Noche Placentera por OkamiNoryoku

Eso ya era algo habitual entre aquellos al que hacían llamar dioses que se odiaban y querían matarse el uno al otro para que uno de los dos dejara de existir pero había algo que los detenía en el momento en que luchaban, aunque era extremadamente difícil de creer, existía una extraña pero irresistible e innegable tensión sexual que no desaparecía con nada que hicieran.

Sabían que aquello estaba mal, que no podía ser pero era inevitable el no sentir aquello y más cuando en plena lucha sus cuerpos rozaban de una manera difícil de explicar, cuando se rozaban tenían que callar sus jadeos para que nadie pensara que había entre ellos porque si no... Todo el esfuerzo de haber mantenido una relación carnal en secreto se hubiera ido al mismísimo caño. El amigo del joven Shinigami más de una vez sospecho que el portador de las líneas de Sanzu traía algo entre manos y que estaba escondiéndolo pero al instante se olvidaba de eso y se centraba más en su meta de superar a los dioses.

Aquella noche como una de las tantas otras, iba a ser testigo de la pasión entre estos dos seres.

El Dios Kishin, Asura, se adentró en aquella simétrica y ordenada habitación con sigilo ocultando su presencia pero también su alma si no quería que Shinigami lo pillase en medio del acto con... Aunque odiara admitirlo, hermano menor ¿Porque lo era no? Siendo ambos prácticamente fragmentos del alma de Shinigami con forma humana pero él no consideraba a Shinigami su padre, lo consideraba un enemigo que debería desaparecer de la faz de la tierra ya que le tenía cierto temor a pesar de tener todo el poder del mundo, a pesar de tener la Locura del Miedo, a pesar de todo. Recorrió con su mirada la habitación de Death The Kid, siempre le había parecido que era algo extremista con su obsesión por tener todo simétrico y ordenado, mas eso no le importó porque tenía que encontrarle y sentirle contra él, escuchar sus jadeos y gemidos rogando por más.

Ciertamente todo aquello empezó cuando en medio de una de sus tantas luchas y en un descuido, cayeron al duro suelo y sorprendentemente estaban muy pegados tanto que cuando Asura movió un pierna apretando sin querer el miembro de Kid, este soltó un audible gemido y luego un suspiro sorprendiendo bastante al Kishin y desde entonces se empezaron a relacionar de forma candente pero también carnal cada noche que podían guardando aquello en un secreto.

Salió bruscamente de sus pensamientos al sentir el alma de Kid enfrente de él, levanto su rojiza mirada hasta encontrarse con la ámbar de su hermano menor notando que este recién había subido a su habitación al sentir el alma de Asura llegar, y el shinigami empezó a sentir las vendas del que era su hermano mayor recorrer con deliciosa tortura su cuerpo con una suavidad inexplicable.

– Um… Asura… –Soltó un suspiro al sentir una venda pasar por su cuello y enredarse en el sin fuerza.

– Lamento haber llegado tarde… Pero compensare aquello… –Con una de sus vendas rodeo la fina cintura de Kid y lo atrajo hacia el atrapando sus labios en un pasional beso.

El menor rodeo el cuello del mayor en un abrazo incitándolo a ir a más pero sin prisas porque tenían toda la noche para hacerlo una y otra vez hasta cansarse, el mayor tomándolo de su cintura lo apretó contra sí mismo un poco más rozando sus miembros que estaban empezando a colocarse erectos. Asura acostó con cierta fuerza a Kid en la cama y empezó a besar pero también a morder cada centímetro de piel expuesta de aquel blanquecino cuello que lo volvía loco cada vez que lo hacían, despojo al menor de su molestosa camisa blanca acariciando los sensibles pezones de su hermano menor para después acercarse a uno y morderlo ligeramente, le sentía un poco más sensible que la última vez que hicieron aquello.

– ¡Ahhh! ¡A-Asura! –Gimió al sentir la boca del mayor en uno de sus pezones y una de sus manos pellizcar el otro.

– Shhh… No querrás que nos descubran… –Le mordió ligeramente el lóbulo de la oreja arrancándole otro gemido de placer.

