Xx
Cuando BaekHyun conoció a Chanyeol, pensó que era demasiado alto.
No era precisamente que eso le molestara, sin embargo, cuando se enteró de su edad, BaekHyun se sintió muy ofendido.
Y es que él, antes de Chanyeol, había llegado a sentirse muy orgulloso de sus 1,70 centímetros de alto. Y luego venía esa cosa enorme a pararse junto a él, con una sonrisa boba, llamándolo “Hyung”.
Ridículo.
Era así. Ridículo. Chanyeol pasaba de los 1,85 centímetros desde los dieciocho y no se cansaba de presumirlo, una y otra vez, logrando fastidiar al mayor.
Fue precisamente por ello que BaekHyun descalificó a Chanyeol como un posible amigo.
Y sin embargo, semanas antes del debutar, se encontró a sí mismo solo en el departamento con el miembro más orejón del grupo. Si hay algo que Baek nunca soportó, fue el silencio incómodo y aunque Chanyeol sonreía mientras miraba el televisor, para él era una situación de lo más penosa.
Resignado, el mayor deslizó sus pies descalzos hasta la cocina y tomó una bolsa de frituras. Las vació en un contenedor y volvió a la sala, arrastrándose de forma perezosa.
Chanyeol, que había estado observándolo de reojo, lo miró fijamente y luego al recipiente que yacía en sus manos, curioso.
—Yah, compartámoslas, Gigante.
El más alto entrecerró sus grandes ojos y guardó silencio. Con sinceridad, no sabía qué parte exacta de la frase de su Hyung era más sorprendente para él. Si el que lo llamase “gigante” o el que quisiera romper las reglas y comer lo prohibido.
Al final se encogió de hombros y se tumbó de forma cómoda sobre toda la extensión del sofá. — No se supone que comamos esas cosas, Baek Hyung.
El aludido lo miró mal.
A Chanyeol realmente le intimidaba la mirada penetrante que su Hyung le dedicaba algunas veces, parecía como si lo detestara, sobre todo utilizando esa cantidad exagerada de delineador sobre los ojos.
—Nadie tiene por qué saberlo, Gigante. — Contestó con simpleza, chocando los dientes al llamarlo de esa forma mientras miraba toda su extensión y se acercaba.
—Un Hyung no debería enseñarle a su Dongsaeng a hacer cosas malas.
—Yah, no las comas si no quieres. — Le espetó el mayor y empujó su cabeza, tratando de abrirse un hueco en el mueble para sentarse.
Y es que BaekHyun siempre ha sido tan delgado como una hoja, por lo cual no tuvo problema alguno para aplastar su trasero en un pequeño rincón del sofá. Observó atentamente al mayor hacía abajo y se encontró con sus lindos y grandes ojos cafés. Resopló.
—¿Vas a comer o no?
Chanyeol levantó la cabeza y BaekHyun supuso que se sentaría a su lado para disfrutar de las botanas y la película juntos. Sin embargo, el menor volvió a recostar la cabeza, dejándola caer esta vez sobre el regazo de su Hyung.
—¿Q-Q-Qué estás haciendo?
Una sonrisa se pronunció en los labios de Chanyeol al captar el nerviosismo de BaekHyun, por lo cual se encogió de hombros y abrió la boca.
Silencio.
—Aliméntame, Baek-ee — Chanyeol hizo un puchero antes de volver a abrir la boca.
BaekHyun pensó que se veía adorable de esa forma. Y luego se reprendió mentalmente por ello.
Chanyeol era todo menos lindo.
Era grande. No. ¡Era enorme! Desordenado. Bruto. Molesto. Estaba mimado y por sobre todas las cosas, era ridículo.
Más sin embargo, el mayor se encontró a sí mismo dándole frituras en la boca durante un cuarto de hora y acariciando su cabello hasta que cayese en los brazos de Morfeo los siguientes veinte minutos restantes de la película.
Y, por supuesto, toda la noche pensando en el porqué de sus inexplicables acciones.
