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De color rosa por golddie

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Notas del fanfic:

Disclaimer: B.A.P. no me pertence, ni a ninguna de sus fans, son almas libres hasta lo que TSEntertainment permita.

{!} Advertencias: Pornografía, fetiches, leve sadomasoquismo, masturbación. Solo advierto(?)

Llevaban juntos cerca de un año ya, y aun con todo ese tiempo donde se supone que la confianza debía ser la base de su relación, Daehyun sentía la necesidad de encerrarse en el cuarto cuando Jongup no estaba y poner sus películas de adultos favoritas.

No era tan terrible si le preguntaban a él. Daehyun sabía (por haber leído en foros y tener amigos mayores) que hasta los hombres en matrimonio veían pornografía cuando sus esposas no querían intimar con ellos por diversas razones.

Pero ese no era el caso.

Jongup sí intimaba con él.

Y mucho. Y era genial.

Pero Daehyun tenía un fetiche que no se había atrevido a compartir. Sin importar si Jongup estaba sobre él o si era Daehyun el que tomaba las riendas, no podía simplemente decirle que quería que le tratara con rudeza, o bien, que le diera palmadas.

O no.

Jongup era del tipo de persona que es suave y amable. Y, no hay que malinterpretar a Daehyun, eso era lo que amaba del muchacho: amaba que fuese así de tierno y considerado no solo con él, sino, con todo ser vivo. Jongup criaba un cactus en el balcón de su departamento y alimentaba a los pájaros que se posaban a cantar fuera de su ventana en las mañanas, por Dios, ¿cómo iba Daehyun a corromper al menor diciéndole que le gustaría que le golpeara mientras estaban teniendo relaciones? (Es más, Jongup sostenía que ellos hacían el amor.)

Era impensable. Daehyun no iba a ser quien le fuese a decir a su amado novio que el sexo era más que besos tiernos y caricias llenas de amor (claro, era una gran parte, y era la parte que le hacía sentirse amado), y que tenía un inexplorado lado donde se podían romper ciertos límites: donde Daehyun estaba seguro que su placer sería inigualable. Por mucho que amara a Jongup, tenía que ser sincero, pues cuando estaban bajo las sábanas, todo era de color rosa y a veces a Daehyun le gustaría que las cosas fueran de un rojo pasión.

Era por eso que Daehyun se encerraba.

Jongup acababa de despedirse de él con un castro (realmente castro) beso en sus labios y un nos vemos a la cena, antes de salir del departamento. Daehyun se había levantado del sofá donde había estado sentado casi toda la mañana terminando un papel para una de sus clases teóricas y se había acercado a la ventana. Desde el tercer piso donde estaba su nido de amor, pudo ver cómo Jongup caminaba hasta desaparecer en la calle donde estaba la parada de autobús.

Daehyun había sonreído porque hace una semana que Jongup no le dejaba solo.

Fue hasta su habitación compartida y cerró la puerta con una mano antes de saltar en la cama. Daehyun prendió su computadora y buscó sus videos favoritos, abriendo uno en específico para ponerle play.

La escena comenzaba tranquila: mostraban a un muchacho leyendo el diario o algún tipo de hoja, silbando felizmente en un salón de estar como cualquiera. Pronto, unos segundos después, otro hombre entraba a la escena, desde lo que el espectador podía suponer era la cocina debido a que venía con delantal para cocinar y una bandeja, inclinándose hacia la mesa (mostrando su trasero a la cámara) y dejar un vaso en la mesita del café. El segundo hombre se volvía hacia la otra habitación (la cocina, pero probablemente solo se movía a un lado para que alguien de staff le entregase una lata de un bebestible) y volvía con el primer muchacho, esta vez inclinándose para servir hacia el lado opuesto, haciendo que el mismo hombre le mirara su trasero y con una mano le acariciara ahí suavemente.

Daehyun suspiró, esperando a que la escena continuara.

El muchacho que llevaba el delantal le sonreía al otro y se sentaba a su lado, ofreciéndole el vaso de antes ahora lleno de algún líquido, diciéndole unas palabras en inglés que Daehyun no entendía pero sonaban sensuales. El hombre de antes, el que leía el diario, aceptaba el vaso sin interrumpir el contacto visual y comenzaba a beber. Había un acercamiento a la garganta que bebía y a la lengua que limpiaba sus labios posteriormente, habiendo terminado la bebida.

Entonces el otro se acercaba a él y le besaba sin ser delicado. Daehyun puede ver sus lenguas y puede escuchar como esos sonidos exagerados dignos de la pornografía se hacen presentes, los gemidos de ambos no son delicados como los de Jongup cuando le besa de esa manera; son hambrientos y llenos de deseo.

