Como era de costumbre Sagato iba normal al colegio sin prestar atención a nada ni nadie; iba, estudiaba, regresaba, jugaba y dormía, así era siempre su vida, en realidad no había mucha diferencia en cada uno de los momentos que pasaba. El omega, invito a Senji, uno de sus mejores amigos, a su casa para pasar el tiempo.
-Porque cierras la puerta con llave...?. Preguntó extrañado luego de que llegaron a su hogar
-Eh...? No por nada.- sonríe con diversión.
Los dos chicos se disponen a empezar su partida semanal de videojuegos online, cada uno tenía sus técnicas, movimientos, trucos, etc. Eran casi expertos en los videojuegos, y siempre que se enteraban que uno nuevo saldría a la venta con temática gore, buscaban sus cosas de acampado para hacer fila y conseguirlo. Sagato es muy terco en varias ocasiones, eso incluye cuando van a comprar los juegos y no alcanza lugar, se comporta más como un niño pequeño que como uno de su edad, exactamente 15 años.
Senji, por su parte, es un chico serio de 18 años, nunca expresa sus sentimientos a nadie, a pesar de eso, se puede notar en su mirada la preocupación, el enojo, la tristeza, etc. Y Sagato es el primero en darse cuenta, gracias a ello, siempre le ayuda si sabe que algo está mal.
Sin darse cuenta de la hora, Sagato y Senji se la pasaron jugando y comiendo papas fritas hasta que por fin la noche calló, ya era muy tarde así que el menor invito a su amigo a quedarse por esa noche en su casa; el pelicafé claro acepto sin protesta:
-Puedes dormir en mi cama, yo dormiré en mi saco de acampado.
-Está bien, no soy tan ancho, durmamos juntos, no muerdo.
-Cómo puedo comprobarlo?
Ambos rieron.
Llegó entonces la hora de dormir, más o menos las 3:25am, hora habitual para irse a dormir los fines de semana. A la mañana siguiente se despertaron como a eso de las 3:00pm, después de una larga jornada de videojuegos sin fin:
-Oye Sagato...... despierta, son como las 3 de la tarde- insistió en un bostezo
-Shh..... déjame dormir otros cinco minutos, no no, mejor diez- pidió mientras cubría su rostro con las cobijas
-No tienes remedio.
Se sienta en la cama, y ya que él estaba del lado de la pared y su amigo en la orilla, saca sus pies de las cobijas, los puso en la espalda del contrario y haciendo una cuenta regresiva sonrió:
-Cinco.... cuatro.... tres.... dos....
-Para qué.... cuentas...??- preguntó en un bostezo
-Uno....!- con todas sus fuerzas, estiró las piernas haciendo que el omega fuese a parar al suelo
-¡¡waaa....!! –cae boca abajo- Tsk..... qué te pasa...?! Porque demonios me tiraste....?!
-Es la única forma de despertarte de tu sueño, bello durmiente. O es que preferías un beso...?- preguntó divertido
-De que hablas? En ese caso prefiero las patadas
Luego de que los dos chicos se vistieran, salieron de la casa en dirección al centro comercial. Sagato, estaba prácticamente en modo automático, pues parecía más dormido que despierto, y solo caminaba mientras Senji lo jalaba del brazo:
-Venga Sagato, ya despierta.
-Si si si, lo que digas.
-Oye vamos tarde a la escuela, es que no me pones atención?!- bromeo esperándola reacción del otro
-Que?! Vámonos entonces.- dijo alarmado
-Tan tonto eres? Es fin de semana idiota- rió
-Maldito- dijo mientras le observaba de reojo- Mi venganza será dulce
-Si mira que miedo te tengo, soy más alto, más listo y más fuerte que tú.
-Y eso que, no me cuestiones, veraz que terminaré ganándote.