Xx
Definitivamente, entre más lo conocía, más pensaba BaekHyun que Chanyeol era la persona más ridícula que había conocido.
Le gustaba bromear. A decir verdad pasaba todo el tiempo jugándoles malas bromas a los integrantes de EXO. Era desordenado. Baek nunca fue un amante del orden y sin embargo, estaba harto de ver el reguero de cosas de un lugar a otro y por supuesto, de que D.O. tuviese que estar todo el día tras el más alto, recogiendo sus desastres.
“Su nivel de madurez es impresionante”, pensó BaekHyun una mañana soleada, mientras el menor se paseaba en calzoncillos por toda la casa y molestaba a un ruborizado KyungSoo de ceño fruncido.
Fingía muy bien ignorarlo, sentado en el comedor, con los ojos puestos en una revista que no leía. Sin embargo, estaba realmente interesado en descifrar por qué su dongsaeng se veía tan contento y no paraba de parlotear con todos los demás acerca de su felicidad.
JongIn estaba a su lado, recargando la cabeza en su hombro en un intento fallido de lo que Baek llamaba: “Poner celoso a KyungSoo fase seis”.
—Yah, Baek Hyung. — Lo llamó el de piel canela, sacándolo de su concentración en escuchar qué era exactamente lo que estaba diciendo Chanyeol en ese momento.
—¿Mhhn? — El aludido tenía todo menos interés en comenzar una conversación.
—¿Crees que debería sacarme los pantalones?
El, en ese entonces, rubio se sobresaltó y recorrió la silla, lanzando la revista a la mesa y alejándose del más moreno. —¿QUÉ?
JongIn sonrió como el mismísimo Kai y su Hyung tragó saliva. —Ya sabes, para llamar la atención de KyungSoo, como Chanyeol.
Dándose cuenta de a lo que se refería, BaekHyun supiró mientras rodaba los ojos. — No tienes que comportarte como un imbécil para acaparar la atención de D.O. Hyung. — Le espetó, poniéndose de pie.
Kai lo siguió con la mirada.
—Pero Chanyeol le parece guay a todo el mundo, Baek Hyung.
El aludido guardó silencio mientras tomaba su revista y emprendía el camino hasta su habitación. —A mí no, JongIn-ah.
Por supuesto que no todo fue tan sencillo como eso.
De un segundo a otro y sin saber muy bien por qué, BaekHyun no pisaba el suelo. Lo siguiente que supo al abrir los ojos, era que Chanyeol corría alrededor del comedor y lo cargaba cual princesa entre sus brazos.
—¡Park Chanyeol! ¡Bájame ahora, maldito gigante! — Gruñó y manoteo en el pecho del otro que saltaba, lo ignoraba y lo llevaba de un lugar a otro sin ninguna dificultad.
—¡Ella me vio! ¡ME VIO!
El resto de los integrantes del grupo los miraron con atención, algunos incluso salieron de sus habitaciones para ver qué estaba sucediendo con exactitud.
Chanyeol siempre era una persona escandalosa, sin embargo, nunca sobrepasaba los límites. Y ese definitivamente era un límite, al menos para el Byun.
Antes de agravar más la situación, el joven Park bajó a su compañero y lo colocó frente a él, atrapando sus hombros entre sus amplias manos mientras agachaba la cabeza y lo miraba de forma cómplice.
BaekHyun perdió la cordura cuando el aliento del más alto chocó contra el suyo y le dedicó una sonrisa altamente seductora al menor, que como siempre, lo ignoró olímpicamente.
—Baek-ee ¡ella me vio! ¡Incluso sonrío! — Exclamó el más alto, alejándose un poco.
El aludido borró su sonrisa y levantó una ceja. — ¿Quién demonios?
—Dara. — Explicó KyungSoo, uniéndoseles y ofreciéndole a Chanyeol unos pantaloncillos gastados.
BaekHyun levantó ambas cejas varias veces en señal de confusión y se cruzó los brazos. ¿A él qué le importaba si Dara le sonreía a Chanyeol?
