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Un Favor por Wednesday

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Notas del fanfic:

Hola~ Espero que disfruten de este oneshot cortito.

Había sido un día muy cansador para Taemin. Sus exámenes lo estaban matando y el echo de no poder pasar tiempo con su novio también le afectaba su rendimiento; No podía ver la hora de irse a su casa y estar con su querido Minho.

-¡Taemin!-  Un grito hizo que bajara de su pequeña fantasía, al darse vuelta se encontró con el sonriente rostro de su mejor amigo Jinki.

-¿Qué quieres?- El menor le pregunto muy frio y cansado, no entendía como el mayor se mantenía con tanta energía en esta época del semestre.

-¿Me puedes hacer un favor?- Taemin se estremeció al escuchar eso, los favores de Jinki, sin saber por qué, siempre terminaban en desastre. -¿Puedes cuidar a Kibum por esta noche? Es que con Jonghyun debemos viajar y no lo podemos llevar con nosotros.- El castaño le estaba prácticamente suplicando. Taemin se tomo su tiempo para contestarle a Jinki.

 –Bueno está bien, si no queda otra.-  Después de un debate interno el pelirrojo decidió aceptar. Cuidar el gato de Jinki y Jonghyun por una no sonaba tan malo… Que equivocado estaba.

Eran las ocho de la noche, Taemin se encontraba solo y  aburrido; Minho todavía no había vuelto a casa, se encontraba demorado por las prácticas del equipo de football. De repente alguien toco la puerta y el pelirrojo rápidamente se levanto de la comodidad de su sofá para atender.

-Hola Tae.- Jonghyun y Jinki dijeron al mismo tiempo. Taemin noto la pequeña bola de pelos dorados en los brazos de Jonghyun, quien muy delicadamente deposito al dicho animal en el suelo. El pelirrojo escucho muy atentamente todas las recomendaciones dadas por parte de Jinki.

-Bueno y eso es todo. El mañana en la mañana lo pasaremos a buscar y muchas gracias Tae.- Con esas palabras y un abrazo la pareja se despidió de su amigo y salió del departamento.

Taemin se quedo observando al felino que se encontraba en un sueño profundo, hasta que el ruido de la cerradura lo saco de su pequeño transe.

-Tae, Te extrañe - La dulce voz de novio hizo que Taemin levantara la mirada y abrazara a Minho fuertemente. – ¿Por qué el gato de Jonghyun y Jinki está aquí?- El alto preguntó  confundido. Los dos mayores cuidaban a aquel gato como si fuera su propio hijo.

-Ambos tuvieron que irse de viaje y no podían llevar a Kibum con ellos.-  Taemin le explico  mientras se acercaba para acariciar el suave pelaje del felino. –Es muy lindo, ¿no lo crees? –

Minho estaría de acuerdo con Taemin si no sintiera un aura extraña e inexplicable alrededor de gato. –Si… Adorable.-

-¿Minho qué te pasa?- La reacción del castaño preocupo ligeramente al menor. -¿No te sientes bien?

-No… estoy bien. Solo me siento algo raro.-  Minho sentía como un raro escalofríos recorría su cuerpo, pero decidió hacer caso omiso, ese tierno gatito no podía hacer nada… ¿Cierto? –No importa solo olvídalo. 

La pareja decidió finalmente ver algo de televisión mientras las extremidades de ambos se entrelazaban, no de una manera cómoda pero si romántica, olvidándose de aquel animal del cual debían hacerse cargo.

De la nada un fuerte estruendo causo que tanto Minho como Taemin cayeran de aquel amplio sofá en el que se encontraban. Al levantarse encontraron un jarrón, el cual fue un regalo de la madre de Minho, hecho millones de pedacitos tirados en el suelo y a Kibum parado muy cómodamente en el estante donde la vasija se encontraba minutos antes de su triste destino.

-¡Dios!  Que mierda ha hecho ese gato-  Minho se encontraba furioso, ese mismo jarrón había estado en la generación de los Choi por años.

