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Un método para silenciar a JongDae por FlamingUnicorn

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JongIn frunció el ceño al escuchar a su compañero de banco riendo escandalosamente.

-¨Cierra la boca¨- Gruñó.

Usualmente no le molesta, pero se había levantado con un horrible dolor de cabeza y la risa del castaño parecía retumbar en su interior incrementando su malestar.

-¨Oblígame¨- Respodió desafiante, desviando la mirada del chico con el que hablaba para clavar sus pequeños ojos en lo suyos.

JongIn inhaló fuertemente y luego exhaló para controlarse, le daban ganas de golpear al chico por su actitud tan altanera pero no quería acabar en la dirección. Además no sería capaz de ponerle un dedo encima, no de esa forma.

El castaño observó como los gruesos labios de JongIn se abrían para largar el aire contenido y no pudo evitar relamarse los suyos.
No le importó ver el ceño fruncido de JongIn, el profesor había faltado, él tenía ganas de seguir charlando y así lo hizo.


La voz de JonDae volvió a escucharse, era agradable pero no cuando hablaba a los gritos. ¿Es sordo?  ¿Por qué tiene que hablar tan fuerte? A nadie más parece molestarle, quizás su dolor de cabeza lo puso irritable.

Intentó ignorarlo en vano porque a los segundos ya se estaba riendo exageradamente de nuevo.

-¨¿No puedes callarte aunque sea cinco minutos?¨- Preguntó harto, ser paciente no era una de sus virtudes, mucho menos en las condiciones en las que se encuentra.

-¨Si quieres que me calle, oblígame¨- Volvió a responder.

JongDae lo incitaba a propósito, es obvio lo que uno debe hacer cuando le responden de esa forma. Y no, no se refiere a emplear la violencia.

JongIn hizo una mueca y desvió la mirada hacía la ventana pero el comentario de JongDae provocó que vuelva la mirada a su dirección.

-¨Hay una forma de hacer que cierre la boca y que no termines en la dirección¨

-¨¿Cuál?¨- Indagó más que interesado, haría cualquier cosa para callarlo aunque sea un par de minutos.

-¨Descúbrelo¨- Contestó simple y retomó la conversación que había abandonado.

Un poco de ayuda está bien pero no tendría sentido dejarle todo servido en bandeja.

-¨Como si fuera tan fácil¨- Bufó el moreno.

Lo único que se le ocurría era amordazarlo con la corbata del uniforme, ¿Va contra las normas?. También podría utilizar su mano para cubrir su boca.

No, era ridículo.

-¨¿Lo dices en serio? ¡Byun BaekHyun, perdiste mi respeto!¨- Exclamó JongDae sacándolo de sus pensamientos. -¨¿Cómo pudiste besar a ese adefecio? Iugh¨

JongIn dejó de prestarle atención a su conversación, no le interesaba saber quién era el ¨adefecio¨ al que besó BaekHyun, su mente sólo repetía una palabra.

¨Besarlo, besarlo, besarlo¨

Podría besar a JongDae.
No era una mala idea, es más, le agradaba en demasía. No va a negarlo, JongDae siempre le pareció atractivo, escandaloso, pero atractivo al fín y al cabo.

Sonrió satisfecho, esa era una solución más efectiva que amordazarlo con la corbata y más placentera, si es que el otro no lo golpea por su actuar tan descarado.

El castaño estaba inmerso en la conversación, ¡Va a molestar a BaekHyun por el resto de su vida!, hasta que sintió como alguien tocaba su hombro.

-¨¿Qué...¨

Apenas volteó la cabeza, unos labios chocaron con lo suyos impidiendo su habla.

JongIn lo estaba besando.

Sus gruesos labios eran suaves, cálidos y húmedos, como lo había imaginado miles de veces pero mucho mejor.
Con su corazón latiendo alocadamente y sintiendo un familiar cosquilleo en su estómago, cerró los ojos dejándose llevar, disfrutando ese anhelado momento.

El moreno al ver como JongDae cerraba sus ojos y no lo rechazaba, comenzó a mover sus labios lentamente pero sin llegar a profundizar. Era un beso dulce y sin prisas, donde sólo disfrutaba el contacto con el otro.


-¨¿Esta era la otra forma?¨- Cuestionó separándose unos centímetros de su boca.

JongDae asintió avergonzado y con la mirada gacha, el calor subía por todo su cuerpo, extendiéndose por todo su rostro.
Si bien esperaba ese beso, no podía evitar sentirse cohibido ante la atenta y penetrante mirada del otro, al punto en que no podía lograr que las palabras salgan.

JongIn sonrió, JongDae lucía como un tomate y le resultaba extremadamente tierno. Alargó su mano  y acarició su mejilla, era extraño verlo en silencio pero era agradable y su cabeza lo agradecía.

-¨Creí que mi cabeza iba a explotar si seguías gritando¨
-¨No estaba gritando¨- Se defendió el castaño frunciendo sus finos labios -¨Y si te dolía la cabeza, podrías haberlo dicho¨

Levantó la mirada pero al percatarse de la poca distancia que lo separaba del moreno, volvió a bajarla. Nunca se había sentido tan vulnerable, tan tonto. No sabía como actuar.

-¨Voy a dejar de hablar¨- Dijo finalmente.
-¨¿Te molesta si uso tu hombro como almohada?¨- Preguntó JongIn depositando un casto beso en su mejilla, podía tomarse ese pequeño atrevimiento.


El castaño negó con la cabeza, al parecer el roce de los voluminosos labios de JongIn causan estragos en su mente porque no es capaz de pronunciar un simple ¨No¨.

El moreno se acomodó en el hombro de JongDae y cerró los ojos. Ahora tenía un método para silenciar a JongDae pero también tenía un problema:

Quería besarlo y no para hacerlo callar. Quería besarlo porque le agradó sentir sus labios. Quería besarlo porque le gustó.


-¨JongDae¨- Lo llamó. -¨¿Puedo besarte otra vez?¨

Notas finales:

 

Es una pareja muy fuera de lo común, lo sé, pero tenía muchas ganas de escribir algo sobre ellos :3

 

¿Quedó muy raro? D:

 

Sepan disculpar si hay alguna falta de ortografía, lo revisé pero uno nunca sabe(?) Jajaja.

Espero que les haya gustado <3

 

Chau! :D


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