Limpiaba su habitación, como cada día, odiaba que en el castillo se acumulara tanto polvo, le irritaba eso, lo hacía toser demasiado, es por ello que siempre colocaba un pañuelo para sujetar su cabello y otro para cubrir su nariz y boca. Abría las ventanas para dejar entrar aire fresco, suspiro y bajo la vista encontrándose con el muchacho de cabello castaño recogiendo madera, lo miro y por alguna razón sintió como si aquella mirada dirigida a su subordinado le hubiese llamado, porque el muchacho instintivamente se giró mirando hacia donde el sargento de encontraba, ambos se miraron, tan solo por segundos, pero parecían una eternidad, el castaño le sonrió con dulzura, el comandante sintió una pequeña punzada en su pecho, aquella sonrisa, dirigida hacia él, llena de vida y juventud que resplandecía en el sol matutino le hacía emanar emociones jamás sentidas, el castaño bajo la mirada con un leve sonrojo y siguió con su trabajo.
“Es estúpido, que un viejo como yo se haya enamorado de un mocoso”-Pensaba el sargento soltando su cabello, había terminado ya la limpieza y se dirigía al comedor.-Desde cuando comencé a sentir esto, es demasiado patético…pero sobretodo peligroso.
Ha pasado ya 1 año desde que descubrieron que Eren tenía la habilidad de convertirse en titán a través de lastimarse. El muchacho ha quedado a cargo de la tropa de reconocimiento para averiguar la sobrenaturalidad de su cuerpo, a lo largo del tiempo la teniente Hanji a capturado titanes para averiguar lo que buscan pero ninguno de sus experimentos han tenido resultado, no sabe que es lo que quieren, ni cuál es su objetivo de comer humanos y hasta ahora tan solo han obtenido información gracias a Eren, que existen titanes con inteligencia que también podían ser humanos que se convierten en titanes tal como su caso y que pueden regenerarse a pesar de haber cortado alguna parte de su cuerpo…sin embargo, es lo único que han logrado, no hay nada más, lo cual no ayudaba en nada, han experimentado una y otra vez con el muchacho y aquella llave que llevaba siempre colgada en su cuello es la clave para descubrir todo el misterio y así probablemente acabar de una vez con los titanes, el problema era, que la aldea donde está la entrada a la salvación está invadida por titanes.
-Eren es la esperanza de la humanidad, pero, ¿No están dejando cargar a un muchacho de tan solo 16 años cargar con algo tan pesado?-Decía Levi en el comedor.
-Rivaille no hay alternativa, no hay nada más que podamos hacer.-Respondía Hanji con algo de frustración.-Se es difícil…pero…
-Esta bien.-Se oyó una voz frente a la morena.-Esta bien Heicho no tiene por qué preocuparse por mí.
-Mocoso, no interrumpas a tus superiores, tan solo soy honesto.
-Rivaille…tiene razón Eren te lo estamos dejando todo a ti.-Hanji bajaba su mirada con decepción.
-Pero Hanji-san, usted está haciendo lo que puede no soy solo yo…todos se están haciendo cargo de mi…-Eren apretaba los puños debajo de la mesa.-todos se preocupan por mi… ustedes hacen más que yo
-No hacen suficiente.-Interrumpió el de cabello obscuro levantándose de la mesa.-No hacen suficiente es por eso que no progresamos
-¡Heicho!-Grito el castaño.-Por favor no diga eso
-Tsk.-Chasqueo la lengua Levi y salió del comedor.
-Hanji-san…yo
-Está bien Eren…-Respondía la morena apretando sus dientes.-Rivaille tiene sus razones para ponerse así.-Decía levantándose para ir a su habitación.
-Pero…
-Eren.-Hanji fue hasta donde se encontraba el de ojos verdes y puso una mano sobre su hombro.-Él está preocupado por ti Eren.-El muchacho bajo la mirada levemente avergonzado.-Ve, traten de no discutir.-El castaño obedeció y se dirigió a la habitación de Levi.