Kid frunció el ceño y a modo de venganza, se quitó las medias lo más que pudo pues tenía al mayor encima de él, ya teniendo los pies descalzos, levanto su pie derecho y con dolorosa suavidad empezó a acariciar el miembro del Kishin por encima del pantalón quien jadeo ante aquellas caricias pero antes de que el shinigami pudiese hacer algo más, Asura atrapo su boca nuevamente deshaciéndose del mas que molesto pantalón del menor junto con el bóxer negro que traía estampados de la máscara del padre de ambos.

Se detuvo un momento para maravillarse con el perfecto cuerpo que lo incitaba a ir mas allá de eso, una maldita invitación al pecado que cada noche cometía con el cuerpo de Kid y también el sentirle retorcerse debajo de él.

Podía tener todo el poder del mundo, ser el villano más cruel en el universo pero incluso en aquella situación enviaba al mismísimo infierno la crueldad ya que no quería que su pequeño hermanito gimiera de dolor al estar dentro de él, empezó a bajar con besos cortos delineando el abdomen de Kid hasta llegar a su miembro el cual apenas toco la punta escucho un gemido de Kid y le sintió arquearse con esa acción, lamio y engullo su miembro en un rápido pero placentero vaivén, finalmente Kid se vino en la boca de Asura quien trago toda la esencia de él.

– Ow Kid ¿Qué fue eso? –Volvió a besarle con pasión calentando de cuenta nueva al shinigami.

– Nnngh… C-Cállate y entra de una vez… –Se froto contra el cuerpo del mayor ya desesperado de tanta tardanza.

Asura sonrió nuevamente y se lamio tres de sus dedos para dilatar la entrada de Kid, ya mojados de saliva adentro el primero en el interior del shinigami que arqueo su espalda al sentirlo, empezó a moverlo en círculos hasta que adentro el segundo haciendo movimientos de tijeras sacándole gemidos de placer a Kid que ya tenía la respiración acelerada y nuevamente estaba poniéndose erecto, adentro finalmente el tercero moviéndolos simulando penetración, el shinigami grito de placer al sentirlos moverse con cierta rapidez.

Considerando que Kid ya estaba lo suficientemente dilatado, saco sus dedos y acerco su propia erección hacia la entrada del menor, comenzó a entrar con lentitud pues el menor estaba más sensible que la vez pasada y lo sintió incomodarse, vio pequeñas lágrimas en sus ojos.

– E-Espera… Duele… –Tomo al mayor de los hombros intentando que se detuviese un momento.

– Tranquilo… Ya entra… Relájate… –Le susurro mientras seguía entrando en él y le lamia y succionaba el lóbulo de su sensible oreja.

Cuando por fin pudo entrar, se quedó quito por unos minutos mientras el menor se acostumbraba a tenerlo dentro como las noches en las que lo hacían. De repente, Kid movió sus caderas en señal de que se había acostumbrado y relajado ya porque también quería que empezara con la acción de aquel acto tan impuro entre ellos, Asura tomo sus caderas empezando con las embestidas, primero lentas y suaves para cuando escucho a Kid gritar de placer, se movía dentro de el con rapidez y cierto salvajismo.

El Shinigami soltó otro grito de placer cuando Asura llego ahí, lo que lo llevo a ver estrellas hasta llevarlo al mismísimo cielo y de regreso, el Kishin siguió golpeando ese lugar una y otra vez haciendo los vaivenes más rápidos y salvajes que hace un momento, el menor arañaba su espalda gimiéndole al oído, empezó a masturbarlo sin dejar de embestirle hasta que sintió que las paredes internas de Kid apretaron de una manera deliciosa su miembro, siguió hasta que se corrieron al mismo tiempo. Se dejó caer encima de Kid, los dos tratando de regular sus respiraciones, hasta que Asura se levantó y miro a Kid que estaba aún agitado.

– La próxima vez voy a destruirte querido hermano –Dicho esto, se vistió y se acercó a la ventana de la habitación para irse.

– N-No, más bien el que te destruirá, soy yo, basura asimétrica –Le miro de re-ojo pero con desprecio en su voz.

– Hasta la próxima ~ –Salió y desapareció antes de que lo pillasen.

– Hmp… Maldito… –Se durmió al rato.