Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

:;:;Porque en el amor nadie decide;:;: por uchiuzuma lover

[Reviews - 318]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

de nada :D

 

“hagas lo que hagas… no abras la puerta” leyó el rubio en la pantalla de su celular. Estaba haciendo un poco de aseo mientras su madre estaba ausente trabajando, obviamente, cuando le había llegado el what. ¿sería sasuke? Quizá sabía que el ojiazul estaba solo en casa y quería asustarlo.

 

Respingó ante el sonido del timbre. Naruto recordó que hace unas semanas hubo una serie de mensajes anónimos sobre que alguien vendría pronto a “sorprenderlo”

 

Miró el mensaje nuevamente; En la parte de arriba decía que venía de un número no registrado…

 

 eso no lo ayudaba a calmarse.

 

-¿piensas dejarme acá toda la tarde?- preguntaron al otro lado de la puerta. Naruto se agarró el pecho, respirando de alivio…

 

Guat!!!

 

El rubio corrió hacia la puerta, encontrándose con la réplica de sí mismo sonriéndole amistosamente.

 

-¡Tuuuuuuuu!- gritó emocionado, tapándose la boca para reprimir ese grito de felicidad atascado en su garganta. Saltó a los brazos de su primo, casi llevándoselo por delante. - ¿qué haces aquí dei-chan!!!?- preguntó incrédulo, levantando la vista. Observó lo bien que le quedaba las puntas castañas que ahora había en su cabello.

 

-¡naru-chaaan!- respondió el rubio, tratando de no caer por semejante embestida de su primo (:v no es esa clase de embestidas… respiren). Notó que estaba viendo embelesado su nuevo look de cabello- ¿te gustan? Me lo tinturé hace un par de semanas. – explicó deidara, separando al chicle de naruto que lo miraba con cara de “:3”- y en cuanto a por qué estoy aquí, pues… vine a visitarte. Escuché que mañana es la feria escolar y el domingo la fiesta de grado. – Naruto asintió, separándose de su primo para hacerlo pasar -¡pero mira nada más como estas! ¿desde cuando tienes perforada la oreja? ¡me encantaaa! La última vez que te vi usabas la ropa del abuelo ¿Qué sucedió que ya pareces modelo playboy? – naruto sonrió nervioso ante lo último ¿cómo explicarle que la única razón por la que estaba vestido así se encontraba en Italia, posiblemente odiándolo por no dejarle explicar su repentina despedida? – ¿está tía kushina? – preguntó el pelilargo, mirando a sus alrededores, esperando encontrar la mata de pelo rojo que tanto quería ver. Se desilusionó un poco al escuchar la negativa del rubio.

 

Después de saludar y que el rubio terminara de arreglar la casa un poco, los dos rubio pasaron la tarde hablando sobre lo que había pasado en su ausencia, sacando varias carcajadas de deidara cuando hablaba de su cuñado (sasuke) y las bobadas que habían hecho juntos; o gruñidos al contarle lo de karin y su extraño comentario acerca de utakata.

 

-hmmm… te gusta mucho sasu-chaaan – afirmó el rubio con corazones en sus ojos, haciendo que naruto se atragantara con su propia saliva. Deidara rió, ya se esperaba algo así. - ¡oh, vamosss! No me salgas con el cuento de que no sientes absolutamente nada por él- naruto abrió la boca, dispuesto a refutar esa teoría; pero la cerró cuando vio que en realidad no tenía nada que decirle a la ceja alzada de su primo.

 

-¡n-no es lo que parece! Es que… NO LO SE… lo admito, no sé si me gusta – Confesó sonrojado, emocionando al rubio mayor. El pequeño naruto tapó su cara, avergonzado. Siempre hubo algo en su primo que hacía imposible si quiera intentar mentirle- si le dices algo voy a negarlo hasta mi tumba…- susurró naruto, haciendo carcajear a deidara. – Hace unas semanas que he sentido que algo ha cambiado entre los dos. No se cómo llamarlo… ¡pero yo sigo enamorado de utakata! así que, aunque me gustara un poquito el bastardo, no cambiaría las cosas.