Antes de que Daehyun se diera cuenta, ambos hombres se están besando sin ropa a excepción del que traía el delantal, que estaba sin pantalones y ropa interior pero su compañero le ha dejado el delantal puesto y le acaricia bajo el mismo. Los gemidos del que es más pálido, el que lleva el delantal, son terriblemente excitantes. Daehyun abre sus pantalones cuando de pronto su compañero de escena separa sus piernas y sin dejar de besarle, pone uno de sus dedos dentro de él.

El hombre que está completamente desnudo y sobre el otro no tiene piedad, penetra al otro chico con un dedo como si fuese suyo y no un compañero de actuación, haciendo que el otro separe más y más sus piernas, deseando ser tomado agresivamente, como si supiera que entre más pida que se detenga, más rudo será el hombre sobre él.

Daehyun ve como los actores cambian de posición: el que llevaba delantal fue puesto de rodillas y manos sobre el sofá y el otro le está dando nalgadas que resuenan en todo el set. Daehyun pone pausa un segundo para quitar sus ropas y con una mano comienza a acariciar su erección suavemente.

Las palmadas no acaban. El chico más pálido grita por que el otro hombre se detenga pero el mismo no le da receso, como si supiera que disfruta ser tratado de esa forma y que realmente le está pidiendo que siga así. Los sonidos llegan directo al miembro de Daehyun: los gritos y el sonido de piel siendo golpeada hasta dejarla sonrosada lo tiene deseando por eso.

Como le gustaría que Jongup hiciese eso con él.

“Jongup”, musitó Daehyun, de pronto imaginándolo a él y a su novio de esa forma. Quizás Daehyun no usaría un delantal como en la escena, pero Jongup le golpearía hasta dejarlo llorando.

Cuando Daehyun abre los ojos, los actores han cambiado de posición de nuevo. Esta vez el muchacho del delantal está puesto de espaldas contra el sofá, con sus piernas separadas como si fuese una mujer y el otro hombre arremete contra su cuerpo violentamente. Hay más gritos porque el hombre sobre él sigue golpeándolo, esta vez en las mejillas, y a veces se inclina para morderle en los hombros y el cuello.

“Ohh”, suelta Daehyun al observarlo. El acercamiento hacia el rostro del chico que está contra el sofá lo deja al borde de su orgasmo, porque el actor está sonriendo y gimiendo por el trato que recibe, así como él estaría.

Hace falta una bofetada más para que Daehyun decida buscar un pañuelo porque está a punto de terminar.

Daehyun cierra los ojos, concentrándose en los ruidos de la película, más gritos, más golpes, más piel contra piel, más gemidos, más gruñidos y más respiraciones entre cortadas y Daehyun gime en su garganta, envolviendo su miembro con el pañuelo de antes para no ensuciar. Su orgasmo llega fuerte, pero no lo suficiente para hacerlo sentirse mareado. Es placentero, pero no tanto para decir que es el mejor que ha tenido en su vida.

Era el mismo tipo de orgasmo que experimenta cuando Jongup y él tienen relaciones.

 

 

 

Jongup llegó al departamento cuando Daehyun estaba tras la estufa, decidiendo qué hacer para cenar. Tal como muchas otras veces, cenaron juntos y después pasaron al salón de estar para ver las noticias.

Cuando fueron a la cama hablaron de su día (Jongup le dijo que iba a tomar dos clases extras y Daehyun le contó que había ido a comprar pastel a la tienda) por un rato antes de que ambos quedaran profundamente dormidos en un dulce abrazo.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Los siguientes días fueron relativamente iguales, exentos de novedades. Y el siguiente a ese Daehyun tuvo que ir clases a dejar el papel en el que había estado trabajando hace una semana. Lo fue a entregar a tiempo, y se quedó un rato con un par de compañeros hablando del trabajo antes de volver a su departamento.

Cuando entró a su hogar suspiró en cansancio. A pesar de hubiera sido por un fin de semana, Daehyun ya se había desacostumbrado a ir y volver a la universidad, así que sentía que merecía una recompensa por su esfuerzo. (Como un trozo de tarta que había comprado hace un día.)

Pero antes, tenía que sentarse un rato.

Y al hacerlo, se relajó completamente. Su mente estaba despejada y el cansancio poco a poco tomó control de su cuerpo.

Daehyun se quedó dormido en el sofá.

 

 

 

Escuchó la puerta cerrarse, y solo por eso Daehyun abrió los ojos. Observó a su alrededor, dándose cuenta que se había quedado dormido, pero la siesta había sido muy reparadora.

“¿Hyung?”, preguntó la voz de Jongup, ante lo que Daehyun le respondió que estaba en la sala.

Jongup le sonrió cuando llegó hasta su vista y se sentó a su lado, notando los ojos adormilados que le presentaba el mayor.

