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Dance with me. por Raes

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Notas del fanfic:

Os lamento (?) por la última parte. Hay una mínima parte hetero, pero sé que lo pasarán por alto porque casi ni hablo de ello.

Notas del capitulo:

Lo he dividido en tres partes, así no lo subía como oneshot entero. XD!

 

            – ¿Y él es?

            – Es Joon, el mejor bailarín de la academia.

 

  Como si fuera poco, mis compañeras de clase de ballet se juntaron todas en la puerta de la sala donde ellos, los hombres, practicaban sus coreografías individuales antes de presentarse junto a nosotras en una función. Y claro, esa pregunta la había hecho una de las nuevas en nuestra clase y por lo tanto, nueva en el instituto.

 

  Se preguntarán ¿a qué me dedico? Pues es simple; estudio en una academia muy reconocida. Desde muy chica mi pasión fue la danza, y a esta edad, 18 años, no es la excepción.

 

            – ¡Oh dios mío, baila hermoso!

            – Además es lindo.

            – ¡Hizo un giro triple!

 

  Esas expresiones entre tantas otras repetían ellas mientras los observaban practicar. Si bien el profesor también era joven todas parecían estar más embobadas con Joon. Que por cierto era mi pareja de baile.

 

            – ¿Y saben qué es?

            – Un hombre.

            – No tonta, ¿es heterosexual?

 

  Ahí estaba otra de sus preguntas. La constancia en saciar esa curiosidad que seguramente les invadía su mente pecaminosa al verlo elongar como sólo Joon podía hacerlo.

 

            – ¡Hey! –una de ellas golpeó mi hombro– ¿tú sabes?

            – Si sé ¿qué? –respondí sonriente, siempre lo hacía.

            – Ayyy no seas mala, sabes de lo que estamos hablando.

 

  Me limité a reír mientras volteaba para seguir apreciando su ensayo. Cada salto era armonioso, perfecto, un deleite visual. Pero ninguna tuvo el agrado de bailar con él, por ende cuando se enteraron de que sería mi pareja, corrieron por los pasillos gritándome desaforadamente, algunas emocionadas y otras envidiándome. Sí, algunos eran así.

 

            – ¿Y ese quién es?

 

  Una de ellas apuntó hacia un nuevo chico, uno muy joven, pelo castaño y semi largo y sonrisa contagiosa. Otra compañera golpeó su mano para que nade notara que estaba señalándolo.

 

            – Es… atractivo…

 

  Todos reímos. Sí, era atractivo, tenía cierto encanto, quizá sus facciones o sus ojos redondos. Al parecer nadie lo conocía. A excepción de mí.

 

            – Debe ser nuevo –murmuraron.

            – No tanto, es el aprendiz de esta clase, su nombre es Mir.

            – ¿Qué? –gritó mi compañera– ¿te conoces a todo el mundo?

            – No, sólo sé su nombre porque compartimos la sala de ensayos cuando practicaba junto a Joon…

            – ¡Niñas! ¿Les gusta fisgonear?

 

  Rechiné los dientes y callé. La profesora que nos tenía a cargo nos pescó infraganti. Se suponía que en ese momento debíamos estar ensayando al que igual que los chicos, sin embargo ya llevábamos más de treinta minutos clavadas en la puerta en la misma posición.

 

            – Lo siento profesora…

            – Nada. No quiero que la función salga mal por su culpa, así que ahora se van a seguir practicando que luego tendrán su castigo.

            – Pero…

            – No se preocupen señoritas, no serán las únicas, los chicos saben perfectamente que no pueden practicar con la puerta sin siquiera cubrirla con una cortina para evitar que esto ocurra, que las niñas se les queden viéndolos.

 

  Nos obligó a caminar lejos de la sala, directo a nuestro salón. ¿Castigo? Así era ella. Aunque la mejor parte era que tendríamos la reprimenda junto a ellas.

 

***

 

  Luego de nuestra hermosa y cansadora clase, nos juntamos en la oficina de nuestros profesores, allí recibiríamos y nos notificarían cuál sería nuestro castigo por haber desperdiciado tiempo valioso de ensayo.

  Sólo llegamos a colocarnos las zapatillas deportivas, no queríamos tardar, porque sino ¿quién sabe? quizá hasta multiplicaban el castigo.

  Ellas, mis compañeras, estaban ansiosas. La verdad no lo entendía, ¿nunca se habían dado cuenta de que algo pasaba con Joon?, ¿era la única que lo notaba?

 

            – Adelante –nos ordenaron.

 

  Ingresamos en completo silencio, hasta que unas pequeñas risas se escaparon de la boca de mis compañeras. Bien podría decirse que sólo el nerviosismo producto de ver a Joon luciendo su traje de danza pegado al cuerpo, las hacía delirar, pero no sólo estaba él… también lo acompañaba Mir, que por cierto, lucía igual o mejor que Joon.

Notas finales:

Como siempre, mirando a los pibes alrededor -se le sale lo argenta(?)-.


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