REFLEXION...
Por Terry Maxwell
Observo atentamente cada delicado movimiento tuyo.
A lo largo del tiempo... he memorizado
todos y cada uno de ellos...
La forma en que muerdes nerviosamente tu labio
cuando estas concentrada....
La forma en que tocas tu cabello y lo acomodas
detrás de tu oreja... cuando estas nerviosa...
La forma en que tu mirada se desvía de la mía
cuando por largo tiempo me pierdo en tu cuerpo...
Se que lo sabes...
Nos conocemos bien después de tanto tiempo juntas.
Si me preguntaras desde cuando
no podría contestarte...
no se cuando... solo se que paso....
Me he enamorado de mi amiga y compañera...
Tal vez no me creas... pero...
al principio... quise enterrarlo en lo
más profundo de mi alma.... nadie debía saber...
Ese seria mi secreto,
quise alejarme de ti pero no pude...
Soy débil y te necesito...
eres el aire que respiro...
la sangre que corre por mis venas;
estas en cada uno de mis latidos...
provocas la lujuria que quema mis venas...
y aun así no te tengo...
A veces cuando estamos solas
nos quedamos viendo largo rato...
observándonos, estudiándonos...
a veces en esos momentos siento tu cuerpo tan cerca del mío
y toma todo mi control el no tomarte entre mis brazos
y robarte un beso...
A veces creo leer en tus ojos que tú también me amas...
pero desecho ese pensamiento...
tan solo me conformo con amarte así
siempre en silencio...
Tengo miedo de tu rechazo por ser de tu mismo sexo...
tengo miedo de lo que digan...
de mi familia...
si tan solo supiera si tú también me amas...
me darías el valor para enfrentarlo todo
volaría al fin del mundo y de regreso...
por amarte libremente...
por tomarte y hacerte mía...
para siempre mi compañera...
mi amor...
mi pecado y mi liberación...
Me acerco a ti ahora que duermes...
lucho con cada célula de mi cuerpo por no besarte
y pierdo...
siento la tibieza de tus labios... contra los míos
gimes y mi lengua por voluntad propia
explora la humedad de tu boca...
me rodean tus brazos y temo que todo sea un sueño...
Me separo y me pierdo en el azul de tu mirar....
me quedo sin palabras y tu tan solo me sonríes y me dices:
"Te amo Haruka".
El cielo se abrió ante mis ojos
y tan solo te dije:
"Te amo Michiru".
OWARI