Mi nombre es Emmy tengo 22 años, acabo de irme de mi casa y me mude a estos departamentos.
Me fui de mi casa porque últimamente mis padres estuvieron insistiendo en casarme con un muchacho y no es tanto que no quisiera porque bueno el chico me ha tratado muy bien pero no me llena como debería de hacerlo y es que siento que debo a esperar a alguien más, alguien de mi pasado que no logro recordar. Solo recuerdo que se llama Annie pero no se quien sea ella.
No recuerdo nada de mi pasado desde que tenía 15 años y es que mis papas me dijeron que estuve involucrada en un accidente de auto muy grave pero no me quisieron decir nada más.
Solo recuerdo haber despertado en el hospital pero todos mis recuerdos se habían ido, con terapias fui recordando a mi familia y otras cosas pero no puedo recordar nada que se relacione con el accidente.
Siento que esa persona Annie tiene algo que ver pero no logro recordar quien sea, les pregunte a mis padres si conocían a alguien con ese nombre pero me dijeron que no, aunque yo creo me mintieron pero no entiendo porque habrían de hacerlo pero bueno yo no logro recordar así que no sé, ya después de un año de recuperación seguí con mi vida y retome mis estudios aunque mis padres no querían pero yo les insistí en que ya me sentía bien y aceptaron después de un rato.
Como les dije hoy me estoy mudando a estos departamentos para poder iniciar una nueva vida sin las presiones de mi familia.
Acabó de terminar mi carrera por lo que ahora me tome unas vacaciones, aunque bueno necesito trabajar si es que quiero vivir yo sola, así que busque un trabajo de medio tiempo en una guardería, suficiente para mí por ahora.
Pasaba el tiempo y todo era normal hasta que hace unas semanas que vi a una mujer que vive en la habitación de al lado y aunque ella era bastante hermosa no fue eso lo que me llamo la atención, si no fue lo que sentí al verla, fue como si hubiera encontrado algo que me faltaba pero no sé qué sea y eso es tan frustrante.
Ahora solo quiero saber más de ella, decidí observarla cada que se iba y cada que regresaba de trabajar supongo, no sé qué me pasaba pero desde que la vi imágenes han regresado a mi cabeza pero no logro identificar nada, no sé si ella tiene algo que ver conmigo o son puras ideas mías, necesito averiguarlo pero como puedo acercarme a ella sin que parezca una loca.
Decidí empezar por saludarla cada que se iba y cada que regresaba a su casa, así fue cada día y cada vez más sentía que algo me ataba a ella y estaba dispuesta a descubrir que era aunque no supiera como.
Así paso un mes y yo aún no sabía cómo acercarme a hablarle y poder sacarme esta duda, me encontraba esperando a que llegara cuando que la vi acercarse, la iba a saludar como siempre pero ella hablo primero.
- Disculpa pero tú porque siempre me saludas, ¿acaso tú me recuerdas? o ¿me conoces? – pude notar que me pregunto con algo de desesperación.
Yo no sabía que contestarle, talvez todo esto eran solo ideas mías pero espera dijo ¿me recuerdas?
- Yo no lo sé… desde que te vi tuve la necesidad de acercarme a ti pero si te molesta ya no lo vuelvo a hacer – no podía mentirle pero tampoco quería incomodarla por lo que hacía así que me dispuse a entrar a mi habitación pero ella me detuvo.
- Es que yo si te conozco pero antes yo no podía recordarlo ¿tú no lo recuerdas? – pude ver en sus ojos la esperanza en que le dijera que sí pero no podía mentirle.
- No, lo siento… pero hay algo que siempre me llamo a ti desde la primera vez que te vi y por eso siempre te saludaba, si tú sabes algo de mí por favor dímelo – me dispuse a preguntarle ahora que ya me había dicho que si me conocía y tal vez en ella podría encontrar las respuestas que eh buscado todo este tiempo.
- Ahora lo sé… pero no creo que sea algo bueno para recordar.
No entendía a qué se refería pero ahora ella era la que se alejaba para entrar a su habitación pero yo no podía dejarla ir, así que antes de que ella pudiera entrar la abrace por la espalda.
- Por favor, sí tú sabes algo de mi dímelo, mis padres me dijeron que tuve un accidente y por eso no recuerdo nada, solo recuerdo desde que desperté en ese hospital pero siempre eh sabido que me falta algo desde ese día y si tú lo sabes por favor dímelo – ya no podía aguantar más así que le dije todo esto llorando.
