Nuestros Orgullos...
Nota: Bueno, los personajes de Yu Gi oh! No me pertenecen... solo los utilizo como forma de entretención para mi y para las personas que leerán esto (alguien lo leerá, cierto? ,o_o,)... solo me pertenece la trama y los personajes originales mientras que algunos de estos son tomados prestados de otros fics de distintas autoras (no se preocupes chicas se los devolveré sanos, salvos y vírgenes, aunque no aseguro lo de vírgenes XD)... Yaku-chan se une a la Campaña liderada por Katrinna Le Fay: No permitamos que el PLAGIO se lleve nuestro trabajo, así que si conoces una historia Robada, por favor denúnciala a sus respectivos dueños. No es justo que nuestras horas de dedicación se vayan a la basura y se vean inmiscuidas en una total falta de respeto para el Autor y los lectores. Entre más luchemos, más saldremos adelante. Muchas gracias Katrinna por prestar tus palabras y seamos muchos los que las gritemos. Ahora, sin más preámbulo, el fic...
Nuestros Orgullos...
Serie: Yu Gi Oh!
Yakumo Kaiba Eiri
Capítulo 1
Todo tranquilo por Kaiba Corp. Solamente lo usual. El jefe gruñón, perfeccionista y endemoniadamente bello pasando delante de todos los empleados y secretarias sin dirigirle palabra a ninguno. Seto Kaiba salió del ascensor del piso 13 donde se encontraba su oficina.
-Buenos Días Sr. Kaiba- Saludó muy amable la secretaria a su jefe a lo que el CEO respondió con un movimiento de cabeza entrando en su oficina.
-Buen Día Seto- saludó Anecuze Aeló al jefe y dueño de aquella increíble empresa. Anecuze era el único junto con Mokuba, el hermano menor Kaiba, que podía nombrar el nombre del jefe corporativo sin terminar muerto atravesado por sus ojos zafiros o, por defecto, muerto de miedo por aquella mirada.
-Mmm…- fue la respuesta del castaño.
-Tan hablador y amable como siempre, Kaiba… ¿a cuantas secretarias despreciaste al pasar para acá?- Kaiba hizo una mueca.
-Déjame pensar…-hizo gesto de pensar- ¿a todas?
Anecuze soltó una carcajada.
-Por lo visto no amaneciste tan normal… hasta haces bromas…-
-Mmm… Aeló, necesito un informe acerca del último modelo del Disco Virtual de Duelo de Monstruos… me dijiste que lo tendrías para hoy, no?-
-Claro Sr. Kaiba… espere que lo voy a buscar…- Anecuze salió de la oficina de Kaiba para buscar el informe a su propia oficina dejando un rato solo al CEO.
Kaiba suspiró. Realmente ese Aeló era un dolor de cabeza. Siempre tan sonriente, alegre y atrevido… no sabía como ninguna chica le había echado el lazo. Tan dulce que era, con su mirada tierna, sus ojitos verdes y sus pucheros de bebé tenía vueltas locas a todas las secretarías y empleadas de la empresa… hasta él, el gran Seto Kaiba que jamás se importaría en lo que hicieran sus empleados ni lo que sucediera entre ellos había notado las miradas que le echaban a su mano derecha las empleadas y algunos empleados cuando bajaban juntos… y no lo miraban a él, lo cual sería obvio por lo hermoso que era (Vamos, modestia aparte) si no que miraban a Anecuze, el cual, por lo que sabía, jamás se había dado cuanta de nada, era tan inocente… demasiado para el gusto del gran CEO.
-Pero es un gran asistente… se puede encarga de absolutamente todo… hace lo que se le encomiende y lo hace a las mil maravillas… nunca había tenido un asistente como él, me siento realmente tranquilo cuando lo dejo a él a cargo…- el Ceo hablaba en voz baja mientras prendía la laptop y se acariciaba las sienes.
-Oh, Seto… me vas a hacer llorar…- Anecuze apareció en el portal haciendo una pose tremendamente dramática…- ¿Eso significa que me subirás el sueldo?- miró a Kaiba con los ojos brillando.
-Ni lo sueñes…- Kaiba comenzó a teclear en su lapto.
-Oh Seto, por que eres tan malo…- Aeló puso un puchero.
-Déjate de tonterías y pásame ese informe…-
-Si, toma…-
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-Hey, Yuugi… ¿Vamos a tomarnos unos helados?-
-Hoy no puedo Joey, prometí con Yami ir a ayudar a mi abuelito con la tienda…-
-Oh, comprendo… no importa…-
-Lo siento Joey…- le dijo Yami.