“¿Estabas dormido, hyung?”, le preguntó en voz baja, ante lo que el aludido asintió, “te traeré agua”, dijo antes de ponerse de pie rápidamente sin que Daehyun pudiera atraparlo en sus brazos y que pudieran acurrucarse un rato.

Esperó un largo minuto antes de que Jongup volviera y le dejara el vaso en la mesita del café. Daehyun le agradeció tomándolo en una mano y comenzar a beber, pero cuando levantó la vista hacia su novio, se atoró con las pocas gotas que había podido poner en su boca.

Jongup le miraba desde arriba con un delantal atado a su cintura.

Daehyun se estaba ahogando.

“¿Hyung, estas bien?”, le preguntó el menor sentándose a su lado y dándole pequeñas palmadas en su espalda.

El mayor asintió, intentando cobrar su respiración.

Una vez que sintió que podía hablar de nuevo, le dijo a Jongup:

“¿De dónde sacaste eso?”, con voz pequeña.

Jongup le sonrió tiernamente.

“Lo compré para mi nueva clase de cocina, ¿te gusta?”, inquirió poniéndose de pie de nuevo y dando un par de vueltas para que Daehyun pudiera verle bien.

El delantal era totalmente verde y con un enorme conejo en la parte de adelante.

“Es lindo, Jonguppie”, le respondió, intentando calmarse.

Su novio volvió a sonreír, esta vez producto del buen comentario que recibió por su compra.

Jongup se sentó a su lado de nuevo y le miró atentamente. Daehyun terminó de beber el agua y se relajó un poco, antes de girarse para mirar al otro muchacho, quien le miraba sin siquiera pestañear, arrancando curiosidad de parte del otro.

“¿Pasa algo?”, le preguntó al menor con voz suave.

Jongup no respondió. Se inclinó hacia adelante y tomó a Daehyun de los hombros con delicadeza para besarle un poco.

Daehyun cerró los ojos y respondió el beso. Jongup solía hacer eso: besarlo sin avisar y luego salir corriendo hacia la habitación.

Le parecía adorable.

Pero cuando el tiempo pasó y Daehyun pensaba que ya era el momento en que Jongup se separaría de él, le sonreiría tiernamente y saldría corriendo, el menor se acercó más a su cuerpo, profundizando el beso a la vez.

Le sentía removerse (no podía verlo) hasta que quedó sobre sus rodillas y luego Daehyun sintió cómo Jongup se sentaba en su regazo, sin haberse separado de él un solo momento.

Jongup le movió por los hombros hacia atrás, dejando que su espalda chocara un poco contra el respaldo. Daehyun le miró desde ahí, esperando a que el menor dijese algo (lo que fuera), pero cuando pasó un rato y lo único que hacían era mirarse, el mayor preguntó:

“¿Quieres… ir a la habitación?”, mas Jongup le sonrió, moviéndose hacia adelante hasta que sus frentes se tocaron suavemente.

Daehyun aguantó la respiración cuando Jongup puso una pierna a cada lado de su cadera.

“Quiero hacerlo aquí”, le dijo con voz baja, volviendo a besar a Daehyun, esta vez, sin ir lento.

El mayor no podía decidir si estaba asustado o complacido por las acciones de su novio: estaba asustado por un lado, puesto que un cambio de actitud así podía sugerir que Jongup quería darle algo a entender, y estaba complacido porque las manos del menor trabajan por su cuerpo con un tacto firme y decidido, casi llegando a ser lo que él anhelaba.

Decidió que solo seguiría la corriente.

Jongup respiraba agitado en su cuello porque Daehyun tenía una mano dentro de sus pantalones y le acariciaba lentamente, pasando sus ojos por el tembloroso cuerpo del menor y el hecho de que siguiera con aquel delantal en su cuerpo.

Si Daehyun cerraba un poco los ojos, podía imaginar que en realidad Jongup estaba desnudo, solo con su delantal verde puesto, sobre su regazo y gimiendo para él.

“Hyung”, escuchó como le llamaba. El aludido hizo un sonido con la garganta, “hyung, los he visto.”

Daehyun se detuvo en seco. Incluyendo su mano alrededor del miembro de Jongup, y este se quejó un poco al respecto.

“¿Qué has visto?”, le preguntó, permitiendo que el menor siguiera escondiendo su rostro en su cuello.

Así le era más fácil a él también.

Jongup pasó saliva.

“Los videos de tu computadora”, admitió.

El mayor no supo cómo reaccionar.

Jongup se asustó por la ausencia de respuesta, así que se movió hacia atrás para poder mirar a su novio, quien de inmediato se rehusó a verlo.

“Hyung, lo siento”, ofreció el menor, realmente demostrando una expresión de arrepentimiento, “no sabía qué eran y…”

Estaba mal por su parte. Jongup solo había visto la laptop encendida cuando Daehyun se había ido a clases y solo quería revisar un correo, siendo que la suya estaba al otro lado del departamento y no quería levantarse de la cama.