Hace ya casi 6 meses Eren y Levi habían empezado una relación de Amantes, esto fue porque el castaño confeso sus sentimientos hacia su superior, estaba enamorado de él, de su valentía, de su increíble fuerza, física y emocional, como es que alguien podía seguir adelante al perder a tanta gente en las expediciones, es lo que siempre se preguntaba Eren, pero de cierta forma lo comprendía, no puedes vivir en el pasado, sin importar cuanta gente importante haya muerto tenía que seguir adelante, conocía ese sentimiento, el también perdió a alguien importante, la persona más importante en su vida, a su madre, es por eso que admiraba tanto a Levi, el sabia del pasado que su superior tuvo antes de unirse a las Tropas de Reconocimiento, como es que una persona pudo haber vivido en lugares tan bajos, sufriendo cada día temiendo por su muerte a cada minuto, robando, asesinando, todo aquello, aquel pasado tan obscuro que alguna vez Levi le confió, tal vez Eren no lo hubiera soportado o tal vez sí, no es como si él no hubiera asesinado una vez a alguien, pero fue por salvar a Mikasa, Levi no lo hizo por salvar a nadie o tal vez sí, pero era más que nada para sobrevivir en el mundo, ante aquella tenebrosa realidad de la que Eren era consciente, su pasado, sus miedos y cada uno de sus hábitos, sus secretos e imperfecciones, el castaño había tomado cada uno, por amor, aunque sabía que tal vez Levi no le quería de la misma forma, el que el haya aceptado sus sentimientos y le permitiera estar a su lado como su amante le era suficiente para hacerle feliz.
Eren llego hasta la puerta de la habitación de Levi y se dispuso a tocar.
-Heicho… ¿está ahí?-Pregunto inocentemente Eren, no hubo respuesta alguna.-Heicho.
-¿Qué quieres?-Se oyó una voz al otro lado de la habitación.
-¿Puedo pasar?
-No.-Eren bajo la mirada, a veces esa frialdad le lastimaba un poco.
-¿Puedo hablar entonces?
-Ya te dije que no puedes pasar.
-No lo hare, solo escúcheme.-Se oyó un silencio que parecía interminable y el castaño comenzó a hablar.-Heicho…yo, aprecio mucho lo que todos están haciendo por mí, me trajeron a vivir aquí, me dan comida y un lugar para dormir, usted me salvo de ser ejecutado, en cambio yo… no he hecho más que causar problemas…no soy eficiente en las labores y no se hacer nada en especial… y es por ello que siempre causo problemas…sobre todo a usted…que como dice soy un mocoso y ni siquiera debería de tener estos sentimientos por usted…-La voz del chico temblaba casi como si en cualquier momento pudiera estallar en llanto.
-Eren…
-Estoy muy agradecido de que usted me haya aceptado y que me permitiera estar a su lado…como…amantes…realmente usted y los chicos hacen mucho más que yo así que por favor… no diga que no es suficiente…porque….entonces yo me sentiré de lo peor…-La puerta se abrió y el castaño se encontró con la mirada de su superior, este bajo la mirada avergonzado.
-Ven.-Dijo Levi tirando del brazo de Eren metiéndolo en la habitación, lo sentó casi a la fuerza en su cama y se arrodillo para mirar su rostro.
-Lo siento Eren…estoy consciente de ello…es solo que estoy enfadado.-Dijo Levi apretando sus dientes y desviando la mirada.
-¿Por qué?-Pregunto el Castaño.
-Por favor no hables de mí como si fuera un dios….cuando soy la persona más corrompida en el mundo.
-No diga eso Heicho.-Eren tomo su rostro y le miro.-Heicho…usted es la persona que me salvo… y por ello le estaré eternamente agradecido.
-No lo hice yo…fuimos todos así que los chicos hicieron más que yo
-No me refiero a eso.-Levi lo miro confundido ¿A qué se refería?
-Eren…-Susurro Levi y luego planto un beso en los labios del castaño lo cual le sorprendió pero correspondió su beso, las manos de Levi se entrelazaron con las de Eren, mientras profundizaban el beso, Levi rozo un vendaje del dedo pulgar de Eren lo cual le hizo gemir de dolor.
-¡Aah!-Se separó el castaño.
-¿Te duele?
-Solo un poco.-Levi frunció el ceño, aquella mordida fue de la última vez que intentaron su transformación como Titán ¿Hace cuanto había sido? ¿Un mes? ¿Por qué aun le dolía?
-Eren ¿Estas bien?-Pregunto Levi al ver el rostro de dolor de chico debajo suyo.
-Estoy bien
-¿Quieres descansar?
-¿Puedo?
-Idiota, claro que puedes.-Levi recostó a Eren en el colchón y le ofreció un vaso de agua.
-Gracias Heicho.
-No agradezcas.- Levi acaricio la castaña melena del chico, solo a solas podía mimarlo un poco.
-Heicho
-Si, Eren
-¿Puede prometerme algo?-Eren bajo la mirada con leve tristeza, Levi le miro desconfiado y después de unos segundos respondió.
-¿Qué cosa?
-¿Puede prometerme que de verdad así será?-De alguna manera Levi podía imaginarse que cosa le pediría pero quería escucharlo del propio Eren.
-Lo prometo.
