Había vivido con Heero desde hacía varios años y se lo habían llevado bien, con algunos bajos y altos pero todo bien hasta que vio aquella escena que lo dejo helado, Heero besando a Reelena el día de su aniversario.
Heero le había dicho que había reservado un lugar en el mejor restaurante de la ciudad, y pensó que el soldado perfecto le daría una sorpresa y vaya que se la dio, allí vi fue donde vio todo, sin pensarlo tomo su abrigo y salió corriendo yéndose a su apartamento, allí maldijo a Heero y a toda su generación.
Pensó que Heero le pediría perdón por esa pequeña pelea que habían tenido horas antes de ir al restaurante, era algo tonto pero no se imagino que Heero lo iba a traicionar de esa forma, llamo a Quatre para buscar algún consejo pero no le gusto lo que el rubio le había dicho, quería irse y eso hizo cuando Wufei le ofreció trabajar de incognito en una misión en la tierra.
Ambos tenían que hacerse pasar por una pareja casi día y noche, pensó decirle a Heero pero su orgullo era mayor, espero a que Heero le llamase pero nunca lo hizo y eso le dolió mas- No, sino me llama es porque no le importo- Susurro entre lagrimas mientras Wufei lo escuchaba con atención.
-Entonces llámalo tú- Respondió el chino.
-Si tuviera los cojones necesario ya lo hubiese hecho, ¿no lo crees?
-Con lo mucho que hablas deberías tenerlos bien grandes.
-Muérete- Dijo sonrojado mientras ambos reían.
La misión de ambos había terminado después de casi un año, luego ambos regresaron a L2 pues el chino quería pasar tiempo con Hilde pues le agradaba mucho la morena.
-Maxwell, voy a buscar a Schbeiker al centro.
-Dale, llévate las llaves, yo también saldré.
-¿Saldrás a ver a Yui?
-No molestes- Hablo con nostalgia.
-¿Qué harías si Yui te llamara?
-No creo que tenga las agallas de hacerlo.
-¿Y si de repente las tiene?
-No se que haría, aun estoy molesto, a demás ¿por que llamaría después de un año?
-Porque es de reacción emocional lenta- Comenzó a acomodarse el abrigo.
-Lentísimo diría yo- Hablo con sarcasmo.
-Solo es una posibilidad- Se encogió de hombros.
-Habla Wufei, ¿que sabes?- Lo miro de forma fija.
-Nada en particular, adiós Maxwell- Tomo las llaves y se fue.
Duo quedo en casa muy pensativo, algo debía de saber Wufei como para decir aquellas cosas, busco su celular y allí seguía el numero de Heero, lo miro por largo minutos hasta que en una de esas sonó el aparato y allí mostraba el numero de Heero, se quedo mirando sin saber que hacer, quería contestar de inmediato pero el miedo y dolor de aquel día se hacia presente hasta que se armo de valor y contesto.
-¿Heero?...- No escucho nada así que salió de casa corriendo encontrando el aparato de Heero en la nieve frente a la ventana- ¡¡¡HEERO!!!- Grito saliendo hacia afuera y no encontrarlo.