- Yo no sé… no podría…
- Yo solo quiero saber la verdad de lo que me paso, sé que mis padres me ocultaron todo, por favor, tú no lo hagas.
Note tristeza también en ella pero no podía obligarla a que me dijera algo así que la iba a soltar para irme pero ella se giró para abrazarme de nuevo, me dijo que me contaría de ese accidente en el que estuvimos las dos pero que lo haría el día de mañana, acepte con tal de saber la verdad, nos despedimos pero antes de irse me dio un beso en la frente, no puedo explicar lo que sentí pero con solo ese gesto me sentí mucho mejor, como si me hubiera recuperado de todo lo que había pasado.
Obviamente no podía dormir pero le prometí que iba a descansar y así lo tenía que hacer, lo bueno es que no tenía que trabajar por un rato ya que habían dado unas vacaciones, me levante temprano pero no tenía ganas de hacer nada así que solo me prepare una taza y me dispuse a esperarla leyendo un libro.
Ye era la 1 de la tarde y ella no llegaba y me dijo que vendría en la mañana, tal vez estoy siendo muy desesperada pero es solo que ya había esperado mucho tiempo para conocer la verdad y si ella la sabía no podía perder más tiempo.
Me dispuse a ir a buscarla a su departamento le toque y casi al instante me abrió, me sorprendí que me llamara por mi nombre ya que no se lo había dicho pero bueno ella si se acordaba de mí y me sentí un poco mal al yo no poder recordar el suyo, me invito a comer ya que ella estaba a punto de hacerlo y noto que yo no lo había hecho y bueno así podríamos conocernos de nuevo por así decirlo.
No sentamos a comer y me sorprendí bastante cuando me dijo que se llamaba Annie, ella podría ser la persona que tanto eh buscado pero como podría saberlo, le conté que lo único que recordaba antes del accidente era ese nombre y se alegró un poco al saber que por lo menos no la había olvidado por completo, pero bueno quería saber más de ella.
- ¿Y qué hay de tú familia? – no tenía idea de que podía preguntarle sin sacar todavía el tema del accidente.
- Me separe de ellos cuando se enteraron de mis gustos – me dijo un poco triste.
- ¿Tus gustos?
- Cuando se enteraron de que me gustaban las mujeres y no lo tomaron muy bien así que desde hace como 5 años decidí mudarme hasta aquí.
- ¿Y entonces ya no lo ves?
- No, aunque de vez en cuando ellos me hablan o yo a ellos pero hasta ahí pero bueno no puede hacer nada y que hay de la tuya.
- No pues también me aleje de ellos porque querían casarme – se me hace raro estar hablando de todo esto con alguien que apenas conozco pero bueno ella si me conoce y además me inspira confianza.
- ¿Y tú no querías?
- No, bueno el chico no estaba mal me trataba muy bien pero yo sentía que debía encontrar a alguien y no precisamente un chico y para que no siguieran insistiéndome mude aquí lejos de ellos.
- ¿Y ya la encontraste?
- No lo sé… tú dime, ¿Eras tú a la que tenía que esperar? – no sé cómo pude preguntarle eso, que me pasa, pero bueno no lo tomo mal pero solo me sonrío, creo que ya no supo que contestarme por la cara que puso.
Terminamos de comer y yo me ofrecí a ayudarle a lavar los platos y nos fuimos a sentar a unos sillones.
- Bueno pues llego la ahora de la verdad – no podía esperar más necesitaba saber que era lo que ella sabía de mí.
- Está bien, pero recuerda lo que me prometiste ayer, lo vas a cumplir verdad.
Aún la notaba insegura de contarme, no sé qué es lo que me iba a decir pero se veía que ella también sufría por eso, tal vez me estoy arriesgando demasiado al tratar de saber la verdad pero ya era muy tarde en verdad necesitaba saber que paso ese día, porque tuvimos ese accidente.
- Sí, te voy a escuchar hasta el final y voy a estar tranquila.
