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Los Deseos de un Demonio por paunina12

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Notas del fanfic:

Sin nada que decir pasen a leer :3 Espero que les guste

Notas del capitulo:

los  personajes de kuroshitsuji no me pertenecer son de su cradora yana toboso

Bochan, mi pequeña y deliciosa alma- Pensaba el peculiar y diabólico  mayordomo de la mansión Phantomhive- ah, mi preciado conde, si supiera todas las cosas que pasan por mi cabeza cuando estoy a su lado, tengo que admitir que he caído en sus redes y ya no hay nada que pueda hacer.

Pero, ¿desde cuándo comenzó a tener esos sentimientos por su bochan?, la respuesta era muy simple, desde aquel incidente en donde este, para introducirse de incognito y atrapar a Jack el Destripador, tuvo que ponerse un apretado corsé y usar un hermoso vestido rosa con detalles negros, justo en el momento en que lo escuchó decir su nombre de una manera extraña a todas las otras veces, una manera tan…Provocativa.

Flash back

- Ngh ¡Sebastian!- decía el conde entre jadeos, mientras se cargaba en la pared que se encontraba  frente a él  – ¡Ahh! ¡Se-Sebastian!, ¡detente, ya está muy apretado! ¡Me duele!

-Sopórtelo solo un poco más, ya se acostumbrara- decía el mayordomo mostrándose tranquilo, aunque por su mente cruzaban pensamientos que nunca hubiera creído llegar sentir por un contratista.

POV SEBASTIAN

Mi joven amo, siempre serio y con voz firme, quién diría que sonidos tan obscenos podrían salir de su boca,  No puedo evitar imaginar cómo jadeará y gemirá si fuera tomado por un hombre. Podría ser cualquiera, ya que nadie logra resistirse a sus encantos a pesar de ser  un niño aún, hay algo que tiene que los atrae a todos, como si de abejas a la miel se tratada y yo, por ser un demonio lamentablemente no soy la excepción. Si lo pienso bien, no estaría nada mal que yo fuera quien lo domara, que lo hiciera gemir y jadear debajo de mi seria en verdad un delicioso pecado que estaría dispuesto a cometer.

 

Alto, ¿Qué es lo que acabo de pensar? ¿Creo que seré capaz de hacer que se trague todo su orgullo para poder dormir con él?

Creo que debo haber enloquecido. Creo que lo único que siento es deseo, pues soy un demonio después de todo, mi figura es asimilada a la lujuria, pero ¿Cómo no sentir lujuria o deseo por mi joven amo? Esa forma de ser tan fría y  calculadora  pero  bajo todo eso se encuentra un chico con un alma increíblemente pura y mancillada a la vez, ya que es tan inocente para algunas cosas y actúa como si fuese todo un hombre para otras. Ese andar siempre tan seguro y ese hermoso rostro, esos ojos azules que siempre se muestran fríos con todos, excepto conmigo, ya que poseemos una conexión digna del contrato.                             

FIN POV SEBASTIAN

Después de ponerle el corsé a su joven amo y ajustarle el vestido el  mayordomo solo pudo soltar una sonrisa burlona.

-¿De qué te ríes Sebastian?- pregunto molesto el conde.

- Solo me sorprende que se vea tan bien joven amo, o debería decir joven ama- dijo el pelinegro con un tono burlón mirando al conde que comenzaba a molestarse por el atrevimiento de su mayordomo- aprovechando el momento y  antes de que su amo pudiera siquiera chistar, el demonio le sujeto  del mentón y lo atrajo hacia él, poniendo su mano izquierda su cadera, provocándole un ligero sonrojo -¿Qué le pasa joven ama? ¿Está nerviosa? ¿O acaso está molesta?- preguntó acercándose lentamente al rojizo rostro del Bocchan.

- ¡Su-suéltame Sebastian, bastardo!-dijo molesto el menor poniendo sus manos en el pecho del mayordomo, separándolo- ¡idiota! ¿¡Quién te crees que eres!? ¡ESTUPIDO DEMONIO!

La vacía habitación se llenó de un sonido de golpe y el mayordomo de negro quedó con una mano marcada en su atractivo rostro.

- Ya es hora de que te pongas en tu lugar, Sebastian, ya estoy cansado de tus bromas. Compórtate como lo que eres, una simple pieza de mi juego, Ya deberías saber que lo único que puedes hacer es servirme -habló el conde con un tono de superioridad.- Ahora sal de aquí y prepara el carruaje. Es una orden.