-Si yo…llego a perder el control sobre mi forma de titán…-Eren callo tragando saliva.- ¿Puede prometerme que usted será el que me asesine?
-¿Qué estás diciendo? Eso no pasara mocoso
-Pero si así es… ¿lo promete?-Levi cerro los ojos con visible dolor.
-….No lo sé
-Pero acaba de decir que si lo hará
-Eren…-Levi se acercó a él besando su frente.-No sé si podría hacerlo….
-Por favor…yo no sé qué haría en mi forma de titán y si yo le hago daño jamás me lo perdonaría….por eso por favor prométalo.
-……..Esta bien…-El chico sonrió, aquella dulce sonrisa que a Levi le encantaba ¿Podría seguir viéndola?
--------2 Semanas atrás--------
Levi se encontraba en el laboratorio de Hanji, un asunto muy delicado, le había llamado para que viniera el solo. A pesar de ser un asunto de Eren, quiso llamar primero a Levi.
-Bien, ¿Que noticias tienes?
-Rivaille….estas no son buenas noticias.-Dijo Hanji preocupada, Levi frunció el ceño la morena estaba hablando en serio.
-¿Qué pasa?
-Es sobre la regeneración de Eren
-Que pasa con eso
-Has notado que han pasado ya 2 semanas desde que hicimos el experimento y Eren no logro convertirse en titan, Pero que después sin razón alguna él se convirtió al tratar de alcanzar una cuchara.
-Ve al punto Hanji
-Eren ya no puede regenerarse
-¿A qué te refieres?
-Los estudios que hicimos con su sangre…después de algunos días comenzaron a pudrirse y al final la sangre de humano de Eren se remplazó por la de titán
-….Quieres decir que…
-Si, Eren dejara de ser humano y se convertirá en Titán completamente.-Levi apretó los puños al igual que sus dientes, no podía creer lo que le estaba diciendo Hanji, pero hablaba en serio.
-¿Cuánto tiempo?
-¿Qué?
-Cuanto tiempo le queda antes de que eso pase
-No lo sé…pueden ser semanas tal vez 2 meses por mucho…
-¡¡¿No hay algo que puedas hacer?!!-Grito Levi desesperado y golpeo la pared.
-Lo siento…-Levi chasqueo la lengua y salió de la habitación. ¿Por qué tenía que pasar algo así? ¿Por qué a Eren? ¿No existía alguna cura? Era lo único que podía pensar Levi…pero sin importar cuanto tratara de buscar una los resultados no iban a cambiar.
------------------------Ahora------------------------------
Eren enrollo sus manos alrededor del cuello de su superior y le dio un apasionado beso.
-Eren…tienes que descansar ¿estarás bien mañana? -Pregunto Levi.
Mañana por fin seria el día en el que irían a una expedición para descifrar el acertijo de los titanes, de aquella misión dependía el futuro de la humanidad.
-Estoy bien…ya no me siento mal
-Oi Eren no te sobre esfuerces.-Decía Levi tirando de un castaño mechón del chico.
-No lo hago.-Rio el castaño quitando la mano de Levi.-Heicho…por favor tóqueme.-Aquella petición sorprendió a Levi, nunca antes se habían acostado a pesar de estar saliendo, solo llegaron a tocarse pero nunca llegaron a tener sexo.
-Eren…. ¿Estás seguro?
-…Si, quiero que Heicho tome todo de mi…quiero darle todo lo que soy así como usted lo hizo.-Eren sonrió ampliamente, esto le hizo ruborizar a Levi.
-De verdad ¿Estás seguro? ¿No estarás agotado para mañana?
-Estaré bien, además prometimos que cuando esto termine iríamos a los lugares de los que hablo Armin
-Si, tienes razón.-Sonrió levemente Levi
-Así que por favor…-Eren volvió a besar a Levi con más intensidad.-Hazme el amor Levi.-Aquella voz tan suplicante que hizo estremecer al superior, que haya dicho su nombre de tal manera lo hizo un poco feliz, y como si fuera una orden Levi accedió, se subió sobre él y comenzó a besarle, después comenzó a morder, lamer y dar pequeños chupones en la bronceada piel de su amante, preparándolo y después entrando en el haciéndolo gritar, gemir y jadear, el rostro completamente rojo de Eren estaba lleno de lágrimas y después abrazo a Levi repentinamente.
-…Levi…Te Amo…-Dijo el castaño el superior se alejó unos centímetros quedando frente a frente y después de un intercambio de miradas Levi sonrió cariñosamente.
-También yo Eren.-Aquella sonrisa era la primera que veía de Levi, era la más hermosa que había visto Eren y después se soltó a llorar, Levi hacia lo posible por no hacer lo mismo…ambos fingían ya lo sabían pero era demasiado doloroso, aquella noche, su primera noche, sería la única oportunidad de sacar los sentimientos de ambos, porque sería su última noche.