- Ok, bueno tú y yo éramos muy unidas – empezó a contarme - todo eso fue hace 7 años cuando yo tenía 18 años y tú acababas de cumplir 15, ese día habíamos ido a una fiesta, yo ya manejaba así que yo pase por ti y te iba a regresar a tú casa. En fin termino la fiesta, tú y yo no habíamos tomado, yo porque nunca me gusto tomar y tú bueno porque sabías que a mí no me gustaba y querías estar conmigo. Íbamos ya de regreso a tú casa ya era muy tarde y todo fue muy rápido – note como con cada palabra que seguía diciendo su voz empezaba a quebrarse – un carro se acercó a gran velocidad, no tenían el control aunque después me entere que iban bastante tomados, pero bueno yo no pude hacer nada porque estaba tan oscuro y no los vi y cuando trate de esquivarlos ya era muy tarde. Después de eso empezaron a movernos para sacarnos del carro, llegaron tus padres y los míos y aunque no tenía fuerzas la que me preocupaba eras tú, así que quise ir a verte pero tus padres me lo impidieron, me echaron la culpa de lo que paso, pensaron que yo era la que iba tomada y me dijeron que no me iban a permitir volver a verte y ya después de eso me desmaye y ya no desperté hasta una semana después y ya no recordaba nada, no me acordaba de ti, por favor dime que me crees todo lo que te estoy diciendo.
En ese momento ya las dos estábamos llorando, confío en su palabra, sé que me está siendo sincera lo noto en su mirada, en sus palabras, pero no sé qué pensar, no sé cómo asimilar todo esto, tanto insistía en saber la verdad y ahora que lo sé no tengo ni la menor idea de que es lo que va a pasar.
Ella noto el estado en que me encontraba así que intento abrazarme pero yo me aleje pero fue solo porque no sabía cómo reaccionar pero creo que ella lo malentendió.
- Te entiendo si no me crees, pero te estoy siendo sincera, te estoy diciendo la verdad – ella se iba a parar pero yo la detuve, tampoco quería que ella lo malinterpretara, solo quería que me entendiera también a mí.
- Sí te creo, es solo que esto no es fácil para mí.
La solté para ser yo la que me fuera, necesitaba estar sola, pero empecé a caminar y sentí que mi cuerpo no me respondía, me sentía débil, lo último que sentí fue que ella me agarro antes de caer al piso.
Mientras dormía si se le podía llamar así reviví todo lo que me había contado Annie, empezó con imágenes en que estábamos las dos y en cada una de ellas me veía muy feliz y ella igual pero después fue el accidente todo lo que ella me contó era verdad, sabía que me estaba siendo sincera pero omitió muchos detalles importantes que fue la manera en la que ella me protegió, el cómo trato de evitar que me pasara algo aunque al final no había mucho que se pudiera hacer, no podía más con esas imágenes así que me desperté gritando, al principio no sentía un poco confundida pero luego ella se acostó a lado mío y me abrazo y eso me tranquilizo.
- Tranquila, estás bien, yo estoy aquí contigo.
- Ahora recuerdo todo ese día, todo lo que paso, lo que me dijiste, fue como si lo hubiera vuelto a vivir – tenía algo de miedo pero en sus brazos me sentía segura aunque aún no sé porque.
- No te preocupes así lo recordé yo, pero yo estaba sola y tú no, tú me tienes a mí y no te voy a dejar sola – ella siempre lograba tranquilizarme solo con sus palabras, me dio un beso en la frente y yo la abrace más fuerte porque podía sentir que también ella había sufrido y de algún modo yo también quería protegerla, así nos quedamos un rato hasta quedarnos dormidas.
Cuando me levante me sentía toda vía algo confundida y más lo estuve cuando ella ya no estaba a mi lado pero me tranquilicé cuando la vi salir de bañarse se veía tan hermosa, tan linda, pero que rayos estoy pensando, no debería pensar en eso, ella me pregunto si quería tomar un baño aunque bueno yo vivía a lado de ella y podría irme pero no quería separarme de ella así que le dije que sí, me presto algo de ropa y me metí a bañar en lo que ella preparaba el desayuno.
Después de unos minutos salí de bañarme debo decir que el baño sirvió para relajarme un poco, me cambié y me fui con ella y comenzamos a desayunar, ninguna de las dos decía nada y es que bueno después de lo que paso ayer no había mucho que decir pero había una duda que tenía y tenía que preguntárselo, todo lo que me paso ayer por preguntar y no eh aprendido pero es algo que necesitaba saber, es más importante que cualquier otra cosas.
- ¿Tú y yo que éramos? – enserió necesitaba preguntárselo aunque me ponía algo nerviosa por la respuesta que ella me diera.
