Sus ojos se abrieron de par en par, aun no se lo creía: la persona que amaba, estaba en coma, su mirada comenzó a humedecerse, sintiendo una gran dolor en el pecho, deseando estrellar su puño, contra el maldito idiota que le había disparado, dejando a Rick inconsciente
-Llévame al hospital-soltó con la mirada gacha y de forma tan fría, que los presentes pudieron sentir su ira y nostalgia
-Daryl, será mejor q…
-¡cierra la maldita boca y llévame al hospital!- rompió en llanto, odiaba verse así: débil e impotente, pero no lo podía evitar, tan solo pensar en que Rick estuviese, en una cama sin poder moverse, sin abrir sus ojos, sin decir palabra alguna, sin hacer absolutamente nada, simplemente era algo que no soportaba .
Su hermano le miro, con reprobación, ¿cómo es que podía, llorar, por un policía? Un Dixon, era fuete y decidido, y sobre todo indomable, Merle aun no entendía como su hermanito, llego a ese punto, de decidir formar una pareja con ese imbécil. Cada vez que los veía juntos su cara mostraba un gesto de asco y enojo. Aun odiaba a Rick, pero ver a su hermano destrozado, por la reciente noticia, llego hasta lo más profundo de su escasa alma, así que solo con un ademan, le indico a Shane que se lo llevara y este hizo caso de inmediato.
Daryl no perdió su tiempo y antes de que Shane se diera cuenta, el joven ya estaba en la patrulla, impaciente por irse
-¡maldita sea, Shane, date prisa¡- su histeria, solo lograba que Merle notara mas su preocupación, lo conocía desde pequeño, y sabía perfectamente que cuando Daryl se mostraba así de molesto, solo era porque estaba preocupado o triste. Frunció su ceño, en el fondo deseaba que el policía estuviera muerto, pero sabía lo feliz que era Daryl a su lado y por eso Merle nuca fue capaz de hacerle algo al comisario. Y justo a ahora sentía algo de envidia y recelo, ya que eran pocas las veces en que decidía visitar al joven, y justo ese día, Rick tuvo que caer en coma, robando la atención de Daryl. Sin remedio, Merle se acerco a la ventana mirando como su hermanito se alejaba para ir en la ayuda de ese estúpido policía.
+-+-+-+-+-+-
Durante todo el camino, las ansias devoraban al cazador, que simplemente jugaba con sus manos, mirando por la ventana, mientras sus piernas temblaban de forma inconsciente, cosa que Shane noto muy bien,
Shane sabía muy bien la relación que su mejor amigo sostenía con el joven y aun que nunca lo acepto del todo, siempre apoyo a Rick en ello, sobre todo cuando, su compañero decidió confesarse al cazador, y como Rick era un hombre de buenas costumbres y modales impecables, antes de tan siquiera abrazar al joven, había decidió dar fin a su matrimonio con Lori, y claro que esta pego gritos en el cielo, pero gracias a que Rick tenia buenos abogados y además contacto con el juez, su divorcio fue más sencillo de lo que esperaban todos.
Al llegar al hospital, el joven bajo de la patrulla lo más rápido posible y se acerco a la recepcionista, exigiendo ver a Rick y en cuanto la joven mujer le dio las indicaciones. Daryl salió corriendo una vez más, dejando a tras a Shane
Trago grueso al verse frente a la puerta de la habitación donde reposaba Rick, y con un suspiro, abrió la puerta con una angustia terrible, oprimiendo su pecho.
Pero al abrir la puerta se encontró con una de las personas que mas odiaba en el mundo
Bueno y es que desde que Rick logro su divorcio con Lori, el policía se mudo con el joven, eran una pareja formal aun si Lori seguía detrás de Rick, esperando que su ex esposo, recapacitara y regresara con su familia.
-¿Qué haces aquí?- soltó la mujer, acercándose de forma intimidante, con arrogancia y furia en su voz, bueno era de esperarse. Lori siempre le trato de esa forma, pero Daryl jamás creyó encontrársela en el hospital, tal vez por eso Shane no quería que fuera al hospital.