La mañana había llegado, la tropa de reconocimiento ganaba tiempo mientras que Levi se dirigía en caballo con Eren hasta el que era su hogar, los demás luchaban, y Levi hacia lo posible por llevar a Eren a salvo.
Eran tan solo unos metros más antes de llegar, eran tan solo unos segundos más para llegar, tan solo era cuestión de segundos la salvación a Eren y a la humanidad, tan solo fue cuestión de segundos para que aquel titán tomara a Levi para devorarlo.
-¡¡HEICHO!!-Grito Eren deteniendo el caballo al ver como aquel titán tomo a Levi quien trataba de escapar sin éxito.
-¡VE!-Grito Levi al castaño.- ¡No te detengas!
-¡Heicho!
-¡VETE! ¡Sálvate!
-¡NO!-Grito Eren con lágrimas en los ojos mientras acercaba su pulgar a su boca.
-¡EREN NO LO HAGAS!-Aquellas palabras no sirvieron de nada, el castaño concluyo la transformación y se convirtió en Titán arrebatando a Levi de sus manos y lanzándolo al suelo haciéndolo girar un par de veces.
-¡EREN!-Grito Levi al ver cómo era atacado por el otro titán, sin embargo Eren se las arregló para acabar con él, Levi se dirigía hacia el pero este en cuanto lo vio hecho un rugido hacia el.-…¿Eren?- Levi había quedado en shock aquel titán ya no era Eren, él ya había perdido control alguno sobre sí mismo, el titán corrió hacia a él pero en un movimiento veloz le esquivo volando por el aire.-Eren Reacciona!-Repetía Levi atacando a los puntos que no eran vitales, pero era inútil Eren ya no controlaba al titán, Levi apretó los dientes al igual que sus ojos.-Devuélveme a Eren!-Grito y corto la nuca del titán donde logro ver el cuerpo de Eren el cual con rapidez arranco del cuerpo del titán y termino por destruir mientras se llevaba en brazos al castaño.-Eren, Eren reacciona ¡¡Eren!!-Gritaba desesperado Levi, el castaño abría poco a poco sus ojos con dolor.
-He…icho-Pronunciaba con dificultad el castaño.
-Eren, ¿Estas bien?
-Lo siento Heicho…-Eren comenzó a llorar
-¿Por qué?
-Siento no poder quedarme y ver esas cosas maravillosas que prometimos ver cuando esto terminara.-Los ojos de Levi comenzaron a cristalizarse y las lágrimas salieron impredeciblemente.
-Eren, no puedes morir, podemos salvarte
-No es verdad…pero Gracias
-Eren, por favor dijiste que estarías siempre conmigo
-Aun si yo muero estaré Siempre Contigo
-Eren….estarás bien ¿sí? Solo aguanta un poco más.-Levi estaba desesperado y no sabía que hacer buscaba con desesperación ayuda pero todos estaban luchando…
-Heicho… por favor mátame
-¡¿Q-Que?!
-Es doloroso… ahora mismo estar así…solo mírame.-Levi miro el cuero de Eren poco a poco se iban formando tejidos de titán en su cuerpo el ya no iba a regresar nunca más a su forma original, solo era cuestión de segundos para que se transformara por completo. Levi abrazo a Eren y las lágrimas no paraban de caer.
-Eren…Te Amo…-Dijo por ultimo Levi mientras clavo un cuchillo en el corazón de Eren
-…..También yo….-Fue lo último que salió de Eren hasta que dejo de respirar.
Aquel día lograron entrar y descubrieron el secreto de los titanes, todos lloraron por la muerte de Eren excepto Levi, quien no hizo mención alguna de lo sucedido, algunos decían que era un insensible, sean cual sean las criticas ya estaba acostumbrado, a única que sabía era Hanji.
Después de aquel día Levi lloro toda la noche y la siguiente y la siguiente, algunas veces Hanji entraba a su habitación y lo acompañaba para que no se sintiera solo.
La humanidad por fin estaba viviendo en paz, los titanes habían desaparecido por completo.
Levi se encontraba en la playa viendo aquel azul mar que reflejaba la hermosa puesta de sol.
-Eren… ¿puedes ver lo hermoso que es?-Decía Levi mirando el cielo.-Seguro que puedes verlo ¿no es así? Por qué… siempre estarás conmigo.-Levi sintió el fresco viento pegar en su rostro y como un susurro escucho aquella dulce voz. Sonrió y casi llorando tan solo dijo.
-También yo Eren…siempre Te amare.