- ¿Cómo?
- Tú y yo éramos amigas o éramos algo más.
- ¿Para qué quieres saberlo?
- Es solo que recordé otras cosas aparte de eso y siempre me veía contigo y vi como trataste de protegerme en el accidente, pero no logro recordar que éramos.
- Éramos novias, llevábamos saliendo oficialmente medio año pero nuestra relación se podría decir que empezó desde antes.
De alguna manera su repuesta me alegro mucho, diablos porque no podía recordar nada concreto sobre ella.
- ¿Y cómo nos conocimos?
- Ya no quiero que te esfuerces en tratar de recordar algo, no quiero que te vuelva a pasar algo, me gustaría mucho contarte pero me gustaría más que tú lo pudieras recordar sola.
- ¿Y qué tal si nunca lo recuerdo? – le dije un poco alterada.
- Ahí estaré yo, te dije que no te iba a abandonar, que yo te iba a cuidar y estoy dispuesta a hacer todo lo posible para cumplirlo y si no lo recuerdas no hay problema, de todas maneras lo importante va a hacer lo que a partir de ahora pase.
Y como siempre ella me tranquilizaba, en tan solo 2 días ella me hizo sentir muchas cosas, cosas que antes no me permitía sentir por alguien, desde ese día seguimos saliendo como amigas, volvimos a ser muy cercanas aunque bueno ella siempre trataba de conquistarme y hacía cosas para ganarse de nuevo mí corazón y la verdad es que lo hacía, poco a poco hacía que ese sentimiento se hiciera más fuerte, cada día me gustaba más pero yo quería recordarla, recordar todo lo que vivimos.
Decidimos vivir juntas, ella insistió en que quería cuidarme además que estando juntas nos ayudaba mucho ya que a ella ya no le fallaba la memoria y yo poco a poco fui recordando todo pero fue hasta un mes después que vinieron todos los recuerdos a mí.
Yo empezaba a sentirme mal, la cabeza me dolía, me sentía débil, ese día había faltado a trabajar por la misma razón, Annie también quería faltar para cuidarme pero no lo podía permitir así que fue, ya no faltaba mucho para que llegara pero yo ya no aguantaba más pasaron unos minutos y ella llego, la vi a los ojos y ya no supe nada más.
Al fin desperté en un hospital, no sé cuánto tiempo llevaba ahí pero eso no era lo que me importaba, cuando desperté la vi dormida a lado mío y me sentía feliz de verla sobre todo porque desperté recordando todo lo que me faltaba por recordar.
Empezó a moverse y poco a poco fue abriendo los ojos y vio que yo la miraba, ella me sonrió e iba a decir algo pero yo hable primero.
- Nos conocimos cuando yo iba a la secundaria, tú habías ido a entregar unos papeles, un niño de mí salón me estaba fastidiando y trataba de besarme, tú llegaste y me defendiste aunque no me conocieras, le dijiste que yo era tú novia y que a partir de ese día no querías que se acercara a mí.
- Así que ya te acuerdas – me dijo feliz.
- Sí ya recuerdo todo y creo que ese día jamás lo volveré a olvidar, es que ese día paso de todo.
- Recuerdo que cuando salí de dejar mis papeles tú me estabas esperando, estabas bien nerviosa y me dijiste que me quedara que por que el chico de tú salón no te había creído y te seguía molestando, así que me quede contigo y te esperaba cada que salías de una clase pero en el descanso fue lo mejor.
- Si porque el chico armo un escándalo diciéndome que como una chica de preparatoria podía fijarse en mí y no sé qué tanto pero tú estuviste defendiéndome y dijo que la única manera en que te creyera era que me besaras enfrente de todos y me besaste.
- Y después tú me dijiste que había sido tu primer beso no – me dijo riéndose.
- Sí pero ni te rías que ya después tú me dijiste que también yo había sido tú primer beso.
- Ok ya no lo voy a negar pero la verdad no sé de donde agarre la confianza de hacerlo pero lo hice y nunca me arrepentiré de haberlo hecho pero lo importante es que ya después ese chico te dejo en paz.
- Sí, aunque después sentí algo de pena por el por qué quedo humillado frente toda la escuela pero él se lo había buscado.
Así seguimos platicando de muchas cosas que pasamos juntas hasta que me dieron de alta, éramos felices estando de nuevo juntas aunque aún no éramos novias seguíamos siendo solo amigas y eso me ponía un poco triste.