Nada. Por supuesto que no le importaba absolutamente nada.
—¿Y qué? — Espetó de malas, chocando su hombro de forma ruda con el brazo del más alto mientras pasaba por su lado.
—¡Baek-ee! ¡Estoy muy emocionado! ¡Dara es tan hermosa!
El aludido tronó la lengua y se volvió para dedicarle una mirada despectiva sin dejar de caminar. —Oh.
“Qué ridículo”.
Xx
Pese a todo lo que pudiese pensar sobre él, BaekHyun se volvió inevitablemente cercano a Chanyeol.
Compartían un montón de gustos. Y después, llegaron a compartir la misma habitación, logrando que su relación se volviese todavía más estrecha de lo que ya era.
Algunas veces el más alto buscaba demasiado a BaekHyun, que se estremecía ante su cercanía y solía suspirar en silencio por las noches al recordar un contacto mínimo.
Y entonces… sucedió.
Era invierno y aunque BaekHyun tenía los pies helados había decidido dejar de moverse bajo sus mantas para intentar conciliar el sueño. Cuando la luz aún estaba encendida, pudo jurar que podía ver su propio aliento, incluso con la calefacción encendida.
Era su primer Diciembre luego del debut y todos estaban sumamente emocionados con ello. Estaban alcanzando muy buenos puestos con sus canciones y cada vez más estaciones de radio y programas de televisión los mencionaban.
Esa noche, BaekHyun sintió un peso adicional sobre su cama pero no se movió incluso cuando unos cálidos brazos rodearon su cuerpo y aferraron su cintura, aproximándolo al cuerpo del intruso. El mayor no era nada tonto, no había nadie tan atrevido como para hacer eso, excepto Chanyeol.
—¿Qué se supone que haces? — Habló bajito mientras el otro apoyaba su quijada en su hombro y suspiraba.
—Está haciendo frío, Baek-ee.
—¿Y qué tengo que ver yo con eso? —Inquirió, temiendo ser descubiertos por SuHo, que dormía en una cama frente a la suya.
Chanyeol inhaló fuerte —Pensé que eras muy cálido… — susurró en su oído. — Y lo eres…
El mayor se estremeció ante la caricia de su aliento y fijó su mirada en la pared. — Esto no está bien.
Chanyeol, sin embargo, agravó la situación. Besando su cuello con pereza. —Yah, Hyunnie, solo vamos a dormir.
El aludido no supo si eso era una afirmación o una sugerencia por lo cual prefirió permanecer en silencio. Su estómago hacia cosquillas, Chanyeol acariciaba su vientre con sus largos y fríos dedos en movimientos lentos y circulares.
Resignado, BaekHyun entrelazó sus piernas con las largas del otro y cerró los ojos.
Chanyeol no tenía un límite.
Xx
Dara. Dara. Dara. Dara.
BaekHyun estaba harto de escuchar a Chanyeol hablar sobre esa mujer.
Al principio el menor no tenía ni la menor idea de quién era. Sin embargo, la inseguridad y un montón de cosas más, lo hicieron verse a sí mismo navegando en internet con su nombre en el explorador.
Era ridículo.
Obviamente una mujer como esa no iba a estar con Chanyeol.
Y no era que BaekHyun pensara que ella era hermosa exactamente. Al contrario, aunque le costaba admitirlo, BaekHyun pensaba muy seguido que Chanyeol era demasiado hermoso para ella.
—Dara es la criatura más hermosa que mis ojos han visto… — Suspiró Chanyeol una noche de primavera mientras veía fijamente la pantalla de su celular.
BaekHyun le dedicó una mirada asesina desde el closet. Su cabello goteaba, pues acababa de salir de la ducha y estaba de todo menos de humor como para escuchar al gigante hablar sobre su peculiar amor platónico.
—No lo es.
Chanyeol se sentó sobre su cama. Porque sí, desde aquella noche de invierno, la cama de Chanyeol había quedado prácticamente sin uso alguno pues el gigante poco a poco se fue mudando a la de su Hyung, quien nunca protestó.