-Qué curioso, estaba a punto de preguntarte lo mismo- y con eso el chico ignoro a la mujer, pasando por su lado dirigiéndose directo asía donde Rick dormía, sentándose en la orilla de la cama, para tomar la mano del policía, intentando aguantar las ganas de llorar
-no deberías de estar aquí-Daryl suspiro, no quería empezar una pelea con la ex esposa de Rick, así que solo le mira de forma indiferente, preguntando el por qué de su comentario-sabes que no tienes derecho-
-¿en serio?¿de nuevo?, sabes que ya no eres su esposa- Daryl no tenía intenciones de mirarla y solo clavaba sus ojos en el rostro pálido de Rick
-¿y tú que eres?
-su pareja ¿te basta?-contesto con fastidio, esperando a que se largara de la habitación
-¡tu destruiste nuestra familia!- grito la mujer, taladrando hasta lo más profundo del alma de Daryl, eso era lo único que siempre le atormento. Ver el rostro de Carl hundido en lagrimas, siempre le lastimo, saber que el era el culpable de que Rick se animara a terminar con su matrimonio, quitarle su padre a un niño de apenas ocho años.
-yo no, fuiste tú…-su voz cortada fue lo único que alcanzo a decir antes de que lo mujer saliera dando un portazo, obviamente enfadada.
Bueno al menos pudo relajarse un poco tras la salida de Lori y ya estando solo dio rienda suelta a su dolor, llorando mientras se abrazaba al cuerpo inerte del comisario. Y después de unos minutos en esa posición, seco sus lagrimas y beso con delicadeza los labios de Rick, esperando que fuera mentira, quería verlo abrir sus ojos, pero nada, solo el sonido de las maquinas le indicaban, que seguía vivo.
Durante casi dos meses, Daryl acudió con frecuencia a visitar al comisario en el hospital, pero claro que más de una vez tuvo que enfrentarse a las malas miradas de Lori y Carl, pero con ayuda de Shane, las cosas jamás llegaron a los límites.
Shane servía de apoyo, tanto para Lori y Carl, como para Daryl.
+-+-+-+-+-+-+-
Un escalofrió recorrió su columna ¿en serio a aquello estaba pasando?, personas, violentas atacaban las ciudades, nadie sabían que eran, pero el cazador los había nombrado “psicópatas” todos los noticieros hablaban de lo mismo, la muerte inundaba al mundo, y aquella epidemia comenzaba a rasar también con Georgia,
-Tenemos que irnos- soltó de golpe Merle al ver el noticiero, de cómo esas personas se comían unas a otras
-entonces debemos ir por Rick- hablo el joven, levantándose del sofá dispuesto a ir por su pareja
-el estará bien, tenemos que salir lo más rápido posible
-¿estás loco viejo? lárgate si quieres, yo voy por el- había tomado el pomo de la puerta en sus manos, pero antes de poder salir, Merle le tomo de la muñeca con brusquedad, para luego lanzarlo al suelo-¡qué demonios te sucede!- grito mirando como su hermano, subía el volumen de la televisión.
El noticiero, anunciaba, que los hospitales más cercanos a Atlanta serian evacuadas, llevando a los pacientes al campo de refugiados, Daryl no confiaba mucho en ello, no quería abandonar a Rick, en un hospital, confiando ciegamente, en que alguien se encargaría de ponerlo a salvo.
Ambos hermanos se miraron con frialdad, si no coincidían en algo, lo único seguro seria una pelea, pero esta vez no, esta vez no había tiempo, Merle desde muy pequeño se había jurado proteger a su hermanito a costa de todo y ahora no podía perder el tiempo, en peleas, así que cuando el cazador, se levanto, Merle no perdió tiempo, para golpear su cabeza, dejando al menor inconsciente. Ver a su hermano de esa forma no le afecto ni lo mas mínimo. ¿Cuántas veces en su infancia lo vio? A su madre, incluso a el mismo, por eso ver a alguien inconsciente por un golpe era algo muy normal en la vida de un Dixon.
