Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Pay Me por fivetreasurebox

[Reviews - 6]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Era un martes cualquiera, el sol brillaba, las nubes estaban totalmente blancas y Sehun se disponía a trabajar. Acomodó su corbata verde bosque y tomó su maletín negro de cuero, entro en el ascensor del edificio departamental en el que vivía, seleccionó el piso del estacionamiento, saludó al vigilante y se subió a su Ford blanco con interiores de piel en color negro, giró la llave y puso se puso en marcha. Todo iba bien, en la radio pasaban puras canciones que le gustaban, iba a tiempo al trabajo, los semáforos le habían tocado el verde, era como si todo estuviera a su favor. Ese día nada malo le pasaría.

 

Delante de él iba un lujoso auto color plata perfectamente cuidado, no podía reconocer que modelo era aquel automóvil maravilloso, se acercó, aun no lo veía bien, se acercó más. Pum. Un golpe duro, le había pegado al coche plateado. Maldita sea. El dueño se bajó enojado, más bien furioso gritando maldiciones, lo único que Sehun se atrevió a hacer fue bajarse de su auto blanco y aproximarse al dueño del carro bonito que ahora tenía abollada la parte trasera.

 

-Lo siento

- oh claro, con un “lo siento” todo queda arreglado ¿no? –Dijo el dueño obviamente molesto- imbécil

- Lo siento, te pagaré –dijo Sehun apenado-

- Oh claro que lo harás, hasta el último centavo, dame tu nombre –dijo fulminándolo con la mirada- ahora

- Oh Sehun

- Bien Sehun, ahora vamos con el mecánico, a que te den el presupuesto de las reparaciones –sacó su teléfono y le tomó una foto al menor- ahora, no intentes escapar, tengo tu nombre y foto, si escapas, te mandaré directo a la cárcel. Andando

 

Los dos rubios se subieron en sus respectivos carros. Sehun seguía al coche de Luhan, aún no podía creer que tendría que pagar a ese desconocido. No tenía la certeza de cuanto tendría que pagar, pero estaba seguro de dos cosas, la primera: no sería barato reparar ese carro y segundo: el dueño era absolutamente atractivo

 

Mierda, mierda y más mierda –pensó- ¿Cómo carajos le voy a pagar? Se ve que es un auto costoso, no creo poder completar. Además el dueño no se ve precisamente amable ¿Qué haré? Me voy a morir, no sé de dónde sacar dinero. Ya, cálmate Sehun, todo estará bien, quizás y no es tan costoso.

 

¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬

 

Luhan no dejaba de pensar en su pobre automóvil nuevo, lo acababa de comprar, no tenía ni un mes con él y este imbécil llega y le abolla la parte trasera.

Sostenía con furia el volante de piel, no dejaba de maldecir en un tono apenas audible. Ese definitivamente no había sido su día; primero, su personal de limpieza renunció por “problemas familiares” Lulu había pensado que esa era una excusa bastante estúpida. Segundo, la pantalla de su móvil se había estrellado y ahora le habían chocado el auto nuevo.

Este día no podría ir peor –dijo Luhan lleno de ira- ese maldito bastardo “Sehun” no se la va a acabar, tendrá que pagar cada centavo, no me importa dejarlo en la calle, ese idiota me pagará.

Algunas maldiciones y gritos de furia después llegaron al mecánico, los dos se bajaron, Sehun iba casi temblando, Luhan caminaba con una seguridad impresionante el menor se sintió intimidado ante aquel hombre delgado con rasgos faciales tan delicados y elegantes que parecía inhumano. El más pequeño veía como su mayor se movía con movimientos elegantes hacia el mostrador.

 

-Buenos días –dijo Luhan mirando con indiferencia al hombre regordete que estaba tras el escritorio de vidrio-

- Buenos días –respondió el hombre gordo sin ganas-

- ¿podrían hacer un presupuesto? Este idiota –señalo a Sehun con el dedo, la cara del menor se llenó de color rojo- me chocó el coche

- Bien, vamos a verlo

 

Minutos más tarde llegó el momento que Sehun más temía, la hora de la cuenta.