—¿Y quién si lo es, uh?
BaekHyun, que cuidaba que la toalla que cubría su cintura no se le cayera mientras se colocaba el bóxer por debajo de ella, quiso decirle que él –Baek- lo era.
—Taeyeon.
Chanyeol abrió los ojos de forma exagerada. BaekHyun sonrió mientras recordaba a D.O.
—¡¿Te gusta noona?!
El rubio suspiró y se sacó la toalla de encima. — Quién sabe, Chanyeol.
El más alto se puso de pie y caminó hasta él. Baek no pudo evitar ponerse nervioso, dándose cuenta del estado en el que estaba. Chanyeol lo tomó por la cintura, haciendo que su corazón diera un salto.
—Baek-ee, harían una pareja preciosa.
El aludido suspiró y presionó el pecho del más alto para alejarlo. Se puso una camisa holgada de inmediato y se metió a la cama.
—¡Me ducharé entonces! —Al parecer el gigante jamás dejaría de ser escandaloso.
BaekHyun intentó relajarse ya en su cama y tomó el celular de Chanyeol, que había dejado sobre la cama. Con un ágil movimiento encendió la pantalla y se detuvo ante el código de seguridad.
—Predecible… — Susurró después de colocar una “D” en los puntos a unir y frunció el ceño al ver el fondo de pantalla de su Dongsaeng.
“Qué ridículo” pensó, Chanyeol tenía la única foto que compartía con Dara puesta allí mismo.
La había tomado algún reportero durante a saber qué premios. Chanyeol no había dejado de hablar al respecto durante todo un mes, pues se había sentado a dos sillas vacías de distancia de la tipeja esa.
Cuando el gigante regresó a la habitación, BaekHyun lo esperaba con el cuerpo extendido sobre la cama. Una imagen bastante tentadora a los ojos de cualquiera, incluso a los de JoonMyun que se sonrojo bastante al entrar a la habitación y encontrar los cuerpos de sus compañeros entrelazados, como siempre.
Durante la fresca madrugada, Chanyeol recordó que debía poner la alarma antes de dormir, así que con cuidado de no despertar a su compañero, tomó su celular, lo desbloqueó y una sonrisa se dibujó entre sus labios…
BaekHyun había puesto una foto de ambos en el escenario de fondo de pantalla. Había un corazón en medio de ellos.
Enternecido, el gigante bloqueó la pantalla y se aferró con fuerza a la cintura del más pequeño, depositando un beso en su mejilla antes de caer dormido.
Su corazón latió con rapidez en la espalda de su Hyung.
Incluso se olvidó de poner la alarma.
Xx
La temática de los lobos estaba de moda.
“Wolf” estaba siendo todo un éxito y al parecer, Chanyeol tenía complejo de lobo.
BaekHyun era quién más sufría por ello. Había marcas de mordidas en sus brazos y también en su cuello, por lo que se alegró de que su vestuario siempre lo mantuviera bien cubierto.
En el último mes, Chanyeol había comenzado a depositar suaves besos en su cuello antes de dormir y sin embargo, ahora se habían transformado en mordidas y chupetones.
Chanyeol siempre le susurraba al oído “Nan neukdego, neon minyeo”* cuando terminaba.
BaekHyun simplemente se dejaba hacer, mordiéndose los labios con fuerza para no gemir y aferrando sus manos a las sabanas. JoonMyun le sonreía de una forma retorcida desde entonces y Baek tenía miedo de alguna vez ser interrogado y no saber responder.
Fue una noche tranquila luego de una tarde cansada cuando BaekHyun tomaba una ducha.
Al mayor le gustaba muchísimo ducharse, para él, era como quitarse todo el peso del sudor de encima. Así que mientras comenzaba a enjabonarse y perdía sus oídos en el agua de la regadera, jamás escuchó el sonido de la puerta abrirse…
No fue sino hasta que la cortina se abrió de pronto que se volvió, sorprendido. Chanyeol se mordía el labio inferior y lo miraba fijamente.