- Yes, my lord – Respondió el azabache arrodillándose para luego salir de la habitación con un aura maligna ¿Cómo se atrevía a tratar a “el cuervo”, el demonio más poderoso de esa manera? No dudó ni un segundo en golpearlo aunque sabía que en menos de un mini cerrar de ojos él podría haber acabado con su vida y tomar su alma sin vacilación alguna. Definitivamente le gustaba esa actitud suya de sobremanera. Era atrevido y directo y cuando creciera sería un completo semental que arrasaría con todas las mujeres y hombres que se cruzasen en su camino solo con una sonrisa. Al igual que lo hacía él.

 

Unos minutos más tarde se subieron al carruaje para llegar a la mansión en donde se realizaría el baile

POV CIEL

Estaba intranquilo, sabía que tarde o temprano tendría que bailar con Sebastian y de nuevo me tomaría suavemente de la mano y tocaría mi cadera, ese toque suave y  encantador que vuelve locas a todas las damas, desde meretrices hasta condesas.  Agregando a esto la  mirada seductora que me muestra cuando estamos en medio del baile, al ritmo de la lenta balada, ¡Demonio idiota! Cree que tiene la libertad para tratarme como  a cualquiera de los contratistas, ya debería saber desde hace tiempo que no soy como todo ese montón de idiotas que pedían, sexo, amor, mujeres, dinero y fortuna.

La Balada da inicio y tú actúas como si fueras mi tutor, con ese peinado y gafas elegantes nadie sospecharía que en realidad eres un demonio. Como era de esperarse mi ruidosa prima Elizabeth está en el baile  por alguna extraña razón queda realmente encantada con el vestido que me confeccionó Nina Hopkins, la rubia trata afanosamente de  acercarse para –al parecer- entablar una conversación sobre el vestido. Al correr el riesgo de ser descubiertos y peor aún, que mi prometida me viese con ropa de mujer, nos trasladamos de la parte más concurrida para bailar hacia la esquina más apartada de la mansión, en donde nos topamos con ese pervertido que no perdió tiempo para empezar a coquetearme de forma descarada. Aunque Sebastian había hecho lo mismo no se sintió de la misma manera, cuando el demonio posó suavemente sus manos en mi cadera me sentí muy avergonzado y no sé por qué pero también estaba nervioso, cosa que logré disimular casi a la perfección, pero el ser tocado por ese sujeto rubio y pervertido solo me produjo una gran incomodidad y asco.

FIN POV CIEL

FIN FLASH BACK

El pelinegro pudo oír la llamada del joven conde y se dirigió a la habitación de éste, tratando de no pensar cosas prohibidas

-¿Qué desea bochan?-

-Prepara la tina, quiero darme un baño.

-Como ordene Bocchan- dijo el demonio, y en un momento ya se hallaba en el baño privado Ciel alistando la tina.

-Ya que mi estimado Bochan, desea tener urgentemente un baño de tina relajante, yo se lo daré con mucho gusto -dijo en voz baja, en su rostro se dibujó una sonrisa pícara.

Sebastian sacó de su bolsillo una pequeña botellita con un líquido rosáceo, que vertió completamente en el agua de la tina, el líquido se mescló con esta poco a poco, hasta que volvió a ser cristalina como en un principio. El demonio sonrió, la primera fase de su plan estaba hecha.

-¿El baño está listo Sebastian? Estás tardando- dijo el ojiazul.

-Claro que si bochan, voy a buscarlo en un momento- respondió el ojirojo y caminó hacia él para hacerlo entrar al baño.

Sebastian no dejaba de pensar que amaba desnudar a su amo, desabrochar cada uno de sus botones y quitarle sus finos lazos y ropajes. Ya no le costaba admitir que le encantaba ser el único que pudiera verlo desnudo, trataba de tocar su lechosa piel cada vez que podía, siempre estaba así, tratando de alargar el contacto físico son que el Joven Amo se percatara. Pensaba en el cada minuto del día. “Si supieras cuanto quiero atacar tus labios hasta dejarte sin aire y amarte hasta el amanecer, sentir tus gemidos en mis oídos mientras susurras mi nombre de la manera más sensual que existe” no dejaba de pensar el demonio.

-¿Se-Sebastian? ¿Estás bien? Te noto algo extraño- preguntaba Ciel algo confundido pues su mayordomo después de desnudarlo y meterlo en la tina había quedado sumergido en sus pensamientos.