-Dije que no importa, brothy…- Joey sonrió- Bueno, hasta mañana…-
-Si hasta mañana…-
-Adiós…-
Joey se despidió con la mano mientras que Yuugi se iba junto con Yami para el lado contrario.
-Yami… no notaste a Joey un poco extraño…-
-¿Extraño? ¿En que sentido, Yuugi?- Yuugi bajó la cabeza.
-No sé… es como… si… se sintiera triste… y solo… no supe que hacer…
Yami miró a Yuugi y le sonrió reconfortándole mientras le decía que debe ser su imaginación.
Joey se fue caminando con la cabeza gacha... nadie… nadie en absoluto había recordado su cumpleaños… ¡ni siquiera su hermana!! … había esperado que sus amigos le saludasen diciéndole “Feliz cumpleaños, viejo!, Que cumplas muuuchos años más, Joey” o algo por el estilo… Suspiró.
Joey pasó por fuera de una tienda y no notó como alguien salía cargado hasta más arriba de la cabeza con envases de comida.
-Aaaaauch!-
Fue lo único que pudieron decir ambos cuando estaban en el suelo cubiertos por los paquetes…
- ¡Cuanto lo siento!- dijo Joey comenzando a recoger los envases y amontonarlos a un lado.
-No te preocupes… Yo no iba mirando…- el otro chico sonrió y también comenzó a recoger todo.
-Como ibas a ver con toda esa comida por encima de tu cara…- comentó Joey con una sonrisa… la presencia de la sonrisa del otro chico le alegró.
-Jajaja… es cierto…- cuando recogieron todo Joey insistió en acompañarle a su auto para ayudarle a cargar todo.- Arigato……- El chico se quedó mirando a Joey.
-Ahh… que bobo… me llamo Joey Wheeler…- se presentó Joey extendiendo la mano reconociendo correctamente el silencio del otro chico detrás del “gracias” por no saber su nombre.
-Mucho gusto Joey-kun… mi nombre es Anecuze Aeló, pero me puedes llamar Ane…- Anecuze sonrió con esa sonrisa infantil que le caracterizaba.
Joey le devolvió la sonrisa, le agradaba mucho aquel chico.
-Por cierto…-comentó Joey mirando la cajuela del auto de Ane cubierto de envases de comidas y bebidas…- parece que tienes una fiesta…- Ane bajo la mirada.
-En realidad no…-negó con la cabeza- Iba a hacer una fiesta con mis hermanos que venía a Dominó a verme, pero no pudieron venir… como había encargado la comida en la mañana y las bebidas las compre antes de que llamaran mis hermanos, me tendré que quedar con todo…- suspiró.
-Pero tus hermanos llegará mañana, no? La comida no se echará a perder…
-Bueno, ellos llegarán en tres días… no sé que pasó…- Anecuze volvió a suspirar y de pronto se le iluminaron los ojos.- Hey Joey-kun… ¿Tienes algo que hacer ahora?-
Joey abrió los ojos muy grandes en un gesto de sorpresa y negó.
-¿Quieres comer conmigo? La verdad es que yo como bastante, pero todo esto es demasiado, incluso para mi… ¿Me ayudas? Es buena comida… y tú me caíste muy bien…-Ane sonrió con una sonrisa irresistible… sabía que nadie se negaría a ella… y Joey no fue la excepción…
Un rato después se encontraban en el departamento de Anecuze tomando bebida (con un poquito de alcohol… solo un poquitito XD) y comiendo una deliciosa comida que iban desde comida tradicional japonesa a patatas fritas…
-… y mi jefe siempre me esta regañando por que soy muy infantil según él…- Ane hizo un puchero.- Eso no es verdad… soy muy maduro…-
-Jaja, si como no…- Joey se reía a carcajadas- jamás había conocido a nadie tan infantil como tú… ni siquiera mi amigo Yuugi que es el más “sano e inocente” de mis amigos…- reía…
-See…- ¬¬ Anecuze se quedó un rato callado tratando de asociar lo último que había dicho Joey… el nombre Yuugi le venía de algún lado… incluso el apellido Wheeler… si… se lo había escuchado a su jefe… Kaiba hablaba del grupito de Yuugi y…- ¡El cachorro Wheeler!!-
Anecuze miró a Joey. Realmente parecía un cachorrito… con aquel cabello cayéndole por la cara, se veía muy inocente y lindo, desprotegido…
- Joey-kun…
- Zzzzzzzzz…
Anecuze se apoyó en el hombro de Joey mientras se quedaba dormido al igual que el cachorrito…
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Mientras que en otro lugar de la ciudad de Dominó…
Aunque ya era muy tarde habían unas cuantas luces en la Mansión Kaiba. Seto se encontraba ocupado viendo unos videos cuando entró Mokuba con una sábana restregándose los ojos…
-Seto… es muy tarde…- reclamó el pelinegro.