—¿¡Q-Qué demo-
El más alto se apresuró a cubrir su boca con sus manos y frunció el ceño. —Hyunnie, si gritas todos nos escucharán.
El aludido parpadeó varias veces y después dejó caer su mirada hasta encontrarse con que su compañero estaba completamente desnudo y despierto frente a él. Un sonrojo cubrió toda su cara y apartó las manos del otro de su rostro con agilidad.
—¡Sal de aquí, Chanyeol! — Exclamó en voz baja, abriendo la cortina y señalándole al grandulón la salida.
El aludido puso los ojos en blanco y volvió a cerrar la cortina. — Te frotaré la espalda, Hyunnie.
Baek suspiró, acostumbrado a que su Dongsaeng lo ignorara. —No, Chanyeol, sal de aquí.
El más alto se cruzó de brazos. “No mires abajo. No mires abajo. No mires abajo” BaekHyun se sentía desfallecer, solo quería que el otro se marchara. Para empezar no tenía ni idea de qué estaba haciendo Chanyeol ahí.
Sus pensamientos se vieron interrumpidos por las grandes manos de su compañero de habitación, que acarició sus hombros y se mordió nuevamente el labio inferior.
—Byun BaekHyun, ¿vas a decirme que no quieres tomar un baño conmigo?
El mayor suspiró ante el contacto húmedo que hacía el mayor al frotar su piel contra la suya repetidas veces. —Solo será esta vez… — Finalmente accedió y se volteó para tomar el champú.
Mala idea.
Pronto sintió el cuerpo del más alto pegarse al suyo. Su piel estaba caliente y pronto se humedeció tal cual la suya. Baek respiraba con dificultad y escuchaba el corazón del otro latir acelerado cerca de su oído. Pero más que eso, había algo que no encajaba.
Algo duro y caliente. Muy caliente.
Los labios de Chanyeol se fundieron rápidamente en su cuello y BaekHyun no pudo reprimir un gemido. La sangre comenzaba a hervirle y no estaba precisamente enojado.
—Hyunnie…
El aludido suspiró por respuesta.
—Tengo un problema aquí.
Baek terminó de acalorarse y sabía que no había forma de sonrojarse más. Lo sabía, él podía sentir su problema, rozaba con su espalda baja y estaba más que duro.
Permanecieron un instante en silencio.
Baek nunca había estado en una situación como esa y pese a que parecía un experto en cada cosa que hacía, estaba seguro de que Chanyeol tampoco. Precisamente por ello, no entendió como fue que su mano se deslizó hasta acariciar los muslos del otro.
Chanyeol lo giró rápidamente un segundo después de sentir su cálido contacto.
Sus miradas se encontraron. BaekHyun observó atentamente los grandes ojos del menor.
—Ayúdame, Hyunnie.
Baek sonrió y su mano se deslizó hasta alcanzar el miembro de su gigante.
Como ya lo había mencionado anteriormente, Chanyeol era enorme. Y bueno, al parecer no solo lo eran sus manos, sus piernas, sus ojos y sus orejotas… Porque BaekHyun recorrió toda su extensión y cuando bajó la mirada se mordió el labio inferior con fuerza.
Chanyeol realmente era todo enorme.
Sin tener mucha experiencia y sin saber muy bien por qué, BaekHyun se puso de rodillas en el mojado suelo, con las gotas de agua todavía cayendo insistentemente sobre su cuerpo.
Solo entonces volvió su vista hasta encontrar la del mayor y volvió a sonreír, lujurioso.
BaekHyun sujetó su miembro con fuerza y Chanyeol se mordió los labios para evitar gemir. Comenzó a frotarlo lentamente, arriba y abajo, una y otra vez, sujetando el trasero del más alto, que agradeció el gesto pues al sentirlo le flaquearon las piernas. El Park buscó con sus dedos sus delgadas y húmedas hebras de pelo, acariciándolas.