Un olor dulce, suave y al mismo tiempo provocador pasó por la nariz de Senji cuando su amigo caminó de largo. Ese olor, era el de celo, nunca antes lo había olfateado tan cerca, era exquisito, pero bastante fuerte, los días menos importantes era cuando el omega si asistía a la escuela, pero en un el último de su celo, él dejaba de ir, y se la pasaba encerrado en su casa:
Se acerca a la oreja de su amigo- Oye dime... Hoy no es el último día de tu celo?
-N-no- se avergonzó por la pregunta- ya sabes que si lo fuera, es-estaría encerrado en mi casa.
-Entonces es el penúltimo- declaró
-De-deja de olerme!
-Shh....! Vamos a tu casa, aquí hay muchos alfas.
-Pe-pero quiero comprar más videojuegos, ya terminé todos los que tengo.
-Vendré yo por ellos más tarde, ahora vamos a tu casa.
-Um.... Está bien, pero yo te diré cuales comprar, está bien...?
-Claro
Ambos se fueron casi corriendo hasta la casa de Sagato, no quedaba muy lejos para su suerte. Antes de alcanzar la puerta, unos chicos, que parecían ser de 16 y 17 años estaban plantados frente a la casa:
-Sagato.... tiempo sin verte- pronunció el de 16
-Akuto?
-Hola Sagato, cuánto tiempo- dijo el otro
-Yamato?
-Sagato.... quiénes son?- preguntó el peligris
-Son amigos de un primo, Akuto y Yamato, hacía tiempo que no los veía
-Quien es él, Sagato?- preguntó uno de ellos
-Él es mi mejor amigo. Senji, ellos son Akuto y Yamato
-Es alfa- aseguro el llamado Yamato
-Eh?
-Tu amigo Senji es alfa, no es cierto? puedo oler hasta aquí su aroma de alfa.
-Porque estas con él, Sagato, tu eres omega, y si lo vas a "hacer" con alguien, por lo menos que sea con alguno de nosotros dos no?
-De que hablas Akuto? Él es solo mi amigo, y siempre me cuida.
-Además, ustedes también son alfas, y solo se aparecen cuando él está en su celo, será que quieren "hacerlo" con Sagato?- preguntó a la defensiva el alfa mayor
-Y que hay con eso?
-Ja, acaso piensas que te dejaré hacerlo?
-Si él quiere, lo tendrás que aceptar
-Esperen un momento.... yo aquí soy el afectado- interrumpió el omega- Akuto, Yamato, denme permiso, me quedaré encerrado en mi casa solo.
-Espera Sagato, me quedaré contigo.- trato de acompañarle
-No, no lo harás, dije que estaría solo por lo que resta del día, y mañana igual, así que nos veremos luego
-Está bien, como quieras, pero me quedaré en la puerta cuidándote.
-Quédate si quieres, mientras tanto, ustedes, vallase, no quiero verlos
Los dos muchachos se retiraron sin más palabras. Senji se quedó todo el tiempo fuera de la casa de su amigo protegiendo la entrada.
Sagato sabía perfectamente que hacer en estos días, cerrar las ventanas, puertas e intentar no abrir ninguna de ellas por ningún motivo. Al caer la noche, el peligris puso su casa en frente de la puerta del menor, metiéndose en ella y quedando profundamente dormido.
La mañana llegó acompañada de un olor dulce que ahora rondaba por cada esquina de la casa de acampado.
El alfa se despertó rápidamente saliendo de esta para ver qué pasaba. El último día de celo de su amigo, el más fuerte, era justo en ese momento y el tonto dejó una ventana abierta.
-Ese estúpido, si me hubiera dejado cuidarlo.
Rápidamente saca un duplicado de las cerraduras de la casa de su amigo le había dado para ocasiones como estas. Abre la puerta, cerrándola detrás de sí; corriendo hacia el cuarto del menor, le encuentra acostado en su cama sonrojado y sudando:
-Qué te pasa? Es que no te acuerdas que día es hoy? Tu olor esta por toda la calle.
-Lo…lo siento, tengo calor si?!
