DURMIENDO CON EL ENEMIGO
GUNDAM WING
DUO – ZECHT
AU, ONE SHOOT
By: Shinigami Ely Chan
Disclaimer: Esta es una historia para fanáticos que toma como base los personajes creados por Kōichi Tokita, sin fines de lucro.
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La mañana de aquel 06 de junio estaba resultando caótica en la central de operaciones que Colmillo Blanco tenía en la Tierra. Otra de sus instalaciones había sido atacada sin que nadie pudiera explicar como un lugar que no existía en los mapas y cuyo sistema de seguridad era manejado por un reducido grupo de personas, había sido burlado y destrozado en cuestión de minutos.
- De nuevo sin intrusos – se escuchó la voz del comandante Zech, que sentado tras su escritorio comenzaba a analizar las fotografías del desastre.
- De acuerdo al primer reporte – comenzó a explicar uno de los oficiales alineados frente a el – Las oficinas y bodegas empleadas para control de nuestros Mobile Suits estaban fuertemente resguardadas, nadie pudo estar ahí y salir ileso.
- Las cámaras de vigilancia no detectaron nada fuera de lo común – explicaba otro.
- Lo único extraño – comenzó a hablar un tercero – fueron esas pequeñas elevaciones de temperatura que se presentaron.
- ¿Elevaciones de temperatura? – pregunto interesado el comandante.
- Si – continuo el joven – pequeños intervalos en los que de acuerdo a la gráfica de control, la temperatura paso de 36 ºC a 37.6 ºC – entregándole el reporte impreso – creímos que alguno de los sistemas de aire acondicionado se había descompuesto, pero al reportarlo a la unidad a cargo, nos informaron que estaban en mantenimiento.
- ¿Qué hora era? – se apresuró a preguntar el rubio.
- Cerca de las 8 de la mañana.
Las 8 de la mañana…. Sería que… - comenzó a preguntarse el comandante – Era la cuarta vez que algo así ocurría…
- ¿Cómo paso esto? – la voz de su trenzada obsesión al entrar a su oficina, lo saco de sus cavilaciones.
- ¿El cómo no es lo importante – retomo la compostura – Lo importante es el quien? – mirando fijamente al joven trenzado que veía desinteresadamente las gráficas que le habían entregado antes – Quiero que todos vuelvan a sus puestos y cuantifiquen las perdidas, ordeno ante el asentimiento y retiro de los oficiales.
- ¿Sospechas de alguien? – pregunto el ojivioleta, mientras jugueteaba con su trenza.
- Tengo algunas dudas – respondió el rubio antes de retirar la máscara que cubría su rostro.
- ¿De su fidelidad? – continuo el trenzado, mientras comenzaba a dar vueltas alrededor de la oficina.
- De mí mismo – aclaro el comandante antes de levantarse de su silla para rodear el escritorio y mirar de manera hambrienta al joven frente a él.
- ¿Tú permitiste esto? – pregunto coqueto el joven de mirada amatista, mientras señalaba las fotos de su escritorio.
- De cierta manera – notando como el castaño se había acercado a él para dejarlo cercado entre su cuerpo y el escritorio.
- Pareces tenso – comenzó a murmurar el trenzado, mientras deslizaba sus labios por la mejilla y cuello del rubio – Te ayudare a relajarte – culmino antes de apresar sus labios en un beso demandante.
El rubio sabía que la culpa era 100 % suya….
Estaba consiente que cada día que pasaba al lado del trenzado, significaba una perdida más para su causa.
Pero después de esos meses disfrutando de los placeres que implicaba tenerlo en su cama, se negaba a dejarlo ir. Aun cuando esta fuera la quinta vez que el trenzado en su camino a desvestirle, le quitaba la llave maestra del control de alarmas, mientras el fingía no darse cuenta.
Suspiro antes de cerrar los ojos y dejar que los labios de su amante le hicieran olvidar sus sospechas y le llevaban a la gloria…