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Desatando mi deseo por Umiko

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Desatando mi deseo


Umiko


 


 


 


La noche ya casi llegaba, escondiéndose así el sol envolviendo todo con su manto anaranjado, tornándose rojizo e incluso violeta, eran un atardecer hechizante que desataba todos esos instintos guardados secretamente.


 


Unos ojos cobalto lo observaban, ver ese cielo....esos tonos lo cautivaron, ese tono violáceo lo hizo desear, desear que su compañero estuviera ahí...ese eterno compañero que tuvo desde la guerra...pensar que las molestias que siempre le causaban, esas risas, ese hablar constante, su forma de ser tan alegre le cautivaron finalmente.


  Pero no, no podía demostrar lo que sentía, no debía, su deber era concentrarse en su continuo trabajo, en sus eternas misiones en preventers.


 


De pronto la puerta se abrió con un gran escándalo...por un momento pensó que ese sería Duo, su compañero.


 


-         Zech?- su pensamiento estaba errado...su superior, el de cabello largo y dorado y ojos azul cielo estaba ahí con sus ojos puestos en él.


-         Si- el rubio cerro la puerta tras de si y se acerco al joven moreno que tenia su mirada fría pendiente e cada movimiento de su superior...¿ que hacía él ahí?


-         Que quieres?- cuestiono...no le gustaba la mirada de Zech, era la misma expresión que él ponía  cuando luchaba internamente por no lanzarse sobre Duo y tomarlo en ese mismo instante.


El rubio se acerco de pronto, de forma sorpresiva....por lo que le chico serio no pudo defenderse y mucho menos huir..aquel hombre le tomaba de las muñecas y lo acercaba con fuerza a su cuerpo.


 


-         Heero...-susurro al oído del joven quien luchaba por zafarse del agarre o al menos intentaba alejarse un poco de ese cuerpo tan imponente- te deseo- solo quería una noche con él, solo quería saber que se sentía tomar ese cuerpo moreno...quería experimentar que era estar con ese chico tan frió y tan perfecto.


No pudo besarlo, no pudo sentir el sabor de sus labios por que Heero no se lo permitía, pero si lamió su cuello y contra eso el moreno no pudo forcejear pues el rubio tenia una muy marcada ventaja.


 


-         piensa que soy Duo...- susurro en su oído, Zech sabía claramente los sentimientos de él, eso estaba mas que claro....esa mirada que siempre seguía los movimientos del trenzado. Debía reconocer que tenia un muy buen gusto, pues definitivamente era un chico muy hermoso...ese cuerpo delgado y bien formado, esos ojos violetas y esa larga trenza eran atributos únicos...si, Heero tenía muy buen gusto, quizá podría probarlo algún día...un día en que ya no sintiera esa obsesión por esos fríos ojos cobalto, así que por el momento solo quería disfrutar de Heero.


-         Du..Duo- cerro sus ojos, esas palabras hicieron volar su imaginación, pensaba en cada momento que esas caricias, que esos besos en su cuello y esa mano que iba hacia su sexo eran del trenzado.


Pero no, se estaba engañando a si mismo, él no quería ceder ante el rubio así que usando toda su fuerza lo alejo.


-         Se que Duo no se interesa en mi, soy demasiado serio para él.


-         Yo te are olvidarlo- nuevamente intento acercarse pero el arma que le apuntaba se lo impidió...Heero siempre estaba armado.


-         No quiero olvidarlo- dicho esto Zech se volteo para retirarse, lo mas sano era quitar esa necesidad por ese cuerpo.


-         Maldición!!- el chico serio resoplo molesto, a pesar de que fue Zech, no pudo evitar excitarse en el momento en que pensó en Duo...como lo deseaba...su cuerpo no podía más y mucho menos su corazón de hielo que se derretía suavemente por esos ojos violetas.


Abrió la ventana recibiendo el aire frío de la noche, necesitaba calmar su cuerpo, necesitaba calmar esas ansias locas de tocar el cuerpo del trenzado.


  De pronto se sorprendió al sentir la puerta nuevamente...es que acaso Zech volvería??


 


-         Hola Hee-chan!- esas palabras resonaron en el cuarto y en la mente del soldado estoico...su amado deseo estaba ahí


-         Hola- se giro para verlo..se veía agotado


-         Que hacías?...por que yo estaba corriendo y...¡¡cierra esa ventana!!..hace frío y te vas a resfriar.


-         Lo se- pero él necesitaba ese frío, necesitaba que es viento se colara por entre sus ropas y calmara su cuerpo.


