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El Dulce Amor de Natsume y Nyanko-sensei por Minna-chan

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Notas del fanfic:

Ningun personaje me pertence, lamentablemente XD

Notas del capitulo:

Wiiiii!!! Este es mi primer fanfic, desde hace tiempo que deseaba escribir uno, así que onegaiii, tratenme con cariño =)

Natsume:

Me encontraba en mi habitación, sentado en mi escritorio en un fallido intento por estudiar, pero naturalmente nadie sería capaz de concentrarse con semejante bullicio a mis espaldas.

Nyanko-sensei, los Chuukyuu A y B, Hinoe, Chobihige, Benio y Kappa mantenían su fiesta pasando completamente de mí, e incluso estaba Misuzu, quién solo podía asomarse por la ventana por su gran tamaño. Tras cada copa de sake el griterío seguía aumentando cada vez más y más.

Hace muchísimo tiempo que había renunciado de poder convencerlos de que ya no celebrarán en mi habitación, simplemente esperaba pacientemente a que ya se hiciera tarde y hacer que se vayan cuando ya no se encontraban en sus cinco sentidos, era muchísimo más fácil ya que se encontraban más dóciles en ese momento. Estaba completamente seguro que seguían con su festejo en otro lado.

Pero hoy era diferente, estaban llevando esto a un nuevo nivel al mismo tiempo que mi paciencia. Necesitaba estudiar, me había saltado las clases un par de días debido a un asunto con un youkai especialmente peligroso, hiriéndome en el pecho levemente, pero por alguna razón dolía más de lo normal, lo peor había sido que en mi ausencia el profesor de matemáticas pasó materia que entraba en los próximos exámenes que ya se acercaban.

Mi paciencia se hizo pedacitos cuando Chuukyuu A se tropezó e hizo un agujero en la pared, al mismo tiempo que Hinoe, Benio y Nyanko-sensei en su torpe brindis debido a la borrachera, derramaban casi todo el sake por el piso. Por el enojo termine partiendo mi lápiz por la mitad, lo que solo consiguió que mi furia aumentara, era el último que tenía, los demás fueron destrozados por Nyanko-sensei al tropezar y caer encima de ellos.

Me paré de golpe y con voz firme, intentando no gritar para no molestar a los demás en la casa, les dije:

-¡Ya basta! ¡Mañana tengo clases así que tengo que dormir! ¡Váyanse todos ahora!

Se hizo un silencio en que todos me voltearon sus miradas hacía mí, e inmediatamente volvieron a sus asuntos.

-¡¿Que fue eso?! –dije enojado.

-~~ Ya, ya Natsu-hip-me-chan. No te enojes, todos venimos a ver-hip-te. Nos preocupábamos por hip tu herida.~~ - dijo Hinoe con voz melosa.

-Estoy bien, y además sé que solo es una excusa para beber- Hinoe no suele tener hipo cuando bebe, eso demostraba que habían sobrepasado el límite. Un momento, ¿Natsume-chan?

-¡Buuuu! ¡Que aburrido eres Natsume! –Nyanko-sensei era incapaz de no salir con sus comentarios. –¡Vamos Natsume! ¡Ven a beber, a beber!

El gato se me había acercado e intentado subir al escritorio, pero simplemente término cayéndose y empapando con su sake mi tarea y a mí.

Al ver lo sucedido todos guardaron silencio.

-Fuera de aquí… ¡Ahora! –Dije lentamente y levantando mi puño.

Creo que todos vieron mi aura asesina, porque repentinamente las sonrisas se borraron de sus rostros y todos intentaron brincar por la ventana, chocando contra Misuzu en el intento. Una vez solo simplemente suspiré.

-Mañana tendré que volver a escribirlo- comenté, mirando mis deberes.

Luego de haber arreglado la habitación, limpiado el piso, arreglado la muralla y cambiado de ropa, por fin pude ir a dormir

No tuve problemas para conciliar el sueño, pero no fue lo suficiente largo como yo hubiera deseado. En mitad de la madrugada desperté abruptamente por un gran dolor en mi pecho. Lo había comenzado a sentir ya en sueños, pero cada vez se hacía más intenso hasta terminar por despertarme.

Al abrir los ojos e intentar enfocar la vista sentí como el mundo giraba. Toque mi frente intentando saber si era fiebre, pero mis manos estaban realmente congeladas que no era capaz de saber con exactitud mi temperatura.

-Nyanko-sensei, ¿estás ahí? –con esfuerzo me senté para buscar a ese gato. No estaba, seguro que aun andaba por allí de parranda. -Maldito gato… cuando se le necesi...-dije entre jadeos por el esfuerzo y dolor.