Baek acercó sus labios al despierto pene del gigante y lamió su glande lentamente, como si lo saboreara. Yeol creyó que no había nada más excitante cuando lo vio besar su punta de forma pasional.
Justo en ese momento, BaekHyun engulló el miembro del menor y comenzó a recorrer lo más que pudo de su extensión con su boca. En respuesta al gesto, Chanyeol tiró de sus cabellos de forma casi involuntaria.
Sus movimientos eran tóxicos. Tan tóxicos como su lengua sobre su pene, tan suaves como su boca.
Baek jugó con su miembro. Su lengua luchaba por proporcionarle al más alto un montón de caricias salvajes que, sin lugar a dudas, ponían a temblar las rodillas del otro. Chanyeol comenzó a empujarlo de vez en cuando para que lo succionara más rápido y el mayor obedeció desde su pose sumisa en el suelo, dejando que le follara la boca.
—Hmmp, H-Hyunnie…
Los suspiros de Chanyeol eran música para sus oídos.
—Quiero que te vengas. — Susurró Baek. No tenía ni idea de donde había salido esa voz tan seductora pero se alegraba de poder usarla, los ojos del más alto se nublaron por la excitación.
Baek volvió a metérselo a la boca, masajeando los sus testículos con una de sus manos y ayudándose con la otra.
Esa imagen era demasiado a los ojos del pobre Yeol que se estremeció con fuerza y se concentró todo lo que le fue posible en no jadear muy alto.
—H-Hyunnie y-yo…
El aludido asintió desde abajo y aceleró sus movimientos. Chanyeol cerró los ojos y con un brusco movimiento, obligó a BaekHyun a levantarse, pegándolo a la pared.
Baek lo miró confundido y él se apresuró a tomar su miembro entre sus manos. Como lo imaginaba, su compañero estaba tan duro como él. Baek le siguió el juego comenzó a frotarlo también. Chanyeol le besó el cuello y después juntó sus miembros.
Una descarga eléctrica recorrió las espaldas de ambos por el contacto y les fue inevitable jadear de forma ruidosa. Yeol los frotó con fuerza y un segundo más tarde se vinieron juntos.
BaekHyun cerró los ojos y Chanyeol dirigió su mano sucia hasta sus labios, introduciendo sus dedos en la cavidad bucal del mayor que comenzó a chuparlos. Acto seguido se dispuso a hacer lo mismo.
Baek abrió los ojos y lo miró sonrojado.
El gigante sonrió — Sabes muy bien, Hyunnie. — Dijo mientras lo tomaba por el trasero y lo pegaba a su cuerpo.
BaekHyun descansó su rostro avergonzado en el pecho de su mejor amigo.
¿Qué había hecho?
Xx
La siguiente vez que BaekHyun vio a Chanyeol triste por Dara, le lanzó un cojín y fue a sentarse sobre él.
La confianza era algo que tenían de más.
Luego del incidente en la ducha, BaekHyun dejó de ser el único de los dos con marcas por todo el cuerpo y habían repetido sus actos en más de una ocasión.
—¿Por qué estás suspirando ahora, idiota?
Chanyeol no lo miró ofendido como creyó que lo haría, simplemente se encogió de hombros y miró la televisión.
—Dara está saliendo con un tipo.
BaekHyun buscó su mirada, desafiante y al no encontrarla, lo tomó por el mentón y lo obligó a mirarlo.
—Deja de pensar en ella. — Demandó.
Chanyeol lo miró sorprendido. —Deja de pensar en Taeyeon. — Replicó.
BaekHyun puso los ojos en blanco y se levantó. No quería hacer un espectáculo, los chicos estaba allí. D.O. estaba sentado recargando la cabeza en el hombro de Kai en el sillón de al lado, SuHo veía fijamente la pantalla de su celular junto a ellos y SeHun usaba el video chat para hablar con LuHan, como ya era costumbre.
—¡¿Es que eres un imbécil o te haces?! — Pese a todo, no pudo evitar gritar.
Chanyeol se levantó, indignado. — ¡Tú eres un imbécil!