Trabajo rápido, al subir a su hermano en la camioneta, empacar algo de ropa y comida y por supuesto, también algunas armas que solían usar, cuando era temporada de caza.
-+-+-+-+-+-+-
Como lo esperaba, la carretera estaba saturada, la ciudad rodeada de vallas y vigilada por militares, todos deseaban entrar al centro de refugiados en Atlanta y por la demanda, se volvía complicado mantener a la gente calmada.
Todos querían entrar y pocos eran aceptados, ¿Cuánto ya llevaban esperando? Más de dos horas, por lo mínimo, pero no quedaba más que esperar. Merle maldecía a todos esos militares, que les negaban el paso, mientras que Daryl con los brazos cruzados, escuchaba música por la radio, o al menos fingía escuchar por que la angustia lo estaba devorando por dentro
-nos hubiera dado tiempo- comento con la mirada gacha, rogando por que Rick pudiera haber entrado ya a la “zona segura”
-olvídalo viejo, seguro que está bien- soltó para luego tocar el clac son por decima vez
Daryl harto, chasqueo la lengua, tomo una de las mochilas que Merle había preparado y bajo de la camioneta comenzando a caminar en dirección a la ciudad
Merle extrañado por su actitud bajo de la camioneta para llamarle
-¡hey!, ¿Qué mierda crees que haces?
-¿Qué no ves?, en la camioneta jamás nos vamos a abrir paso…!así que mueve tu estúpido trasero y vámonos ¡- el mayor no estaba convencido de ello , pero ya había llevado al chico hasta ahí a la fuerza, lo mínimo que podía hacer, era confiar en el. Así que el mayor tomo la otra mochila y siguió a su hermano.
En parte había sido una buena idea, ya que fue fácil esquivar todos los autos parados y a la gente que gritaba solo haciendo peor la situación, y cuando estuvieron cerca de la entrada, los beneficios de salir con un policía, salieron a relucir.
-¿Daryl?- el mencionado giro encontrándose con un uniformado, de cabellos azabache y ojos de un verde intenso: un viejo amigo de Rick, que había decidió ir por algo más de adrenalina, dejando la policía y uniéndose al ejército. Y aprovechando que todo era un alboroto, ambos pudieron saludarse de la mano y hablar un poco sobre lo que sucedía
-ya veo- aquel hombre bajo la mirada, tras escuchar lo que había sucedido con Rick y después de meditarlo un poco, el militar, miro de un lado a otro asegurándose de que sus superiores no le prestaran atención-síganme
Los Dixon le miraron extrañados ¿seguirlo a donde?
-espera, ¿Qué quieres hacer?- cuestiono, el menor de los Dixon, recibiendo una sonrisa del hombre
-conozco a Rick y sé que lo que el haría, todo por mantenerte a salvo
Ambos hermanos analizaron la frase rápidamente. Y entendieron que ese hombre les dejaría entrar a la ciudad de forma rápida y fácil.
Y así fue, el gran tumulto de personas y los ánimos calentándose fueron una gran distracción, para que Daryl y Merle entraran sin problemas
-solo… ¿puedo pedirte un favor?- Daryl asintió ante la petición del hombre mientras Merle impaciente pedía alejarse lo más posible de la entrada-cuida a mi familia- el cazador se sorprendió de aquella petición, pero no la cuestiono y mucho menos se negó, y al asentir el soldado le indico por donde continuar, para no ser vistos.
Una vez a dentro de la ciudad todo era diferente, las personas asustadas, se acomodaban en casas de campaña, mientras algunos miembros de la marina repartían víveres y atendían a algunas personas que habían recibido golpes a la hora de entrar.