-Lo sé, Mokuba… por eso ve a dormir…- le respondió el CEO.
-Peeero…-
-Nada de “peros”, Mokuba…- Seto le miró con su mirada fría pero Mokuba ni se inmutó…
-No me mires así, Oni-chan…- Mokuba le devolvió la mirada- De acuerdo… me voy a dormir… pero no trabajes hasta muy tarde, Seto… mañana tienes que ir a la preparatoria…
-Si, lo sé…-El castaño cerró los ojos mientras asentía con la cabeza a su hermano. A veces se preguntaba quien era el hermano mayor… si él o Mokuba…
-Buenas noches Seto…-
-Buenas noches Mokuba…-
Mokuba cerró la puerta del despacho de su hermano con cuidado. Cuando sería el día en que Seto dejara de pensar tanto en trabajo y viviera un poquito, aunque solo fuera un poquito, su vida. Mokuba suspiró.
-Ojalá mi hermano se encontrara a alguien a quien amará y quien le amase. Pero… mi hermano es muy frió con la gente… no sé si será posible. Espero que si…- Mokuba entró en su pieza.
Seto estaba sentado en la silla al lado del escritorio. Cuando Mokuba había entrado había estado mirando uno de los tantos videos que se grabaron durante el torneo de Ciudad Batallas. Aunque ningún duelista se dio cuenta, todos y cada uno de los duelos que se llevaron a cabo fueron grabados por KC. Seto quería tener un archivo con cada duelista respetable del mundo por si en un futuro le tocaba enfrentarse a alguno de ellos. Seto suspiró. Ahora se dedicaba a ver esos videos… pero realmente no le interesaban en lo más mínimo. Se había convertido en una simple excusa para ver en acción a cierto rubio ojos miel que desde hace más de un año le perseguía en sueños. Realmente, desde que le conoció su mundo perfecto se puso de cabeza. Con su lindas sonrisas, risas y sus “La amistad es lo más importante” lo estaban enfermando y eso le mostraba a todo el mundo… pero a nadie le mostraba que su enfermedad era una que ningún dinero ni hospital ni clínica podría curar… se había enfermado de amor. Ahora, simplemente se dedicaba a mirar los videos de sus duelos por el solo placer de ver su sonrisa de victoria cuando ganaba, su cara de satisfacción cuando derrotaba un monstruo de su rival o la de desesperación cuando su mejor monstruo era derrotado. Todo en él era perfecto… solo su humor le hartaba… pero al mismo tiempo le encantaba, además… tenía que soportar todos los días en KC a alguien muy parecido a su cachorro… ese kitsune molesto. Seto sonrió ante sus pensamientos. Era cierto… su cachorro y Anecuze eran muy parecidos… ojalá jamás se conocieran…
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-¿Y que paso luego?- preguntó Duke interesado.
-Pues le ayude a cargar todo y…-
-¡Hola chicos!-.
-Hola Tea, ¿Qué tal?- le saludó Tristán.
-Bien…- respondió la chica.
-Hola…-saludaron los tricolor.
-Hola Yuugi, Yami…-
-¿Saben? Joey estaba contando de algo que le pasó ayer después de que se despidieron de él, tú y Yuugi…-comentó Duke a Yami poniendo su típica sonrisa sarcástica.
-¿See?-
-Ajá…-sonrió Ryou
-Por lo que nos estaba contando…-Bakura comenzó pero Kaiba que acababa de llegar le interrumpió.
-Probablemente se le llevo la perrera y quiere comentárselo…- dijo Kaiba irónico mientras se sentaba en su puesto…- quizás propició un escape en masa de la perrera… si no, no encuentro razón para que haya llegado a tiempo…-
-maldito Kaiba…- Joey se le trató de echar encima pero Bakura y Tristán le sujetaron.
-Déjale Joey…- le dijo Tristán mirando con odio a Kaiba.
-Pero es cierto…- Duke miró Joey poniendo una cara pensativa- llegaste muy temprano hoy…-
-Es que…-Joey se sonrojo ante la sorpresa de todos, incluso de Seto- me trajeron en auto…-
-Oh… vaya…- soltó Tea.