 

-Bueno –dijo el hombre del taller- según como lo veo, en dólares serían, unos….. 8 mil

- ¿8 mil? –preguntó Sehun aún impactado-

- Si, verá, las refacciones de este carro son caras y difíciles de encontrar, más la mano de obra. Si, ese es el precio.

- Paga –dice Luhan en tono duro- ahora

- Pe-pero yo no tengo ese dinero –tartamudeó el menor-

- Pues no sé que tengas que hacer pero me vas a pagar todo niño

- Ni vendiendo mi auto tendré el dinero

- Bien, tendrás que trabajar para mi –dijo el mayo con aire de victoria-

- ¿para ti?

- No directamente, mi socio necesita un asistente, trabajarás en mi empresa hasta que pagues ¿entiendes?

- N-no se tu nombre –dijo el menor con angustia en los ojos- ni donde trabajas

- No seas idiota, te llevaré a mi empresa, comienzas hoy. Soy Luhan.

- Ok. Luhan

- Luhan es para los socios y amigos, tu háblame con respeto. –dijo mirándolo con dureza- no lo olvides Sehun

- ¿Lo quiere arreglar o no? –dijo el mecánico interrumpiendo-

- Si –respondió el mayor dejando a Sehun en shock-

- Bien, estará listo en un mes.

 

 

Con esas palabras se quedaron ambos. Sehun estaba tan aturdido y atiborrado de sentimientos y de ideas que solo escucho algo que el mayor le dio pero de eso solo comprendió: Sígueme.

 

El menor se subió a su auto aún en shock, no podía creer que realmente estaba pasando, que no era un sueño tonto del que despertaría con el sonido agudo del despertador. Tendría que renunciar a su otro trabajo para después ser el asistente del socio de Luhan. Asistente de un tipo al que nunca ha visto en la vida. Jodida suerte. Puto carro. No debió haberse acercado al despampanante auto del mayor, si se hubiera quedado a una distancia prudente nada de esto hubiera pasado, él estaría en su trabajo redactando la columna de las noticias internacionales para una revista de cultura en lugar de estar siguiendo a un individuo del que no tiene ni una jodida idea de quién es. Sin duda la vida da muchas vueltas.

 

Antes de que el menor se diera cuenta ya estaba estacionando su Ford en el estacionamiento de la empresa del tal Luhan.

 

Una vez fuera de su auto el mayor se acercó con pasos elegantes al más pequeño.

 

-Camina rápido y pon atención, mi socio no espera en mi oficina.

 

Sehun no dijo nada más, con eso era suficiente. Captaba a la perfección la idea. En el elevador, ninguno dijo nada, el menor veía nerviosamente sus manos y jalaba un poco la cutícula para liberar el nerviosismo, los minutos eran eternos, era como si ya llevara años en ese lugar, además estaba incómodo con la presencia de Luhan, éste le intimidaba mucho. Unos minutos después, los dos chicos estaba caminando hacia la oficina del mayor, ésta estaba perfectamente bien decorada y limpia, las puertas eran de vidrio, los sillones de piel en color negro, algunos cuadros en marcos plateados y pequeños adornos de color verde limón que sobre salían entre el color blanco de las paredes. Junto al escritorio estaba parado un hombre alto, delgado de piel blanca, finas facciones, cabello castaño perfectamente bien peinado y vestía un traje negro, camisa de vestir blanca y una corbata de color azul rey.

 

-Bien Sehun, te presento a Park Chanyeol –dijo Luhan mirando a su socio- Serás su asistente

- Mucho gusto, Sehun ¿cierto? Luhan me lo contó todo –le estrechó la mano al menor-

 

El pobre chico no se dio cuenta de que a Chanyeol le había gustado y mucho, en sus ojos había deseo, deseo por él.

 

Notas finales:

gracias por leer XOXOXOX


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).