La nieve caía lentamente sobre las gradillas de concreto casi ocultadas por el blanco manto que esta creaba al acumularse, Suoh y Munakata conversaban con los cigarros en la boca que el segundo había traído y el primero encendió con su caluroso poder.
-Es hora que dimitas rey rojo- Exclamó un Munakata algo exaltado. Por un segundo la mirada de Mikoto estaba ida sin mirar el rostro de su interlocutor. Luego cerró sus ojos y dijo con un aire de resignación:
-Nunca he tomado la posición de un rey…
En ese instante luego de pronunciar estas palabras el cigarro de Munakata cayó a la nieve y rápidamente sin que Mikoto lo presintiera se abalanzo sobre este. El rostro de Mikoto ahora estaba serio, Munakata sobre él, tomó el cuello de su camisa temblorosamente y le dijo:
-Hay estudiantes inocentes de preparatoria aquí- Miraba a Mikoto amenazante pero algo suplicante- Tus hombres también están aquí- Tras decir esto, inclinó un poco su cabeza y cerró sus ojos, los volvió a abrir mirando fijamente a Mikoto, acerco su rostro al de él y cuando sus miradas se hallaron frente a frente le dijo: -¿Lo entiendes?
Tendido en el suelo y seriamente Mikoto le dijo: -Voy a solucionar mis propios asuntos, así que tú encárgate de cuidar de los tuyos… ¿Eso era todo?- Munakata quien tenía una mirada amenazante ahora tenía un rostro sorprendido…Entonces sujetó con más fuerza su camisa y se mantuvo tembloso , asido a esta mientras que el cigarro de Mikoto continuaba encendido…
Entonces Munakata rozo con sus labios los de Mikoto, quien sorprendido dejo caer su cigarro al abrir sin premeditar su boca, al hacer esto Munakata quien aun sostenía su camisa lo beso profundamente, batiendo sin respirar su lengua con la de un Suoh que le correspondía…Sin soltar la camisa de Mikoto, separo su boca de la de él, resoplando fuertemente al hacerlo, desesperado bajo la cremallera del rey rojo, quien al ver esto se sentó rápidamente y exclamó asombrado:
-¿Qué haces Munakata?
Reisi no le contesto, tomando con su mano izquierda el falo de Mikoto comenzó a succionarlo, este tomó el cabello de Munakata, pero no podía detener las estupendas mamadas de su compañero…El rey azul no pronunciaba una palabra, con su mano izquierda desabrocho sus pantalones, la cremallera bajo sola por introducir su mano violentamente dentro del pantalón buscando su ano, paro un segundo, miró fijamente a un Mikoto sorprendido y cargo con saliva dos de sus dedos, los cuales introdujo lentamente en su entrada, mientras hacía una cara llena de dolor y vergüenza…
-Munakata… ¿Tu?- exclamó un Mikoto que cada vez más subía su calor corporal por la excitación de aquella violenta reacción de Reisi…Después de resoplar repetidamente, un sudoroso Mikoto sintió y observo como su polla era tragada por el ano de Munakata…Este movía con frenesí sus caderas, jadeando, sus pantalones aun por las rodillas, se arrugaban mientras seguía montando con insistencia el falo de Mikoto…
-Debes tener frío…-exclamó un Mikoto jadeante quien ya dejaba entrever su aura roja rondando alrededor evaporando la nieve que cubría las gradillas, con una alta temperatura el rey rojo colocó sus manos bajo el chaleco del azul, buscando sus pezones, jalándolos y moviéndolos con arrebato, esto solo hacía que lo gemidos de un suplicante Munakata fueran más audibles.
-Estoy caliente…Munakata…Munakata-decía entrecortadamente Mikoto quien casi no podía hablar, entonces se saco su camisa ya empapada por el sudor y tomo con sus manos las caderas de Munakata, moviendo con violencia el cuerpo de este, quien apoyaba sus manos en los hombros del hombre que le hundía repetidamente su falo dentro de su angosta entrada…
La cara de Munakata era muy hermosa, sus ojos entreabiertos, un sonrojo evidente y su boca abierta para dejar escapar su intenso jadeo…-Suoh… ¿Vas a desistir?- Dijo con una voz apenas audible, después de lamer la barbilla de Mikoto cuando una gota de su sudor caía desde esta…
- Esto era para persuadirme ¿no?...-Exclamó un Mikoto con una cara sonriente pero algo maliciosa, mientras tocaba el rostro de un Munakata a punto de eyacular…En ese instante la cara de Reisi se posó en los ojos de Mikoto, mirándolo con asombro y luego adoptando un rostro más que serio, bastante frio…beso a Suoh con intensidad, entremezclándose en dicho acto sus salivas y sudor, entonces mordió un pezón de Mikoto quien al exhalar con fuerza vertió dentro del ano de Munakata su semen, el cual quedó impregnado en su próstata y salpico por las paredes de su recto…A su vez el abdomen de Mikoto, también quedo cubierto por el fluido blanquecino del rey azul…
Al ponerse de pie un poco del líquido espeso se escurrió del ano de Munakata, serio y con una expresión que denotaba su frustración, mientras subía sus pantalones dando la espalda a Mikoto, rápidamente dijo:
-¿No piensas cambiar de opinión?
Mikoto se levanto lentamente con desgano, subió su cremallera y abrocho el botón de sus pantalones, recogió modestamente su camisa, la cual secó con su aura calurosa…Al igual que su sudor. Miró a los alrededores y observo la colilla del cigarro a medio acabar aun encendida y con su zapato la apago, tomó algo de aire y dijo mirando hacia un lado:
-No lo creo…
Munakata apretó sus dientes con cierto enfado, al igual que sus puños cerrados y volteo un poco su cabeza hacia Mikoto, quien tenía una mirada tranquila, su rostro reflejaba tras las gafas una mirada suplicante y lastimosa, con una voz apenas audible pero grave dijo:
-Idiota…