Seto se sentía arder… ¿alguien había traído en auto a SU cachorro? Eso era inaceptable…
- Oh, olvídate de Kaiba, hermano… vamos sigue contándonos…- Tristán tomó del hombro a Joey y le dio vuelta para alejarle de Kaiba, pero Joey seguía mirándole con odio. Seto solo prendió su lapto y comenzó a teclear. Estaba furioso. Fuese quien fuese se las iba a pagar. Nadie tocaba lo que era de Seto Kaiba.
-Bueno, lo que paso es que me choque con un chico afuera de una tienda…- comenzó a contar Joey ante la mirada atenta de sus amigos y los oídos de Seto que no lo iba a perder.- Y…-
-Espera Joey…- le interrumpió Deblin- ¿Cómo era el chico?-
-Que…-Joey le miró irónicamente- ¿quieres echarle el lazo?-
-Quizás…- Duke se encogió de hombros ante la risa de los demás y la mirada de reproche de Tristán.
-Bueno, era más alto que yo… solo un poco. De pelo castaño claro, más claro que el de Tristán…- Joey le tomó un mecho de pelo a Tristán para compararlo-.
-hey! Que me arruinas el peinado…- Tristán le quitó su pelo. Todos se rieron.
-Bueno, tenía el cabello más o menos largo, como hasta más debajo de los hombros, un poquito ondulado en las puntas… se le formaban unos pequeños tubitos al final…- Joey hizo el gesto de los tubitos con los dedos. Al Ceo esa descripción se le hacía extrañamente familiar.- Tenía unos ojos verdes muy grandes… no, ligeramente más pequeños que los tuyos Yuugi, no exageremos… y más claros que los tuyos, Duke…- Yuugi y Duke habían apuntado a sus ojos…- además, cuando estábamos en su departamento parecían que eran grises…- soltó Joey sin pensar.
-¡¡¡¡¡¿Quééé?!!!!! O_OUUU- Todos se miraron sorprendidos y se acercaron más a Joey.
-¿Estuviste en su departamento?- le preguntó sorprendido Tristán.
-O///’ Ehhh… see… ¡¡Pero no es lo que piensan!!! Yo solo…-
-¿Te quedaste a dormir con él?- preguntó en un jadeo Bakura.
-Si… ¡digo no! Me quedé en su departamento, pero…-
-¿Así que fue él el que te trajo en la mañana?- Preguntó casi afirmando Ryou.
-Bueno… ~///~…. Bueno… si, pero…-
-Por Ra, Joey… no puedes ser más fácil…-Duke se tapó la cara imitando el tono serio de Yami.
-¿Por lo meno sabes como se llama el chico en cuestión?- preguntó Tristán.
-¬///¬… claro que lo sé…-
Seto se sentía hervir… su cachorro, SU Joey había pasado la noche en el departamento y, seguramente, en los brazos de otro… y ese “otro” más encima se había atrevido a llevarle a la preparatoria… Ahora venía lo final… el nombre del próximo residente permanente del cementerio de Dominó…
-Se llama…-Seto contuvo la respiración- se llama Anecuze Aeló. ¿Están felices? ¬///¬…-
…………..
Seto quedó marcando ocupado. ¿Anecuze… Anecuze Aeló?... era una coincidencia… ¿cierto?... Kaiba olvidó como rayos se respiraba… ¿Qué tenía que hacer?... ¡Ah, si!! Inhalar… Exhalar… Inhalar… Exhalar… Tranquilizarse… Tenía que convencerse que no estaría bien llamar de inmediato a KC confirmando el despido de su asistente… por que… ¡Rayos! No era su culpa… como iba a saber Aeló que Joey era el cachorrito de sus sueños o… ¿o si?... bueno… ya sabía lo que haría… dejaría pasar el día como si no hubiera escuchado y nada y luego, en la tarde en Kaiba Corp tendría una seria conversación con Anecuze, dejándole en claro que Joey era de él, y si le molestaba, pues… Las puertas de KC eran muy grandes.
-Si, eso haré…-Kaiba murmuró.
-Bien, todos a sus puestos…-había entrado una profesora alta y delgada. Aún con sus años a cuestas se veía bastante atractiva y alegre. Esta impartía la clase de Literatura y además era la profesora jefe de ese curso.
-Buenos días- saludó.
-Buenos días, profesora- le respondieron todos de pie.
-Siéntense-dijo con una sonrisa en el rostro.- Ahora saquen su libro en la página 104 y lean el texto para luego…-
Y así siguió la clase.