-         Bueno, me voy a duchar..esto de estar corriendo da mucha calor- el trenzado se quito la playera ante los ojos cobaltos mostrando así su pecho desnudo, suavemente tostado, sus mejillas estaban sonrojadas y sus labios entre abiertos trataban aun de regularizar la respiración después del ejercicio realizado.


 


No podía dejar de mirarlo, sentía como lo poca calma que había conseguido se desvanecía fugazmente y el deseo corrompía su mente causando catástrofes en su cuerpo.


¡deja de mirarlo, deja de mirarlo! Se repetía mentalmente pues sabía que ya no aguantaba mas las ganas de besarlo...¡vete ya! Rogaba por que entrara de una vez a la ducha y para su suerte el trenzado desaparecía tras la puerta del baño.


 


-         Demonios- nuevamente recibía la fuerte brisa, pero esta vez, lejos de calmarlo perecía tener el efecto contrario, pues ese frío viento contrastaba perfectamente con su ardiente cuerpo haciéndolo aun mas consiente del deseo que embargaba a todo su ser.


Ahora podía en cierto modo, entender el deseo de Zech...pues esa necesidad de tocar lo deseado corrompe el alma, en su caso la necesidad de tocar a su amado carcomía su corazón y encendía ese fuego de pasión que tan secretamente guardaba y ocultaba a todos.


 


Su mente ya no reprimía el querer de su corazón, es mas, su cerebro le jugaba en contra gritándole que fuera por el y demostrarle lo placentero que sería estar juntos.


 


Ya no soportaba mas aquella sensación de necesidad por Duo, esas corrientes eléctricas recorrer su espalda y ese deseo de tener a tan perfecto cuerpo entre sus manos...decidió cometer una locura.


 


Se encamino a la puerta del baño y entro lentamente..con silencio, teniendo así una mejor vista del trenzado ahora desnudo bajo el agua.


  Se acerco a su victima pero algo fallo en su plan pues tropezó con el pantalón que estaba en el suelo.


 


-         Heero?- interrogo han notar que no estaba solo y no podría ser nadie que no fuese su compañero de cuarto...que quería?, que hacía ahí?.


-         Si...soy yo- sintió como unos fuertes brazos lo atraparon por la cintura y la voz sensual de Heero en su oído..no pudo evitar cerrar los ojos ante aquella sensación tan agradable...pero..¡que estaba haciendo!


-         Hee..Heero, que haces..-los ojos cobaltos brillaron al notar el nerviosismos en aquella palabras, además Duo no se le estaba resistiendo...incluso parecía entregado a su cercanía.


-         Duo...mi Duo- Heero comenzó a besar los hombros del chico, aquella cercanía lo enloquecía  pero trataba, al menos por el momento de controlarse...sentía como el trenzado se giraba para que dar de frente.


-         Heero...sal por favor- estaba nervioso, no quería que jugara con él...el lo amaba, un amor inocente, que no tenía mas requisitos que ser feliz viéndolo.


-         No- ya era demasiado tarde para arrepentirse, estaba ahí, con el, lo tenia entre sus manos y sentía su cuerpo arder como nunca..no se alejaría, llevaría eso asta el final.


-         Lo mejor es que salgas, tu ropa esta mojada- Duo intento alejarlo poniendo sus manos sobre la playera mojada y tan apegada por el agua asiendo presión para alejarlo, pero no pudo evitar esa corriente eléctrica que recorrió su cuerpo...sentir ese cuerpo caliente en sus manos, su empuje parecía mas una caricia...su corazón latía descontrolado.


-         Tu no quieres que me vaya- Heero tomo al trenzado por las muñecas acercándolo mas a su cuerpo y evitando así que este intentara apartarlo- tu me quieres aqui- susurro en su oído.


Comenzó por besar ese cuello de piel cremosa, lamiendo lentamente sintiendo como Duo no se oponía, es mas, parecía que inconscientemente se entregaba a sus caricias, pero aun no soltaría sus manos.


 


-         no quiero que juegues conmigo- sonó la voz agitada del joven desnudo...sus ojos brillaban, se veía tan hermoso.


-         Yo nunca juego- tratando de darle confianza y demostrar que sus intenciones eran serias...acercándose lentamente a esos labios tan deseados y se regocijo al contacto con ellos...de pronto se sorprendió al sentir como Duo lograba soltar sus manos con fuerza, por un momento pensó que intentaría alejarlo nuevamente...pero no fue así, sus manos se abrazaron a su cuello profundizando el beso...dando por sentencia que se entregaría por completo a su amado.