No pude más y simplemente me derrumbé en el futón, tendría que esperar a que se me pasase o alguien llegara.

-¡Aaagh! – de repente el dolor en mi pecho se volvió insoportable, llevándome casi a la inconciencia.

No podía llamar  a Touko-san. ¿Cómo le podría explicar sobre la herida? Y ni siquiera sabía si ella sería capaz de verla, ya que no parecía ser un corte igual al de otras veces.

-Nyan…ko-sen…sei, ¿por qué no lle…gas?- dije en un susurro con mis últimas fuerzas antes de caer inconsciente.

* * *

Nyanko-sensei:

Todo era risas en medio del bosque. Una gran fogata iluminaba las sonrisas y bebidas de todos. Después de que salimos de casa de Natsume y fuimos a celebrar a otra parte más youkais se nos habían unido. Normalmente sería el más ruidoso de todos y el que más bebería, pero por alguna razón mi ánimo se había esfumado.

-~~¡Madara! ¡Madara! ¿Por qué no bebes?~~ - Nuevamente la voz melosa de Hinoe.

-Hmph, eso a ti no te interesa -dije mirando hacia otro lado y restándole importancia.

Hinoe aun borracha era muy perspicaz, y se dio cuenta de inmediato que algo me molestaba.

-~~Heeeee~~- una sonrisa maliciosa comenzaba a formarse de su rostro.- ~~¿No será que te sientes culpable por lo que le hiciste a Natsume?~~

-¡Claro que no! ¿!Por qué rayos tendría que sentirme culpable por un mocoso como ese!?- le grité enojado, aunque una parte de mi supo que eso era verdad. Pero nunca lo iba a admitir.

-Pero Madara-dono ¿acaso no tratas a Natsume-dono de una forma diferente?  Todos aquí conocemos como eres realmente y nunca fuiste apegado a los humanos, pero con él nunca dudas en ir a rescatarlo e incluso dejas tu orgullo de lado por él- dijo Misuzu, quien al parecer había estado escuchando de cerca y se metió en la conversación.

-¿Qué ideas tan ridículas están teniendo? Simplemente tengo un contrato con él, yo lo protejo y si llega a morir el libro es mío. Nada más que eso.

-Madara, todo sabemos que tú  nunca respetarías semejante trato, simplemente lo matarías o lo dejarías morir a manos de otro youkai- esta vez era Chobihige.

Mi furia aumentaba cada vez más, ¿por qué demonios todos tenían que entrometerse?

-¡¿Y QUE MIERDA LES INTERESA A USTEDES?! ¡ME LARGO!

Rápidamente cambié de forma y me lancé hacía el estrellado cielo nocturno. No estaba para soportar tantas tonterías, aun cuando todas eran verdad. No. Porque eran verdad era que no podía soportarlas, pero ni yo mismo entendía el por qué mi comportamiento había cambiado tanto con la compañía de ese chico.

* * *

Hinoe:

-Hmm… ese Madara- dije con la vista fija en el punto del cielo por el que había desaparecido.

-¿Aun le das vueltas a eso, Hinoe-dono?- ese era Misuzu.- ¿Es que descubriste algo?

Todos los youkais prestaron atención, nadie se perdía la oportunidad de hablar de Madara, todos siempre tenían alguna queja contra él.

-Creo que le gusta Natsume, aunque no parecer haberse dado cuenta- dije sin rodeos.

-Bueno eso no es nada nuevo, varios youkais a veces sienten simpatía por algún humano- dijo Chobihige.

-Es cierto, incluso he escuchado de youkais que están con exorcistas por su propia voluntad ya que se hicieron amigos.- dijo Benio con un poco de desagrado al nombrar la palabra exorcista.

-No, no me refiero a compañerismo, si no a lo que los humanos llaman amor de pareja.

-¿Te refieres como esos humanos que se pasean en esos parques tomados de la mano?

-A eso mismo- contesté, llevando la pipa a mi boca.

De inmediato todos se pusieron a reír, creyendo que era una broma mía, pero pronto comenzaron a apagarse. Todos conocían la verdadera personalidad de Madara, y el hecho de haber pasado tanto tiempo con un humano era inaudito.

-Podría tal vez ser verdad… -dijo Chobihige dudoso.

-Yo no lo creo- comentó con seguridad Benio.

-¿Qué tal si hacemos una apuesta?- dije con una sonrisa.- Vigilémoslos de aquí en adelante y veamos cual es la verdad.

-¿Y cuál sería el premio, Hinoe-dono?- pregunto Misuzu.

-¿Qué tal si los perdedores se convierten en los sirvientes de los ganadores  por un mes?

Todos sonrieron ante esto, planeando que harían con su esclavo si ganaran.