Pero lo que más llamo la atención de Daryl, fueron las personas enfermas que llegaban, y de inmediato pensó en Rick, y acercándose a uno de los médicos encargados, pregunto sobre los pacientes de King County. Aquel doctor miro al joven con dolor en su rostro, tratando de aclarar su garganta y darle las noticias que habían recibido de King County.
Tal parecía que las autoridades locales, creyeron que la mejor opción seria, asesinar a todo residente del hospital, doctores, enfermeras…pacientes, solo como medida de prevención
La mirada de Daryl se apago, la esperanza de reencontrarse con Rick en Atlanta se había esfumado, el médico se disculpo y regreso a su trabajo, mientras que el alma de Daryl se destrozaba, sintiéndose al borde del colapso.
Alzo la mirada y sin dudarlo golpeo a su hermano a puño cerrado, logrando tirarle al suelo y que su nariz sangrara
-¡es tu maldita culpa!- de inmediato los refugiados voltearon sus miradas asía el par que discutía, pero claro todos manteniendo la distancia
-¡¿cómo lo iba a saber?!
-eres un…-el menor estuvo a punto de abalanzarse sobre su hermano, de no ser claro por qué fue detenido por un par de hombres. Que intentaron calmarlo y después de unos minutos lo lograron
-viejo, yo no lo sabía- la voz del mayor de los Dixon parecía una súplica, parecía querer pedir perdón pero no podía.
-Cierra la boca- escupió sin sentimiento alguno, para luego caminar sin rumbo fijo, solo queriendo arrancar ese sentimiento de culpa de su pecho: Rick estaba muerto, el hospital no había podido trasladarlo y el simplemente huyo de King County, buscando refugio, se alejo de las personas hasta un lugar apartado, donde pudo llorar, mientras sostenía con fuerza a aquel dije que colgaba de su cuello, aquel que una vez fue de Rick, pero que tras su primer aniversario, paso a ser de Daryl.
-lo siento- escucho esa voz y sus lagrimas cesaron y callo por unos segundos buscando poner las palabras correctas en su boca y una vez las encontró, volteo para toparse con la mirada arrepentida de su hermano
-tienes razón, no fue tu culpa
-aun así, lo siento
-viejo, yo lo siento, mira come te he dejado la maldita cara
-¿Qué esto?, golpeas como niña, Darylina
Si habían comenzado a bromear era porque Merle, sabía que Daryl lo necesitaba, necesitaba reír e intentar olvidar su pena o de lo contrario, se volvería agresivo e implosivo y a veces hasta vulnerable
-+-+-+-+-+-+-
Las cosas iban bien, ya llevaban dentro del campo de refugiados, más de dos semanas, y Daryl frecuentemente hablaba, con la familia, de aquel soldado, que le permitió la entrada a Atlanta y muchas veces jugaba con la pequeña, que tenían como hija única, su dolor aun no desaparecía, pero al menos no lo atormentaba,
Pero todo eso, era demasiado bueno para ser verdad…nadie se dio cuenta, toda la vigilancia y nadie se dio cuenta…los malditos” Psicópatas” habían logrado entrar a la ciudad, Los gritos de una mujer, fueron los que dieron la alarma esa noche, pero ya era demasiado tarde,
El joven cazador miro horrorizado, como las personas caían al suelo siendo devoradas por esos monstros y luego solo fue peor. La ciudad se vio envuelta en llamas, después de que el ejército, ordenara lanzar Nepal en las calles.
Muerte, era lo único que había en ese lugar, su mente se bloqueo por un instante, no sabía qué hacer, ¿Cómo ayudar? Y en ese momento de shock, la pequeña, que sostenía entre sus brazos, le fue arrebatada por uno de ellos, su joven rostro se mancho de sangre, mientras gritaba. Intento a ayudarla, pero alguien le jalo, alejándolo de uno de los “psicópatas” que estuvo a punto de morderlo
-¡hay que regresar!- exigió el menor, siendo arrastrado por su hermano
-olvídalo, nos largamos-
-pero…
-¡joder ¡ ya está muerta, vámonos-
Daryl miro a su alrededor personas en llamas y otras más ensangrentadas, una sinfonía de voces agonizantes, gritando de forma desgarradora y entonces noto a la madre, de la pequeña, en vuelta en llamas, pidiendo ayuda.