 

-esos son pequeños detalles- exhaló el mayor, moviendo sus manos para restarle importancia. - ¡muy bien! Ahora que estoy de vuelta, felizmente casado y esperando a un mini itachi, solamente me falta hace que alguien te embarace para no sentirme tan solito- bromeó deidara, haciendo que naruto escupiera el jugo que bebia hace unos segundos. Naruto se sonrojó, involuntariamente había pensado como se vería un hijo entre el Uchiha y él… ¡quiso decir!, utakata y él. *muere por hemorragia cerebral :v. Es malo tantos sonrojos, naruto*

 

-no bromes así, que quiero primero especializarme- comentó el rubio, limpiando el desastre que había hecho con el jugo usando una servilleta. Deidara sonrió traviesamente, como extrañó molestar a su primo.

 

Deidara nunca había terminado la universidad, pues sus padres habían fallecido en una explosión terrorista cuando tenía tan solo 8 años, por lo que minato y kushina habían decidido pagarle sus estudios; sin embargo, tras la muerte de minato, deidara desistió de la ayuda económica que no podía brindarle su tía, pues sabía lo mucho que podría valer su carrera. Afortunadamente conoció a itachi, su actual esposo, quien le propuso pagar sus estudio cuando su nuevo pequeño hijo cumpliera cierta edad.

 

.¿cómo conociste a itachi?- preguntó naruto, sacando de sus pensamientos al mayor, quien agito un poco la cabeza para espabilarse. Se había puesto nervioso ante los recuerdos.

 

-Fue unos 2 meses antes de acabar el último grado, recuerdo lo tanto que lo odiaba, siempre con esa sonrisa coqueta, intentando llamar mi atención con piropos de albañil y propuestas raras- narutó abrió un poco la boca, sorprendido, era como si casi le estuviera describiendo su relación con sasuke. Deidara rio ante sus ocurrencias, ignorando la sorpresa en la cara de naruto- tú sabes que no soy el típico facilón que va abriendo las piernas en cuanto le hablan lindo; pero, él fue tan, pero tan, pero taaaan persistente, créeme cuando te digo que casi pongo una orden de restricción en su contra, que al final acepté una cita con él. Le dije que solo sería esa vez y que tenía que alejarse después. Él aceptó; pero bueeee… el imbécil supo cómo jugar sus cartas y terminé besándole la mejilla cuando me trajo a casa; después de eso ya estaba mojando cuco por él. Fin de la historia.- Deidara aplaudió, haciendo énfasis en lo de “fin de la historia”.

 

 Naruto sonrió pícaro al notar como las orejas de su primo adquirían un color bastante escarlata. Suspiró abatido ante la historia… ¿y si terminaban de la misma forma? Agitó la cabeza, no quería torturarse toda la tarde.

 

-así que es por eso que no veo maletas…- obvió el rubio menor. Deidara asintió, rascándose la nuca.

 

-aguarda un momento… ese que va allá no es ¿sasuke? – naruto miró en dirección al dedo de su primo, viendo que efectivamente el retrasado que iba caminando, lento como babosa, no era nadie más que el uchiha.

 

- ¿bastardo? - preguntó naruto, un poco fuerte, llamando la atención del pelinegro. Sasuke se detuvo, haciéndose el desconcertado al ver al rubio en esa calle. - ¿Qué haces aquí? -preguntó el rubio.

 

 Deidara se asomaba ligeramente por la puerta.

 

-uzuratonkachi… yo… solo daba una ligera caminata, ya sabes, mis pompis se ponen paraditas- bromeó con una sonrisa coqueta, haciendo sonrojar a los dos rubios.

