare de decírtelo. –se soltó del abrazo del rubio, pero no se soltaron del todo, el aun sostenía sus caderas y Kise sujetaba su cuello,- Te amo tanto.- beso dulcemente sus labios.

-Te amo Daiki, siempre lo voy a hacer, siempre te amare sin importar el tiempo, ni las circunstancias.- igualmente beso a Daiki.

- Bien ahora es tiempo de mi regalo- sonrió seductoramente al rubio y lo jalo hacia la entrada del complejo de apartamentos  donde vivía, cuando se dio cuenta.- Espera que vamos a hacer con esto, - señalo hacia la mesa.

-No te preocupes, le pague al portero para que la quitara, en cuanto no nos vea, asi que sigamos- siguió caminando a la entrada.

En el elevador, ninguno de los dos quería esperar más, estaban abrazados y prácticamente se devoraba uno al otro. Y prosiguieron asi hasta que llegaron al piso del rubio, se separaron y casi corren al departamento. Una vez dentro Aomine se abalanzó sobre Kise,

-No sabes lo sexy que te ves con ese traje, y lo que me provocas, eres tan lindo, - decía con voz inusualmente ronca, mientras repartía pequeños besos por todo el cuello de su novio.

-Pues si me veo tan sexy,  no me lo quites-dijo, en son de burla, cuando Aomine comenzó a aflojar la corbata-

-Te ves aún más sexy sin el.- arrojo la corbata y comenzó a desabrochar la camisa blanca.

-Espera, alto, aun no te doy mi regalo, - Kise se dirigió a su habitación y saco una gran caja de regalo y se la entregó a Daiki –Ábrela

-wow, es  genial, me encanta amor, - sus ojos brillaban, mientras observaba la chamarra de cuero que Kise le había obsequiado, y rápidamente se la probo.

-Estaba en lo cierto, cuando la mire, me dije: Daiki se verá tan sexy con ella, y no me equivoque, te vez muy sexy.- decía mientras le repartía pequeños besos en sus mejillas y sus manos se deslizaban por debajo de la recién adquirida chamarra.

-Pues si me veo tan sexy no me la quites- repitió las palabras de su novio, cuando este comenzó a desabrocharla.

-Te ves aún más sexy sin ella, y sin nada. –

Ambos retomaron su labor, y en pocos segundos, ambos estaban completamente desnudos, y besándose por todos lados, apenas y llegaron a la Habitación, Aomine coloco dulcemente a Kise en la cama y se puso entre sus piernas, mientras retomaban el beso, las manos de Daiki se dirigieron a su entrada, y comenzó a prepararlo, -Te amo Ryouta -, dijo al tiempo que empezó a penetrarlo, lenta y cuidadosamente, También Te amo-, poco a poco todo fue aumentando, las estocadas, los gemidos, la pasión, el calor de sus cuerpo, el sudor, el placer y el amor. Ambos llegaron al final con un sonoro gemido. Aomine se dejó caer al lado de Kise, entrelazo sus manos a modo de que ambos anillos se encontraran.

-El viernes al terminar las clases, buscaremos un departamento, ¿te parece?

-Perfecto, - dijo somnoliento el rubio, antes de quedar dormido.

El moreno retiro unos mechones de la frente de Kise, le dio un tierno beso en los labios y suspiro profundamente –Gracias por haberme aceptado, me has hecho muy feliz.- susurro a Kise, sabiendo que este no lo escuchaba.

 

Notas finales:

es un poco corto y raro aun asi espero que hayan disfrutado de leerlo.
si gustan dejar un review nos leeremos ahi.

gracias por leer, matanee


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