Un mes después Annie al fin me pidió que fuera de nuevo su novia pero me dijo que no quería que la aceptara por obligación de los recuerdos si no que le diera una respuesta de acuerdo a lo que yo sintiera por ella en estos momentos, sin pensarlo le dije que si porque ella a pesar de que no podía recordarla seguía luchando por mí y que cada día que pasaba se ganaba de nuevo mi corazón y que yo ya la amaba aún antes de recordar todo.
Esa noche fue la mejor para las dos, ese beso que tanto habíamos anhelado al fin se dio, nos besamos como nunca y yo me entregue en cuerpo y alma a ella y ella se entregó a mí.
Ya habían pasado dos años desde que nos hicimos novias todo iba bien hasta que a mis padres quisieron verme, lo hable con ella y decidimos que era lo mejor así que les di la dirección pero no les conté que vivía con Annie y que ya había recordado todo, si no que esperaríamos a que llegaran y las dos se los contaríamos.
Cuando llegaron su reacción fue pero de lo que esperamos en cuanto la vieron mi padre intento pegarle pero yo me puse en frente de ella y lo impedí, les pedí que por favor primero escucharan su versión, enojados y todo pero finalmente aceptaron, ella les conto lo mismo que a mí cuando no recordaba pero mis padres no lo creyeron como yo lo hice, siguieron echándole la culpa, yo ya no podía aceptar que dijeran de cosas así que intervine y les dije que Annie era mi novia y que no la iba a dejar por nada del mundo, que yo confiaba en ella y que además yo ya había recuperado mí memoria desde hace más de dos años y que si no iban a aceptar mi relación con ella que se fueran y como era de esperarse los dos se fueron sin decir nada.
Eso nos afectó mucho a las dos pero sobre todo a Annie ya que ella tenía la esperanza de que mis padres le creyeran y que no quería que estuviera peleada con ellos solo por su culpa, poco a poco le hice entender que no era su culpa que yo la amaba y le dije que a mí también me dolía pero me importaba más nuestra relación que cualquier otra cosa. Ya después de un tiempo decidimos olvidarnos de eso y seguir con nuestra vida.
Así paso todo un año, estaba un poco preocupada porque desde días atrás ella se estaba comportando un poco distante conmigo y salía muchas veces sin decirme nada sentía que me ocultaba algo pero ya después ella volvió a ser la misma conmigo y habíamos salido de vacaciones y estábamos en una cabaña muy bonita que ella había rentado por unos días, yo me acababa de levantar y ya era algo tarde y es que bueno en la noche hicimos de todo menos dormir.
Me levante y salí a buscarla pero no la encontré pero si encontré una nota que decía: “En cuanto te despiertes búscame en el corazón de piedra” sin más me fui a darme un baño rápido, me cambie y fui a buscarla.
El corazón de piedra era justamente un cazón enorme de piedra que estaba en medio de todo el bosque que rodeaba la cabaña, era un lugar muy bonito y solo podías visitar ese corazón si tenías el acceso a la cabaña o eso es lo que me conto Annie.
Estaba a punto de llegar cundo empecé a escuchar música, se me hizo un poco raro pero bueno supongo que Annie la había puesto en su reproductor pero al acercarme un poco más vi que no era un reproductor si no que eran músicos que supongo Annie había traído hasta aquí como lo hizo no lo sé pero después la vi a ella hablando con el que supongo es el jefe de los músicos.
Al verme ella que había llegado se acercó a mí y me tomo de la mano, caminamos hasta enfrente de los músicos y estos al acercando se fueron separando sin dejar de tocar para dejar a la vista una pequeña mesa con una comida romántica.
- ¿Qué es todo esto? – no me salían las palabras, no sabía ni que decirle.
- Es solo un poco de todo lo que tú te mereces, además es una ocasión especial.
- ¿Especial?, ¿Por qué sería especial? – le pregunte algo confundida.
No me contesto solo vi cómo le hizo un señal a los músicos para que tocaran algo más tranquilo, ella se alejó de mí y vi que recogió algo, regreso a mí me tomo mis dos manos con un de las suyas ya que la otra la tenía detrás de su espalda, me estaba poniendo muy nerviosa y me puse más cuando ella poco a poco se fue arrodillando en frente de mí.