 

-una caminata… a las 4 de la tarde… con este sol…cuando tu casa queda a media hora caminando… ¿a quién quieres engañar? - naruto sonrió ladino, haciendo que el gesto del uchiha desapareciera. Bajó los hombros, acercándose a paso lento.

 

-tú ganas, tú ganas… estaba por aquí cerca y me acordé de que mañana es la feria, me preguntaba si… bueno, quizaaa…-naruto alzó una ceja, contendiendo una risa ¿desde cuándo tan tímido el uchiha?

 

Sasuke luchó contra su garganta, tratando de soltar lo que había estado ensayando en su cuarto durante casi toda la mañana.

 

-¿podíamos ir juntos…? – completó el rubio, haciendo gruñir a sasuke, quien susurró “no necesitaba tu ayuda, dobe”, mientras volteaba la mirada. Naruto rodó los ojos, no le sorprendía ese comportamiento. -pues no, no puedo, teme…- sasuke lo vió, sorprendido, escondiendo el retorcijón que le daba en la cara cuando sintió su corazón acurrucarse en una esquina de su pecho.

 

-ni que fueras tan…-

 

-porque tengo que cuidar de un puesto de atracciones, pero podemos encontrarnos allá… solo será por una hora. - soltó una risita al ver que las mejillas de sasuke cobraban color… casi parecía que no fuera traslúcido. El pelinegro asintió, guardando silencio. Pasaron unos minutos donde ninguno de los dos dijo nada, solo viéndose fijamente, formando un silencio un tanto incómodo. Naruto recordó esa vez que el azabache lo había atrapado bailando como foca y había pasado algo similar.

 

-naruto ¿p-puedo besarte? – Preguntó sasuke, cerrando los ojos, un poco (muy) incómodo y avergonzado por lo que había dicho. Había sonado mejor en su cabeza. Los colores no tardaron en azotar la cara del rubio, haciéndolo parpadear rápidamente por lo desconcertado que lo había dejado la pregunta.

 

-di que siii…- susurró su subconsciente, que en realidad era deidara hablándole escondido en la puerta, quien retenía una risita ante lo bizarra de la situación. (¿debería hacer que deidara arruinara el momento?  Hmmmm… sería Zukulent0 :v)

 

- ¿s-sí? – preguntó-respondió el rubio, tomándolo por sopresa. No había querido decir eso. - quiero decir… ¿para qué? - naruto agitó su cabeza, tratando de espantar algo de la vergüenza que atacaba su pobre heart, que parecía el trasero de una bailarina de twerk de lo rápido que se movía. (;D)

 

-no lo sé…- respondió sasuke, solo le habían entrado ganas de besarlo.

 

-…- Deidara hacía todo lo posible por no morir ahí mismo… como le encantaba el yaoi ajeno.

 

- ¿puedo...? - preguntó sasuke, aun viendo fijamente al rubio, después de unos segundos de un, AÚN MÁS, incómodo silencio. Naruto apretó sus puños, si seguía sin respirar iba a desmayarse ahí mismo ¿se supone que sasuke esperaba que él dijera que… - esta b-bien – se mordió su lengua, esas palabras habían escapado involuntariamente. Su respiración se cortó al ver como sasuke se acercaba a su rostro, haciendo que su cara dudara de si ser roja por la vergüenza o morada por la falta de oxígeno, apoyó levemente los brazos en los hombros del azabache, buscando apoyo por si se desmayaba.

 

Sasuke se quedó a unos centímetros de sus labios, intentando contener la repentina alegría que despertaba en su vientre (no en el nepe… cálmense, pervertidos XD) Pero algo no estaba bien… sentía que algo faltaba en ese momento. Movió sus labios a la mejilla del rubio, sorprendiendo a naruto, deidara y a todos los lectores que posiblemente odien a la escritora ahora.

 

Naruto permaneció estático, sorprendido ante la acción del bastardo, él juraba que con su arrogancia lo besaría en los labios y luego se iría.