Senji corrió a la ventana y la cerró con seguro, viendo a través de ella a varios alfas que se acercaban al patio de la casa y claro, entre ellos se encontraban Akuto y Yamato tocando la puerta:
-Sagato abre...-grito con insistencia- Akuto o yo te ayudaremos con tu celo
El mayor cierró de igual forma la puerta del cuarto del más bajo con seguro:
-Se...senji...
-Quieres algo Sagato, agua, comida...?
Sagato se levantó de la cama con la poca fuerza que tenía y se acercó a donde su amigo, el cual, le cargo y recuestó nuevamente tapándole con las sabanas y alejándose lo más que podía sin salir del cuarto. Quería controlarse para evitar hacerle daño a su amigo. El pelicafé estaba harto de estos días, los días de su celo, que además de calor y enojo, le provocaban desesperación y dolor:
-Se-senji, ayúdame, qui-quiero "hacerlo" contigo…- suplicó
-No puedo Sagato, después de todo solo soy tu amigo-admitió en tono frío- Además, no podré controlarme
-Eres mi mejor amigo, ahora te pido ayuda, no importa si no puedes controlarte, lo soportaré
-Estás seguro, luego de eso, serás mi omega y de nadie más, entiendes?
-Sí, lo seré, me está doliendo mucho, puedes hacerlo ya?
El alfa se quitó la camisa y el pantalón quedando solo en bóxer, se acercó a la cama con cautela y retiré de igual forma, las ropas del contrario. El peligris se colocó sobre el contrario, junto su mejilla con la del otro y en un susurró en su oído comenzó a hablar mientras su mano se colaba a la entre pierna del mismo
-Ah..... Um.... Ag.....- comenzó a gemir mientras apretaba los hombros del mayor
-Te gusta cierto? O prefieres sin el bóxer?- escurrió su mano por dentro de la prenda de Sagato- Estas bastante excitado
-Ah! Ngh…
El mayor quitó el bóxer del otro dejándolo completamente desnudo; comenzó a besar su cuello bajando poco a poco, lamiendo de igual forma hasta llegar a sus botoncitos, aplasta uno de ellos con dos dedos, mientras al otro lo lame y muerde repetidas veces haciendo que el pequeño gimiera más. Baja hasta llegar a su miembro, al principio lo besa todo para terminar engulléndolo y lamiéndolo por completo mientras movía su cabeza adelante y atrás:
-N-no hagas eso, si sigues, yo me vo-voy a... Me voy a... -Sin poder aguantar más, terminó dentro de la boca del más grande- Ah!
Este, tragó todo con impaciencia- Por dios, sabes delicioso, probemos a ver si puede salir más.
-N-no, ya no.- suplicó entre jadeos
-Claro que sí.
Con su boca vuelve a masturbar al menor esta vez dejándolo un poco antes de que se viniera nuevamente.
Los alfas fuera de la casa de Sagato olfatearon el olor del omega combinándose con el de un alfa, se retiraron uno por uno, incluso Akuto y Yamato aún que un poco más tarde que los demás.
Mientras tanto, dentro de la casa, Senji había acomodado la entra del menor, justo arriba de su cara, y la cabeza de su amigo enfrente de su propio miembro (69):
-Lámelo, así será más fácil meterlo, yo lo aré de este lado.
El menor metió el miembro del mayor ya excitado a su boca chupándolo todo y succionándolo un poco, mientras el mayor metía lo más profundo que podía su lengua a la entrada de este, y poco a poco fue lubricándola toda. Luego de un rato, mete su dedo índice:
Sagato de inmediato, sacó el miembro del mayor de su boca mientras apretaba los ojos -Umm.... n-no lo muevas....!- movía sus caderas mientras la sensación le invadía el cuerpo
-Tu cuerpo dice que lo mueva más, prefiero obedecer a tu cuerpo.
El alfa mete otro dedo dándole más alcance hacia adentro y tocando lo que parecía ser el bultito rosado y carnoso del menor, que le provocaría gemir. Sin pensarlo dos veces, comenzó a presionarlo y pellizcarlo frenéticamente:
-Ah! No hagas eso!- gemía fuertemente mientras algunas lágrimas se escapaban de sus ojos
-Te dije que no me podría controlar una vez que iniciara, además, eres demasiado sexy.