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-¡Señores Wheeler y Kaiba!- la profesora les gritó- Vengan conmigo a mi despacho de inmediato…-
La profesora se puso de pie y abrió la puerta. Kaiba pasó tan arrogante como siempre por allí seguido de Joey el cual le guiño un ojo a Yuugi que le miraba preocupado.
-“No es nada”- le dijo moviendo los labios sin emitir sonido para que Yuugi se los leyera. Yuugi sonrió y asintió.
La profesora caminaba muy seria mientras miraba de reojo a los dos muchachos que le seguían. Uno el Ceo más importante del mundo empresarial de Japón si de realidad virtual hablamos, el otro un chico, a su parecer, extraordinario. No sabía por que se llevaban ambos tan mal si… si en el fondo eran tan parecidos y más encima… la profesora suspiró con pesar.
Abrió la puerta de su despacho y les hizo pasar.
-Bien…-dijo sentándose mientras los otros dos también lo hacían- bien, me pueden explicar por qué?... me pueden explicar por qué “de nuevo”?-
Ambos se miraron y luego de una mirada de desprecio de ambas partes Joey se encogió de hombros y Seto se entretuvo en leer los lomos de los muchos libros que adornaban las paredes de la habitación en sus estantes.
La profesora suspiró. A ambos les tenía mucho aprecio. A Joey le tenía un profundo respeto pues conocía todo el esfuerzo que tenía que hacer para poder estar allí y eso lo valoraba más que la misma vida… una madre que no le interesa la vida de su hijo, un padre alcohólico que vive de lo que su hijo gana con sus trabajos de medio tiempo… y aquel chico aún tenía fuerzas para sonreír, reír, divertirse y hacer aquello que no le correspondía como era trabajar a sus cortos 17 años… era impresionante y la profesora le respetaba muchísimo.
Por otros lado, Seto Kaiba. El déspota, inteligente, frío, ególatra y, en el fondo, triste Seto Kaiba. A sus 17 años manejaba toda una empresa, tenía a su servicio y juicio miles de vidas y cuidaba de su hermano pequeño entregando su vida si fuese necesario. …l también merecía su respeto, él tampoco debería haber tenido que tener aquella fría vida, pero él la eligió para el bien de su hermano. Su adopción, su cruel vida con Gozaburo Kaiba, su vida después de la muerte de su padrastro… todo eso lo sabía la profesora que por algo era su profesora jefe. Le interesaban profundamente sus alumnos y en especial ese par eran de su absoluto agrado. Al comienzo por las investigaciones que mando a hacerles a la vida de ambos y luego, además, por los informes de la vida que llevaba actualmente Kaiba por su sobrino y ahijado.
-Señor Kaiba, yo sé que no le gustaría dejar una mancha en su “limpísimo” expediente, así que le propongo que sea usted el que les ponga el castigo a ambos…- la profesora sonrió, esa era la mejor forma… ella hace ya mucho que veía las actitudes de ese par y sabía que allí había algo más… podía notar la furia y los celos en la mirada de Kaiba cuando esa peliteñida de la clase de al lado se le trepaba al pobrecito de Joey y le divertía observar a rubio suspirar con alivio cada vez que Kaiba rompía en pedazos una carta de amor de esas que le enviaban sus “admiradoras”…
Joey abrió los ojos muy grandes.
-¿Por qué profesora?-gimió.
-No te parece, Wheeler?- Kaiba sonrió maléficamente.
-Bueno, señores, volvamos a la clase… mañana quiero el castigo que se impondrá señor Kaiba…- la profesora se levantó y comenzó a caminar hacia la puerta.- Píenselo bien, señor Kaiba… debe ser el mismo castigo para ambos…-sonrió mientras salía y le seguían el Ceo y el rubio.
-Pobre de ti Kaiba que el castigo que pongas se interponga con mi trabajo de medio tiempo…-le murmuró Wheeler a Kaiba mientras pasaba a su lado.
-Trataré…-Kaiba sonrió-… que sea justo a esa hora para que te despidan… jaja…-una risa maquiavélica sonó y Kaiba se adelantó entrando a la sala mientras que Joey maldecía.
-Maldito Kaiba…-murmuró mientras pasaba por el lado de la profesora la cual suspiró con pesar… solo un milagro podía juntar a ese par.
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Clase de Deportes.
-Ahora haremos un pique, de acuerdo?- el profesor miró a sus alumnos (pique, carrera de velocidad)
-Si profesor…- respondieron los alumnos.
-Colóquense en filas yo les separare en grupos.
Todos se colocaron en fila ante la orden del profesor.