-         Te deseo tanto- no dejo de acariciar ese cuerpo, apegándolo de pronto contra la pared fría de...escuchando así un gemido del trenzado...la pared era fría y ahora con su cuerpo ardiendo no pudo reprimir el gemido.


 


Cada vez estaba mas excitado y al oír esos suspiros lo enloquecían...como deseaba oírlo gemir de placer, rogar, su nombre salir de esos labios tan sensuales que ahora tenía la dicha de probar.


 


Duo no se quedaba a tras, el también  deseaba lo que estaba ocurriendo y también necesitaba ese cuerpo deseado y adorado así que comenzó a sacar la ropa mojada de aquella persona.


 


Ya no soportaba mas el deseo reprimido lo encerró en sus brazos y lo cargo asta su propia cama en el cuarto depositándolo ahí...lo miro detenidamente, lucia tan hermoso, tan sexy...tan excitado, tanto como él. Sacando sus ultimas prendas para así quedar desnudo, se desvestía frente a los ojos violetas que siguieron todos sus movimientos.


 


No perdió tiempo comenzando a besar su pecho desnudo, sintiendo el compás alocado del corazón de un hermoso trenzado...besaba, lamía...como le gustaba ese sabor ese sabor que lo enloquecía y que lo hacia reaccionar cada vez mas agitadamente, cada vez mas desesperado...y esos gemidos que reinaban el ambiente lo excitaban de sobremanera...¿como pudo negarse tanto tiempo a ese suculento manjar?...pues ahora recuperaría el tiempo perdido.


 


-         Heero..me..vooo- no deseaba terminar ahora..quería terminar junto a Heero, quería que fuera perfecto, quería llegar al clímax junto a su amado...así que rogaba por que su amante dejara de lamer su excitado sexo.


Con desgano, Heero dejo aquella sensible parte del cuerpo de su trenzado y comenzó a prepararlo..lo haría suyo de una vez por todas...tomaría ese cuerpo virgen que tan generosamente se le estaba entregando...seria suyo como siempre debió serlo...aun mas ahora que Duo se rozaba con su piel y lo incitaba seguir y jamás desobedecería una orden como aquella.


-         haa..por ...favor..Hee- las voz del trenzado era muy agitada, llena de gemidos, rogando a cada instante por que su amante dejara de prepararlo y lo tomara de una vez....y así fue.


El cuerpo moreno de Heero arremetía con rapidez...lleno de pasión, de deseo...lujuria al máximo nivel...entrando, envistiendo contra aquel sensible lugar...pero de Duo no había queja alguna..solo gemidos y palabras de cariño...como le encantaba esa voz que lo llamaba a continuar.


El orgasmo no se hizo esperar invadiendo a ambos amante..derramando sus semillas...Heero inundaba la pequeña cavidad de su amado...mientras su Duo casi se desvanecía después de su orgasmo...fue tan perfecto...tan excelente.


 


-         te amo Heero- siempre lo había amado en secreto...el lo ocultaba por miedo al rechazo, así que prefería tenerlo como amigo a que su amor lo odiara.


-         Duo...-quería decirle lo mismo...que lo amaba...que siempre lo había deseado...pero el no era muy expresivo...mas ahora que estaba cansado y veía como su ángel se dormía sobre su pecho....no pudo decirle...“ya habrá tiempo”


 


 


La noche había pasado en paz, ambos cuerpos juntos soñando con seguir estando unidos, pero la luz de la mañana les avisó que era hora de despertar...de mostrar al mundo la felicidad de saberse correspondidos.


 


-         Duo...-lo llamo, pero este estaba profundamente dormido..quizá lo mejor era que descansara...pues la noche anterior había sido muy agitada...si lo mejor era que siguiera durmiendo.


Le escribió una pequeña nota donde le avisaba que estaría en la oficina d Zech, necesitaba una ultima información antes de salir a su misión...mejor dicho a la misión de ambos.


 


Los ojos violetas comenzaron mostrar su esplendor..abriéndose lentamente y rápidamente buscando al que la noche anterior había sido su amante...la cama estaba fría si él...pero aun tenia su aroma...encontró la nota...lo mejor sería acompañarlo en la oficina de Zech.


 


 


Continuara


  


 


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Hola...bueno..este fic..lo divido en dos, pero quizá terminen siendo 3 .^^U...bueno, estén atentas al capitulo que le seguirá...esperen lo con ansia...por que nadie sabe que puede pasar...jejeje.


 


Saludos a todas aquellas que me apoyan tanto tiempo..las Quiero mucho!!!!..y a las que leen también....que estén bien!!.


 


Mi correo por si quieren hablarme o dar ideas.....o simplemente saludar... umikosederrite@hotmail.com


 


 


 


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