 

Casi le gustó que hubiera hecho eso. Pensó “casi” porque el bastardo lo había dejado con las ganas (ahr XD); Pero estaba tan tieso que si alguien viera la escena se preguntaría por qué ese pelinegro estaba besando un maniquí; sin embargo, eso no implicaba que estuviera disgustado o incómodo, por el contrario, se sorprendió así mismo al pensar que podía estar así toda la tarde.

 

-¡SASUKE MOJIGATOOO!- Gritó desde la acera un tercero. Naruto golpeó a sasuke, asustado por el repentino grito, haciendo que este trastabillara y terminara en el suelo. – Gusto en conocerte, naruto. Mi nombre es itachi, hermano mayor del emo – naruto movió la mano ligeramente, en signo de saludo, mientras sonreía nerviosamente; luego ayudo a levantar al Uchiha, quien se negaba a saludar a su imbécil hermano… había arruinado su primer beso con el rubio. - ¿No me vas a saludar sasu-chan? – preguntó itachi, haciendo cara de perrito degollado desde la ventana del carro.

 

-muérete…- dijo él, en respuesta. Itachi hizo una mueca de superioridad, bajó del auto y le dio un abrazo al pequeño rubio.

 

-oyeeeee!! Que tu esposo aquí soy yooo- se quejó deidara, saliendo de su escondite un tanto celoso, mientras se cruzaba de brazos e inflaba los mofletes. Itachi rio, nunca se aburriría de las expresiones de su rubio.

 

-Eso lo sé- susurró el azabache, mientras golpeaba ligeramente la frente de sasuke en modo de saludo.

 

¿desde cuándo deidara estaba ahí escondido? Pensó sasuke, nervioso al pensar que lo había visto actuando así de cursi.

 

Itachi besó a deidara en la nariz, abrazandolo por la cintura. Este último sonrió en respuesta, para luego besar el mentón del mayor.

 

Los menores voltearon la mirada, incomodos por el sabor a miel que adquiría el aire cerca de ellos; además, muy en el fondo, sentían envidia de no poder hacer eso entre ellos dos. (Everybody know it ;D)

 

-debemos irnos, la reservación es en dos horas- informó itachi, haciendo a sasuke y deidara asentir. Naruto supuso que hablaban de una cena, por lo que no se molestó en preguntar. Analizó a itachi, pues no había tenido tiempo de hacerlo ante su repentina aparición, se parecía muchísimo a su suegro; además parecía buena persona... un poco serio pero agradable. No era difícil adivinar que itachi no era de sonreír mucho si de deidara no se trataba. – ¿te gustaría acompañarnos, naruto? Podría llamar y pedir una silla más- sasuke sonrió obvio, que pregunta más estúpida, abrió la boca para responder con un rotundo…

 

-no, gracias, quizá para la próxima. – itachi asintió, entendiendo la situación, con una mirada había bastado para enterarse del embrollo en el que estaban metidos ese par. Sasuke se sintió desinflado… ¿Qué sentido tenía ir a cenar con sus hermanos y cuñado si sabía que iba a estar toda la comida pensando en lo que acababa de pasar? Por un momento pensó en proponer quedarse a hacerle compañía a naruto, pero no quería ser pesado… hasta a él le parecía difícil digerir lo ocurrido, mucho más lo iba a ser con para el rubio, quien acababa de ser abandonado por su “novio” y su mejor amigo lo rechazaba. Decidió darle su espacio, al menos ya habían quedado para el día siguiente.

 

 

 

-Gracias por su compra- sonrió naruto, entregando un tiquete a algún desconocido que quería gozar de la feria. Suspiró exhausto, había tenido que llegar una hora más temprano, pues kiba había dicho que no se sentía bien, por lo que tuvo que trabajar lo de él y lo de su mejor amigo. No quería que kiba se viera en un problema por no haber aparecido; además, quería hacerlo en modo de compensación… hace bastantes semanas que había dejado abandonado al castaño.

