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Condena de Medianoche por Silence Tsepesh de Lenfet

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Notas del fanfic:

Yo de nuevo.. despues de unos problemas con las advetecias de este fic... considere mejor resubirlo... si alguien lo noto, por favor, Ignore las advertencias que llego a ver u.u.. una disculpa si alguien esperaba alguna de esas situaciones...

Notas del capitulo:

Gracias por leer.. de nuevo 

Alemania, 2.21 A.m

El joven caminaba despacio al lado de su acompañante. Al parecer su acompañante no tenia prisa alguna por llegar a su destino, el tampoco la tenia, pero el paso lento le comenzaba a impacientar. Se pregunto si su mentor usaba alguna vez sus habilidades.

.-lo hago Seth, solo que es mas prudente que los demás se den cuenta de tu llegada.- el hombre ya algo mayor le miro divertido.

.- ¿encontraremos aquí a alguien que me pueda ayudar?

.-estoy seguro de que si, el problema es que si no esta aquí tendremos que buscarlo.- pasaron frente a un negocio con puertas de cristal, miro su reflejo en ellas: su tez pálida, muy pálida, sus ojos azules y un cabello oscuro, algo largo, que sin embargo no le caía más allá de las orejas. Exactamente igual que hacia 397 años. Suspiro. Si, ser incapaz de envejecer a veces resultaba frustrante. Tenía 23 años cuando fue convertido, por su acompañante,  en uno de esos seres que necesitan de la sangre para poder vivir… en un vampiro. Desde entonces, no se había producido el mas mínimo cambio físico en el.

.-llegamos.- su mentor indico un hotel algo viejo, pero aun en condiciones para habitar. Se acercaron más, en la puerta colgaba un letrero de clausurado. Su mentor le ignoro y tomo la puerta, que ante su sorpresa se abrió. Le siguió despacio por un amplio recibidor en penumbras. Pudo escuchar voces mas adelante, detrás de una puerta de madera. Su mentor llego a la puerta y entro.  Dentro  parecía una enorme sala, con sillones, sillas y algunos muebles mas esparcidos por toda la habitación, que en otro tiempo seguro había sido una sala de conferencias.  Los sillones eran ocupados por un amplio grupo de seres como el. Ninguno les presto más atención de la necesaria. Una mujer pelirroja se les acerco sonriendo. Sus ojos verdes contrastaban intensamente con su larga cabellera pelirroja.

.-Dante, me alegro mucho de verte.- saludo con un abrazo a su mentor.

.-siempre tan hermosa, Desiré.- la mujer rio suavemente.

.- ¿Qué le trae por aquí, Dante?-

.-mi pupilo esta interesado en canciones que hablen sobre nosotros, por lo que le ayudo a encontrar a quienes le puedan ayudar el… ¿has visto de casualidad a Andrei?- pregunto con voz serena.

.-están de suerte Dante, justo llego hace dos días, pero ha salido a “cenar”.- añadió Desiré con una sonrisa cómplice.- pueden pasar y esperarle.-

.-no, iremos a buscarle.- Dante rechazo la invitación con su eterna serenidad. Se dio la vuelta y comenzó a salir.

.- ¿esa persona podrá ayudarme, Dante?-

.-por supuesto, Seth, pero no todo es así de fácil- su mentor guardo silencio, mientras volvían a recorrer las calles oscuras. Caminaron por una pequeña calle, iluminada por una farola al final, donde se veía un parque.

Antes de llegar al final de  la calle, la farola se precipito en su dirección, cayendo a unos cuantos pasos de ellos. La calle quedo a oscuras, lo cual no era ningún impedimento para ellos. Una risita resonó en la calle.

.- buenas noches, joven Andrei.- un resoplido de disgusto fue lo que se escucho esta vez. Un movimiento en un balcón algo adelante llamo la atención de Seth, luego una sombra saltando del mismo balcón, cayendo detrás de la lámpara caída. Seth miro con asombro mal disimulado a la persona que estaba delante de él: un chico muy joven, no muy alto y delgado, vestía ropa pasada de moda y muy gastada. Su cabello negro brillante, suelto y largo hasta los codos y completamente revuelto. Su rostro era extremadamente joven, casi infantil, que se contrastaba con la expresión cínica de sus ojos de un rojo intenso, mostraba una sonrisa burlona, casi cruel. Tenía cierto aire de salvajismo. Seth se pregunto quien podía convertir a alguien tan joven.

.- ¿no es algo peligroso lo que hacia con esa lámpara? Pudo lastimar a alguien.- la sonrisa del chico se hizo mas burlona.

.-solo si es humano, señor Dante- su tono era insolente, como la expresión de su rostro.- ha interrumpido mi cena, señor.- añadió.

.- ¿no ha cenado suficiente?- Dante señalo tres cadáveres pegados a la pared, en un oscuro rincón. El chico miro despectivamente sobre su hombro los pálidos cuerpos.

.-supongo.- se dio la vuelta y comenzó a caminar hacia el parque. Dante le siguió, y luego Seth.

.- no es casualidad que este aquí, ¿verdad señor Dante?-  dijo sin voltear a verlos, y sin detenerse.

.- no lo es, joven Andrei, le estábamos buscando, mi acompañante fue atacado por las arpías por eso le convertí.-

.-Auch.- Andrei se detuvo y les miro, sin borrar la sonrisa burlona de su cara.

.-esta interesado en canciones que hablen sobre nosotros, joven andrei, confiaba que podrías ayudarle.-Dante no borro su expresión serena.

.- ¿Por qué habría de hacerlo?- se volvió a dar la vuelta, para seguir andando. Dante hizo ademan de seguirlo.  Seth reacciono en ese momento, había estado ensimismado mirando al chico.

.-no importa, Dante, no creo que pueda ayudarme, es solo un niño.- un segundo después tenia el rostro furioso del chico delante de el.

.- ¡ten cuidado con lo que dices! ¡No tienes idea de lo que puedo hacer!- sintió el aura hostil que emanaba. Retrocedió por instinto. El chico le siguió fulminado con la mirada.- si quieres conservar  a tu pupilo, Dante, será mejor que le enseñes con quien puede meterse.- espeto,  se dio la vuelta y corrió, en segundos le dejaron de ver. Dante suspiro.

.- ¿donde quedo tu prudencia, Seth?-

.-pero si es un niño.-

.-lo se.

.- ¿Quién lo convirtió?, ¿lo sabes?-

.-no, Seth, no conozco a alguien que sepa quien le convirtió, pero te puedo asegurar que es muy peligroso molestarle, no serás el primer vampiro que él mata.-

.- ¿Cómo puede…? Si es un niño.- Seth estaba asombrado.

.-ha vivido mas años que yo, Seth.- Dante sonrió tranquilamente. Seth le miraba con los ojos muy abiertos, mudo de la impresión.

.- ¿me dices que tiene más de 500 años?-

.-técnicamente, si, ahora, será mejor que volvamos al hotel, ya tendremos ocasión para convencerle.

Seth siguió en silencio a Dante, tenia la imagen del chico rondando en su mente, al igual que todo lo que le había dicho Dante de él. Sonrió. Esa era la sorpresa más grande que le habían dado en todos sus años como vampiro. Serian dos meses interesantes.

 

 

Notas finales:

De nuevo, siento el malentendido u.u..


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