La contraseña no fue problema y cuando entró vio que había varias pestañas abiertas en menú de inicio. Una de ellas, era la carpeta que Daehyun escondía dentro de una carpeta, dentro de otra carpeta, dentro de otra carpeta… y Jongup realmente no pensó cuando abrió uno por pura curiosidad.

Lo vio desde el inicio al final, sin siquiera pensar en algo coherente mientras lo hacía. Cuando terminó de reproducirse, Jongup se dio cuenta de que estaba erecto dentro de sus pantalones de pijama. Y vio más. Había cerca de diez videos, todos con distintos actores, pero todos apuntaban a lo mismo.

Golpes. Y gritos y los actores se trataban de forma muy ruda, como si estuvieran teniendo relaciones con alguien a quien odiaran.

Jongup había terminado con cada uno de ellos.

“… ¿Y?”, preguntó Daehyun, luego de que Jongup dejara de hablar.

El menor pestañeó, ahora siendo él el que evadía el contacto visual, volviendo a abrazar al mayor por el cuello.

“M-me gustaron”, admitió.

Daehyun no lo podía creer en un momento, pero cuando por fin se dio cuenta de lo que significaban esas palabras, sonrió.

“¿Oh, en serio?”, inquirió, buscando ver a Jongup a la cara, al mismo tiempo que la mano que tenía dentro de los pantalones del menor comenzaba a moverse a un nuevo ritmo, arrancándose un quejido de placer, “¿qué tanto te gustaron?”, preguntó, sin borrar su sonrisa.

Jongup se sentó mejor, poniendo ambas manos sobre los hombros de Daehyun y mover sus caderas contra su novio.

“Hyung”, le llamó, “hyung, hagámoslo ahora”, exigió el menor, moviendo sus manos por la camisa de Daehyun, queriendo quitarla del camino, así como pronto seguirían los pantalones.

No hubo mucho más que decir hasta que Jongup intentó quitarse el delantal. Daehyun le pidió que se lo dejara puesto.

A pesar de todo, Daehyun amaba a Jongup. Así que cuando el menor le pidió que le diera una palmada en el trasero (ya desnudo), Daehyun así lo hizo, pero con fuerza moderada y luego repartiendo besos en la piel. Su miembro reaccionaba, deseoso de poder penetrar a aquella persona que emitía tan hermosos gemidos y gritos cada vez que le golpeaba.

Jongup tenía su rostro completamente sonrojado y había lágrimas en sus ojos. Daehyun entró en su cuerpo sin ser tan delicado, de nuevo ubicando al menor en su regazo y que así este fuera el que se moviera.

Jongup le golpeó también. En sus mejillas un par de veces, provocando que Daehyun le sujetara fuertemente las caderas y comenzara a moverse por sí mismo también, atrayendo con fuerza el cuerpo del menor hacia abajo para llegar cada vez más adentro de su novio.

Siendo la primera vez que hacían algo así; siendo que era el fetiche soñado de Daehyun y el recién descubierto de Jongup, no pasaron más de unos cuantos minutos en los que ambos ya estaban agitados y deseando llegar a su orgasmo de una vez.

Ambos gritaron, Daehyun mordiendo expansiones de piel, Jongup imitándole luego cuando fue turno del mayor de maldecir por su placer, repartiendo besos luego de que el chico ya se había calmado un poco.

Jongup se movió un poco, moviendo los cabellos de la frente de Daehyun que se habían adherido a su piel producto del sudor y le dio un corto beso ahí, para luego sonreírle.

“Te amo, ¿sabes?”, le dijo Daehyun al sentir al muchacho sobre él removiéndose.

Jongup asintió.

“Debiste habérmelo dicho, Daehyunnie”,  le regañó suavemente, “¿qué era lo peor que podía pasar?”, inquirió.

El aludido asintió.

“Solo no quería asustarte”, admitió, dándose cuenta que seguía dentro de Jongup, así que removió un poco sus caderas para no incomodar al menor.

Jongup le sonrió.

“Pero resultó mejor de lo esperado”, comentó Daehyun, sonriéndole aún más.

Su novio le sonrió, asintiendo con una expresión cansada.

“Y ahora es mi turno, hyung”, le dijo, sin dejar de sonreírle. Pero esta sonrisa era distinta.

Daehyun le sonrió de la misma manera.

“Vamos a la habitación”, le ordenó, ante lo que Jongup obedeció de inmediato.

 

 

 

Notas finales:

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no pregunten de donde salió la idea(?), este fue un pedido en el ask, así que espero que al anon que lo pidió le haya gustado (a ustedes también), amor amor<33


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