- Tú eres la mujer a la que yo más amo – empezó a hablar ella y sentía como ella también estaba un poco nerviosa - por la cual yo daría mi vida, una vida que me gustaría vivir siempre a lado tuyo si tú me lo permites, es por eso que te pregunto Emmy ¿Te gustaría ser mi esposa?
Yo no lo podía creer, no esperaba que me pidiera matrimonio y me había dejado más que sorprendida, como pude reaccione y me arrodille con ella y la abracé y le dije que sí, ella me puso el anillo y nos hundimos en un beso.
Después de que nos separamos Annie despidió a los músicos, ya después me dijo que fue porque ya llevaban mucho tiempo tocando en lo que me esperaban, además de que era mejor que a partir de ahora pasáramos el tiempo a solas como las prometidas que ahora éramos.
Terminaron nuestras vacaciones por lo que teníamos que regresar a casa, regresamos en su auto pero me sorprendí cuando tomo otro camino que no era el que nos llevaría a los departamentos, así que le pregunte pero ella me dijo que si nos dirigíamos a casa pero estoy segura que este no es el camino pero en fin ya no quise preguntarle más
Nos paramos enfrente de una casa bastante bonita debo decir pero no entendía el por qué, ella se bajó del auto y me abrió la puerta para que me bajara yo también.
- Bienvenida a tu nuevo hogar - me dijo extendiéndome su mano la cual tome inmediatamente.
- No entiendo.
- Recuerdas que no hace mucho recibía varias llamadas y salía después de eso.
- Sí lo recuerdo pero que tiene que ver eso.
- Estaba arreglando los papeles de esta casa que ahora puedo darte, una casa propia en donde solo estemos las dos, así que acompáñame.
Me llevo dentro de la casa y seguía diciendo estaba muy bonita pero no entendí bien, quiere decir que compro esta casa para las dos y porque ya estaban nuestras cosas aquí, como es que llegaron, estaba confundida.
- Tenía vario dinero ahorrado y estos tres años que llevamos de novias junte más para comprarla – creo que adivino lo que estaba pensando – en cuanto me dijiste que si querías casarte conmigo no pude esperar más y mande a traer todas nuestras cosas aquí.
- No tenías que hacerlo vivíamos bien en ese departamento, además compraste esta casa antes de que me pidieras matrimonio.
- Sé que vivíamos bien en ese departamento pero yo quiero darte una vida en la que solo estemos las dos y todo sea nuestro y si la compre antes porque en el fondo esperaba que me dijeras que sí
- Te amo Annie.
- Yo igual te amo.
Después de un año finalmente nos casamos fue algo sencillo ya que no queríamos algo grande, solo invitamos a algunas amistades y a nuestros padres aunque bueno los de ella solo nos visitaron un día antes de la boda y nos felicitaron pero no estaban muy contentos de que su hija se juntara con una mujer por lo que no se quedaron a la boda y de los míos solo asistió mí madre ya que al parecer ella sí estaba feliz de que hiciera mi vida con Annie ya que ella también solo se dejó llevar por lo que le dijo mí padre.
A pesar de nuestros padres todo en ese día fue un éxito desde la fiesta, la noche de bodas y la luna de miel, todo fue mágico e inolvidable.
Cabe decir que desde que Annie me pidió matrimonio yo ya no trabajo y no es tanto que no quisiera porque en realidad me gustaría mucho ayudarle con los gastos de la casa pero acordamos que sería lo mejor ya que desde que desperté del coma recordando todo me puse más delicada de salud y me dijeron los doctores que sería mejor que no hiciera mucho esfuerzo ni que me presionara tanto para que no me afectara y entonces ella insistió que a partir del momento que le dije que sí ella se encargaría de trabajar y yo de los labores de la casa aunque bueno ella siempre trataba de llegar temprano del trabajo e insistía en ayudarme, me cuidaba demasiado pero en verdad aprecio mucho lo que hace por mí porque sé que ella me ama y yo la amo a ella.
Soy muy feliz a lado de ella, a pesar de todo lo que pasamos, a pesar de lo que paso con nuestros padres y a pesar de que nos olvidamos por mucho tiempo pudimos volver a encontrarnos y recordarnos lo felices que éramos desde el día que nos conocimos y que al fin después de todo ella es mi esposa porque lo que realmente importa es que yo siempre la amaré y sé que ella también me amara toda la vida que se nos permita estar juntas.