-Hey, cuidado Duke O///O- Tristán se puso las manos en el trasero con intenciones de “protegerse”.
-pero si yo no he hecho nada… ^___^- Duke sonreía abiertamente.
-Pues tu sonrisa no dice eso, jaja…-se reían Marik y Bakura mirando la cara sonrojada de Tristán.
-¬///¬ ya cállense- reclamó sonrojado el castaño.
Seto suspiró con un pequeño sonrojo en sus mejillas… que bueno que no había sido su cachorro el que estuviera en el lugar de ese mono (Tristán).
El profesor comenzó a dividir en grupo de tres y, como no, Joey le tocó con el “cubito de hielo” y además con Marik.
-te voy a ser polvo, Wheeler…-le dijo fríamente Kaiba (N/Y: ¬¬U este par apenas tienen oportunidad pelean u_ú)
-¿Si? Inténtalo… Yo seré el que te hará comer mi polvo… y será como esa canción… ¿Cómo era? Ah, si… “…….” (“Otro más que muerde el polvo”)- Joey comenzó a reír mientras Seto se sentía hervir de furia.
Primero le tocó al grupo de Yami que estaba con Bakura… pues, que decir… por poco y eso se trasforma en batalla campal, pero por un descuido del tricolor Bakura llegó primero.
-Jajaja… te gané, te gané… ^o^-Bakura saltaba y reía alrededor de Yami quien de brazos cruzados le miraba con ganas de querer asesinarlo.
-Ya cállate… ¬¬-
Luego al grupo de Yuugi, Tristán y Duke… pues, la pelea al comienzo estuvo entre Tristán y Duke (dejaron muy atrás al pobrecito piernas cortas de Yuugi TT-TT) pero en un enredo de piernas ambos cayeron y el ganador fue Yuugi XDD (N/Y: Eso me pasó a mi XDD… ganadora por caída de compañeras XDD)…
-Buen trabajo, Deblin…- Tristán se sacaba de encima a Duke quien estaba sobándose el trasero.
-Auch, cállate mono…
Luego le tocó a Malik y a Ryou junto con otro chico… la carrera estuvo muy pareja hasta el final cuando Bakura, Marik y Yami comenzaron a silbarles a los peliblancos quienes se pusieron nerviosos y perdieron ventaja por lo que ganó el otro chico… Bakura y Yami fueron perseguidos por un tiempo aproximado de 10 minutos por unos furiosos Ryou y Malik… a Marik se lo perdonaron por que le tocaba correr con Seto y Joey justo ahora…
-Trata de no perder de vista mi polvo, Kaiba…-le murmuró Joey con una sonrisa.
-Tú mejor no vengas llorando después a pedirme una revancha, que no importa cuantas veces corramos, te ganaré…-Seto le miraba arrogantemente mientras que Marik les suplicaba a todos los Dioses que por favor no se armara un pelea o por lo menos (eso sería mejor XD) armarán una y le dejaran ganar… XDD.
-Grrr…-
-En sus marcas…-El profesor miró su reloj- listos… ¡YA!- sonó el silbato.
Joey tomó la delantera seguido de cerca por Kaiba y por Marik que no podía creer que ese par le hubiera adelantado tan rápido.
-¡¡Corre, Marik!!!-le gritaban Yami y Bakura mientras corrían perseguidos aún por Ryou y Malik.
- ;___; que demonios para aquí… - lloraba Marik.
Joey mantenía su delantera y no cedió un centímetro pero Kaiba comenzó a subir y se quedaron a la par… ya iban a llegar cuando Seto sintió una puntada en el corazón que le quitó velocidad y con eso Joey ganó.
-Yuju!!!- Joey se reía feliz mientras sus amigos le felicitaban…
-bien hecho, Hermano, le ganaste a Kaiba…-le felicitaba Tristán.
-Si, felicitaciones…-le decía Duke mientras Yami le palmeaba la espalda y Yuugi sonreía. Malik, Ryou y Bakura le palmeaban la espalda a Marik quien lloraba desconsoladamente y decía “Déjenme en paz!!”
Joey sonrió a las felicitaciones y luego se pasó por el lado de Kaiba.
-Recuerda lavarte los dientes, el polvo tiene muchos microbios y no es recomendable comerlo mucho, así que trae tu cepillo cuando quieras volver a echar una carrera conmigo…-Joey sonrió con prepotencia mientras que Kaiba cerraba los ojos.
-Wheeler…-Joey se dio vuelta y sonrió.