Continúo jugueteando con el bultito hasta hincharlo un poco. Sacó los dedos y lamió todo el jugo que escurría de ellos:
-Rápido, ponte en cuatro.
El menor obedeció colocándose en la posición indicada dejando su entrada lubricada frente de la cara del mayor; este saca de su mochila, la cual estaba al alcance, una botellita con un líquido.
-Qué es?- preguntó curioso
-Lubricante
Senji derramó el lubricante sobre la entrada del omega. Era frío y viscoso. Tomo aire y colocó la punta de su miembro justo en la entrada del menor
-Listo...?
Poco a poco fue adentrándose mientras el más bajo abría su boca con impresión y dejaba escurrir un hilo de saliva de ella.
-Espera.... esta… muy grande, no… no entrar...Ahh!- antes de terminar la frase, el peligris ya había entrado completamente
-Vez como si entró- alego divertido- ahora me moveré un poco
-N-no, no lo hagas.- pidió entre jadeos
Haciendo caso omiso de las palabras del pequeño omega, el alfa comenzó a envestirlo sin utilizar toda su fuerza, provocando que hasta la propia cama en la que estaban comenzara a moverse un poco:
-Ah... ah... ah...! -soltaba gemidos con forme las envestidas
-Está muy estrecho sabes, me aprieta
El mayor sacó su miembro de la entrada del menor por un momento; voltea al mismo dejándolo boca arriba pero aun recostado en la cama. Con una mano sostiene los dos tobillos del omega y los levanta para ver su rosada entrada
-Que hermosa vista.
-De-deja de verme!- sonrojado
El mayor mete su miembro a la pequeña y estrecha entrada del menor al mismo tiempo que soltaba sus tobillos para comenzar a envestirle. Esta vez, el alfa puso más empeño y lo envistió con más fuerza haciendo que el omega gimiera y llorara por el placer y dolor. Pasó sus manos por la espalda del más bajo y lo levantó haciendo que se sentara en su miembro y aún siguió envistiéndolo con todas sus fuerzas hasta que él mismo llegara a su límite:
-Oye necesito moverte para no venirme dentro tuyo
Sagato abrazó a su amigo por la cintura con sus piernas y con sus brazos el cuello- pues ahora te aguantas y te vienes dentro.
-Venga déjame salir, ya no aguanto
-No te aguantes ma..ma... Ah!
Sin más palabras el mayor se vino dentro del omega al mismo tiempo que él manchando ambos cuerpos de un líquido blanco y espeso:
Sacando su miembro de la entrada del menor- Ten, tomate esto -le entrega una pastilla
-Bien -tomó la pastilla colocándola en su boca y escupiéndola al instante
-Dije tómatela no escúpela
-Ni de broma, sabe asquerosa
-Bien -la pone en su boca y en un beso profundo hace que el menor la tragué-mejor sabor?
Este desvía la mirada- No se
El omega se recuesta cansado y poco a poco se va quedando dormido, el mayor se acuesta a su lado, le besa una mejilla quedando de igual forma dormido.
A la mañana siguiente, el mayor fue el primero en despertar, se coloca su pantalón admirando al pequeño omega aún dormido y acurrucado.
Verle así dormido le pareció muy tierno, así que no lo despertó, más bien, le cobijo con las suaves y delicadas sabanas todo su cuerpi sin ropa; va donde la puerta del cuarto, la abre y sale dirigiéndose a la cocina.
Al llegar, comienza a preparar el desayuno para "su" omega; sube las escaleras caminando a la habitación, entra y admira al chico aún dormido. Deja el desayuno en la mesita de noche, va al baño y comienza a preparar la tina:
-Le gustarán con muchas o pocas burbujas? – se preguntó a sí mismo-
Pone una cantidad media de burbujas y sale caminando a la cama.
