El Osito Tamegoro, el Príncipe Kikumaru y Sir Oishi
Serie: The Prince of Tennis
Universo: El de la serie, en este fic no hay partidos de Tenis y todo eso, pero se supone que si son jugadores de Seigaku, solo que es un fin de semana, ¿comprenden? ^.^UU
Autora: Yakumo Kaiba Eiri
Nota: Los personajes de “The Prince of Tennis” no me pertenecen, solo los utilizo como forma de entretenimiento para mí y para las personas que leerán esto y no por intención alguna de lucro. Yaku-chan se une a la Campaña liderada por Katrinna Le Fay: No permitamos que el PLAGIO se lleve nuestro trabajo, así que si conoces una historia Robada, por favor denúnciala a sus respectivos dueños. No es justo que nuestras horas de dedicación se vayan a la basura y se vean inmiscuidas en una total falta de respeto para el Autor y los lectores. Entre más luchemos, más saldremos adelante. Muchas gracias Katrinna por prestar tus palabras y seamos muchos los que las gritemos.
El Osito Tamegoro, el Príncipe Kikumaru y Sir Oishi
Yakumo Kaiba Eiri
Kikumaru estaba acostado en su cama. Sus ojos llorosos y sus puños apretados demostraban el dolor que había experimentado y que quizás aún experimentaba.
No quería pensar más en ello, solo le causaba ganas de seguir llorando pero las lágrimas ya no salían de sus ojos por lo cual solo le ocasionaba un gran dolor en su corazón.
-Kikumaru, hijo, tienes visitas...-
Su madre le habló desde afuera de su habitación, pero el pelirrojo hizo oídos sordos.
-¡Kikumaru!-
-No quiero ver a nadie, mamá... dile a quién sea que yo le hablo más tarde...- dijo mientras apretaba la almohada contra su cara. Pudo oír el leve suspiro de su madre y luego sus pasos bajando por las escaleras.
Se dio vuelta mientras miraba el techo y apretaba la almohada contra su pecho y dejó salir un leve suspiro mientras que sus ojos intentaban llorar pero ya no podía... sus ojos estaban secos. Miró el reloj que estaba a su lado en el escritorio: las 330 de la tarde.
-En este momento no debería estar aquí... debería estar con él en allí...- se volvió a dar vuelta quedando boca a la cama para luego abrir las sábanas y acostarse.- No me pienso levantar en todo el fin de semana, no me importa que sea sábado...- y cerró los ojos.
Se dejó llevar por sus pensamientos y sueños, lo que fuera por alejarse de esa realidad... ¿era un exagerado?... ¡NO! Solamente era importante eso para él... una promesa no se rompe, no importa la razón... pero ni siquiera había dejado que se explicase... ¡Y que importaba! Que se explicase no iba a cambiar el hecho que rompiese su promesa... pero, no había sido su intención romper su promesa... ¡Pero lo había hecho!... ¡¡Pero no había querido!!... ¡¡Pero lo había hecho!!
Kikumaru se aferró con más fuerza a la almohada cuando sintió un leve empuje sobre su cabeza. Era leve, como de un bebé... el pelirrojo abrió los ojos aún adormecido y viendo borroso entonces lo vió.
-¡Señor Tamegoro!- dijo con sorpresa.
En el borde de la cama estaba parado su osito de felpa favorito, tan bonito con su corbatita de moño, Kikumaru le había puesto señor Tamegoro y era su mayor tesoro.
-“El señor Tamegoro quiere dormir una siesta... ¿el Príncipe Kikumaru le quiere acompañar?”-
Kikumaru casi se cae cuando el oso habló. No había abierto la boca, pero sabía que él había hablado. El Señor Tamegoro se sentó en la cama y con delicadeza cayó hacía el lado izquierdo poniéndose en posición de dormir una siesta. Kikumaru sonrió sorprendido y cuando él también se iba a recostar el osito de felpa se levantó.
-“Noo, Señor Tamegoro no puede dormir una siesta... Señor Tamegoro tiene mensaje para el Príncipe Kikumaru... mensaje de Sir Oishi...”- Kikumaru abrió los ojos con sorpresa para luego sonreír.- “Sir Oishi pide disculpas por romper su promesa de llevar al parque de diversiones al Príncipe Kikumaru... pide que su majestad le perdonase y le concediera nuevamente el privilegio de amarle, que sin su amor Sir Oishi muere y que sinceramente no cree que el Príncipe Kikumaru quiera quedarse sin pareja tan pronto... dice que si su majestad le perdona pueden ir mañana, que su majestad el Príncipe Kikumaru se marchó demasiado pronto y no le dejó decirle que podían cambiar la visita para el día siguiente si su majestad así lo deseaba... Sir Oishi pide una pronta respuesta pues lo único que quiere es abrazar al Príncipe Kikumaru y poder pedirle entre beso y beso mil disculpas... Señor Tamegoro ha hablado... ahora si puede dormir su siesta... Buenas noches, Príncipe Kikumaru...”- el osito hizo una reverencia para luego volver a caer para el lado izquierdo y quedarse dormido.
Kikumaru sonreía muy feliz para luego asomarse por la cama y ver tirado en el suelo a Oishi que le miraba con mucha ternura. Al pelirrojo se le llenaron los ojos de lágrimas y se dejó caer en los brazos del pelinegro el cual lo recibió con los brazos abiertos y miles de besos.
-Perdóneme, Príncipe Kikumaru...-pidió Oishi mientras abrazaba al pelirrojo por la cintura y le llenaba la cara de besos.
-No hay nada que perdonar... soy yo el que debe ser perdonado, Sir Oishi... me sentí dolido por que había roto su promesa, pero debí haber comprendido que no fue su intención... - pidió el pelirrojo mientras hundía su cara en el dulce cuello del pelinegro.
-No me dejó explicarle... mi padre tuvo que viajar y me dejó a cargo de mi hermano pequeño... nosotros queríamos una cita romántica, por eso me vi forzado a cancelarla... pero no fue mi intención lastimarle, perdóneme...-
-No, es mi culpa... había haberle dejado hablar... perdóneme por ser tan inconciente...-
-No se preocupe, pero...-
-¿pero?- Kikumaru le miró con duda.
-vamos a ayudar a tu madre que está cuidando a mi hermanito abajo...- dijo con una gotita Oishi mientras Kikumaru soltaba una carcajada.
-No te preocupes, a ella le gustan los niños... tenemos tiempo para nosotros, Sir Oishi...-dijo de una manera provocativa el pelirrojo Príncipe.
-Si usted lo dice, su majestad...-dijo con una sonrisa el caballero pelinegro.
Mientras abajo la medre de Kikumaru escuchó algo raro y tomando de la mano al hermano menor de Oishi se marchó muy sonrojada a cualquier parte para dejar reconciliarse a esos dos tranquilos.
FIN ^__^
Nota de Yakumo: La li ho! Hola, ejém... este es mi primer fic del Príncipe del tenis... y no he visto mucho la serie así que no sé cual es la vida de Oishi y kikumaru, si, así es, le inventé una madre a Kikumaru y un padre y un hermano a Oishi... es que no sabía que poner n_nUU... bueno, espero que les guste... ¡Ah! Lo de Príncipe y Sir es solo una forma de hablarse que tienen cuando se quieren hablar de forma romántica XP no es que sea un universo paralelo donde Kikumaru precioso sea un Príncipe... es solo la forma en que le dice Oishi ^_^UU... bueno, espero sus comentarios... Bye-Bye Nanoda!!