So Lucky To Have You.
I
–Como todos los años...
La voz del director resuena en todo el auditorio, dando inicio a un pequeño discurso de bienvenida para todos los presentes.
–Los próximos a graduarse, realizan un evento para sus padres, en el cual les agradecen por sus vidas, los esfuerzos y todo lo que han hecho por ellos –. El hombre hace una breve pausa para echar un vistazo a la hoja que tiene en sus manos y así después, continuar –. Este año, hemos hecho algunos cambios, con eso de que hay que modernizarse… – El director sonríe, y todo el auditorio estalla en risas por lo que ha dicho y la graciosa expresión que pone –. Daremos inicio a este evento con un video hecho para ustedes, después habrá presentaciones en vivo y finalizaremos con palabras de algunos estudiantes. Pero eso no es todo, tenemos la fiesta de clausura y un premio sorpresa para la mejor familia de la noche.
El director echa un último vistazo a la hoja que aún conserva en sus manos y suspira.
–Ah… ¿Dónde está la modernización en esto? En fin, creo que eso es todo. Las personas vuelven a reír.
–Disfruten del evento –. Una leve reverencia y el hombre se retira, dejando libre el escenario.
Un par de minutos después, las luces se apagan y del techo sobre el escenario, desciende una gran pantalla blanca, donde será proyectado el video, el cual no dura más de media hora y muestra una muy mala, pero divertida imitación de la vida de hijos y padres. Todo protagonizado por los estudiantes, en su mayoría hombres, pues eso lo hace aún más divertido.
Mientras el video sigue reproduciéndose, en la parte trasera del escenario, lejos de la vista de todos los adultos, se encuentran los dichosos estudiantes, algunos nerviosos, otros aparentando tranquilidad y otros tantos, jugando y divirtiéndose para evitar que las ansias y los nervios hagan mella en ellos, como ya ha pasado con los otros.
Más alejados del resto, un pequeño grupo de amigos se encuentra reunido, hablando acerca de su presentación, que será una pequeña obra, inventada por ellos mismos. Algunos son conocidos de toda la vida, otros desde ese mismo año, como es el caso de dos hermanos, quienes ingresaron faltando tan solo cuatro meses para que terminara el año escolar.
De todos, los dos últimos eran los más nerviosos, pues era la primera vez que harían y participarían en un evento realizado por el instituto y más, si era para sus padres.
–Todo saldrá bien, ya lo verás –ánima el mayor de los dos, con una sonrisa adornando sus labios. Eso logra calmarle, pero no lo suficiente–. Lo harás bien –dice antes de abrazarle rápidamente para volver con los otros.
– ¿Nerviosa? – Alguien se ha acercado por detrás y le ha susurrado, haciendo que dé un brinco asustada por la cercanía, pues al principio no reconoce a quien la ha hablado tan cerca, debido al tono de voz que ha usado. Solo hasta que se da la vuelta es que puede por fin reconocerle. Justo a tiempo para que la otra persona bese sus labios rápidamente.
Tal acto ha provocado que una gran sonrisa se forme en su rostro, haciéndole olvidar todo a su alrededor.
–Hola – Saluda tímidamente, sintiendo como sus mejillas empezaban a arder. De seguro ya sonrojadas.
–Mira qué linda te vez, ya hasta te has sonrojado – Dice, apretándole las mejillas.
– ¡No es cierto! – Chilla, soltándose del agarre para ocultar su rostro entre sus manos. De por sí, ya está lo suficiente avergonzada, como para que el chico frente a ella se lo recuerde.
–Oh mira, es el turno de Yi Zi –. En cuanto es pronunciado el nombre de su hermano, la chica levanta la mirada y la dirige a donde le está señalando.
En efecto, su hermano se está preparando para su presentación. Pero todavía no es su turno, porque él junto al resto de sus amigos, son los últimos.
–Mentiroso – Murmura, volviendo su vista al chico que aún está frente a ella.
Ha cruzado los brazos y sus labios han formado un puchero, el más tierno a los ojos del mayor. Tanto así que le han entrado unas terrible ganas de besarla. Y lo hace.
Primero pasa la punta de su lengua por el labio inferior, que es el que más sobresale; después sigue con un corto beso, como el que le ha dado hace un rato. La menor, tentada a seguir, separa lentamente sus labios profundizando así el beso del cual es participe y que, por supuesto, disfruta.
– ¡¿Pero que ven mis preciosos ojos?! ¡Wu Yi Jie, Kim SooJong! ¿Qué creen que están haciendo? – Ambos se separan tan rápido como pueden, al escuchar el grito proveniente del hermano de la chica.
– ¡Yi Zi! – SooJong estira los brazos y abraza efusivamente al chico, quien se remueve incómodo, porque no le gusta ese tipo de contacto. Y el otro lo sabe.
– ¡Suéltame! – Forcejea tratando de soltarse del molesto agarre – ¡Yi Jie, aléjalo! – Pide, pero no es su hermana la que lo hace, en su lugar está alguien más. Es otro de sus amigos.