 

- ¿has terminado, dobe? – preguntaron a sus espaldas, sin embargo, reconoció la voz.

 

-teme…-susurró naruto, con una sonrisa de saludo. Sasuke se contagió de la sonrisa.

 

-lindo atuendo- comentó sasuke, sarcásticamente. Naruto había tenido que usar un uniforme para poder cumplir la tarea que se le había encargado.

 

-lo sé. Ven, acompáñame al baño, la puerta no sirve y no quiero que alguien entre y me vea desnudo- aclaró ante la perversa mirada del uchiha. Rodó los ojos. -por cierto… ¿Dónde está dei-chan y tu hermano? – preguntó al ver que por ningún lado estaban el par de esposos… que extraño sonaba decir eso.

 

-me les adelanté, no soportaba estar más allá… tienen toda una mansión para escoger cuarto y deciden hacerse al lado de la mía- gruñó el azabache.

Naruto lo miró extrañado.

 

- ¿eso que tiene de malo? - pregunto un poco enojado ¿qué tenía sasuke contra la humanidad?

 

-que gimen como si fueran cerdos siendo apuñalados…- murmuró sasuke. No había podido dormir casi nada en la noche, tanto griterío lo había dejado traumado; aunque, en algún momento de la noche, se había preguntado si naruto sería así de expresivo a la hora de intimar

 

-o-oh…- casi se atragantó con saliva. En ese caso sí que merecía estar molesto.

 

Una vez naruto se había cambiado en el baño mientras sasuke esperaba afuera, con cierta tentación de entrar a hacerle compañía al rubio, decidieron disfrutar de una tarde de atracciones. Entraron a la mansión embrujada (habían usado una sección del colegio para eso) donde más que gritar se había casi orinado de la risa al ver que algún graciosito había hecho un grafiti en la pared que decía “¿quieren asustarse de verdad? Díganle a sus gfas que se comieron el pan del desayuno :v”

 

-¡chicos, aquí! – gritó deidara desde la entrada de la feria, venían abrazando a itachi del brazo. Naruto saludo con la mano, tratando de no hacer escándalo para que dejaran de mirarlo por semenjante grito. -que bien te ves, Naru. – naruto alzó una ceja, divertido, realmente se había vestido con un jean y una camiseta blanca… no es que pareciera super modelo con eso. – lo siento, aún no me acostumbro al cambio de look- naruto rio nerviosamente… él tampoco se había acostumbrado. -perdón por la demora, nos demoramos… b-buscando las llaves del carro- se excusó nerviosamente el rubio. Sasuke se le acercó al oído.

 

“entiéndase por la sonrisa de imbécil que se carga itachi, que hicieron de TODO menos buscar llaves” naruto enrojeció fuertemente ante el comentario, golpeando sasuke por imprudente. No pudo evitar notar que la itachi sonreía sin razón alguna desde que había llegado… ni siquiera había saludado aún.

 

-¡auch! – soltó itachi, sobándose una costilla, deidara lo había golpeado para que regresara a la tierra- hola narutin, sasukin. No saben lo ESCABULLIDAS que estaban esas maleta… ¡las llaves!… quería decir las llaves”- naruto sonrió, nervioso, ante la mirada de culo que le daba deidara a su esposo, como si tuviera ganas de ahorcarlo con la mirada.

 

-nosotros iremos a recorrer el lugar, ya sabes… viejos recuerdos- avisó el rubio mayor, alejándose con itachi y la poca dignidad que aún conservaban.