-Ya tranquilo, tampoco que Kibum lo haya hecho a propósito. Solo es un simple animalito- Taemin agarro al pequeño felino en sus brazos mientras lo acariciaba suavemente –Mira lo tierno que es… no tiene un gramo de maldad en su cuerpo.

El castaño soltó un fuerte suspiro, su novio tenía razón, Kibum solo era un animal y los animales solo actúan con instinto. No podía echarle la culpa de nada.

-Tienes toda la razón- Minho trato de acariciar al gato pero este erizo su piel y soltó un fuerte gemido. Pareciera que no quería tener ninguna relación con el más alto.

-¡Ja! Ves, Kibum ahora se siente ofendido.- Taemin se rio de mayor y se dispuso a ir la habitación dejando a un muy sorprendido, y aterrado, Minho detrás.

-¿Qué le pasa ese gato?- El castaño murmuro para sí mismo. No entendía el odio del felino hacia su persona, si él no le había hecho nada malo al animal. Dando un último suspiro decidió seguir a Taemin a la habitación.

Cuando entro a su cuarto Minho vio como Taemin estaba acostado muy cómodo con Kibum a su lado. Ese maldito gato estaba ocupando SU lugar, lleno de celos el castaño agarro al gato, con muy poco cuidado, y lo coloco en el suelo.

-¿Cuál es tu problema con el pequeño Kibummie?- Taemin dijo molesto, no entendía el comportamiento infantil de Minho –Ten cuidado, si algo le llega a pasar a ese gato, Jinki y Jonghyun no dudaran ni un segundo en asesinarnos.

-Va a llenar de pulgas la cama, aparte ese es mi lugar.- El castaño mostro un pequeño puchero haciendo que el menor se derritiera en ese mismo instante. –Yo solo quiero pasar tiempo contigo pero Kibum siempre lo interrumpe.

-Ya tranquilo, tampoco es que te voy a cambiar por un felino- Taemin le mostro una sonrisa traviesa –Podemos divertidnos hasta con Kibum en el departamento.

El pelirrojo se acerco muy provocativamente hacia el mayor, luego lo tomo por los hombros y unió sus labios en un apasionante beso.

Minho, primero, fue tomado por sorpresa pero a los pocos milisegundos se acostumbró y rodeo la cintura del menor atrayéndolo más hacia su cuerpo. Las cosas se fueron acalorando un poco. Minho delicadamente acostó a Taemin sobre la cama y coloco su cuerpo arriba del menor, los besos ya no eran solo en la boca, habían comenzado a dispersarse por el cuello y el pecho del pelirrojo.

Un ruido ensordecedor hizo que ambos se separaran abruptamente. Ahora que había hecho ese gato endemoniado. La pareja se paro rápidamente y fueron a ver el desastre que había causado ningún otro más que Kibum.

-Voy a matar a ese gato- Ahora era Taemin el que se encontraba furioso, Kibum había roto la ultima foto que se había sacado con su hermano, tres años atrás, antes de que este se fuera a China a vivir con su novio – ¡Minho!

El castaño estaba teniendo una batalla de miradas con aquel felino de apariencia  tierna pero de alma malévola.

-¡Ves! Sabía que ese gato no era de fiar- El mayor estaba a cinco minutos de tirar aquel gato por la ventana para que hiciera diez metros de caída libre. –Llamemos a Jinki y a Jonghyun para que lo vengan a buscar.

Taemin contemplo esa idea durante varios segundos, pero llego a la conclusión de que aquellos ya no deben estar cerca de la zona y que a fin de cuentas sería lo mismo.

-No, ya es tarde. Solo olvidemos lo que hizo y tratemos de empezar de nuevo- El pelirrojo trataba de calmar sus nervios mientras recogía los pedazos de vidrio del portarretrato tratando de recuperar la foto con su preciado hermano.

-Pero mira lo que le hizo a tu foto con Jongin, ese gato merece la orca- Minho ya había comenzado a exagerar, el solo trataba de sacarse ese horroroso animal de encima.