-Amor... Amor despierta, vamos, duermes como un oso
Despertando un poco- Estoy cansado, cárgame...
–Claro que sí, pero despierta ya.- se acercó- Primero te baño y luego desayunas
Quitó las sabanas del cuerpo del menor y lo carga como "princesa" entre sus brazos; va al baño y con cuidado lo coloca dentro de la tina sin dejarlo caer y sin lastimarle. Terminando de tallarle, le enjuaga y saca de la tina envolviéndole con una toalla y sentándole en la cama.
-Espera.... déjame traer ropa
-A sí, gracias- continuaba medio dormido, así que en cuanto se acostó, quedó completamente dormido
Trajo consigo unos boxers, una playera de manga corta a rayas y un short largo camuflajeado- Te has vuelto a quedar dormido he
Quita las toallas y comienza a vestirlo, como todo un niño pequeño. Cuando termino, le volvió a despertar, esta vez por completo, así que el menor comenzó a comerse todo lo que su amigo le había preparado, terminando sonrió al mayor con restos de comida en la boca:
-Sí que eres como un niño pequeño- limpió las boronas de comida de su cara
-Umm.... déjame, yo lo hago- dijo en un puchero
-No importa, ya te limpié yo- El mayor bajo la cabeza serio sin decir nada:
-Que tienes?
-Recuerdas que anoche te dije, que si te hacía el amor, serías mi omega?
-A si?
-No lo recuerdas?
-No
-Te lo dije, ahora ya no hay de otra, eres mi omega, y créeme si te digo que voy a ser muy sobre protector, a los alfas les atraerá tu olor de omega
-Qué bueno que pude escoger, en fin, no necesito que lo seas, ni que me fuera a dejar tocar por alguien mas
-Sabes que existe la violación cierto?
-Espero que eso no pase
-Si ojala, mataría al desgraciado.
-Vaya, pero me queda la duda.
-Cual?
-Desde hace cuánto que querías hacerlo conmigo?
-Más de lo que te imaginas.
El mayor se levanta, se coloca su camisa y los zapatos mientras se prepara para salir
-A dónde vas?
-Iré a comprarte algo para el dolor
-Pero no me duele nada
-Eso crees.... intenta pararte pero con cuidado, hazlo despacio
El omega se levantó rápidamente casi saltando de la cama en la que estaba recostado, y casi en el mismo instante en el que lo hizo, sus caderas se quedaron sin fuerzas, haciendo que callera al instante y golpeando su cabeza contra el frio y duro suelo:
-Te dije que con cuidado!- corrió hacia él y le ayudo a levantarse
-Tsk.... Estoy bien solo, no tengo fuerza en mis caderas, y ya
Le recuesta en la cama-Quédate aquí, no te levantes por nada, entiendes?
-Entendido
El mayor abandonó el cuarto bajando las escaleras rumbo a la puerta, salió cerrando con llave la casa, comenzó un pequeño viaje en dirección a la farmacia. Mientras, en la casa del omega, el pequeño estaba acostado en su cama aburrido, encendió el televisor, pero un pensamiento le invadía "querrá formar una familia conmigo?" era lo único en lo que estaba pensando ahora, pensaba que sí, pero luego que no, y así se la pasó todo el tiempo que estuvo solo. Ya en el camino de regreso, el alfa traía consigo la medicina que le ayudaría a su omega, llegó a la puerta y la abrió utilizando la llave que traía, entró cerrando la puerta detrás de él, subió al cuarto rápidamente y encontró a su novio en un estado de pensamiento muy profundo:
-Aquí esta, es una crema, seguro reducirá el dolor
-Gracias, pero.... podrías ponérmela tú?- pidió avergonzado
-Claro que si
Besó su mejilla y delicadamente levantó la playera del menor, bajó un poco su short mientras comenzaba a aplicar la crema en las caderas con la mayor delicadeza mientras le daba al mismo tiempo un masaje; el omega estaba muy satisfecho con eso. Al terminar, subió su pantalón y bajo la playera:
-En unas horas podrás caminar, si?