 

Ya habían recorrido casi todas las atracciones, realmente naruto estaba sorprendido de lo bien que se la estaba pasando cuando sasuke dejaba de lado su altanería y orgullo. Sonrió emocionado cuando escucho por el parlante:

 

- avisamos que la atracción de “el túnel del amor” cerrara en media hora, así que aprovechen los que aún no hayan podido entrar. – La escuela había hecho uso del lago y botes con forma de corazón para poder armar el paseo. Claro, habían decorado la hierba de los laterales con luces que parecían luciérnagas, un suave olor a lavanda y canela se esparcía por el aire y el lugar estaba ambientado con una melodía de arpa; además, el que justo el sol se estuviera escondiendo hacía de la vista un espectáculo de colores rojizos y anaranjados.

 

- ¡vamos, sasuke, solo nos queda esa atracción! – exclamó emocionado el rubio. No es que le causara la mayor de las gracias el subirse a una atracción para novios junto con el Uchiha, pero es que aún estaba muy temprano, no le alegraba pensar llegar a casa y quedarse mirando el techo como poseso toda la noche. Prefería divertirse así fuera un ratito más.

 

-hmp…- espetó el moreno, haciéndose el desinteresado, cuando por dentro tenía ganas de saltar de la emoción. Casualmente llegaron detrás de itachi y deidara. Estos últimos subieron justo después de saludar.

 

-aguardaremos a que se alejen un poco y podrán subirse- informó el encargado, quien era un profesor, que miraba a todo el mundo como si fueran lo más estorboso que pudiera haber hecho kami-sama.

 

Después de unos minutos subieron por fin a la cursi canoa con respaldar en forma de corazón.

 

-no puedo creer que en 5 días sea la fiesta de grado…- susurró el rubio, dejándose llevar el escenario.

 

-solo faltan 5 días para que se acabe el curso- mencionó sasuke.

 

“tienes hasta el final del curso para enamorarlo”

 

Había retumbado en su cabeza. Suspiró derrotado. ¡lo admitía! Había perdido cruelmente su reto escolar… pero para ser sinceros…ahora no le podía importar menos. Miró de reojo al rubio, quien casualmente había girado a verlo justo en ese momento.

 

-me gustan tus ojos, naruto- comentó sasuke, casi sin razonar lo que decía.

 

-a mí me gustan tus sonrisas, sasuke- naruto rio inocentemente mientras lo dijo, haciendo que sasuke carcajeara, alegre. Había algo en esa risa que hacía que un enjambre de abejas se alborotara dentro de su estómago, pensó el ojiazul. De pronto su cuerpo le pedía cercanía con el pelinegro.

 

- ¿iremos juntos al baile? – alguna fuerza desconocida le había dado el valor de preguntar sin siquiera girar la mirada.

 

- ¿por qué querría ir contigo? - preguntó el rubio, con una mirada traviesa ¿era la imaginación de sasuke o estaban más cerca que antes?

 

-porque primero tengo que preguntar si quieres ir voluntariamente o tengo que secuestrarte…- bromeó el azabache. Hacía algo de calor ¿no?

 

-a la mierda las preguntas…- sin previo aviso agarró el cuello de esa linda camisa celeste del azabache y lo atrajo hasta sus labios. Sasuke no se molestó ni en sorprenderse, correspondiendo en cuestión de segundos el regalo que le estaba dando su acompañante. Naruto se sintió incomodo…

 

Por lo que empujó a sasuke al agua, llamó a utakata y escaparon juntos para siempre… (ok no XD. Ya los troleé bastante)

 

Naruto se sintió incomodo… así que paso una pierna por encima de sasuke, quedando sentado en las piernas del moreno.

 

Mucho mejor.

 

-me encanta cuando coincidimos en algo- murmuró sasuke contra los labios del rubio. Los dos sonrieron con complicidad antes de arremeter más salvajemente que antes.

Notas finales:

3500 palabras... AMENMEEEEEEEE.

 

COMENTEN ASÍ SEA EL NOMBRE DE SU MASCOTAAAAA.

 

Tengan compasión... son las 2 de la mañana. quizá haya zuculento lemon sobre esa canoa 7u7


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).