-Estoy bien Bocchan, no es nada -dijo el mayordomo comenzando a enjabonar a su amo.

Después de algunos minutos el menor comenzó a relajarse, pues el líquido que había puesto Sebastian comenzaba a hacer efecto,  así que lentamente este comenzó a balbucear frases inentendibles como si estuviera adormilado y ebrio. Sebastian al percatarse de que el conde estaba ya bajo los efectos de esa droga, se acercó a él y toco un punto de presión en su cuello, causando que este se relajara y sin darse cuenta soltara lo que pareció ser un pequeño gemido que en un instante ahogo con su mano.

-Sebastian ¿lo estás haciendo a propósito? Demonio pervertido- dijo con un notable sonrojo- ¿¡Cómo pude decirle eso!?- pensó el conde

-Bochan ¿existe algo que yo haya hecho para hacerlo pensar de esa manera?-dijo el mayordomo, conteniendo su risa, todo estaba saliendo como lo planeó y en unos segundos podría hacer su jugada estratégica.

Volteo el rostro de su amo y lentamente acerco sus labios a los de él.

-Sebastian que estas hacien… - alcanzó a decir el conde mientras sus labios eran atacados por los del demonio.

Sebastian le dio un casto beso al menor y luego de ver los brillantes ojos del conde mirándolo con ojos expectantes, brillantes y  su boca ligeramente abierta al separarse, toda su cordura se desvaneció. Volvió a robarle otro beso y con su lengua delineó los labios del menor para que le permitiera entrar a su boca, lo que el confundido y drogado conde concedió lenta y torpemente, sus leguas se juntaban en un baile exótico donde el demonio tenía el control  Ciel trataba de resistirse, pero le parecía increíblemente difícil. En ese momento comprendió que esa era una de las cosas por las que las mujeres caían de forma tan deprisa a los pies del pelinegro. Poco a poco el menor comenzó a disfrutar el beso, aunque se sentía realmente bien no podía dejar que continuara. El demonio solo estaba jugando con él después de todo ¿no es así?

El joven se separó de su mayordomo- Sebastian ¿qué rayos estás haciendo?- dijo el menor antes de desmayarse.

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Cuando despertó se encontraba en su cama y  no veía a su mayordomo, los recuerdos de lo ocurrido en el baño le cayeron encima como un balde de agua fría, un increíble sonrojo se pintó en sus mejillas, estaba tan avergonzado, no entendía cómo podía haberse dejado llevar de esa manera, más aún con un demonio y para empeorar más las cosas  justamente con el que iba  devorar su alma. Después de mirarse por todos los ángulos en el gran espejo que estaba en su habitación, descartó cualquier acto pervertido que se le hubiese ocurrido hacerle su mayordomo. Se dio un último vistazo para asegurarse y  se dirigió lentamente a la habitación de Sebastian  prefería ir el mismo a tener que llamarlo.

Según lo que recordaba le había dado a Sebastian la habitación más alejada del centro de la mansión, incluyendo del área de servicio, pues creía que al ser el mayordomo principal debía tener una habitación un poco más grande que sus compañeros, eso y porque era un demonio, claro está.

SEBASTIAN POV

¿¡Por qué no pude hacerlo mío!? Estuve tan cerca, no puedo creer que me haya arrepentido en el último momento, justo cuando él estaba en mis brazos profundamente dormido. Como si nada hubiese pasado lo estaba vistiendo para acostarlo.

Es la primera vez que me sucede algo así, creo que eso confirma mis sospechas, el querer que solo duerma conmigo y no  obligarlo a pesar de que todo estaba a mi favor me muestra que quizás me gusta, o bueno, quizás que poco a poco me estoy enamorando de él.

De un segundo a otro siento un sonido en la puerta y veo que el joven amo la abre, entra  y con llave la cierra detrás de sí.

-Bo-bochan, no debería estar aquí tan tarde, debería estar durmiendo, recuerde que si necesita algo solo tiene que llamarme, no hace falta que venga por cuenta propia-Las palabras comenzaron a salir apresuradamente de mi boca, estaba nervioso, no sería para nada bueno si recordaba lo que estuve a punto de hacer.

-¿Te molesta que este aquí Sebastian?, porque lo que hiciste en el baño me demuestra que quieres a toda costa tenerme aquí- mierda, pensé.

Se acercó a mí con aires gatunos y seductores, meneando sensualmente las caderas de un lado hacia el otro, y sin perder el contacto visual, se agachó  se situó entre mis piernas abiertas y coquetamente pasó su dedo por encima del pantalón, justo en mi parte íntima.