-¡Ya!  Minho cálmate, tampoco es para tanto. Solo escondamos todo lo que es frágil y preciado así Kibum no lo encuentra- Taemin comenzo a guardar en un cajón toda su colección de discos de Michael Jackson, sus otras fotos familiares y sus trofeos ganados por su destreza en el baile.

-Cada segundo odio más a ese gato.-  Minho rezongó pero comenzo hacer las mismas cosas de Taemin, guardar sus más preciados objetos.

Todo había mejorado… hasta que Minho encontró su camiseta autografiada por el mismísimo Messi toda llena de huellitas. –Taemin suéltame, déjame matar a ese animal.

El menor sabía que grave era esa situación, Minho amaba esa camiseta más que así mismo. Pareciera que Kibum hacía todos eso sucesos apropósito y una parte de Taemin no lo dudaba en lo más mínimo.

-Tranquilo Minho, no lo puedes matar. Piensa en Jinki y en Jonghyun ellos nos asesinarían a nosotros si algo le llega a pasar- Taemin pensaba dos veces lo que tenía que decir por qué en su interior, el menor también quería deshacerse de aquella maldecida bola de pelos.

La gota que derramo el vaso fue cuando aquel animal entro a la habitación de la pareja y araño y mordisqueo por completo el peluche que Minho le había regalado al menor en su primer aniversario.

-¡Sueltalo!- Taemin tironeaba de una punta del oso para que aquel salvaje felino dejara al pobre Minmin en paz –Minho esta bestia está matando a Minmin 

Cuando Minho trato de intervenir pero Kibum volvió a erizar la piel y tiro un arañazo hacia la dirección del castaño lastimando la mayor parte de su mano.

-¡Ah!- Minho exclamo de dolor, las lastimaduras causadas por gatos siempre ardían. –Taemin, ese gato está loco.

-Dime algo que no sepa- el pelirrojo ya se había rendido, tuvo que dejar a Minmin a merced de aquel endemoniado animal –Se me ha ocurrido una idea.

- Me vas a dejar que lo tire por la ventana – Minho pregunto esperanzado. Al ver como Taemin negaba con la cabeza se decepciono un poco –Entonces ¿Cuál es?

-Dejémoslo encerrado en el baño-  El pelirrojo se explico mientras cuidadosamente se acercaba a Kibum, el cual ya se había aburrido de descuartizar a Minmin y rápidamente pudo agarrarlo y sin ningún cuidado logro tirarlo en el cuarto del baño y con la velocidad de la luz cerro con llave la puerta.

-Creo que hemos zafado- Minho muy cansado se dejo caer en la cama –Esperemos que enserio no sea ningún ser del diablo y que mágicamente vuelva aparecer.

-Eso espero también.- Taemin igualmente de cansado se acostó al lado de su novio y ambos cayeron en un muy profundo sueño. Trataban en no pensar que en la mañana podrían encontrarse sin baño en el departamento.

La mañana llego demasiado rápida para el gusto de Taemin y Minho, seguían cansados por aquella actividad horripilante llamada cuidar a Kibum. Ambos se despertaron con el sonar del timbre de la casa.

Tanto el castaño como el pelirrojo sabían que los que venían eran los dueños del diablo mismo, así que mientras que Minho recogía las cosas pertenecientes a aquel gato Taemin se aventuro a buscarlo en el baño.

El menor esperaba lo peor… pero solo encontró a Kibum durmiendo en el piso hecho una tierna bolita. Sin tenerle la más mínima consideración Taemin agarro bruscamente al felino y casi corriendo abrió la puerta y se lo entrego a sus dueños. Sin dejarlos ni decir hola, Minho prácticamente les tiro las cosas pertenecientes al gato y cerró la puerta con una fuerza casi brutal.

Una vez sin Kibum en su acogedor apartamento la pareja decidió volver a la cama para entrelazarse como suelen hacer siempre y relajarse mientras uno escuchaba la respiración del otro.

-Nunca más volvemos aceptar hacer un favor.

- Si, Nunca más.

 

 

 

      

 

 

 

 

 

  

 

 

 

 

Notas finales:

Bueno... espero que les haya gustado. Gracias por leer y los reviews son agradecidos tambien. *(^_^)*


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