-¿Si?- Todos cerraron los ojos… sabían que se armaría una pelea…
-Mira, tienes algo…-Seto levantó la mano y la llevó con suavidad a la mejilla de Joey haciendo que este se sonrojara… ¡por una fracción de segundo! por que luego recibió un golpe en el estomago desde la otra mano de Kaiba… y comenzó la pelea.
-No otra vez…-dijo Yuugi…
-Que se le va hacer…-agregó Yami.
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Toc-toc
-Adelante-.
-Profesora, Profesora…- Una chica sudorosa abrió la puerta del despacho corriendo.
-Que sucede Katrinna?- preguntó sorprendida.
-Srta., Wheeler y Kaiba armaron una pelea en medio de la clase de deportes… me mandaron a avisarle… cuando venía para acá los estaban separando y por lo que me dijo el profesor los llevarían a la ofician del director…-
-Gracias…-La profesora salio a toda velocidad a la oficina del director.
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-Me parece increíble esta actitud en un par de alumnos tan buenos como son ustedes…
-…como soy yo…- corrigió Seto.
-No señor Kaiba, como son ambos...-El director miró a ambos a través de sus lentillas…- y además…
Toc-Toc
-Señor Tatsumi…-la profesora entró precipitadamente.
-¿Qué sucede profesora Sasuka?
-Vengo a pedir disculpas por este par de irresponsables alumnos…-dijo con cara angustiada- son muy buenos, un poco peleadores, pero muy buenos… por favor... no les castigue o suspenda… yo me hago responsable de ellos…-suplicó.
Joey y Seto le quedaron mirando impresionados… ella no merecía que ellos se comportarán así, solo le traían problemas… sus ojos arrepentidos de juntaron y los mieles se sumergieron en los zafiros y al revés. Por un segundo ambos se intercambiaron pensamientos… eran tan parecido que lo podían hacer… Ella no se lo merecía… siempre se preocupaba tanto por ellos…
-Yo lo sé, Sasuka… no te preocupes… pero estos chicos se merecen un buen escarmiento…-les miró a través de sus anteojos…-¿no lo creen?- le habló directamente a ambos.
-Si…-musitaron.
Ambos profesores sonrieron satisfechos. El poder aceptar sus propios errores era el mejor aprendizaje que podría tener alguien.
-Saben que se comportan mal?-
-Si.
-Saben que sus peleas interrumpen clases y les quitan tiempo de estudios a sus compañeros?-
-Si.
-Saben que preocupan a su profesora que, además, les quiere mucho?-
-S-Si…
Los ojos de Joey se vieron cristalizados por un segundo mientras que el Ceo por primera vez se sentía avergonzado.
-Saben que esto no se debería volver a repetir?-
-Si.
-Podrían mantener esa promesa?
-….
Ambos profesores sonrieron. Eso era lo que esperaban, no mentiras… la verdad.
-Estoy satisfecho, profesora… lléveselos y haga lo que considere justo- El director se recostó en su silla. Ambos pares de ojos, mieles y cielos, se elevaron para mirar con sorpresa al director.
-Si, señor director…-La profesora les hizo un gesto a los chicos los cuales se levantaron y la siguieron.
Ya estando en el pasillo se volteo a mirarlos. Ambos sabían que ahora si se la habían ganado, dos retos en un día y a la oficina de su profesora jefe y del director…
-“Adiós trabajo de medio tiempo”-pensó Joey en un suspiro.
El Ceo solo miraba cansado.
-Ahora…-comenzó la profesora- Vayan a su salón…-sonrió.
……..
Joey y Seto se quedaron sorprendidos y estáticos… ¿Ni una palabra de regaño? ¿Ni un reto? ¿No otro castigo? Era demasiado bueno para ser verdad…
-Pero profesora…-Kaiba le miró sorprendido.
-Silencio señor Kaiba, no quiere otro castigo o no? Y a usted no le conviene o no señor Wheeler? Entonces no aleguen y váyanse a su salón…-volvió a sonreír…
Ambos abrieron los ojos sorprendieron pero rápidamente asintieron agradeciendo interiormente su buena estrella.
Kaiba y Joey se apresuraron hacía los vestuarios sin dirigirse mirada, no les agradaban esos retos, preferían poder discutir tranquilos, era una forma de relajo para ellos... darle a entender al otro que estaba presente en su vida aunque no lo pudiesen demostrar fuertemente por el gran orgullo que ambos mantenían.
Ya en los vestuarios el CEO se comenzó a desvestir lentamente ocasionando un leve sonrojo en la suave y clara tez del rubio el cual rápidamente desvió su mirad antes de que el castaño pudiera notarla. Joey simplemente entró a uno de los camerinos y cerró la puerta para luego salir completamente cambiado y salir por la puerta de los vestuarios rumbo a su salón dejando a un decepcionado Kaiba que solo suspiró con resignación para luego seguir su tarea.