–Ya déjalo – Murmura –. Está siendo muy ruidoso y sus gritos me provocan jaqueca, es molesto.
– ¡SeungYeol! – El chico se molesta y un gran puchero adorna sus labios, provocando que todos los que estaban a su alrededor, rieran.
–Es broma – El antes nombrado se acerca a Yi Zi y besa su cabeza, además, posa su brazo derecho sobre sus hombros, logrando que el chico se sonroje más.
Yi Zi se remueve incomodo por la cercanía del mayor, pero no tanto como lo ha hecho anteriormente con SooJong. SeungYeol le gusta, pero sabe que eso es imposible, pues está seguro de que el mayor sólo se acerca para molestarlo.
Pese a que no quiere hacerlo, termina alejándose sin pronunciar palabra alguna, pues está nervioso. SeungYeol le gusta, está bastante claro para él, pero además, SooJong lo sabe.
– ¡Ah, pero mira cómo se ha sonrojado! – La voz burlona de SooJong, se escucha nuevamente –. Acaso… ¿Te gusta? – Murmura cerca de su oído para que nadie más le escuche, mientras le dedica una divertida mirada. Esto ha hecho que el color rosa de sus mejillas pase a ser un intenso rojo – ¡Ja! ¡Te has puesto más rojo, eres igual a Yi Jie cuando hago lo mismo!
– ¡Cállate! – Ordena la chica avergonzada. ¿Por qué tiene que decir eso?
– ¡No es cierto! – Replica Yi Zi, pero ambos saben que está respondiendo a la pregunta que el novio de su hermana le ha hecho.
– ¡Claro que sí! – Desmiente en seguida, sabiendo que el otro le entenderá. Porque sólo ellos dos saben el trasfondo de esa conversación –. Los conozco, incluso hacen los mismos gestos, hasta cuando mienten; si no fuera porque son hombre y mujer no habría modo de diferenciarlos.
–Habla por ti, yo reconocería a Yi Zi en seguida –. Dice SeungYeol muy confiado.
–Como sea – Resta importancia y pasa a cambiar rápidamente de tema – ¿Saben? Hoy estoy más ansioso y feliz que nunca; por fin podré conocer a la hermosa madre de mi linda Yi Jie – Sus palabras han provocado que los dos hermanos se tensen, pero nadie lo nota.
– ¿Cómo lo sabes? – Pregunta Yi Zi, pues se suponía que ninguno además de ellos dos y su padre, lo sabían.
–Los escuché decir que ella vendría para el evento – Responde como si nada.
– ¿Tu madre vendrá? – Pregunta SeungYeol y él no hace otra cosa más que asentir – ¡Eso es genial!
–Es cierto, además nunca hemos ido a su casa y mucho menos conocemos a su madre. Pero hoy por fin lo haremos – Dice SooJong y Yi Jie al igual que su hermano, solo asiente –. También hablaré con ellos, quiero que nuestra relación sea oficial.
–No si estoy yo para impedirlo.
–No me hagas hablar, Wu Yi Zi –. El nombrado frunce el ceño y se muerde el labio, incapaz de contestarle, porque sabe que tiene las de perder.
Pocos minutos después, uno de sus compañeros, se acerca a ellos y anuncia que es el turno de SooJong y SeungYeol, lo que indica que las presentaciones están por terminar.
En cuanto los dos chicos están lo suficientemente lejos, los hermanos dejan salir todo el aire retenido a causa de la anterior charla.
– ¿Y si no les gusta? ¿Y si ya no nos quieren? ¿Y si nos miran mal? Y si…
– ¿De cuándo acá te preocupa lo que otros piensen acerca de nuestra familia? – El mayor parece haberse molestado y ella se da cuenta de que ha hablado sin pensar –. Yi Jie ¿te estas avergonzando de que conozcan a nuestros padres?
– ¡Claro que no! – Responde enseguida, incluso niega con sus manos –. Nunca, nunca me avergonzaría de ellos.
–Después de diecisiete años ¿Cómo podrías? – El tono con que lo ha dicho, le deja bastante claro que sí, está molesto y que sería muy decepcionante que aquello fuera verdad.
–Quiero a SooJong – Deja escapar.
– ¿Tanto como para ponerle por encima de nuestros padres? – La menor niega moviendo lentamente su cabeza –. No le has dicho quiénes son.
–Yi Zi, yo… – El sonido de un teléfono móvil sonando, la distrae.
Es el de su hermano, quien después de contestar y escuchar la voz de la persona al otro lado de la línea, está repentinamente feliz.
–Ya están aquí…todos.
– ¿Ha llegado? ¡¿En serio?! Espera… ¿Cómo que todos?
Pero en vez de contestarle, Yi Zi entona una canción muy conocida. Al menos para ellos dos, y se aleja, porque ya es hora de su presentación.