-En cuantas?
-Como de 1 a 3, no mas, tranquilo
- Waaa… Es mucho!
-Y pensar que tienes 15 años
-Cállate! Está bien sí, me quedaré aquí -se recuesta
-Gracias -besa su frente y se recuesta a un lado de él quedándose poco a poco dormido
-Si tienes sueño duérmete, yo estaré aquí sentado o acostado.
-Bueno
El mayor terminó dormido mientras que su noviecito seguía hundido en ese pensamiento que le invadía su mente, tocaba su vientre imaginando que estaba embarazado, imaginando que formaría una gran familia al lado de su pareja:
-Mira... tu papi está dormido- sonríe ´para después razonar lo que dijo- que estoy haciendo?- se cuestiono
-Eh..?- preguntó el peligris mientras se levantaba-
-Um..? O lo siento, ya te desperté, vuelve a dormirte.
-No, está bien, ya dormí 2 horas, es suficiente.
-Entonces ya puedo caminar?
-No sé, intenta
El menor se levanta de golpe y baja de la cama sin caerse:
-Estoy bien- sonríe divertido
-Te digo algo…? Todo fue una broma, desde hace mucho ya puedes caminar.
-Que?
-Todo fue una broma
-Ummm.... que malo eres.
Salió corriendo escaleras abajo y por toda la casa alegremente, tal como un niño que estuvo castigado por 15 minutos sentado en un sillita en el rincón de su cuarto. Fue hasta el jardín observando el exterior, el invierno se estaba acercando, eso significaba mucha nieve con la cual jugar; se tiró al césped y admiro el cielo, escuchando a los niños jugar en toda la calle, y el viento mover las hojas de los árboles, ya es fresco el viento, y él tan solo en short, playera de manga corta y descalzo, pescaría de inmediato un resfriado.
El alfa salió con una manta, la cual, utiliza para envolver al omega, le carga llevándolo dentro de la casa y sentándolo en el sofá café claro que tenía una cuantas cobijas enzima:
-No salgas si estas así vestido, ponte algo que te cubra del frio o pescarás un resfriado.
-¡Achu..!- estornuda- Muy tarde *snif snif*
Carga al más bajo envuelto en dos cobijas y lo lleva a su cuarto recostándolo en la cama y cubriéndole con las sabanas:
-Por no comportarte tendrás que estar en cama ahora.
-Eh? –estornudo- pero estoy aburrido de estar acostado!- alegó en un puchero
-Pues eso te lo ganas por descuidado, iré por la cena, no tardo, seguro para mañana te recuperas
-Bien y eso espero.
Al día siguiente, una vez que amaneció, el omega fue el primero en despertar, se levantó y caminó escaleras abajo. Encendió el televisor de la sala y sentándose con una bolsa de papas fritas comenzó a ver su programa favorito
Luego de una media hora, entre sueños el alfa noto la ausencia de su omega, se despertó de inmediato y al no verle en la cama, corrió escaleras abajo en busca de él, hasta encontrarlo sentado en la tv de la sala comiendo. Suspira un poco aliviado al ver que su novio si se encontraba dentro de la casa:
-Me imagino que ya te recuperaste, verdad?
-Así es, ahora ya no tengo que estar en cama.
-Sí, ya me di cuenta que te desagrada.
-Pues claro, por cierto voy a preparar el desayuno
-No te preocupes, yo lo hago.
-Seguro…?
-Claro.
El mayor fue hasta la cocina, comenzó a preparar un poco de arroz, mojarras, frito de lechuga y te frio de manzanilla. Sirvió en la mesa todo esperando a que su novio apagara el televisor y fuera a la mesa a comer. Después de 15 minutos de espera, y sin respuesta alguna del mas bajo, el mayor se levantó de la mesa un poco molesto, va donde el omega, apaga el televisor, le carga en uno de sus hombros, va donde la mesa, lo sienta en su silla y se sienta él en la suya:
-Itadakimasu.
-emm… Itadakimasu.