Los ojos de BaekHyun se llenaron de lágrimas — ¡Ah, claro! ¡Yo lo soy! ¡Porque yo fui al que usaste! — Exclamó, Yeol puso cara de no entender nada y todos les prestaron atención — ¡Yo fui el imbécil que se dejó tocar por ti! ¡El imbécil que te hizo la mejor mamada de tu vida! ¡El imbécil que se enamoró mientras tú sigues suspirando por una maldita tabla que no te merece!
El gigante se cayó. Olvidando absolutamente todo lo que tenía para decir.
Su garganta estaba ceca y su mente intentaba procesar lo más rápido que le era posible mientras BaekHyun lloriqueaba, moviéndose de un lugar a otro frente a él, lanzándole todo lo que encontraba a su paso, atacándolo como una fiera.
—¡Te odio, Chanyeol! — Bramó el más pequeño de estatura mientras, le lanzaba una pera, que, afortunadamente el gigante fue capaz de esquivar — ¡Si no me querías ¿por qué jodidos tenías que tocarme?! Puede que yo sea un imbécil pero tú también eres un imbécil
Chanyeol abrió la boca. Las palabras no salieron.
—¡Un imbécil y la persona más ridícula que conozco! — Exclamó BaekHyun con el delineador comenzando a correrse — ¡Tan estúpido! ¡Suspirando y lloriqueando por Dara en los rincones! Ilusionando a tu mejor amigo y tocándolo mientras piensas en ella ¡Eres un sucio imbécil!
EXO-M se había reunido a observar desde China mediante el chat que mantenía LuHan con SeHun.
Kai le daba palomitas a KyungSoo en la boca mientras miraban entretenidos y JoonMyun comenzó a tomar fotos con su celular.
—Baek-ee…
—¡Cállate, Park Chanyeol!
—Byun BaekHyun, ¡Escúchame!
El mayor detuvo su caminata y lo miró con los ojos inundados en lágrimas. — ¿Qué quieres?
Chanyeol sonrió con ternura ante el puchero en los labios del otro y se acercó rápidamente, estrechándolo entre sus brazos y privándolo del suelo para hacerlo girar junto con él.
BaekHyun se aferró a su cuello para no caer y Chanyeol tuvo que inclinar la cabeza hacia abajo para mirarlo fijamente cuando lo devolvió al suelo. Una de sus grandes manos lo tomó por el mentón y estampó sus labios contra los del más bajo. —Me gusta BaekHyunnie…
El aludido parpadeó, sorprendido. Chanyeol volvió a besar sus labios de forma efímera. — Me gusta muchísimo Baek-ee.
Los colores se le subieron al rostro de forma instantánea al mayor cuando hubo procesado sus palabras pero de igual manera se puso de puntitas para dejar un casto beso en los labios del más alto.
—A mí me gustas mucho más, Yeolie.
Los demás miembros comenzaron a aplaudir mientras ambos volvían a besarse repetidas veces.
JoonMyun fingió que lloraba. — ¡Crecen tan rápido!
—¡Al fin se acaba la tensión en esta casa, dios mío! — Kai Exclamó, estrechando a KyungSoo entre sus brazos.
—Todo eso voy a tener que limpiar. — Se lamentó Soo.
SeHun guardó silencio mientras los miembros en China festejaban.
—¡Yo quiero una copia del Sextape! — Vociferó Kris, siendo apoyado por los constantes asentimientos de Tao.
—¡Otra parejita! — Los ojos de LuHan brillaban cual estrellas mientras Lay le limpiaba las lágrimas falsas.
Minseok y Jondae se besaban apasionadamente al fondo, recordando cuando ellos se confesaron el uno al otro.
—¡A cien cada sex tape! — Exclamó Chanyeol, abrazando a su adorado chico por la espalda y todos rieron.
BaekHyun rodó los ojos y hundió su codo en el estómago de su nuevo amor correspondido.
Yeol siempre sería Yeol. Afortunadamente, él se había enamorado así.
Ridículo y todo.
Xx