-Esto será muy interesante, prepárense Madara, Natsume- dije en voz baja.

* * *

Nyanko-sensei:

Mientras surcaba por  los cielos pensaba en lo que me habían dicho antes. Era verdad que ya no se comportaba como el mismo, desde hace ya un tiempo que tenía este sentimiento extraño. Cada vez que la situación se volvía peligrosa me invadía la preocupación y el nerviosismo, sobre todo cuando no estaba a su lado para poder protegerlo, si él resultaba herido no podía controlar mi furia contra el causante, y cuando Natsume se recuperaba de sus heridas siempre estaba atento a él, ya que siempre se sobre exigía para no preocupar a los demás.

Ahora me había alejado de él, ya que estaba enojado conmigo.

Tan solo pensar en Natsume me provocaba una extraña sensación. Sentía mi corazón agitado y algo que presionaba fuertemente mi pecho, hasta el punto de que me costaba respirar. Sacudí mi cabeza intentando calmarme y poder pensar en otra cosa.

Como estaba cansado simplemente llegaría a dormir, intentaría no despertar al chico o si no sería echado nuevamente, y si tenía éxito podría dormir junto a Natsume, debajo del suave futón ya tibio por el cuerpo del muchacho y se acurrucaría junto a él para poder estar aún más cálido…

Ante ese pensamiento mi pulso se disparó como loco, ¿qué demonios me sucedía? Sentía un leve calor en mi rostro pero no sabía que es lo que era. Me tomó un par de minutos darme cuenta de que estaba sonrojado.

-¡Maldita sea! ¡¿Qué demonios me sucede?! –grité con exasperación.

No sería buena idea dormir con el chico, mejor ya me iba buscando otro sitio.

Una vez que estuve afuera de la habitación de Natsume cambié mi forma nuevamente. Con cuidado y silenciosamente entro a la habitación, si lo despertaba un nuevo chichón aparecería en mi cabeza.

Ya adentro, lo mire para asegurarme de que no se había despertado. De inmediato note algo raro, su respiración era irregular y ruidosa, y sólo la mitad de su cuerpo se encontraba en el futón. Al acercarme me di cuenta de su expresión de dolor.

Asustado, me apresuré a encender las luces. Estaba sudando mucho, tenía una fiebre muy alta y se encontraba inconsciente, pero lo que más le llamó la atención fue que las manos de Natsume sujetaban con fuerza su pijama en su pecho. Cuidadosamente moví sus manos e intenté desabrochar su camisa de  dormir, pero con las manos de gato que tenía era imposible.

-Mierda –murmuré.

Como tenía que examinar a Natsume, me vi obligado a cambiar de forma, pero no elegí la de Reiko, sino la de un humano con larga cabellera plateada, orejas de gato, ojos rasgados y tatuajes rojos en su frente, pómulos y alrededor de los ojos. (Vean aquí http://www.zerochan.net/785017)

Cuando mi mano estaba puesta ya en el botón, fui plenamente consciente de lo que iba a hacer. Abrí los ojos por la sorpresa y detuve mis manos. De inmediato mi corazón acelero su marcha, sentía que se me iba a salir del pecho y sentí un extraño hormigueo en el estómago. Lo único que quería era quitarle la ropa y mis manos estaban dispuestas a hacerlo, aunque no entendía el por qué.

-Agh…- un quejido de Natsume me aclaró la mente. No era momento de tonterías.

-Maldito mocoso, siempre causando problemas –le reproché mientras sacaba su camisa y dejaba a la vista las vendas que cubrían su lesión.

No parecía haber nada malo por encima, pero una mala sensación se desprendía desde el sitio de la herida. Rápidamente le quite las vendas, aunque costo un poco de trabajo, ya que estaban enrolladas alrededor de su torso, así que con un brazo alrededor de su torso lo levante, sentándolo y apoyándolo en mi para que no se cayera, mientras que con la otra desataba el vendaje. Nuevamente necesite de todo el auto control posible, podía sentir su suave piel de su espalda al tenerlo medio abrazado, solo ese toque hacía que mi corazón se agitara, pero esta vez no dejé que eso me desconcentrara. Al menos, no por completo.

Una vez terminada la operación, lo recosté nuevamente, tan solo para fijarme con horror en la herida. Esta había cicatrizado normalmente, pero en los bordes de esta una mancha negra comenzaba a extenderse.

Notas finales:

Les agradesco por leer mi fanfic, sean buenitos y dejen reviews. como ya dije al principio es mi primer fanfic y me gustaría que dejaran su opinión y de esa forma saber en que estuve bien, que les gusto y en que puedo mejorar.

Muchas gracias ~~Mattaneeee~~


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