-Bo-bochan ¿qué hace?- pregunte bastante desconcertado ¿acaso lo que había hecho en el baño había dado resultado?

 -Quiero que me tomes de una vez, ¡Es una orden!- dijo inesperadamente.

 -Yes, my lord-tras pronunciar estas palabras procedí a quitarle rápidamente la ropa, esa piel desuda que tanto tiempo había querido acariciar por fin tenía el derecho de tocarla, de hacerlo mío de una vez por todas, y con su autorización. Una vez su pecho estuvo desnudo comencé a lamer sus pequeños y rosados pezones, Ciel no hacía más que gemir y apegarse a mí, disfrutando del placer que le proporcionaban mis caricias. De repente se separó y bajó a mi pantalón para abrir el cierre y liberar mi miembro de la prisión de tela en la que se encontraba, tomó mi virilidad con suavidad  la introdujo lentamente en su boca, lo metía y sacaba de su boca mientras con sus manos acariciaba mis testículos.

-Bocchan, nunca pensé que terminaríamos haciendo esto, no sabes cuánto lo había soñado.

Espera, nosotros…esto ya... podría ser ¿un sueño?

Un espasmo involuntario me despertó de mi hermoso y lascivo sueño.

-No puede ser, es tercera vez en este mes –pensé, sintiendo un incómodo dolor en mi miembro.

Soy lo más patético del mundo, un demonio poderoso, un temido come-almas teniendo un sueño húmedo con un chico de 13 años. Nunca había tenido que masturbarme pues compañía no me faltaba. Pero no podía ir simplemente acostándome con cualquier persona que me apeteciera, eso arruinaría mi imagen como Mayordomo principal de la familia Phantomhive.

-Si supieras como me tienes, Bocchan- dije para mí mismo y tome mi miembro que se encontraba erecto debido al sueño, comencé un sube y baja lento y tortuoso mientras recordaba el sueño que había tenido y aumentaba la velocidad de mi mano para poder solucionar mi “problemita”. Comencé a masajear mis testículos y a frotar la punta de mi miembro, imagine al joven amo arrodillado dándome placer con su boca mientras me miraba de forma inocente. Estaba más que excitado y solo pude continuar…

FIN SEBASTIAN POV

El verdadero conde Phantomhive bajaba las escaleras que llevaban a la habitación de su mayordomo, pero mientras más se acercaba escuchaba ruidos extraños

-¿esos no son…gemidos?- se preguntó el conde al escuchar poniendo su oreja en la puerta, su conciencia le decía que debía volver, pero su curiosidad se lo impedía y lo puso a mirar por la cerradura.

Vio algo increíble, su perfecto mayordomo ¡SE ESTABA MASTURBANDO!

Ciel estaba más que asombrado pues creía que los demonios no necesitaban eso, pero se sorprendió más cuando el mayordomo habló.

-Bocchan-decía entre jadeos y gemidos el mayordomo.

El menor pensó que había sido descubierto, pero se equivocó.

-Joven amo…Bocchan, ngh…ahh...- Observó la sonrojada cara de su mayordomo y todo quedó claro.

Se está masturbando ¡mientras piensa en mí!- pensó el ojiazul que no salía de su asombro, por algún motivo no podía dejar de mirar, hasta que se dio cuenta de que su mayordomo ya estaba por acabar.

-Bocchan… ¡ah!- dijo el demonio antes de correrse, respiró agitado  miro su mano izquierda  que estaba algo mojada con un poco de semen y llevo uno de sus dedos a su boca para probar su sabor.

- Rayos- Estaba a punto de irse cuando escuchó algo que lo dejó aún más descolocado.

-Es dulce, me pregunto si le gustara a bochan podría ponerlo en uno de sus postres, no se daría cuenta y seria extremadamente excitante-dijo el demonio mientras sus ojos se ponían más rojos y brillaban.

CIEL POV

Me fui de ahí corriendo, sé que no debí haber visto nada de eso pero… algo me impulso a quedarme. Ver a Sebastian de esa manera, fue algo realmente extraño e interesante…

Voy en camino a mi habitación estoy completamente sonrojado y simplemente me acuesto y trato de dormir, pero no puedo dejar de pensar en Sebastian, estoy confundido.

¿Qué planeas, demonio?

Notas finales:

bueno espero que les haya gustado, lamento las faltas de ortografia,dejen sus reviews y diganme que les pareció.

~ Sayonara ~


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