El rubio cachorro caminaba a toda velocidad rumbo a su salón. El carmesí de sus mejillas aún no se quería borrar por completo para su fastidio. Ese Kaiba tan sexy y apuesto... ¿por que demonios tenía que ser tan perfecto? Sonrió solo para él... así era el CEO de Domino City, y así era como le quería... y odiaba... y, por que ese carácter de los mil demonios que poseía el castaño solo hacía que fuera un ser detestable... arrogante, déspota, egoísta... pero endemoniadamente bello... No, no, no... Joey, no pienses en eso... el rubio sacudió la cabeza, ya había llegado al salón...
-Buenas tardes profesor...-saludó el rubio cuando le hubieron abierto la puerta.
-Buenas tardes señor Wheeler... tome asiento, su profesora me habló, no hay problema...-Joey asintió y se dirigió a su puesto con su mochila al hombro, cuando el profesor le detuvo- ¿Y el señor Kaiba?- preguntó con curiosidad.
-Ehhh...-Joey carraspeó un poco mientras sentía un leve escalofrío en el espinazo al recordar la escena de Seto sacándose la polera dejándole ver aquellos fuertes y bellos br...- esta en los camerinos, supongo que cambiándose de ropa...- Joey se cortó antes de que su mente comenzara a jugar con sus hormonas para darle un mal rato.
-Ah, ok... asiento entonces...- Joey asintió y se sentó al lado del tierno tricolor que tenía como mejor amigo y que le miraba preocupado.
-No hay problema...-le susurró mientras le levantaba el dedo pulgar- todo salió bien...-
-Pero no siempre tendrás la misma suerte, Joey-kun...-le regañó Ryou en un susurro. Joey solo sonrió mientras sacaba la lengua y se pasaba una mano por la cabeza en señal de vergüenza.
En ese momento entró con su pose elegante de siempre el arrogante de Kaiba. Joey le miró por un instante y sus miradas se cruzaron y se volvieron a sumergir, uno en los ojos del otro, embelezándose por un segundo para luego volver todo a la normalidad.
-Profesor...-se comenzó a explicar el CEO.
-No sé preocupes, señor Kaiba... tome asiento...-Kaiba solo asintió y tomó su lugar.
El ojiazul miraba con disimulo a aquel rubio que aunque lo intentara no quería salir de su cabeza y el rubio sentía aquella mirada aunque la llamaba “obra de su imaginación” y seguía tranquilo la voz del profesor... de esta manera acabó el día plácidamente.
Continuará...
Nota de Yakumo: La li ho! Hola a todos... este fic originalmente iba a ser un One-Shot, pero pensé que sería muy largo y latoso, por lo que tendrá entre tres y cuatro capítulos (a menos que me aburra y lo termine en el próximo u_ú) espero que les guste mucho...
Kurama: Otra perdida de tiempo y espacio, no Yaku-chan?
Yakumo: ,O_O, no seas malito Kuramita-chan... espero en serio que les guste... estoy trabajando en un tributo a todos los fics de la pareja JoeyXSeto que he leído, pero se me está haciendo un poco largo... n_ñ... tengo como 120 fics de esta pareja y hacer un fic con un tributo a todos, uf... no se imaginan todo lo que he hecho... ya llevo 60... Yuju!! Vamos Yaku, solo queda la mitad... TT-TT... pero vale la pena, es que todas se lo merecen... solo espero que sea de vuestro agrado... pido disculpas por el fic que mantengo cortado “Una linda navidad... Kaiba trama algo?” pero es que este fic es un revoltijo de cosas y no me puedo poner de acuerdo con mis musas... se supone que iba a hacer una fiesta sencilla donde Kaiba se declaraba, pero después vino una musa revoltosa a decirme que tenía que colocar algo con el título, y como vi Angel Sanctuary me quedé pegado con los ángeles y demonios, leí “La ley del Amor” y quedé traumada con las reencarnaciones y @_@ ya no daba para más... quiero que ese poder terminar ese fic bien... quiero hacerlo antes de esta navidad por dios... mis musas, ayúdenme...
Kurama: pobrecita... ¿musas? ¿No somos musos?
Yakumo: Ay, ustedes son los que más me enredan...
Kurama: ¬¬
Yakumo: Bueno queridas chicas... espero sus comentarios... Bye-Bye Nanoda!!
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