-¿Oigan? Alguno de ustedes se ha preguntado ¿Cómo se vería Kuroko si fuera mujer? - inquirió un pensativo Kagami mirando a su pequeña sombra y amigo secarse el sudor de su rostro con el cuello de su camisa.
Hyuga, Izuki y Kiyoshi que estaban junto a él siguieron la dirección de la mirada del pelirrojo e intentaron descifrar la doble cognición de aquella pregunta rara, comprendiendo que tal vez la complexión pequeña y la poca falta de color en la piel del peli celeste podría resultar muy atractivo en una chica.
-¿Porque de repente preguntas eso Kagami?- indago Kiyoshi cruzándose de brazos y mirándolo de reojo.
Kagami frunció el ceño un poco e imitando a Kiyoshi también se cruzó de brazos, resoplo dejando salir aire ruidosamente por sus fosas nasales mientras con los ojos cerrados asentía como aprobando alguna idea en su cabeza, después de cabecear dos veces más levanto la mirada y fijo su atención en los tres mayores decidiéndose a hablar al fin.
-Verán, el otro día íbamos Kuroko y yo caminando rumbo a Maiji Burger y nos topamos con Momoi.- Lo mayores se miraron entre si y después se fijaron en Kagami sin comprender que tenía que ver eso con lo que habían preguntado. - en cuanto vio a Kuroko se le lanzo como boa constrictor y lo abrazo, ya saben cómo es- conto as de Seirin percatándose de las expresiones confusas de sus sempais- Pero después de un rato asfixiando a Kuroko dijo algo que me dejo intrigado...
-¿Qué fue lo que dijo?- pregunto impaciente Hyuga de tanto rodeo del menor.
-Menciono que acababa de despedirse de "Tokiko-san" - dijo la luz confidente a los tres mayores que se habian acercado a él para escuchar mejor. Obviamente la falta de explicación del menor provoco que la irritación de Hyuga creciera y pellizcó la mejilla del pelirrojo al ver que ya no decía nada más.
-¡¿Y quién demonios es Tokiko-san?!- indago el capitán furioso.
-¡Hyuga! -intervino Kiyoshi- déjalo que hable si sigues haciendo eso no podrá decir nada más. El mencionado dirigió esta vez su irritación al número siete de Seirin y accedió a regañadientes a soltar la mejilla del menor que inmediatamente se comenzó a sobar la mejilla.
-¡Eso fue muy rudo! ¡Capitán!- reclamo el pelirrojo con lagrimitas en las comisuras de los ojos. Junpei lo miro condescendiente y chasqueo los labios irritado.
-¿Y bien?- dijo Izuki tranquilo- ¿Esta Tokiko-san tiene que ver algo con lo que preguntaste al principio?- Kagami asintió y después de un suspiro frustrado decidió continuar con su charla.
-Sí, resulta que Momoi dijo que era la hermana mayor de Kuroko.- informo los tres mayores arquearon una ceja especulante. De alguna manera comenzaban a entender por dónde iba el asunto, mirando al mismo tiempo al pequeño Kuroko aun del otro lado de la cancha terminando su ronda de entrenamiento de pies, ninguno sabía que la sombra tuviese hermanos o en este caso hermana. Es mas no sabían absolutamente nada de la vida privada del muchacho peli azul.
-así que tu curiosidad se debe a que no consigues imaginarte a Tokiko-san - aclaro Kiyoshi sonriente.- ¿No le preguntaste a Kuroko?
-en realidad lo hice, - argumento el pelirrojo -pero fue Momoi quien me dijo que si conseguía imaginar a Kuroko con falda entonces sabría como es su hermana...
Los tres mayores intentaron unir sus imaginaciones para visualizar lo que el as decía pero sus mentes o eran muy pobres de creatividad o el entrenamiento los había dejado más exhaustos que ni siquiera podían imaginar aquella bizarra pero claramente curiosa persona.
-No puedo, -declaro el capitán agachándose hasta sentarse en la fría madera del gimnasio.
-No eres solo tu Hyuga- comento Kiyoshi- yo tampoco pude imaginarlo.
-¡Verdad que es imposible!- dijo Kagami aliviado de no ser el único que no pudiese imaginar a Kuroko con falda.
-quizá podamos hacer que Kuroko nos lleve a su casa un día de estos y nos presente a su hermana,- ideo Izuki -así no tendremos curiosidad y conoceremos algo más sobre Kuroko...
-No parece mala idea...- concordó una voz femenina tras ellos.
-¡Entrenadora!- exclamo sorprendido Hyuga -¿Desde cuándo esta ahí? Ya se parece a Kuroko.
-no seas tonto, ustedes estaban demasiado distraídos eso es todo.- dijo la muchacha con ímpetu. - pero es cierto que es buena idea lo de antes. Además ya me dio curiosidad a mí también.- declaro la castaña intrigada. Tomo su silbato e hiso que todos los integrantes se reunieran en torno a ella.
Cuando todos estaban ya lo suficientemente cerca les dijo que el entrenamiento había llegado a su fin. Y fijo sus ojos bronce sobre el azulado provocando que el sixman sintiera un breve escalofrió en el cuello.
-¡Kuroko!- llamo fuerte el joven respondió un breve Hai y ella continuo- he decidido que la reunión de hoy será en tu casa.
-¿se puede saber porque?- indago el aludido con su típica inexpresión en el rostro.
-porque en mi casa no hay espacio- invento la joven con una tierna sonrisa.
-¿y porque no lo vamos a la casa del capitán?- cuestiono Koganei inocente ganándose una mirada colérica de la castaña.
-¡Cállate Koganei! - farfullo la joven y se dio cuenta que Kuroko empezaba a sospechar. Así que comenzó a reír nerviosamente agregando- que me dices Kuroko-kun ¿hay algún problema?
-preferiría que fuese en otro lugar- comento el joven cohibido- el departamento de Kagami-kun es bastante espacioso porque mejor no vamos allá- sugirió intentando zafarse mirando al pelirrojo que comenzó a sudar nervioso intentando buscar alguna excusa decente sin éxito.
- Kuroko, el departamento de Kagami esta demasiado sucio no podemos ir ahí- dijo Kiyoshi con cara sonriente.
-¡OYE! - Kagami grito un ofendido, él podía ser muchas cosas pero desordenado ¡jamás! Sin embargo noto que al pelo azul que no cambio su inexpresión en ningún momento como notando que en efecto era una muy mala excusa, por lo que prefirió mirar a otro lado cuando sus ojos chocaron en miradas.
-Está bien… - termino diciendo el peli celeste, parecía que era una pelea inútil insistir. Por su parte Riko y compañía sintieron el regocijo del triunfo sobre su querido amigo y ansiosos por saciar su curiosidad fue nuevamente su entrenadora quien hablo.
-¡Entonces está decidido! ¡Vayan a prepararse todos! ¡Iremos a casa de Kuroko!- declaro la castaña alegre, mientras celebraba internamente el salirse una vez más con la suya…
Continuara…