Merle n lo pensó mas y lanzo a Daryl dentro del auto, para luego arrancar, rompiendo la valla, que estaba en la entrada. Todas esas armas de que mierda servían si no las supieron usar.
Atlanta había caído, la única zona segura, había caído, Daryl recordó el rostro de la pequeña y la madre y solo pudo sentirse culpable, no pudo mantener su promesa, no las mantuvo a salvo…
+-+-+-+-+-+-
Llevaban más de un mes vagando por el bosque, lejos de la ciudad, cazando lo que podían, durmiendo en cabañas que se encontraban abandonadas en el bosque, sobreviviendo como podían.
Huyendo de esos monstruos, hasta que un noche fría, vieron humo salir del bosque, intrigados, ambos Dixon siguieron el rastro para encontrarse con un grupo reducido de personas, siendo liderados por Shane
El policía se alegro de verlo en una sola pieza, aun que claro no se mostro muy alegre al ver a Merle detrás de el, Pronto todos conocieron el nombre de Daryl y Merle Dixon, y aun que todos, los vieron como personas intimidantes, les recibieron muy bien. Claro excepto por Lori, que también se mostraba lo dolida por le muerte de Rick, pero no lo suficiente ya que muy quitada de la pena se acostaba con Shane.
Otro mes paso, fue tiempo suficiente como para que todos conocieran el lado malo de los Dixon, por eso muchos les temían otros les odiaban, y otros se mantenían alejados. Ese día, saldrían de expedición, por lo general solo iba un joven asiático, de nombre Glenn, pero esta vez irían más personas
-¡qué te parece Darylina?, ¿matamos unos cuantos malditos caminantes?
Daryl dibujo en su rostro una mueca que fácilmente pasaba por una media sonrisa , asintiendo con arrogancia, pero cuando Daryl se encamino al auto adonde viajarían para ir a la ciudad, Shane le detuvo
-¿Qué quieres? soltó con brusquedad, impaciente por salir y sentir algo de adrenalina
-sabes las reglas
-vamos, viejo, solo ida y regreso
-no Daryl
-oye, policía de pacotilla, no sé quién te creas, pero si mi hermanito quiere ir a matar unos cuantos imbéciles, no veo porque tu debas impedírselo – Merle había tomado a Shane del cuello de la camisa, amenazando con golpearle, pero para su fortuna, Daryl intervino.
-olvídalo, mejor iré a cazar-
Merle poco convencido, asintió, golpeando de forma suave el hombro de Daryl, como forma de despedida para luego irse con el resto del grupo
Y mientras Shane aprovecho para escabullirse y evitar al cazador, cosa que no le funciono
-¿hasta cuándo, me dejaras salir?- pregunto el joven cruzándose de brazos, al interceptar al mayor
-hasta que sea seguro
-no me jodas Shane, me se cuidar solo- soltó fastidiado, de que Shane le prestara tanta atención solo por querer hacer lo que Rick haría: protegerlo
-no lo dudo, pero aun así, tengo que cuidarte- Daryl agacho la cabeza, llevando su mano hasta su pecho, tomando de nuevo aquel colgante, sintiendo que sus heridas abrían de nuevo-el te hubiese querido a salvo—fue lo último que le dijo antes de comenzar a caminar
-Shane, iré de casería- le alcanzo a decir antes de que se alejara mucho
-Está bien, pero no muy lejos- y ya con el consentimiento, Daryl se adentro en el bosque dispuesto a buscar a algún animalito, que sirviera de comida….
Y justo en ese momento, un hombre que se hallaba inconsciente, dentro de un hospital, abrió sus ojos de par en par, recordando, a su esposa, su hijo, sus amigos, pero le faltaba recordar algo, algo que era vital en su vida, aun necesitaba…Recordar…
Continuara…
